3 minute read

No es “borrón y cuenta nueva”… ES CUENTA NUEVA Página

NO ES “BORRÓN Y CUENTA NUEVA”… ES CUENTA NUEVA

Por More Lic. Hernán Moshe Wahnish

Advertisement

“En el camino que una persona quiera ir, será conducido”

Talmud (tratado de Makot 10b)

Nechama Leibowitz nació en Praga pero cursó sus estudios en Berlín y se mudó a Israel en 1930.

Allí enseñó durante muchos años en el Seminario de Maestros Mizrahi en la Universidad de Tel Aviv, y en muchas otras escuelas, incluyendo Hesder Yeshiva. En 1968 la nombraron profesora vitalicia de la

Universidad de Tel Aviv. Como educadora ella hizo una contribución inestimable a la capacitación de varias generaciones de docentes en todos los niveles de estudio, tanto en Israel y como en la Diáspora. En 1956 fue galardonada con el Premio Israel de Educación. Murió en

Jerusalem en 1997.

Sus historias son famosas. Esta es una de las anécdotas que solía contar a futuros educadores:

Durante su juventud, Nejama había sido directora en una escuela para chicas observantes y un día una profesora le contó que se había presentado un problema porque se estaban robando cosas de valor desde el salón de clase de las niñas.

Al principio, aclaraba, la situación se toleró porque eran cosas menores, pero ahora se trataba de ropa y también de dinero. ¿Qué fue lo que hizo Nejama? Reunió a todas las alumnas y les dijo:

Lo que les voy a decirles es solo para una persona de esta sala, pero como no sé quién es, se los tengo que decir a todas: Alguien ha estado robando de sus compañeras, y nosotros, en este colegio nos tomamos estas cosas con gran seriedad. Si las cosas que faltan aparecen en mi escritorio antes de mañana a las 8 de la mañana, consideraré este asunto como terminado. Si esto no ocurre, le advierto a la persona que lo hizo, que pueden ocurrir dos cosas, y la segunda es mucho peor que la primera: Puede suceder que un día te atrapen, y de verdad será una gran vergüenza para vos y tu familia. O puede ocurrir algo mucho peor, y es que sigas robando y nunca seas atrapada y eso será aún más grave porque seguirás robando y cada día de tu vida te mirarás al espejo y te dirás a ti misma “soy una ladrona”. Ahora, quiero que consideres esto con mucho cuidado: ¿Eso es la imagen que querés tener de vos misma? Los artículos aparecieron a la mañana siguiente en el escritorio de la profesora y los robos se terminaron. ¿Qué aprendemos de esta historia? Que una niña de 10 años decidió que lo que haría con su vida estaría determinado, no por lo que había hecho en el pasado, sino por su visión de cómo le gustaría verse a ella misma en el futuro. Es esta actitud un claro ejemplo de qué es la “teshuvá” El vocablo hebreo “teshuvá”, cuya raíz “shivá” contiene tres significados. Estos son bíblicamente: arrepentimiento, retorno y respuesta. ¿Cómo debemos sentirnos al reconocer un error propio? ¿Debemos sentirnos culpables o malvados? ¡No! Culpa es una emoción negativa que dice “Yo soy mala persona”. Mientras que arrepentimiento es el reconocimiento positivo de que, mi esencia es mi neshama, mi alma infinita, y no he estado a la altura de lo que se espera de mi potencial. Una vez que tomo conciencia y me apego a mi fuente de conexión divina, retorno a mi misión personal, única e intransferible que vine a cumplir a este mundo. Este es el momento crucial en donde me pregunto ¿Mi vida actual es coherente con mi misión, con mis objetivos vitales? ¿Cómo quiero verme en un futuro? ¿Qué huella quiero dejar en el mundo? Ahí viene la respuesta, desde lo más profundo de nuestro ser. Una respuesta que llega desde nuestra voz interior que aturde de sinceridad. Esa misma respuesta es la que todo buscador espiritual debe responderse a sí mismo sino quiere seguir viviendo una vida de espejismos. Tal como dice el Talmud (tratado de Makot 10b) “En el camino que una persona quiera ir, será conducido”. No hay límites para nuestro potencial creativo, cuando realmente vivimos conectado con él. Es cierto que cambiar cuesta. Pero no cambiar, cuesta mucho más caro. Tenemos otro año por delante para ser esa persona que siempre quisimos ser. Y recordemos, que no hay “borrón y cuenta nueva” sino que directamente hay CUENTA NUEVA.

This article is from: