La Comunidad Autónoma de Puerto Rico; una verdadera opción de futuro con España. Por Andrés de Bustamante «Mientras soporta la colonización, la única alternativa posible para el colonizado es la asimilación o la petrificación. No siéndole permitida la asimilación, como veremos, no tiene otra posibilidad que vivir fuera del tiempo. A ello le obliga la colonización, y, en cierta medida, a ello se habitúa. Estándole prohibidas la proyección y construcción del futuro, tiene que limitarse al presente. Y un presente mutilado, abstracto.» Retrato del Colonizado, Albert Memmi,1969
En este artículo intentaré de explicar lo que es la llamada Opción española para la descolonización de Puerto Rico, una breve mirada a lo que sería la 18va Comunidad Autónoma española, la Comunidad Autónoma de Puerto Rico (CAPR); algunas de sus implicaciones y contrastes actuales, con un breve repaso de su trasfondo histórico como opción de futuro. Este novedoso concepto para superar la centenaria situación colonial que hoy sufre el pueblo puertorriqueño ha sido previamente abordado por Francisco J. González Sosa en un borrador titulado Descolonizando a Puerto Rico en el Siglo XXI: La Opción Española [1]. Hasta hoy, ese artículo ha servido como el manifiesto para los que abogan por la descolonización de Puerto Rico mediante la reunificación con la Madre patria, España. Este incipiente movimiento propone la reintegración de Puerto Rico con España como una Comunidad Autónoma (C. A.) española; según el ordenamiento civil y territorial esbozado en la Constitución española de 1978 [2]. Un diametral y revolucionario planteamiento de soberanía para resolver el problema político de Puerto Rico el cual rompe con más de un siglo de fútiles intentos de desarrollo político. Más allá de la natural incredulidad y desconcierto que inicialmente que provoca esta opción política y de futuro descolonizador, el reclamo para tal reintegración territorial y política se basa en el hecho histórico que Puerto Rico fue una provincia española de ultramar, parte del territorio español, que los puertorriqueños fueron ciudadanos españoles en igualdad de condiciones a los demás españoles en la Península y con plena representación en las Cortes españolas [3]. Sin descontar el hecho que brevemente durante el 1898 la entonces Provincia de Puerto Rico fue una autonomía española, con amplios poderes de autogobierno y de gestión económica. Privilegios y poderes superiores a los que tenemos hoy en pleno siglo XXI [4]. Un modelo administrativo y territorial el cual sirvió de prototipo para la actual organización territorial española basada en el concepto de las autonomías. Adicionalmente, esta novedosa pero centenaria alternativa de estatus político otorga claros beneficios sociales, políticos y económicos a Puerto Rico. Beneficios que son virtualmente imposibles de obtener dentro del arreglo territorial actual [5], debido al derecho constitucional y la política estadounidense [6]. Esta nueva opción de estatus, potencialmente podría ser muy provechosa para Puerto Rico, España, la Unión Europea (UE) y posiblemente pare el resto de América, incluido los Estados Unidos de Norte América (EE.UU.). Es de vital importancia establecer que este proyecto político no implica una relación colonial o de dominación unilateral por una nación extranjera. Siendo esta una opción de status, o descolonización, basada en nuestra realidad cultural e histórica, se puede analizar estudiando el pasado o proyectándose al futuro para evaluar las ventajas y opciones que existen actualmente dentro de España. De manera retrospectiva, según nuestra historia, esta opción tiene singular relevancia histórica ya que fue parte del desarrollo político y económico que Puerto Rico una vez ostento como provincia española de ultramar. Desarrollo dentro del cual la Isla obtuvo unos poderes y prerrogativas que desde 1898 perdió unilateralmente [7], como lo fueron un gobierno propio y democrático con autonomía plena, paridad ciudadana, sufragio universal, representación legislativa y la capacidad para pactar tratados comerciales con naciones extranjeras entre otros privilegios políticos y económicos. Sin embargo, dentro de la actual encrucijada política, económica y social que sufre Puerto Rico, mayor relevancia y atractivo nos ofrece la evaluación y análisis de esta opción política de manera prospectiva, considerando las transformaciones políticas y económicas que causaría en Puerto Rico el retorno a España como una de su 18va C. A. Este es el objetivo de esta