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ALFOLร Enero-Marzo 2015 Nยบ 28

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Editorial

Un nuevo ciclo

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on el permanente entusiasmo que acompaña al equipo de redacción, este, ya se encuentra dispuesto para emprender ilusionado a través de la creatividad, la nueva publicación trimestral, de nuestra veintiocho edición. El inexorable paso del tiempo, nos ha permitido llegar al amanecer de este nuevo año suficientemente motivados, para el desarrollo de nuestros modestos trabajos. Trabajos, siempre realizados en aras de mejora y originalidad. Incluido queda en el ánimo de todos, la permanente aceptación del reto que nos ocupa, que es el acicate que da impulso a nuestra actividad. Este valioso ejercicio -como puede suponerse - posibilita a cuantos participamos en él, grandes satisfacciones para el espíritu. Únicas y transcendentales, para el logro de nuestra empresa. Ardua tarea, en la que las numerosas dificultades siempre afloran, y las mismas, haciéndonos ser conscientes de los serios problemas a que nos enfrentamos como aficionados, en este “mundillo” literario. Independientemente de la edad de cuantos componemos el equipo, en el conjunto de los trabajos aportados, no se manifiestan en forma alguna, sensaciones que puedan revelar los años de los autores. Más bien los vinculados, dan muestras en sus escritos de dinamismo y jovialidad. Estas afirmaciones no deben ser interpretadas como signos de valor. Pero consideramos que son fruto y resultado, de la aportación que representa la entrega firme en este menester. Los testimonios aquí expuestos, van dirigidos a cuantas personas de cualquier edad, que

sientan el impulso de ser participes en este evento. Pues, como puede deducirse, solo es necesario para ello, el verter el impulso sensorial de trasladar nuestras emociones, a través de la letra impresa. Me atrevo a considerar que, una ingente mayoría de lectores que detengan su atención en esta página, están suficientemente preparados, sin saberlo, para deleitarnos con sus aportes. Sinceramente creo que - como a todos nos ocurrió - únicamente les falte el pequeño impulso, para incorporarse al reto. Por todo lo aquí expuesto, esta proclama, incluye la invitación de bienvenida a cuantos lectores deseen ser colaboradores de nuestra revista. A ello nos mueve, el deseo de cuantos miembros la componen el ver ampliada la misma. Disponemos de tres meses para la publicación, partiendo del uno de Enero al treinta de Marzo de 2015. Solamente nos resta recordaros que, serán admitidos quienes presenten su solicitud de colaborador, entre las fechas señaladas.

Alfolí Equipo de redacción José Luis García, Marisa Ramírez, Miguel Soto, Luis Felipe Soto, Félix Bernardino, Carlos Bernardino, José Ruiz Guirado, S.Olhai, Felipe Cabildos, Juan Díaz , C. Aramburu, M.Romero, Matilde Ramírez y Rafael Tenllado Apoyo y maquetación: Carlos Bernardino y Miguel Soto. Imágenes de portada y contra portada: Internet. Revista.alfolí@gmail.com

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Indice En este número: Editorial ___________________________________ 2 Amanecer literario___________________________ 4 La ruta del rio Cares__________________________ 6 A tumba abierta_____________________________ 12 El viento de El Escorial ______________________ 14 Federico___________________________________ 16 Un recuerdo________________________________ 18 Poesías____________________________________ 19 Sensaciones________________________________ 20 El Pequeño Escorial de Fuencarral______________ 21 La palabra_________________________________ 22 El costo de sobrevivir _______________________ 24 ¡Que cosas tiene mí abuela!___________________ 28 Islandia, un ejemplo a seguir__________________

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Así lucha Finlandia contra la corrupción_________

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Un canto a la imaginación____________________

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Recordando a Francisco de Quevedo___________

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José Ortega y Gasset________________________

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La dirección de esta revista, no se hace responsable del contenido de los artículos recibidos y publicados de sus colaboradores.

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Nuestro nuevo amanecer literario, expresado en imagenes

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La ruta del rio Cares (Urriellu desde la Vega Guapa) Texto: C. Aramburu

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n mis encuentros con la naturaleza, la montaña formo parte en mi juventud de principal atención. Entre mis recuerdos destaca, el viaje que realice en compañía de unos buenos amigos, para recorrer el incomparable panorama que ofrece la ruta del rio Cares. Conocida también como La Garganta Divina, es un impresionante desfiladero por cuyo fondo discurren las aguas cristalinas de este rio, que atraviesa los macizos central y oriental de los Picos de Europa. La belleza que contiene y su adquirida fama, ha hecho que se convierta en la ruta más visitada de la comunidad asturiana.

Imágenes: Internet principios del siglo XX existía una antigua ruta conocida por los lugareños como “paso de cabras” siendo un sendero mal señalado, el cual a veces, desparecía completamente. Entre los años de 1916 – 1921 la senda fue regenerada, para construir una canalización de agua para abastecer una central hidroeléctrica en Poncebos. Transcurridos los años,

El rio Cares nace en el Valle de Valdeón, a los pies del Pico Cebolleda, en la provincia de León. Sus aguas discurren entre los pueblos de Caín (León) y Poncebos (Asturias). A Entrada al pueblo de Posada de Valdeón 6


entre 1945 y 1950, la senda fue ensanchada por necesidades de acceso al mantenimiento del canal. Una ingente mano de obra fue necesaria para la realización. El arduo trabajo para lograr abrir un nuevo ancho en ella, desmoronando la roca en el escarpado lugar, unido a la inclemente climatología, hicieron lamentar graves accidentes en los que perdieron la vida un considerable número de obreros. Gracias a este heroico trabajo, en la actualidad podemos disfrutar de la misma y de sus impresionantes paisajes, con un mínimo esfuerzo. La ruta comienza en Posada de Valdeón (León) pasa por Caín (León) y finaliza en Poncebos (Asturias). El camino entre ida y regreso es de 21 Km. Nosotros partimos desde Posada de Valdeón hasta Poncebos. Esta ruta es la más aprovechada en cuanto a la contemplación del espectacular paisaje. No

nos perdimos así ni un ápice que discurre por toda la travesía. Creo recordar que atravesamos más de 70 túneles escavados en la roca. Saliendo de Caín, pasamos una franja de túneles, donde tratábamos de evitar el agua que caía sobre nuestras cabezas, e igualmente, nos veíamos obligados a agacharnos para no tropezar con el techo. Llegamos a Poncebos con dos únicos deseos: descansar y reponer fuerzas. Prevaleció la idea de todos, en el deleite de la consumición de unas frescas cervezas en el más cercano chiringuito. para después, engullir una esplendida comida de cuchara y tenedor. Desplazándonos a continuación a una planicie y mullida pradera, donde nos aguardaba una reparadora siesta. Más tarde, disfrutamos de sendas partidas de cartas jugándonos al mus, las copas de rigor, en las que no faltaron los envites habituales que marcan los cánones.

Panorámica de Posada de Valdeón 7


Panorama a la salida de Cain, caminando hacia Poncebos.

Pasada la tarde, la necesidad de pernoctar nos llevo a la localización de un alojamiento en el pueblo. Conseguido este, decidimos madrugar para dirigirnos en la mañana naturalmente caminando- a conocer el pueblo de Arenas de Cabrales distante a cinco km. de Poncebos. Nuestra visita a Cabrales, ya programada, no pudo ser más exitosa, pues el atractivo de su conjunto, nos sorprendió al igual que los visitados hasta el momento. Decidimos pasar en él la jornada entera, visitando su entorno, para dedicar el día siguiente a ascender a Sotres ( Pueblo más alto de los Picos de Europa). Al ser la distancia que le separa de Cabrales de trece km., deberíamos madrugar mucho, para estar de regreso en Cabrales al anochecer. El acusado desnivel debido a su altitud – que ahora no recuerdo – debe superar los dos mil quinientos metros. Debido al esfuerzo muscular que llevamos a cabo, renunciamos a

nuestra llegada a Sotres a continuar con el ascenso, para la contemplación en la distancia del Naranco de Bulnes. La proximidad del Rey de los Picos se debe, a que el ascenso a él desde Sotres, es el más adecuado. En nuestros planes por supuesto no quedo incluido la ascensión al Naranco, ya que éramos conscientes de las dificultades técnicas que para su realización eran precisas. Por ello solo nos debimos conformar con su observación en la distancia. Con nuestro arribo desde Sotres hacia nuestro punto de arranque desde La Posada, dimos comienzo al final de este incomparable viaje. Mucho me alegraría el saber que algún lector, encontrara en esta asimilación, la curiosidad de averiguar por sí mismo la realidad de mis manifestaciones. Y es que después de disfrutarlas tan intensamente, solo me cabe el 8


reclamo de divulgarlas para ser compartidas. A mi parecer, la descripción que me hicieron quienes me animaron a descubrir estos parajes, se quedaron cortos en cuanto corresponde a su belleza. Sotres, Cabrales, al igual que Poncebos, Caín y Posada de Valdeón, parecen salidos de un lienzo. Tanto por la sencillez y originalidad de sus construcciones, como por la enmarcación de la naturaleza que los contempla. Todo el conjunto queda tan embellecido, que hace sea imborrable su recuerdo. Una imagen, dicen, vale más que mil palabras. Es por ello que siento la necesidad de hacer públicas –aunque no sea su autor- las siguientes imágenes.

pio que, el singular paisaje e incomparable territorio, nos supuso a mis amigos y a mí unos inolvidables días que como puede verse a pesar de los años transcurridos, continúan permaneciendo en nuestra memoria.

Espectacular mirador de Tombo (Posada de Valdeón)

Solo me resta añadir como señalo al princi-

Ermita en las lindes de Cain. 9


Impresionante panorรกmica del desfiladero en la ruta.

Al fondo, puente sobre el rio cares. 10


El rio Cares a su paso por Poncebos.

Arenas de Cabrales

Una parte de la senda.

Saliendo de Cabrales

Admirable panorรกmica del pueblo de Sotres. 11


A tumba abierta Texto: Marisa Ramírez

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Imagen: Internet

e me ha olvidado escribir en esta máquina en la que todo el mundo lo hace sin problemas, y es más, le parece cómodo y fácil.

ideas. Sin darte cuenta lees una y otra vez, lo que en teoría tenía que salir de ti espontáneamente sin pensar apenas lo que escribes.

Mi realidad es completamente distinta. No me gusta, ni me gustara nunca.

Papel y lápiz, y todo me brota con una fluidez tan asombrosa, que a veces yo misma no me lo creo.

En este aparato las cosas no salen del corazón. Bien cierto es, que no llevan tachones, ni palabras cambiadas que se notan en el del texto original. Si quieres, ni te preocupas de la ortografía, pues con darle a un botoncito te corrige el texto, más o menos aceptablemente. Si repites una letra, con darle a una flechita hacia atrás se acabo el problema. Una maquina tonta que te deja casi sin

Que fácil me resulta esa escritura. Como corren mis ideas por esos folios limpios de teclas. Mis dedos vuelan y mi mente se agiliza hasta límites insospechados, e incluso creo que escribo mejor. Siento que es más verdad que darle a este teclado absurdo, que hace que pienses siete veces siete lo que vas a poner por si queda mal.

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Coge un folio y un lápiz. Siéntate y permite que tu mente guie tus dedos.

cuado y aquí lo tenéis, facilito, facilito. Cargar y listo para imprimir.

Seguramente saldrá semánticamente peor, pero para el que está penando en ese momento escribiendo directamente en el ordenador (y no es su costumbre) le sabrá mejor lo tradicional. Puede que hasta le resulte dolororoso, inhóspito, frio éste método tecnológico.

No es útil para la vida moderna, el del alma. Yo aprendí así y seguiré haciéndolo de la otra manera. La maquina es una anécdota hecha por el hombre hace unos años. Las manos con sus dedos están desde el origen de la especie humana. Se perderán muchas cosas, no me importa. Habiendo salido de mí, vivirán eternamente aunque no haya constancia de ello. Es lo que menos me preocupa. No me importa si lo que escribo gusta o no gusta, si está correctamente expresado, si lo entienden, da igual. Lo escribí sintiéndolo en ese momento así, con eso me basta. No pretendo ser Pablo Neruda. Y aun a él le corregían los escritos. Todos tenemos que comer y hay gente que necesita corregirte, se siente mejor… Brindo por ellos.

Este aparato, frena mi mente. Coarta mi creatividad. Difícilmente llorare de sentimiento escribiendo aquí. En mi medio nado como un pez, sonrió, rio, grito al silencio, me habla el, callo yo, escucha, escucho, charlamos de todo o nada. Me abstraigo de tal manera que todo sonido desaparece. Nada importa, solo mi sentimiento y las herramientas que adoro de toda mi vida. Simples ellas, pero tan antiguas como el hombre. Siempre he escrito así y espero seguir haciéndolo. Seguro que lo hago. Tengo montones de papel escritos y guardados. Otros se marcharon al olvido de la pérdida o acabaron rotos, no sé porque, seguramente no era su momento o el mío, da igual. Preguntareis porque escribo directamente aquí. La verdad es por pura vaguería. No soporto volver a escribir otra vez lo ya expuesto en papel. Es una pérdida de tiempo, ya está dicho todo, por eso el “directo” comodidad. Poco importa lo que se diga mientras vaya en el formato ade-

Quiero tener un recuerdo para finalizar este escrito. Aunque me duela no hacerlo en papel como él se merece. Me refiero a donde he transportado el ordenador. Una maravillosa cartera arrugada y vieja, que me hizo sentir su historia mientras bajaba a la cafetería donde me encuentro en este momento poniendo fin a este escrito Lo que me hizo sentir esa cartera merece papel, lápiz, mas intimidad y mucho, mucho más sentimiento. Tal vez alguna lagrima y seguro que muchas sonrisas de complicidad. 13


El viento de El Escorial

Texto: José Ruiz Guirado

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amos a traer a capítulo un fenómeno meteorológico, el viento lóbrego (así lo califico, porque en es este lugar del que se habla –el Escorial- el bosque que sería, impediría que la luz entrase a raudales, podría ser de esta guisa o apariencia), que tendría su importancia; primero, porque su presencia, como se va a transcribir, a punto estaría de dar al traste con el lugar que se elegiría para la ubicación de la Obra. Y, por otro suceso que causaría espanto por su virulencia y, que como se verá, tuviera en jaque frailes y a legos. Correría el año de 1561, por el mes de Todos los Santos, que ya era San Andrés. En comisión real se desplazarían expertos en distintos saberes para el propósito. E in situ, comprobarían si el paraje complacería y cumpliría las exigencias

Imagen: Internet (madera para cortar, agua, piedra, salubridad y distancia a la Corte). Y así nos los expondría Fray Juan de San Jerónimo: “Se juntaron en Guadarrama este día… y de allí partieron para el lugar del Escorial…y de allí subieron para el dicho sitio con el ánimo y el contentamiento cristiano y muy deseosos de ver dicho lugar. Y en llegando que llegaron todos a una cruz a la mitad del camino desde el lugar del Escorial para el sitio donde estaba una viña de Juan Rubio llamado el Rico, se levantó una tan gran tempestad de aire que llevó la barda a la cerca de dicha viña y dio con ella en las cabezas de las mulas y caballos que los hizo volver todos atrás, donde parecía que el demonio había causado aquella tempestad para ponerles pavor y espanto…” 14


(Pasarían la jornada en el cercano lugar del Escorial. Apréciese la articulación que el propio cronista utiliza consecutivamente –del Escorial-. Le partícula “el”, que antecede al vocablo “Escorial”, no sería en rigor parte sustantiva del nombre, sino artículo determinado del mismo. [En el Escorial, del Escorial, al Escorial], con todas las consecuencias ortográficas que de ello se derivan. Sería el nombre propio, determinado o no por el artículo, sería el único que exigiese mayúscula siempre. El artículo que lo determinaría seguiría las reglas en uso de la gramática y los modos que establecerían el idioma, que se aplicarían al nombre propio como al común. Y sería hasta finales del siglo XIX la tradición ortográfica del Escorial fiel a esta regla. El amigo Pepe Sierra, ilustre musicólogo y catedrático de música, me comunicó hace unos días que otro reputado investigador -Pepe Rodríguez-, recién ha publicado en “La ciudad de Dios”, exhaustivo trabajo sobre el tema que nos ocupa). Pasarían trece años de aquel suceso. Estaría el rey meditando la manera de manera de trasladar los restos de sus padres, hermanas y parientes. El 22 de enero del año de gracia de 1574, escribiría al Vicario, en ausencia del Prior, para que cumpliera las instrucciones. El seis de febrero cantarían la Misa y Oficio de ángeles por los infantes Don Fernando y Don Juan. Se levantaría tal

viento que llenaría a todos de pavor. Oigamos al P. Sigüenza relatarlo: “Porque parecía que se habían abierto las puertas del infierno para arrebatar las piedras de esta casa”. Tres siglos después -1829-, José Quevedo, nos relataría lo que presenciaría con sus propios ojos: “Arrebató seis planchas de plomo unidas sobre la bóveda que cubre el altar mayor de la iglesia principal, que pesaron 49 arrobas, y las llevó como un ligero papel hasta cerca de la torre que llaman la del Prior, a más de doscientos pies de distancia…” El rigor de su virulencia se ha hecho sentir a lo largo de distintos sucesos. La contraposición a este exceso eólico, nos los proporcionaría “La brisa de Santa Teresa”; tradición escurialense recogida por Carlos Vicuña en sus “Anécdotas de El Escorial”: “Un día caluroso de verano subió la Santa cansada, sudorosa y desfallecida (ya no era tan joven), desde la villa de El Escorial hasta el ángulo noroeste del Monasterio, y apoyándose en la piedra guardacantón allí existente suplicó al Señor algún alivio. Dios le envió una suave brisa que la confortó al instante. Desde entonces nunca falta en los días más calurosos de verano, un vientecillo refrigerante…”

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Federico Texto: Miguel Soto

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l viento de levante sonaba con fuerza, Federico abrió la puerta de la casa y miró el camino de los cañaverales. ¡No se oía nada ¡ Al mediodía se había acercado a Conil a la casa de Josefa la partera. Llamó a la puerta, una mujer entrada en carnes abrió: ¿Qué pasa muchacho?- Preguntó. -Josefa, la Antonia está a punto de parir. Ya le han empezado los dolores. -¿Cada cuanto tiempo?- Preguntó la mujer. - Los ratos son largos. Esta mañana, desde que nos hemos levantado, ha tenido tres. -Tú Fede, vete para casa; en cuanto

Imagen: Internet prepare las cosas, voy para el Cabo. -¿Quién te va a llevar?- preguntó el pescador. -“El Jesús”. Dile, cuando pases por su casa, que enganche la mula a la calesa y que me espere. Federico avisó al cochero; se montó en el jaco y regresó al Cabo. Antonia preparaba unos pescados en el fogón. -¿Cómo vas mujer?- Preguntó. - Van deprisa, pero todavía aguanto, Te dejo aquí los cubos de agua; cuando llegue la Josefa, los pones al fuego. Asintió con la cabeza y sin decir nada salió al camino, estaba impaciente… prestó atención al silencio y reconoció el chirriar de las ruedas. 16


-¡Ya viene! Exclamó; -el viento seguía soplando. Cuando la calesa se detuvo, el “Jesús”, quitándose la gorra saludó a Federico, y mirando a Josefa le dijo: _! Ya hemos llegado! -Anda, ayúdame con las bolsas- dijo la mujer. Bajó de la calesa y entró en la casa. -Está en la cama- dijo Federico. Josefa entró en la habitación. Saludó a la Antonia y cerrando la puerta, encargó a los hombres que hirvieran agua. Los dos hombres, al lado del fuego, consumían los cigarros. Federico removía las ascuas con la barra de hierro; el silencio era absoluto. Se abrió la puerta, y Josefa preguntó: ¿Está preparada el agua?. El pescador asintió con la cabeza; entonces un grito de la Antonia reclamó a la partera. -¡Empuja, empuja, ya veo la cabeza! Vamos… mujer; ya está aquí. ¡El ultimo empujón! Antonia sin pudor gritó con fuerza.-Un muchacho- afirmó la partera. ¡Traed el agua! Federico, cogió los cubos y entró en la habitación; Antonia jadeaba con los ojos cerrados; estaba muy blanca. Josefa se dio la vuelta. En sus brazos una

criatura saludaba con su llanto. ¡El tributo por nacer!. -Es un muchacho y bien guapo. Anda cógelo que voy a limpiar a tu mujer. Cuando tubo la criatura en sus brazos la miró con atención, no se atrevía a moverse; en sus ojos dos lágrimas asomaron, junto a una sonrisa en los labios… -¡Mi hijo!- exclamo el pescador. Le arropo con una manta, y salió de la habitación. Cuando paso por el lado del Jesús se lo enseño y le dijo: - !Mira… mi hijo!-dijo; abriendo con el pie la puerta de la casa y saliendo a la orilla. El levante estaba suavizando. Federico extendió los brazos, metiendo las alpargatas en el agua; y acercando sus labios al oído del niño le susurro: ¡Hijo, este es nuestro tesoro! De vuelta a casa miró a la lejanía las luces de su pueblo; estaban encendidas las estrellas, brillaban más que nunca. Eran las ocho de la tarde del dos de Febrero del año 1931.Entró en la casa, pasó a la habitación. Antonia había recuperado el color. Le dio a su hijo; ella le estrechó contra el rostro y miró a su marido.-¿Estas contento?- Federico asintió con la cabeza. -Le he enseñado el mar. -¿Cómo se llamara? -Preguntó la partera. El pescador con una gran alegría reflejada en el rostro contestó: Federico Jiménez Carrasco.

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UN RECUERDO Texto: Marisa Ramírez Amanece.

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a gente empieza sus quehaceres. No da mayor importancia al aire que respira, al sol que comienza a calentar en este tórrido verano. Todo en sus vidas parece igual o similar, pocas cosas han cambiado para ellos. Inmersos en su rutina, sus pies se deslizan sobre el asfalto sin conciencia ninguna de lo que están pisando. Pequeños autómatas, que sin necesidad de pilas alcalinas, caminan y caminan, llenos de obligaciones perentorias. Todo corre de prisa, es necesario hacerlo. El mundo no funciona si no estoy yo… ¡Soy el centro! Los carros de la compra sí te echan de menos. El perro, que siempre está atado a la barra, también; tiene los ojos más tristes que de costumbre. Su parcelita, donde él se apoyaba, lleva días llorando, nadie lo nota. El vacio se llena con el griterío y las preocupaciones de la gente que día tras día, le han visto allí parado, durante horas, con el pecho lleno de cupones,

Imagen: Internet unas gafas de culo de vaso, su cartera marrón colgada en bandolera y ese olor malvado que también formaba parte de su personalidad. No sé ¿Porqué, comencé a echarte en falta? Pregunté varias veces y a distintas personas, nadie sabía nada. Supe que te estabas muriendo en un hospital. Nadie a quien pregunté conocía si tenías familia, si estabas solo. Una dura enfermedad, te apartaba deprisa de esta vida, con dolor. Cuando estuve por casualidad, en el mismo centro en el que agonizabas, quise verte. Preguntar por el ciego que se ponía en la puerta del mercado y que a punto estuvo, de darme el cuponazo del viernes, hace unos años. .Puede sonarte a excusa, pero hice cuanto pude, para ir a verte, lo siento. Ahora otra persona ocupa tu puesto, no la conozco, a ti sí. Tu esquela apareció un buen día colgada en la pared del establecimiento, hacía más de una semana que te habías ido, tan calladito. Todos tenían cosas que contar de ti. Me hubiera gustado, darte la mano y un beso de despedida. No supe hacerlo. ¡Hasta siempre¡ Buen viaje. 18


Poesías de Rafael Tenllado

Llueve

Imagen: Internet

VEJEZ

En el cristal un mensaje Que sólo hoy entiendo: ¿Será éste mi último otoño…?

Detrás de la cortina Deja el lápiz Ráfagas de incertidumbre…

DUDA

Entre las hojas, es costumbre, Compartir la pesadumbre de la rama

INSOMNIO

Abatida por el viento; Quizás este año Caiga la nieve sin quebrarse…

La avara luz De la lámpara de noche, El sueño custodia Como al reo Que han de ajusticiar… 19


Sensaciones Texto: M. Olhai

M

iré por la ventana. Hacia un día radiante. Los rayos del sol caminaban por mi cuerpo desnudo. Las manos, apoyadas en el adobe notaban su frescor.

Imagen: Internet

mentos. -¿Me pones crema?: insinuó la mujer.

Vertí en mi mano el denso fluido sintiendo su viscosidad. Al acariciar la piel de su espalda, sentí inEn la playa estaba ella, disfrutanmediatamente como recorría por do de la brisa. todo mi cuerpo, un inesperado y Me puse el bañador y cerré la cor- gran escalofrío. tina. Sintiendo el escalofrío de la De forma suave, recorrí pausadapenumbra. Apagué la luz del bamente toda la superficie, hasta ño, y cerré el grifo; entonces perdescubrir rincones que me hablacibí su frialdad. ban de misterio. Ya en la calle, me dirigí a la areElla se volvió complacida, yo le na. Al pisarla, noté su fuego en rocé con mis dedos su cuello y mis plantas. sus hombros. -Buenos días. Me miró con sus ojos color de Una sonrisa fue su respuesta. cielo, instintivamente, rozamos Acercándome a ella, puse mi ma- nuestros labios de forma suave, no sobre su espalda, estaba ca. Sentado a su lado, mirando al liente, los rayos del sol habían tomar, sentí en mi alma el comienzo mado su piel tostándola por mode algo mágico… 20


El pequeño Escorial de Fuencarral Texto: Félix Bernardino

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egún una tradición muy antigua, la imagen de Nuestra Señora de Valverde, la trajeron a España desde Antioquia, en el siglo I, los discípulos de San Pedro. La misma fue construida por San Nicodemo, y pintada por San Lucas. A causa de la invasión Sarracena, en el año 715, los cristianos de entonces, la escondieron en un pozo que en actualidad existe en el interior del Santuario. Allí estuvo escondida hasta el año de 1242. Y fue el día 25 de Abril de este año en el que se apareció con grandes resplandores, sobre unas retamas a unos pastores que por el lugar apacentaban sus ganados. Llevada la imagen a la Iglesia parroquial, por dos veces desapareció volviendo en ambas al lugar de la aparición. Ante estos hechos milagrosos, las autoridades religiosas, con la colaboración de los vecinos, decidieron construir una ermita en el mismo lugar, para guardarla culto. Tiempo después aconteció un hecho milagroso. Este fue; el brote de un manantial de gran caudal a flor de tierra. El hallazgo se produjo al inicio de una excavación para la busca del agua que se necesitaba para la obra de construcción. Terminada la obra, el pozo desapareció al secarse totalmente. Muy pronto la ermita fue transformada en un gran Santuario, que se hizo famoso por las especiales mercedes que la Santa Virgen concedía a sus devotos y visitantes. Entre ellos se encontraron como fervorosos, nuestros Reyes de las Casas de Austria y de Borbón. Felipe II fue devotísimo de esta Imagen, y la llevó en ocasión memorable a Madrid, para encomendarle el buen suceso de la Armada Invencible. Se dio solemne

Dibujo: del autor novenario en la Iglesia de la Almudena de Madrid, y después en magna procesión presidida por el mismo Rey Felipe II, fue devuelta a su Santuario. El Santuario era conocido a causa de su enorme riqueza material y artística. La acumulación del patrimonio conseguido durante dos siglos de generaciones devotas de Nuestra Señora de Valverde, y conocido su entorno como El PEQUEÑO ESCORIAL, figura en la historia del Santuario también: Que la acumulación de extraordinarias obras de arte, se debieron a la aportación realizada por el Príncipe Carlos, procedentes todas del Monasterio de El Escorial. Al día de hoy, tristemente desaparecidas. Hasta el año de 1836 fue Monasterio de Religiosos Dominicos, quienes desde el siglo XVII acostumbraban a donar a los romeros el día 25 de Abril de cada año, pan y queso, tradición que se ha conseguido mantener ininterrumpidamente. En el año de 1940 es reproducida la preciada Imagen y es traída desde la Iglesia de Nuestra Señora de la Almudena, de Madrid, a su Santuario en grandiosa procesión. Entonces se crea la Hermandad de Nuestra Señora de Valverde, siendo párroco D. Félix Verdasco. En el año de 1942 se celebra el séptimo centenario de la aparición de la venerada Imagen de Nuestra Señora de Valverde. El 2 de Abril de 1990, la Hermandad de Nuestra Señora de Valverde es erigida canónicamente por el Arzobispo D. Ángel Suquía Goicoechea.

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La palabra Texto: Rafael Tenllado

A

ndaba por la séptima cuartilla de un relato que estaba escribiendo, cuando topó el pensamiento con un “agujero negro”, que impedía concretar la palabra más adecuada Busqué aquella en el diccionario; pero ocurrió que no la encontraba. Consulte en el de sinónimos, vocablos afines; ninguno se aproximaba a mí necesidad. Comprobé la fecha de ambos; eran muy recientes. Consulté Internet, tampoco aparecía. Decidí bajar a la librería donde – desde hace veinte años – adquiero mis libros. Al dueño, antiguo periodista, comenté mi situación. No era el único al que había solicitado información parecida. Recordó a un colega, muy conocido en otro tiempo; llegó a obsesionarse tanto por un asunto análogo que terminó retirándose del oficio. Me contaron que había abierto una agencia dedicada a localizar palabras desaparecidas. Después de escudriñar, inútilmente, ocho ediciones de diferentes diccionarios; le pedí la dirección de aquella. Tras escrutar en su antiguo fichero, me entregó media cuartilla, escrita con letra menuda. Me puse en contac-

Imagen: Internet to con la agencia donde me recibieron aquella misma tarde. Ciertamente, es muy singular, el universo de las palabras- Afirmó aquel hombrecillo que tenía delante. Tendría poco más del metro sesenta, muy delgado. Representaba la ochentena. Cada una de ellas, poseen características propias; sienten y padecen como cualquier ser vivo. Algunas son frías y herméticas. Otras, en cambio, cálidas y transparentes. Me preguntó por la fecha en que había desaparecido. Le conté todos los pasos que había seguido, hasta contactar con él. -Sígame- dijo. Nos adentramos por un largo pasillo que desembocaba en un cuarto de grandes dimensiones, donde, claramente, habían derribado el tabique que lo dividía. El cuarto se hallaba cubierto, desde el techo hasta el suelo, de pesados archivadores . Cada uno de ellos, debían de contener miles de tarjetas. Y cada una, con información exhaustiva, de cada palabra desaparecida.

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-Sé, que está pensando… ¿Cómo puede haber tantas desaparecidas?

La invité a unas bravas y unos botellines de cerveza.

-Así es- confirmé abrumado.

Cuando estaba preparada, me relató su historia: Siempre he sido muy viajera. Me atraían, especialmente, aquellos idiomas totalmente desconocidos que sentían qué me estaban esperando.

-Las palabras que se hallan en el diccionario, son sólo, una mínima parte de todas, las que han desaparecido. -¿Pero… y donde…? -Se ignora el paradero. Debe de existir, una especie de cementerio, donde “reposan” todas aquellas que dejan de ser utilizadas. Salí a la calle sospechando que nunca lograría localizarla. Normalmente, cuando estoy bloqueado, suelo dejar aquello que esté escribiendo en “barbecho”, durante una semana. Fue lo que hice. Comencé otro relato, en el que he estado trabajando hasta hoy, que he retomado el anterior. De nuevo la cuartilla se transformaba en una trampa, de la que no podía escapar. Cerré los ojos dejando vagar la mente…

Una tarde, no pude soportar, tanto vocablo mediocre. Abandoné el diccionario cuando nadie me consultaba. Desde entonces he estado viajando, siendo huésped de diccionarios, cuya lengua ni siquiera imaginaba que existieran… Seguimos charlando toda la tarde. Cuando la dejé, tenía la absoluta convicción, que jamás volvería a formar parte de ningún diccionario, libro, periódico, revista ni internet. Ya no podía. No pertenecía a nadie. Terminé otro relato; ayer lo entregué. Nunca he vuelto a verla.

Tropezando con una forma conocida ¡Era un libro de Haikus, en ellos, suelo recuperar aquello tan complicado, como es la “sencillez”. Cogí uno de ellos (Issa Kobasyashi) en uno de sus poemas: surgió la intuición. Nunca dejo guiarme por ella, pero era demasiado intensa, como para ignorarla. Cuando llegué a la “Cuesta de Moyano” ella estaba allí. ¡No entiendo cómo, pero sabía que era ella!. Estaba sentada en la base de la estatua de “Pio Baroja”, leyendo un fragmento de un periódico.

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El costo de sobrevivir

(Última parte) Texto: Carlos Bernardino

E

l inicio del cambio de esta nueva etapa de trabajo, supuso para Fernando una entrega total en el desempeño de las nuevas funciones a desarrollar, tanto en el ámbito de relación laboral con aquellos colaboradores autónomos: Empapeladores, pintores, e instaladores de pavimentos, que iban a intervenir en las ejecuciones de estas obras. Para ello, hubo de indagar en los costos de la mano de obra de los distintos materiales a instalar. Una vez conseguido este propósito, ya pudo trasladar sus costos, a los distintos presupuestos solicitados por sus primeros clientes. Su incorporación al negocio, inmediatamente favoreció la aceptación de las primeras obras. Pues su popularidad en el barrio y seriedad demostrada en el estudio, eran suficientes para que sus vecinos confiaran en su buen hacer. Esta prevista circunstancia en escaso tiempo, y dado el continuo incremento de obras a rea-

Imágenes: Internet lizar, presupuso un éxito seguro para la iniciada empresa. Por esta circunstancia Fernando, se entregó a la atención y aprendizaje de cuantas instalaciones realizaban los profesionales. Y no era ello, para incurrir en competencias que no le correspondían. Su pretensión era; la adquisición de conocimientos profesionales perfectos, para sí mismo, y poder demostrar a sus clientes en un momento dado, su saber en todas y cada una de estas materias. La fijación que puso en este empeño, le llevó a alcanzar pasado un tiempo, la suficiente ilustración y conocimiento de los diversos materiales. Y así, llegado un momento, poner en práctica el plan trazado. Para su realización -mediante las prácticas necesarias- de ser capaz de instalar papel pintado, pavimentos plásticos, moquetas y parquet. Pasado un tiempo, el exceso de pedidos fue tan amplio, que imposibilitaba a los instaladores su ejecución. Como alternativa a este 24


problema, propuso a sus colaboradores la solución, -siempre contando con su beneplácito-, de ser ejecutados por él, aquellos trabajos, que ellos no pudieran realizar. El equipo de instaladores, no solo aprobó la leal propuesta. También supieron entender el compromiso de atención a sus clientes. Pues estos en definitiva, representaban la fuente de ingresos comunes de la empresa. Salvada satisfactoriamente esta eventualidad, Fernando, se hizo cargo de la ejecución de diferentes obras, las que realizó a plena satisfacción de los clientes. Clientes, que no solo admitían con agrado a su inesperado instalador, si no que, no salían de su asombro al comprobar sus demostradas habilidades. Esta capacitación, al margen del interés comercial supuso para el interesado, la satisfacción del logro conseguido una vez más. Ahora, ya se veía preparado para poder discutir las deficiencias detectadas por él, en las diferentes labores. Esta nueva y expuesta demostración, igualmente fue válida para los intervinientes y así procurar afinar sus terminaciones de cada obra. En términos generales, estos fueron los acontecimientos más destacados, en los doce años que Fernando mantuvo abierta esta empresa. Ellos, le posibilitaron unos ingresos económicos suficientes para, no solo vivir con suficiencia su familia. También, con los ahorros conseguidos gracias a una buena administración, decidió dedicar una parte de ellos, a la inversión en la compra de un piso en la sierra de Madrid. Con ello no solo canalizaba para el bien familiar, los recursos obtenidos. Al tiempo, el disfrute de esta vivienda por su ubicación en plena naturaleza, les evitaba los incómodos desplazamientos para llegar a ella. A partir de este conseguido bien, tanto los fines de

semana y vacaciones, fueron igualmente gozadas en el paraje serrano. Pero como quedara demostrado en el transcurrir de la vida de Fernando, la inestabilidad de su trabajo, una vez más es manifiesta. Así ocurre que, en el año de 1982, la demanda a esta elaboración comercial disminuye. De manera progresiva e inquietante va reduciéndose, hasta llegar a la conclusión que comienza a preverse: que un próximo futuro, impida la continuidad en este negocio. La causa de este declive, pudo ser atribuible a la saturación de mercado, o, en su defecto, a la variante social de otras apetencias decorativas. Pero fuese así o no, el bueno de Fernando se encontró por tercera vez, ante el azaroso problema: Ingeniarse una nueva manera de dar solución al grave problema que se avecinaba. Anticipándose al final que intuyó, -al igual que le ocurrió con la fotografía-, convino con su cuñado, representante de joyería al efecto, en trabajar con él como ayudante -que precisaba en aquel momento-, mediante el tiempo suficiente para que su hijo adquiriese los años que le permitieran ocupar su lugar. Esta inicial solución solo cubriría el tiempo necesario para conseguir el suficiente conocimiento de esta, para él, nueva profesión. Después de cubiertas ambas premisas, el acuerdo tomado entre ambos, -al margen de los honorarios económicos-, era obtener así, la representación de un muestrario de algún fabricante del gremio. Inicialmente, el buen funcionamiento y entendimiento entre ambas partes, discurrió a la perfección durante los dos primeros años. Pero pasados, estos comenzaron a surgir por parte del cuñado, ligeras inconveniencias referidas al elevado costo de sus retribuciones 25


-feridas al elevado costo de sus retribuciones económicas. Estos inconvenientes en escaso tiempo, fueron en aumento. Hasta tal punto se acentuaron llegado un momento, en que su mal estar, se hizo insoportable. Ante esta situación, la respuesta de Fernando fue tajante: no continuar trabajando con él.

no compartía con respecto a sus intereses, ya que llegó a descubrir en sus liquidaciones, la merma que le eran aplicadas por la empresa. Este comportamiento por la misma, vino a corroborar los informes recibidos a través de compañeros, del mal hacer de los socios que la componían.

Como réplica de su cuñado a la decisión tomada por Fernando durante el viaje, fue el anunciarle al siguiente día, la aceptación sin previa consulta, de un muestrario ofrecido para él. Este pertenecía a una empresa de mayoristas del gremio, ubicados en Madrid.

Al desencanto sufrido por estas comprobadas afirmaciones, hubo de añadir para su revés, el conocimiento que su cuñado –según le fue garantizado- igualmente conocía.

Esta inesperada alternativa, le supuso una descarada e inoportuna solución, a los problemas con los que se iba a enfrentar a partir de ahora. Las dudas, -sobradamente conocidas por aquel-, sobre su escaso saber, para salir airoso al aceptar esta alta responsabilidad. Su desconocimiento, llegaba al límite de ignorar la diferencia habida, entre una Circonita y un Brillante. No obstante, no se podía permitir el “lujo” de caer en el desánimo. Su situación le obligaba a superar el inesperado momento. Debido a ello, al no caber otra opción, inmediatamente se hizo cargo del descomunal muestrario, no sin antes concertar con la empresa las condiciones económicas. Este, estaba compuesto de cinco maletas de un peso aproximado de veinticinco kilos de oro y pedrería cada una. Siendo obligado a la vez, a custodiar el mismo en su domicilio. Con él, debía viajar por las provincias de Castilla y Andalucía. Las continuas dificultades que en principio pudo encontrar, las supero con la perseverancia en él acostumbrada. A través de su éxito en las ventas, unida a su seriedad, fue paulatinamente ganando la confianza que la empresa había depositado en él. Confianza, que

Debido a esta lamentable circunstancia, a continuación, no pudo evitar sus reproches al mismo, por su mala conducta. Pero este, no reconociendo su desleal comportamiento, argumentó razones insostenibles, eludiendo en todo momento su conocimiento al respecto. Este fatalismo inevitablemente, le venía a demostrar la escasa moralidad de los cuñados, con quienes había llegado a emparentar. Como respuesta, al ser preguntado por aquellos conocedores de este hecho acerca de su mal estar, con buen humor siempre respondía: -Contento puedo estar, de haber tenido solo dos parientes de este tipo- . Así transcurrió el tiempo, en el que se fueron acrecentados los problemas con la empresa. Debido a ello, Fernando y amigos, no cesaban en la búsqueda de otro muestrario, para ejercer una nueva representación. Pero cuando aun no se habían cumplido los dos años de permanencia en esta, un trágico suceso puso final a su trabajo en la misma. Al salir una mañana de su casa portando el muestrario, fue atracado por unos pistoleros en el momento de dirigirse al coche. Derribado al suelo ante la amenaza de muerte, el y su hijo fueron testigos mudos, de ver 26


como desaparecían del lugar, con el botín. Este hecho, dio lugar a que esta despreciable firma, le negara un nuevo muestrario. Denunciado el hecho ante el sindicato, este fue declarado como despido improcedente, debiendo ser indemnizado por tanto, con arreglo a lo establecido por la ley. Por este nuevo acontecimiento, Fernando, por cuarta vez en su deambular por la vida y a sus cumplidos cincuenta y cinco años, nuevamente se veía obligado a encontrar un ajeno rumbo para mitigar su desdicha. Para conseguirlo, medió esta vez la amistad de una buena amiga. Vendedora destacada de la editorial Salvat, y enterada de lo ocurrido le condujo hasta a la directora de ventas. Así comenzó su nueva singladura, como comisionado de ventas en esta editorial. En ella discurrió con gran entereza, superando los ingresos habidos en la nefasta empresa anterior. Tiempo después fue requerido por un fabricante de joyería de Barcelona, para ejercer la representación de la misma. Y como la oferta ofrecida resultó ser altamente favorable, decidió volver al gremio que tantos disgustos le había causado.

leza del entorno que le rodeaba; a la lectura que durante años había acopiado: una considerable cantidad de libros, que permanecían expectantes en una cuidada biblioteca; e igualmente, a la audición de una cuantiosa discografía de música diversa, magníficamente conservada al efecto, ávida de posar en un moderno esplendido tocadiscos disponible. Y ante toda esta “gozada”: a vivir desde este momento: ¡Una libertad sin límites! La sana ejecución de estas intenciones, las llevó a efecto en la fecha señalada. Para ello, no presto oído a quienes venían a aconsejarle la permanencia en el gremio, debido a sus éxitos de ventas. Desde aquel tiempo, hasta la actualidad, este gran camarada, -contando en la actualidad ochenta y cuatro años- afortunadamente para él, lleva vividos con todo merecimiento, veintidós años de completo gozo. Aquí concluyo mi relato, acerca de las adversidades y reveses que debió soportar este gran amigo mío. A través de él, he pretendido rendir una leal consideración, al coraje demostrado durante toda su vida, para resistir estos adversos y duros rigores. Nada más.

Esta empresa, se convirtió finalmente en el último “vehículo” de su agitado calendario laboral. Pues alcanzado el año de 1993, -cumplidos los sesenta y dos años y los cincuenta y un años trabajados en su vida-, Fernando, determinó disfrutar de una merecida jubilación. Él, me comunicaba para su regodeo, que ahora le esperaba una época para el disfrute de una asignatura pendiente largamente esperada: Pasar al disfrute de la maravillosa natura27


¡Que cosas tiene mi abuela!

A

ntes de sentarse en el sillón de los cuentos bonitos, la abuela, miró a su público habitual.

Todas las caritas la miraban. Unos, con mucho interés, otros; con gesto distraído. Cómo era muy lista, se fijó en los más pequeños, preguntándose: ¿se estarán enterando estos angelitos, de los cuentos que me invento? La verdad es que la cosa no era nada fácil. Tenía nietos de muy diversas edades. Es más, alguno no había nacido aún. Sí, como lo oís. Aunque parezca imposible ¡La realidad siempre supera la ficción! Había una, solamente, que todavía permanecía en la barriguita de mamá: todos tenían derecho a un cuento. Sabía que lo tenía un poco “crudo”, pero… Pensando en sus angelitos, comenzó el relato: --Tffgggu, ciser pupu desfi—dijo, vocalizando cada consonante; enfatizando cada vocal. Cetiuo, Fermín; cascarrino… La cara de los mayores era un poema. Los ojos se les salían de las órbitas .Los más grandullones llegaron a pensar que la abuela; estaba hoy, un poco “rarita”; vamos…como tontorrona. Pero no se lo tomaron en cuenta ¡La querían tanto! --No os preocupéis chicos…Ya veréis que se le pasa enseguida y nos cuenta una bella historia; como siempre. -- Biouyrr cayapeo chaparrillo Antequera. --¿Solapilla misitas cospetiernetilo? Las miradas de asombro seguían produciéndose en los mayores.

(Cuento)

M. Romero

--Bbbb.Foquibb, ñoñiñoñi. --Zaparás complitonis cuesta bajo. --¡Dios mío!...¡¡Se ha vuelto loca del todo! --Mira que os lo dije…Balbuceó uno de ellos, casi llorando. Le damos tanta guerra que, no la dejamos descansar. La abuela, completamente ajena a todos los comentarios, continuaba sin inmutarse. --Pili, pila, bubu bubu. --Moscaseriop lumichago bbb, suerutiono.. --¡Abuela! ¿Qué te pasa? ----Gggg, rgrte conpitollili certon --Y costrifitini gg bonestrio, suego cori sato. Al ver que se levantaba del sillón, como todas las noches, se percataron que aquello era el final del cuento. Y colorín, colorado…este cuento se ha acabado- dijo, dándoles un beso y deseándoles que soñaran cosas bonitas; se retiró a dormir. Cuando los mayores miraron a los “enanos”, con sus caritas sonrientes y la alfombra llena de babas que salían a “borbotones “de sus boquitas abiertas; con los ojitos entrecerrados de pura felicidad, se dieron cuenta que aquello había sido dirigido, sólo para los pequeños. ¡Ellos habían entendido todo y no se habían “pispado” de nada! Sin lugar a dudas, debían pensar que tenían la abuela más lista del mundo. Y se fueron a dormir tan felices. Como todas las noches.

--Califragilístico mostachosino lujarte rabanillo. 28


Islandia, un ejemplo a seguir Publicado por: https://teatrevesadespertar.wordpress.com

I

slandia consiguió acabar con un gobier-

descalabros y desmanes financieros. Los mati-

no corrupto y parásito. Encerró a los

ces de la historia islandesa de los últimos años

responsables de la crisis financiera en la

son múltiples. A pesar de trascender parte de

cárcel. Empezó a redactar una nueva Constitu-

los resultados que todo el movimiento social ha

ción hecha por ellos y para ellos. Y hoy, gracias

conseguido, poco se ha hablado del esfuerzo

a la movilización, será el país más próspero de

que este pueblo ha realizado. Del límite que

un occidente sometido a una tenaz crisis de la

alcanzaron con la crisis y de las múltiples bata-

deuda. Es la ciudadanía islandesa, cuya revuelta

llas que todavía están por resolver. Sin embar-

en 2008 fue silenciada en Europa por temor a

go, lo que es digno de mención es la historia

que muchos tomaran nota. Pero lo lograron,

que habla de un pueblo capaz de comenzar a

gracias a la fuerza de toda una nación, lo que

escribir su propio futuro, sin quedar a merced

empezó siendo crisis se convirtió en oportuni-

de lo que se decida en despachos alejados de la

dad. Una oportunidad que los movimientos

realidad ciudadana. Y aunque sigan existiendo

altermundistas han observado con atención y

agujeros por llenar y sombras por iluminar.

lo han puesto como modelo realista a seguir.

La revuelta islandesa no ha causado otras vícti-

Desde En Positivo, consideramos que la histo-

mas que los políticos y los hombres de finan-

ria de Islandia es una de las mejores noticias

zas. No ha vertido ninguna gota de sangre. No

de los tiempos que corren. Sobretodo después

ha sido tan llamativa como las de la Primavera

de saber que según las previsiones de la Comi-

Árabe. Ni siquiera ha tenido rastro de mediáti-

sión Europea, este país del norte atlántico, ce-

ca, pues los medios han pasado por encima de

rrará el 2011 con un crecimiento del 2,1% y que

puntillas. Sin embargo, ha conseguido sus ob-

en 2012, este crecimiento será del 1,5%, una

jetivos de forma limpia y ejemplar.

cifra que supera el triple que la de los países de

Hoy por hoy, su caso bien puede ser el camino

la zona euro. La tendencia al crecimiento au-

ilustrativo de los indignados españoles, de

mentará incluso en 2013, cuando está previsto

los movimientos de Occupy Wall Street y de

que alcance el 2,7%. Los analistas aseveran que

quienes exigen justicia social y justicia econó-

la economía islandesa sigue mostrando sínto-

mica en todo el mundo.

mas de desequilibrio. Y que la incertidumbre sigue presente en los mercados. Sin embargo, ha vuelto a generar empleo y la deuda pública ha ido disminuyendo de forma palpable. Este pequeño país del periférico ártico rechazó rescatar a los bancos. Los dejó caer y aplicó la justicia sobre quienes habían provocado ciertos 29


Así lucha Finlandia contra la corrupción (y no lo hace España) Publicado por Dashiell un jueves, noviembre 04, 2010

F

inlandia ha sido reconocida internacionalmente como la nación menos corrupta del planeta. Una parte de

ese logro recae en la estricta moralidad imperante en el país, a pesar de ello, y para facilitar la transparencia, también cuenta con un conjunto de principios enfocados a evitar el abuso de poder y que son insólitos en la cultura española. Esta es la manera con la que Finlandia lucha contra la corrupción: PRIMERO: En Finlandia cualquier compra que realicen las Administraciones Públicas, desde un edificio hasta un bolí-

no solo de los periodistas sino de los votantes. Debido a ello actuaciones contra esa norma (como ésta) son no solo contrarias a la ética sino ilegales. TERCERO: Principio de transparencia total en las cuentas de los ciudadanos. Los fineses pueden saber cuales son los ingresos declarados de todos los residentes en el país, ya se trate de una persona que cobre el desempleo, del artista de mayor éxito de la nación o del CEO de Nokia. El equivalente peninsular permitiría conocer las cuentas no solo empresariales sino personales de Emilio Botín, Arturo Pérez Reverte, Felipe González, José María Aznar, Adolfo Domínguez o cada uno de los vecinos de Madrid.

grafo, ha de estar ejecutada a precios de mercado e incluir, necesariamente, tres ofertas de proveedores distintos, para poder elegir la más baja. No es legal, admisible ni justificable el pago de 100 euros por un cartucho de impresora o de 1000 por una silla aunque las facturas sean correctas. Ejemplos ambos acaecidos en España y que la justicia no pudo castigar. SEGUNDO: Principio de transparencia total de las Administraciones públicas. Cualquier decisión tomada por un funcionario público dentro del desempeño de su profesión (excepto las relacionadas con la seguridad) puede ser conocida por el resto de ciudadanos. Nadie puede negarse a satisfacer las necesidades de información

CUARTO: Ausencia de alcaldes: El gobierno de los municipios en Finlandia recae en "City managers", es decir, en funcionarios públicos con experiencia en la administración de entidades de esa índole. Así pues el ciudadano puede distinguir con claridad que la persona al mando es alguien supeditado a los votantes y que puede ser despedido o reemplazado por el Consejo municipal (el órgano elegido en las urnas y que ostenta la soberanía popular). Helsinki es la excepción a este modelo. QUINTO: Ausencia de cargos de designación política: En Finlandia los secretarios de Estado son funcionarios de carrera que alcanzan el puesto superando pruebas objetivas en lugar de por designación partitocrática.

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En 2005 se realiza una remodelación del sistema para permitir a las organizaciones políticas el poder elegir a los Secretarios de Estado, aun así muchos de ellos siguen siendo en la actualidad trabajadores públicos ascendidos por méritos propios. SEXTO: Estructura de poder colegiada: La corrupción se extiende con mayor facilidad cuando el poder se concentra solo en un individuo, es por ello que en Finlandia se promueve la toma de decisiones mediante el debate y el consenso. Al igual que el órgano político principal de las ciudades es la Asamblea popular (el alcalde solo es un trabajador público) el Consejo de ministros tiene mayor capacidad de poder que el Presidente de la República. SÉPTIMO: Principio de acceso libre al poder. La posibilidad de convertirse en un miembro de alto rango de la administración y los ministerios fineses no recae en una élite intelectual formada en Instituciones de enseñanza concretas (como en Francia) tampoco en personas que puedan atraer la inversión de diferentes empresas para sufragar sus campañas (ejemplo de Estados Unidos) o en ciudadanos adscritos a organizaciones políticas que ascienden por los méritos internos dentro de su partido (caso español). En Finlandia los puestos son cubiertos por funcionarios públicos (siguiendo un baremo meritocrático) y cuya carrera está abierta a todos los fineses. El país evita, por tanto, tener que acudir a un modelo como el de España dónde los cargos de libre designación del gobierno (elegidos ideológicamente) reciben 200.488 euros anuales y se multiplican de manera oscura por todas las administraciones. OCTAVO: Principio de proporcionalidad en el castigo. La cuantía de las multas por violar las normas suele ser proporcional a los ingresos de los individuos y las empresas. En 2001 Anssi Vanjoki, alto ejecutivo de Nokia, fue considerado culpable de conducción temeraria por romper los límites de velocidad a los mandos de su Harley Davidson imponién-

dosele por ello una multa por el equivalente a 104.000 dólares de la época. Este principio de proporcionalidad en el castigo, junto a la marca social que lleva el estar envuelto en un caso de corrupción, actúa de forma extremadamente disuasoria ante posibles tentaciones para cruzar el límite de la legalidad. ======= La capacidad legislativa demostrada en Finlandia, -proverbial en todo su contenido, contrastada con nuestras leyes- viene a demostrarnos la carencia de buenos principios para nuestra sociedad, del entorno político que nos asiste. Esta afirmación está fijada, en los oscuros intereses de los varios partidos políticos que componen la cámara parlamentaria. Pues a través de las legislaturas de los gobiernos que nos han asistido, desde el proceso constituyente del año 78, hemos asistido a los desmanes de un bipartidismo, en los que han primado los intereses de poder de los partidos, a los beneficios sociales. Esta protesta, viene ratificada por el descontento social emergente de las desigualdades sociales observadas durante décadas y, desatendidas las consiguientes demandas. La indiferencia política en nuestro país, al seguimiento de estas eficaces leyes, hacen que nos encontremos a “años luz” de aquel pueblo, para lograr el muy ansiado deseo de bienestar democrático. Es por ello el que, ante la llegada de un proceso electoral, la apatía de los españoles sea manifiesta. En términos generales, el desencanto es debido lógicamente, a la falta de credibilidad en los cuadros representados. Al expresar aquí este sentir, algunos podrían pensar que mis preferencias políticas sean de izquierdas. Si es así, debo negarlo. Mi denuncia no conlleva carácter político alguno. Mi bandera, representa los colores del sentimiento de justicia legal, reclamada por una inmensa mayoría de compatriotas y yo mismo, durante años. Carlos Bernardino 31


te en la coherencia, viniendo a marcar estos términos, la diferencia con el mundo animal. El basamento de esta doctrina fue, la desbordante imaginación de los más grandes filósofos conocidos desde el principio de la historia de la humanidad, hasta nuestros días. Este dio como resultado, los más avanzados y espectaculares logros para la misma: Aristóteles, Sócrates, Platón…

Un canto a la imaginación Texto: Carlos Bernardino Imagen: Internet aravillosa entelequia, que el ser humano utiliza para deslizar sus sueños a través de las neuronas cerebrales. Esta peculiaridad que nos distingue del mundo animal, debe ser en todo momento, entrenada permanentemente por los seres humanos. La concluyente razón: su práctica nos hace ser menos dependientes de la materia.

M

Contrariamente a la masa, esta expectativa no se ve precisada de combustibles sólidos para subsistir. La simplicidad de su existencia: su carburante etéreo. Este será inagotable mientras la aplicación exista. Por consiguiente, el individuo que no asuma esta conexión, difícilmente entenderá el origen en la condición del ser humano.

Durante siglos posteriores a estas iniciales contribuciones científicas, surgieron relevantes pensadores en evolución de prosperidad y competencia, de cuantos fueron desapareciendo. Faltarían páginas aquí, para enumerarlos. Friedrich Nietzsche, Karl Marx, René Descartes… Por citar alguno. Gracias a estas mentes privilegiadas, recibimos el fruto de sus grandes investigaciones, con el resultado pleno beneficioso para los habitantes de este planeta: Las ciencias. Físicos, biólogos, médicos, matemáticos, astrónomos, inventores, artistas…han sabido encauzar desde el principio de la creación hasta nuestros días, a la sociedad humana. Por ello, no debemos alejarnos de estos principios, permaneciendo fieles al dogma de los imagineros, de todos los tiempos de nuestra civilización. Aun siendo consciente de mi exiguo conocimiento, al menos, deseo dejar aquí constancia de atención a la significada creatividad de aquellos que fueron, formidables filósofos.

Es debido a ello, por lo que el ser inteligente, rendirá un especial culto al perfeccionamiento de esta capacidad intelectual. La inteligencia de que está dotado, y en esencia su capacidad imaginativa, es comparable al universo que contempla, por no tener límites. Por tanto, su aplicación se fundamenta racionalmen-

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(Madrid, 1580 - Villanueva de los Infantes, España, 1645) Escritor español. Los padres de Francisco de Quevedo desempeñaban altos cargos en la corte, por lo que desde su infancia estuvo en contacto con el ambiente político y cortesano. Estudió en el colegio imperial de los jesuitas, y, posteriormente, en las Universidades de Alcalá de Henares y de Valladolid, ciudad ésta donde adquirió su fama de gran poeta y se hizo famosa su rivalidad con Góngora. Siguiendo a la corte, en 1606 se instaló en Madrid, donde continuó los estudios de teología e inició su relación con el duque de Osuna, a quien Francisco de Quevedo dedicó sus traducciones de Anacreonte, autor hasta entonces nunca vertido al español. En 1613 Quevedo acompañó al duque a Sicilia como secretario de Estado, y participó como agente secreto en peligrosas intrigas diplomáticas entre las repúblicas italianas. De regreso en España, en 1616 recibió el hábito de caballero de la Orden de Santiago. Acusado, parece que falsamente, de haber participado en la conjuración de Venecia, sufrió una circunstancial caída en desgracia, a la par, y como consecuencia, de la caída del duque de Osuna (1620); detenido, fue condenado a la pena de destierro en su posesión de Torre de Juan Abad (Ciudad Real). Sin embargo, pronto recobró la confianza real con la ascensión al poder del conde-duque de Olivares, quien se convirtió en su protector y le distinguió con el título honorífico de secretario real. Pese a ello, Quevedo volvió a poner en peligro su estatus político al mantener su oposición a la elección de Santa Teresa como patrona de España en favor de Santiago Apóstol, a pesar de las recomendaciones del conde-duque de Olivares de que no se manifestara, lo cual le valió, en 1628, un nuevo destierro, esta vez en el convento de San Marcos de León. Pero no tardó en volver a la corte y continuar con su actividad política, con vistas a la cual se casó, en 1634, con Esperanza de Mendoza, una viuda que era del agrado de la esposa de Olivares y de quien se separó poco tiempo después. Problemas de corrupción en el entorno del condeduque provocaron que éste empezara a desconfiar de Quevedo, y en 1639, bajo oscuras acusaciones, fue encarcelado en el convento de San Marcos, donde permaneció, en una minúscula celda, hasta 1643. Cuando salió en libertad, ya con la salud muy quebrantada, se retiró definitivamente a Torre de Juan Abad.

Recordando a Francisco de Quevedo Texto: C. Aramburo

Imagen: Internet

La obra de Francisco de Quevedo Como literato, Quevedo cultivó todos los géneros literarios de su época. Se dedicó a la poesía desde muy joven, y escribió sonetos satíricos y burlescos, a la vez que graves poemas en los que expuso su pensamiento, típico del Barroco. Sus mejores poemas muestran la desilusión y la melancolía frente al tiempo y la muerte, puntos centrales de su reflexión poética y bajo la sombra de los cuales pensó el amor. A la profundidad de las reflexiones y la complejidad conceptual de sus imágenes, se une una expresión directa, a menudo coloquial, que imprime una gran modernidad a la obra. Adoptó una convencida y agresiva postura de rechazo del gongorismo, que le llevó a publicar agrios escritos en que satirizaba a su rival, como la Aguja de navegar cultos con la receta para hacer Soledades en un día (1631). Su obra poética, publicada póstumamente en dos volúmenes, tuvo un gran éxito ya en vida del autor, especialmente sus letrillas y romances, divulgados entre el pueblo por los juglares y que supuso su inclusión, como poeta anónimo, en la Segunda parte del Romancero general (1605). En prosa, la producción de Francisco de Quevedo es también variada y extensa, y le reportó importantes éxitos. Escribió desde tratados políticos hasta obras ascéticas y de carácter filosófico y moral, como La cuna y la sepultura (1634), una de sus mejores obras, tratado moral de fuerte influencia estoica, a imitación de Séneca. Sobresalió con la novela picaresca Historia de la vida del Buscón, llamado don Pablo, obra ingeniosa y de un humor corrosivo, impecable en el aspecto estilístico, escrita durante su juventud y desde entonces publicada clandestinamente. 33


José Ortega y Gasset Texto: S. Olhai

N

acido en una familia madrileña acomodada perteneciente al círculo de la alta burguesía de la capital, entre 1891 y 1897 estudiaría primero en el Instituto Gaona y, más tarde, en el Colegio San Estanislao de Kostka de laCompañía de Jesús, ambos en Málaga. Su abuelo materno gallego, Eduardo Gasset y Artime, había fundado el periódicoEl Imparcial, que después su padre, José Ortega Munilla, pasaría a dirigir. Así, cabe destacar que Ortega y Gasset se crió en un ambiente culto, muy vinculado al mundo del periodismo y la política. Su etapa universitaria comienza con su incorporación a los estudios de la Universidad de Deusto, Bilbao (1897–1898) y prosigue en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Central de Madrid (1898– 1904). Doctor en Filosofía de la Universidad de Madrid (1904) con su obra Los terrores del año mil. Crítica de una leyenda. Entre1905 y 1907 realizó estudios enAlemania: Leipzig, Núremberg, Colonia, Be rlín y, sobre todo, Marburgo. En esta última, se vio influido inevitablemente por

Imagen: Internet el neokantismo de Hermann Cohen y Paul Natorp, entre otros. De regreso a España es nombrado profesor numerario de psicología, lógica y ética de la Escuela Superior de Magisterio de Madrid (1909), y en octubre de 1910 gana por oposición la cátedra de metafísica de la Universidad Central, vacante tras el fallecimiento de Nicolás Salmerón. En 1910 se casa con Rosa Spottorno. En 1911 nació su primer hijo, Miguel Ortega Spottorno, quien habrá de ser médico. En el año 1914 nace en Madrid su hija, Soledad Ortega Spottorno, quién en 1978 creó la Fundación José Ortega y Gasset, de la que será su presidenta de honor. En 1918 nació su hijo José Ortega Spottorno, que fue ingeniero agrónomo y fundador del periódico El País. Colaborador del diario El Sol desde 1917, donde publica bajo la forma de folletines dos obras importantes: España invertebrada y La rebelión de las masas. En 1923 funda la Revista de Occidente, siendo su director hasta 1936. Desde esta publicación promo34


la Revista de Occidente, siendo su director hasta 1936. Desde esta publicación promoverá la traducción y comentario de las más importantes tendencias filosóficas y científicas en nombres tales como: Oswald Spengler, Johan Huizinga, Edmund Husserl, Georg Simmel, Jakob von Uexküll, Heinz Heimsoeth, Franz Brentano, Hans Driesch, Ernst Müller, Alexander Pfänder, Bertrand Russell y otros. Ortega y Gasset funda la Escuela de Madrid, a partir del 15 de noviembre de 1910 cuando consigue su cátedra universitaria en filosofía, y como comenta José Gaos, a través de la coordinación espiritual de varias personas vinculadas a Ortega, en centros editoriales que había fundado o a los que aconsejaba el mismo Ortega. Durante la II República es elegido diputado por la provincia de León con la Agrupación al Servicio de la República. En el debate de totalidad del proyecto de la Comisión de Constitución celebrado entre los días 27 de agosto y 9 de septiembre de 1931 intervino como portavoz del grupo parlamentario de la Agrupación para decir que «nuestro grupo siente una alta estimación por el proyecto que esa Comisión ha redactado» («hay en este proyecto auténtico pensamiento democrático, sentido de responsabilidad democrática», añadirá más adelante) pero advirtiendo a continuación que «esa tan certera Constitución ha sido mechada con unos cuantos cartuchos detonantes, introducidos arbitrariamente por el espíritu de propaganda o por la incontinencia del utopismo». Entre esos «cartuchos detonantes» destacó dos, la forma como se había resuelto la cuestión regional («Si la Constitución crea desde luego la organización de España en regiones, ya no será la España una, quien se encuentre frente a frente de dos o tres regiones indóciles, sino que serán las regiones entre sí quienes se enfrenten, pudiendo de esta suerte cernirse majestuoso sobre sus diferencias el Poder nacional, integral, estatal y único soberano. Contemplad la diferencia de una solución y de otra») y la cuestión religiosa («el artículo donde la Constitución legisla sobre la Iglesia» le parece «de gran improcedencia») propugnando en su lugar «que la Iglesia, en la

Constitución, aparezca situada en una forma algo parecida a lo que los juristas llaman una Corporación de Derecho público que permita al Estado conservar jurisdicción sobre su temporalidad»).3 Permaneció en el escaño durante un año, tras criticar públicamente el curso que la República tomaba en su célebre discurso conocido como «Rectificación de la República» de diciembre de 1931. José Ortega y Gasset alrededor de 1950. Cuando comenzó la Guerra Civil Española en julio de 1936, Ortega se hallaba enfermo en su domicilio; apenas tres días tras el comienzo de la contienda, se presentaron en su domicilio varios comunistas armados de pistolas que exigieron su firma al pie de un manifiesto contra el Golpe de Estado y en favor del Gobierno republicano. Ortega se negó a recibirlos y fue su hija la que en una conversación con ellos —conversación que, como ella misma relató más tarde, llegó a ser muy tensa—, consiguió convencerlos de redactar otro texto muy corto y menos politizado y que, efectivamente, acabó siendo firmado por Ortega, junto con Gregorio Marañón, Ramón Pérez de Ayala y otros intelectuales. En su artículo En cuanto al pacifismo, escrito ya en el exilio, se refiere Ortega a este episodio. En ese mismo mes de julio y a pesar de su grave enfermedad, huyó de España (lo que consiguió gracias a la protección de su hermano Eduardo, persona de valimiento cerca de diversos grupos políticos de izquierda) y se exilió; primero en París, luego en los Países Bajos y Argentina, hasta que en 1942 fijó su residencia en Lisboa. A partir de 1945 su presencia en España fue frecuente, pero habiéndosele impedido recuperar su cátedra (aunque al parecer consiguió cobrar sus sueldos atrasados), optó por fundar un «Instituto de Humanidades» donde impartía sus lecciones. Durante estos años, y hasta su muerte en 1955, fue fuera de España —sobre todo en Alemania—, donde recibió el crédito y las oportunidades de expresión que correspondían a su prestigio.

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