2 minute read

Misión católica de lengua española

DE FIESTA CON JESUS

EL MES DE JUNIO HA SIDO PARA LOS NIÑOS DE NUESTRA MISIÓN UN MES DE FIESTA, YA QUE MUCHOS DE ELLOS HAN RECIBIDO LA PRIMERA COMUNIÓN, DESPUÉS DE HABERSE PREPARADO DURANTE UNOS AÑOS… UN TIEMPO EN EL QUE HAN CRECIDO NO SOLO EN ESTATURA SINO TAMBIÉN EN VIVENCIAS Y VALORES.

Celebrar esta Fiesta ha sido el comienzo de una amistad muy especial con Jesús. ¿Y esto qué significa? Muchas cosas, por un lado, quiere decir que nuestros niños Drisler, Dante, Estíbaliz, Daniel, Johanna, Inés y Lucas, que recibieron su Primera Comunión los días 8 y 12 de Junio en la Iglesia de San Nicolás, tienen dentro de sus corazones un Amigo que estará siempre al lado de cada uno de ellos para cuidarlos y guiarlos en el camino de vida cristiana.

Es importante que todos veamos la Primera Comunión no como un hecho aislado ni un fin en sí mismo, sino como un paso más en el conocimiento humano y cristiano de los niños que siguen pidiendo un acompañamiento educativo posterior de manera constante.

Toda nuestra comunidad estuvo de Fiesta, donde los padres y nuestra catequista Andrea Meier, supieron acompañarlos, enseñándoles quien es Jesús en sus vidas, abriéndose las puertas de sus corazones para recibir por primera vez el Cuerpo de Jesús en la Eucaristía, que a partir de ahora se queda a vivir por siempre en cada uno de ellos. La Primera Comunión significa que al estar más cerca de Jesús, la amistad con Él crecerá, y comulgar su Cuerpo es acercarse a Dios de una manera más directa, íntima y personal, por ello este sacramento no deja de ser uno de los más puros y nobles que han recibido porque les ha ofrecido la posibilidad de conocer al mismo Hijo de Dios como Amigo.

Debemos buscar que la Primera Comunión tenga el sentido cristiano que debe tener y sea sobre todo una experiencia de fe para el niño, que por primera vez se sienta a la mesa de Jesús y lo invita a su Fiesta, una fiesta que no termina con el acto litúrgico y festivo, sino que continua en la vida.

Queridos niños, Jesús los ha bendecido en modo especial y al mismo tiempo los invita a seguir sus enseñanzas para que puedan vivir de ahora en adelante más en su paz y amor. Bienaventurados ahora por tener en vuestras vidas y en vuestros corazones al mismo Hijo de Dios, Jesús presente y vivo en la Eucaristía.

Padre Marcelo

This article is from: