Especial Paco de Lucía

ESPECIAL PACO DE LUCÍA

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El Rey Sol del flamenco

Paco de Lucía, el músico y el hombre, era un especie de sol. Uno que daba luz y calor a flamencos, a músicos, a su familia y al orgullo de una ciudad. Un 25 de febrero, el de 2014, se apagó. ¿Se imaginan que un día, sin más, se apaga el Sol? Algo así ocurrió con su muerte. Todos anduvieron aturdidos, a oscuras.

Entonces, poco a poco, comenzaron a encenderse hogueras con los rescoldos de su recuerdo y hoy, diez años después del día en el que crujieron las guitarras, a pesar de su ausencia, su figura está más presente que nunca.

Su familia impulsa su legado al servicio del flamenco con una fundación, su ciudad natal levanta un centro de interpretación y un conservatorio con su nombre, sus discípulos tratan de seguir sus pasos, los flamencos beben en la fuente y caudal de su obra, y la música le homenajea desde Algeciras a Nueva York.

En 8Directo también hemos querido encender una humilde llama en forma de periódico especial con motivo del décimo aniversario de su fallecimiento. Lo hacemos a lo largo de 40 páginas no para recordar su muerte sino para celebrar su vida, y su inconmensurable obra. Para buscar y recorrer las hue -

llas que dejó el maestro, para visitar con otros ojos y otros oídos esos lugares que le inspiraron, para conocerlo mejor a través de los que lo tuvieron cerca, y para propagar otras llamas encendidas a través de su difusión.

Esta casa ha publicado ya cinco periódicos gratuitos en papel desde que viera la luz el primero en enero de 2023, sobre el turismo del Campo de Gibraltar. Luego llegaron los dedicados a la Semana Santa, uno sobre la industria, que inauguró también los foros de 8Directo, y de nuevo sobre el sector turístico. En sus manos tiene el quinto número, un monográfico dedicado al algecireño y campogibraltareño más universal. Este es, sin duda, el más especial de los especiales de 8Directo, sobre el más

especial de los especiales.

JOSÉ IGNACIO LANDALUCE CALLEJA ALCALDE DE ALGECIRAS

La dimensión de la genialidad

La genialidad ni tiene ni puede ser medida. La dimensión de un genio es infinita, y a veces, por desgracia, solo se es consciente de esa magnitud cuando su poseedor se va de nuestro lado, pero hay otras ocasiones en las que esta realidad es conocida por todos.

Es verdad que hace diez años que se paró el corazón del más grande genio de la guitarra de todos los tiempos, y al hacerlo también se helaron los de quienes tuvimos la ocasión de conocerlo personalmente y tratar con él como le gustaba, de tú a tú, pero lo mismo pasó con los que le conocían a través de su música. Y no me refiero solo a sus paisanos, a los algecireños, sino a gentes de todo el mundo.

Y ahí fue cuando Francisco Sánchez Gomes, Paco de Lucía, el niño de la portuguesa, pasó de ser un genio a convertirse en una leyenda. Y las leyendas nunca mueren, como tampoco lo hacen los recuerdos, las vivencias, los sentimientos. Todo ello permanece imperecedero por y para siempre, y es así como queremos seguir haciéndolo.

El 25 de febrero de 2014 marcó un antes y un después en la historia de Algeciras. Diez años sin Paco son muchos años, especialmente para su familia, para la que desde la que fue su tierra natal y en la que reposa para siempre, tal y como fue deseo, solo podemos tener palabras de

agradecimiento por tanto compromiso como siguen demostrando con la ciudad que vio nacer al genio el 21 de diciembre de 1947. Junto a ellos, y como escribió el maestro, solo queremos caminar para poner en valor cada día un poco más, si cabe, el legado, la memoria y el recuerdo de quien elevó la guitarra flamenca al Olimpo de la cultura.

Ahora, nuestra obligación es dar todos los pasos que hagan falta para que el legado de Paco de Lucía no solo sea seña de identidad inequívoca de Algeciras, sino para que las generaciones venideras tengan plena constancia de quien fue un músico excepcional, una maravillosa persona, el más internacional de los algecireños, en definitiva, uno de esos seres que son irrepetibles, por mucho tiempo que pase. Por ello, de manera inminente, podremos disfrutar de su esencia en cada rincón del Centro de Interpretación que lleva su nombre, y que estamos seguros se convertirá en lugar de visita obligada para todos quienes le admiraron, y lo siguen haciendo.

El escritor noruego Knut Hamsun dijo en una ocasión que el genio es un rayo cuyo trueno se prolonga durante siglos. Y no puedo estar más de acuerdo con esta sentencia, porque así era, es y será siempre Paco de Lucía. Por los siglos de los siglos.

SUSANA PÉREZ CUSTODIO

PRESIDENTA DE LA MANCOMUNIDAD DE MUNICIPIOS DEL CAMPO DE GIBRALTAR

Patrimonio de todos

Que la comarca del Campo de Gibraltar ha sido siempre, lo es y lo continuará siendo, cuna de grandes artistas y caudal de creatividad sin límite alguno es algo que nadie puede poner en duda. Este razonamiento, que se hace evidente en cada rincón de nuestra tierra, nos hace ser sumamente ricos no en lo material, sino en lo espiritual, en lo intangible, y eso nos lo da en gran medida el arte.

El flamenco, una de las señas identitarias de nuestra Andalucía, es Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, y por lo tanto a todos nos pertenece. Pues lo mismo pasa con quienes se encargan de humanizar este arte, de darle forma y sentido.

La historia del flamenco grabó en su libro con letras de oro el día en el que Paco de Lucía hizo algo impensable hasta aquel día: hacer que sonase en el Teatro Real de Madrid la guitarra a la daba vida con cada rasgueo, con cada falseta, en cada acorde. Hizo algo que nadie antes había logrado hacer, y eso le encumbró aún más.

Por ello Paco, que en vida nunca dejó de sentir Algeciras, la tierra que le vio nacer, no solo es patrimonio moral y sentimental de los algecireños, sino de todos los campogibraltareños, porque en esta comarca fue donde alumbró algunas de sus grandes creaciones.

Paco de Lucía es una referencia para el Campo de Gibraltar, y la Mancomunidad de Municipios, que trabaja a diario de manera estrecha con el mundo de la cultura, tiene también entre sus objetivos fomentar el conocimiento del legado de uno de los artistas más conocidos en el mundo entero, y que una década después de su desaparición sigue levantando la admiración de muchos.

Nuestra ilusión y nuestros esfuerzos están a disposición de esta causa, porque para todos nosotros Paco de Lucía seguirá siendo por siempre un campogibraltareño ejemplar.

ALMUDENA MARTÍNEZ DEL JUNCO PRESIDENTA DE LA DIPUTACIÓN PROVINCIAL DE CÁDIZ

Orgullo de una provincia

Hace diez años que la provincia de Cádiz perdió a uno de sus grandes genios: Paco de Lucía. Al morir, este artista algecireño internacional, Hijo Predilecto de la provincia de Cádiz, se convirtió en mito universal de la guitarra. Desde entonces, su recuerdo y su arte habitan en el mundo entero y, con especial cariño, en nuestra provincia y en su Algeciras natal.

Paco de Lucía es, sin duda, uno de los principales referentes artísticos y culturales de talla mundial con los que cuenta la provincia de Cádiz, y el conjunto de nuestro país. Desde pequeño destacó como excelente intérprete flamenco en las facetas de guitarrista y compositor y, con el paso de los años, su virtuosismo y estilo personal conquistó el mundo.

El vínculo entre Paco de Lucía y la Diputación de Cádiz se tejió al abrigo de muchos años en los que su arte y su figura inspiraron -y lo siguen haciendo- la acción cultural de la institución provincial.

Así, por ejemplo, su trayectoria se ha prodigado en diferentes producciones literarias, ensayos e investigaciones publicadas por la Diputación de Cádiz. Sus reflexiones forman parte de uno de los capítulos de la serie documental La vuelta a Cádiz en 80 mundos titulado ‘El flamenco entre dos aguas’, también de la Diputación. Colaboramos con el Ayuntamiento de Algeciras en impulsar la Ruta Paco de Lucía. Y el flamenco, que él modernizó y llevó a todos los rincones del mundo, está ampliamente representado en el catálogo de actividades culturales que brindamos a los municipios a través del programa Planeamos y es la piedra angular de nuestra colaboración con la federación provincial de peñas flamencas de Cádiz.

Solo un genio podría hacerlo. Paco de Lucía transformó -con Camarón de la Isla- el concepto del flamenco clásico cambiando para siempre el curso de este arte que se abrió al exterior y obtuvo el reconocimiento internacional que se merecía y que, hoy día, no para de crecer.

Todos estamos en deuda con Paco de Lucía y, también, agradecidos. Participar en iniciativas para homenajear su figura y divulgar su legado siempre es motivo de satisfacción para esta Diputación.

Como presidenta me siento orgullosa de representar a una provincia que fue cuna y escenario del artista que universalizó la guitarra española. Un algecireño orgulloso de su tierra y nosotros de él.

ARTURO BERNAL BERGUA

CONSEJERO DE TURISMO, CULTURA Y DEPORTE DE LA JUNTA DE ANDALUCÍA

Diez años para agrandar la leyenda

Han pasado diez años de aquel 25 de febrero de 2014, diez años desde que la noticia de su muerte conmocionó al mundo de la cultura y a toda la sociedad española: miles de personas, anónimas y personalidades destacadas, desde el rey a las principales figuras de la música de este país, acudieron a su capilla ardiente en el Auditorio Nacional de Madrid.

Han pasado diez años, pero a todos los efectos Paco de Lucía nunca se fue, nos sigue acompañando. Es así porque su testimonio artístico y su legado continúan teniendo una profunda influencia en la música, una influencia que no se quedó en el flamenco, sino que rompió las fronteras de los géneros musicales. Desde luego en el flamenco el eco de su voz es inmenso, pero siempre tuvo el reconocimiento internacional de otras músicas, de otros artistas, con los que entabló diálogo, como el jazz, el blues o el rock. Se han dicho muchas cosas de él: “leyenda”, “genio”, “revolucionario”, “maestro”. Pero me quedo con la frase de Keith Richards, que creo que mejor define lo que significa Paco de Lucía para la cultura: “solo hay dos o tres guitarristas que se puedan considerar leyenda. Y por encima de todos ellos está Paco de Lucía”. En estos diez años su leyenda se ha agrandado aún más. Y pronto abrirá en Algeciras, en su tierra, el Centro de Interpretación Paco de Lucía, un proyecto en el que la Junta de Andalucía ha puesto todo su empeño para garantizar la difusión de su legado, acompañando en esa gran responsabilidad a su familia. También a través de la Fundación Paco de Lucía, a la que Andalucía se ha unido ingresando en el Patronato, una representación que tengo el honor de ostentar como consejero de

Turismo, Cultura y Deporte. A una figura de su dimensión se le debía un homenaje a su altura y el Gobierno andaluz ha estado muy cerca de la familia para hacer realidad “Paco de Lucía Legacy” en Nueva York, con más de 30 artistas españoles, trasladando lo mejor de nuestro flamenco a una de las capitales mundiales de la cultura.

Desde el inicio de su carrera, no hubo dudas de que estábamos ante un artista inigualable. Si hay una obra artística sobre cuya trascendencia exista unanimidad entre músicos y aficionados de todo el mundo esa es la de Paco de Lucía: escribió el flamenco, lo sintió y nos hizo sentirlo de manera única, lo hizo grande elevándolo a la categoría de ARTE, con mayúsculas, en una época en la que el flamenco era arrinconado como un arte menor. Quedaba mucho para que fuera incluido por la Unesco como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad –así sucedió el 16 de noviembre de 2010-, pero figuras como él fueron determinantes para conseguir este más que justo reconocimiento.

Pero desde el Gobierno andaluz queremos más y nos hemos marcado nuevos hitos, que parten de la aprobación de la Ley del Flamenco en abril del año pasado y que tiene entre sus mandatos velar por su preservación y difusión. Y eso incluye reforzar su presencia en la educación para profundizar en su conocimiento, a través de la innovación, de la investigación y explorando sus posibilidades de transformación social. En eso Paco de Lucía fue también un maestro porque su guitarra siempre sonó desde el máximo respeto a las raíces sin dejar de buscar nuevos caminos, nuevos públicos y nuevos sonidos que han marcado profundamente el presente y el futuro del flamenco.

2014-2024. Diez años después

DE ALGECIRAS AL CIELO

El último adiós de su pueblo

Redacción: María E. Selva | Fotografía: Andrés Carrasco

Miles de algecireños despiden a su paisano Paco de Lucía en La Palma.

El sol arañaba un nuevo amanecer en Algeciras cuando ya corría la voz. Ya se escuchaba su silencio. El barrio de La Bajadilla se despertaba sin su genio, el más sencillo, sin su Paco de Lucía. Sin lugar a dudas la peor de las noticias. En esta Algeciras presente no había ni

hay un referente de tal magnitud para medir el impacto social y mediático de su muerte, dolorosa y repentina. Su compadre Victoriano Mera fue protagonista involuntario ese día: “Se ha ido la persona más importante nacida en la historia en Algeciras”.

Enmudeció el flamenco en el mundo, pero si había un sitio especial esa mañana, ese era La Bajadilla. Hasta quienes no le conocieron en vida lo sentían con un profundo pesar. No había más que ver la trascendencia de la noticia de su fallecimiento para abrir los ojos ante

la dimensión de su hazaña. No había medio de comunicación que no situara en el mapa su lugar de nacimiento. Mérito del cual se encargó él en vida.

Esta ciudad tan querida y denostada, ávida de paisanos y paisanas valientes que la defiendan, se encontró vacía sin su

máximo exponente. Un hombre que se colocaba el nombre de su tierra en cualquier rincón del mundo y la amarraba a su memoria, la añoraba y la reconocía con su extensa timidez. El día 26 de febrero de 2014 se erigió como una indeseable efemérides. De esos tristes días ya nos queda el recuerdo de las emociones sentidas, de ese látigo frío que nos recorre por dentro cuando algo le ocurre a una persona cercana, aunque realmente lo cercano era la admiración a su talento.

Desde el vacío que dejó en su barrio a la bulla en la calle Alfonso XI, el murmullo del gentío, la lluvia entre paraguas, los aplausos por bulerías, las lágrimas rotas al cante. Nada de lo que estábamos por vivir se

todo el mundo quería darle un último adiós y entre la sencillez de sus paisanos se iban mezclando grandes artistas a los que, con respeto, se veía pasar con íntima emoción. Este goteo de personas perduró durante toda la madrugada hasta la mañana siguiente, minutos antes de la misa fúnebre en la Parroquia de Nuestra Señora de la Palma, en el corazón de la Plaza Alta.

“Las cuerdas de la guitarra están llorando, ay lloran por Paco de Lucía”

parecía a algo vivido. Casi tres días estuvo su tierra esperándole. De México a Algeciras pasando por el Auditorio Nacional de Madrid.

La Casa Consistorial en horas se reinventó en un santuario flamenco para acoger su capilla ardiente. Un trabajo silencioso que para muchos y muchas se quedará grabado. Pero todo parecía poco esos días y estaba latente el nerviosismo por estar a la altura de un hombre que no tenía techo.

En la madrugada del 28 de febrero al 1 de marzo, pasada la medianoche, llegó el coche fúnebre al Ayuntamiento abriéndose camino entre una marea humana de aplausos a compás. No era cualquier día, era el Día de Andalucía y como dijo Estrella Morente: “Las cuerdas de la guitarra están llorando, ay lloran por Paco de Lucía”. Si hubiera que soñar una despedida para nuestro genio, qué maldita y bonita casualidad que fuera bajo el arropo de un día tan nuestro.

Algeciras le abrió la puerta a sus seres queridos, a su gente…

Si hubiera que atrapar un recuerdo vivido de esas largas horas de duelo fue el traslado de sus restos mortales desde el Consistorio al templo. Es una imagen clavada para quienes lo vivimos en directo. Rompió a llover, caían lágrimas del cielo, mientras los aplausos a compás empujaban a sus amigos y familiares, los cuales sostenían el féretro en una carrera oficial de apenas unos metros. Miles de personas arropa-

ron a su familia a pie de calle, desde los balcones. Algeciras se volcó como nunca se había visto. No cabía un alma en nuestro más sagrado templo. El sentir era unánime, de algún modo su gente supo agradecer y reconocer su deseo de descansar en la tierra que le vio nacer. Fue imposible convertir en íntimo un momento que para su familia era el inicio de un duelo, pero para los algecireños era el adiós a su divino genio.

Fueron apenas unas horas en las cuales Algeciras se paralizó y se abrió al mundo, decenas de periodistas, conexiones en directo, cámaras, micrófonos. Desde el New York Times a Le Mond, Bild, Il Messaggero, Globo, Telegraph, BBC, El Clarín, CNN… más de medio mundo se hacía eco de su fallecimiento, esas mismas personas que también sabían que el guitarrista nació en Algeciras, su pueblo.

Capilla ardiente en el salón de plenos de la Casa Consistorial.

Emoción en el sepelio en el Cementerio Viejo.

2014-2024. Diez años después

PACO DIO SU VIDA POR LLEVAR EL FLAMENCO AL NIVEL QUE SE MERECE, SEGUIR CON SU TAREA ME HACE SENTIRLO CERCA

Redacción: Francis Mena | Fotografía: cortesía de Gabriela Canseco

Un escalofrío recorrió muchos cuerpos en todo el mundo el 25 de febrero de 2014, cuando se supo que Francisco Sánchez Gómez, Paco de Lucía, había muerto. Le lloraron los flamencos, le lloraron los amigos, le lloraron sus hijos como sólo los hijos lloran a un padre. De una manera diferente lo hizo Gabriela Canseco, su mujer, madre de dos de sus hijos, Diego y Antonia. “Quedé absolutamente devastada”, dice. Trata de reponerse todavía de una pérdida que le cambió el mundo y lucha por lo que más luchó su marido: por llevar el flamenco a lo más alto y lejos posible. En Nueva York, en las horas previas al festival Paco de Lucía Legacy, que se celebra en esta ciudad, la viuda del guitarrista atiende a 8Directo, ilusionada por el evento.

—Diez años de la muerte de Paco, una fecha dolorosa para la familia, pero también muy significativa. Hay eventos muy importantes para recordar al maestro, como por ejemplo el festival de Nueva York.

—Es un evento muy grande, y son varios teatros los que utiliza, varios centros culturales. Nueva York se llena de la música de Paco y de flamenco.

—¿Por qué se ha elegido Nueva York? ¿Por eso de llevar el flamenco y la música de Paco de Lucía a lo más alto posible?

—Esto es casi más importante que proteger su obra, porque su obra se protege casi sola, pero una de sus grandes motivaciones para hacer todo lo que hizo era llevar el flamenco por el mundo y que cogiera el nivel que se merece, que era el de las grandes músicas del mundo.

—A su obra se le sigue abriendo las puertas de los mejores teatros del mundo.

—Totalmente. Y el nivel de convocatoria que tiene, que actúan tantos artistas realmente con muchas ganas de hacerle un homenaje a Paco. Diez años después no dejan de hablar del maestro, con un cariño… Esto sigue vivo, su enseñanza sigue viva.

—Realizando este especial de 8Directo me encuentro a mucha gente muy marcada por él, de una manera muy profunda. ¿Era consciente Paco de la cantidad de gente que había marcado con su música?

—Yo creo que sí, lo que pasa que él no le echaba mucha cuenta porque era una persona que lo que le interesaba era su trabajo, era llevar el flamenco a ese nivel del que hablamos, a la altura de las mejores musicas del mundo, pero él como persona no tenía ningún ego. No era nada estrella, entonces no echaba cuenta a eso, le importaba que su música llegara lejos.

—A veces parece que todavía cuesta. A Paco era difícil no reconocerle pero incluso a él se le reconoció muchas cosas después de fallecer.

—Eso es definitivo. Incluso ahora que el flamenco está teniendo mucho auge, en España se nota una cosa peyorativa, y en el resto del mundo es un respeto absoluto el que se le tiene al flamenco.

¿Notáis más respeto fuera?

—Sí. Es algo que hay que cambiarlo porque el tesoro que hay en España es incalculable, una cosa que sólo existe en España, que es única y

algo allí, algo que muestre su trayectoria de un vistazo. Es un centro no demasiado grande, muy abordable, lo puedes visitar y tener una idea realmente de quién fue, desde sus inicios hasta dónde llegó. Cualquiera que pase por Algeciras va a encontrarlo muy interesante y muy educativo, porque hay veces que la gente no sabe exactamente qué es lo que hizo Paco. —Hay mucha gente echando de menos a Paco pero para su viuda, para usted, ¿cómo fue esa pérdida?

—Fue devastador, absolutamente devastador perder a Paco, y diez años después estoy empezando a poder respirar, pero vivir sin Paco… me cambió el mundo. Paco me daba una magia al mundo que ya no la tiene, ya no es.

que se reconoce en todo el mundo. Eso no lo tiene cualquier país.

¿La Fundación Paco de Lucía tiene también esa función?

¿Y él sabía que lo había conseguido?

—Sí, eso sí lo sabía, totalmente. Antes de tocar en el Teatro Real ya tocaba en los grandes teatros sinfónicos de Europa. En la sinfónica de Berlín, por ejemplo, entonces sabía que había llegado muy lejos. Cuando pasó lo del Teatro Real decía, sí mucho escándalo pero yo ya llevo años tocando en los mejores teatros de Europa. Da un poco de pena de que siempre España iba un poco por detrás en el reconocimiento del flamenco.

—Claro, en primer lugar es seguir divulgando la obra de Paco pero como te comentaba es seguir luchando por el flamenco como él lo hizo, y seguir intentando que llegue al mayor nivel posible: a que el jazz, el flamenco, y la música clásica estén por igual.

Algeciras también acogerá muchos eventos este año en recuerdo de su paisano más ilustre, entre ellos, la apertura del Centro de Interpretación. ¿Qué le dice este proyecto?

—Es muy importante que haya un centro en Algeciras, era como evidente, tenía que haber

—Fue muy inesperado.

—Totalmente inesperado. De una hora a la otra. Fue lo más horrible que puede pasar.

—¿Luchar por el nombre de Paco, la fundación, le ayuda de alguna manera?

—Da mucha satisfacción porque sigo trabajando por lo que él dio la vida. Poder seguir con su tarea es muy reconfortante, y me hace sentirlo muy cerca, me hace estar cerca de sus músicos, de la gente que lo quería tanto, de los flamencos y esto da mucho gusto. El cariño sigue vivo entre los flamencos. —Pronto sale un nuevo disco de Paco. ¿Cómo ha surgido?

—Esta sorpresa que salió de Paquito y Pepito -Paco y Pepe de Lucía- es maravillosa, un disco inédito de Paco niño es como un regalo del cielo.

Va a ser muy valioso porque supone una vuelta al inicio, después de conocer todo lo que hizo con su música será volver al principio.

—¡Claro! El inicio, las primeras grabaciones, cuando era realmente pequeño, vamos a ir a la fuente de todo lo que fue Paco.

¿Podemos esperar más cosas nuevas de Paco de Lucía?

—No creo, es muy difícil. Por eso digo que es un regalo del cielo. Se encontraron estas grabaciones, las encontró Pepe que las tenía por ahí guardadas. Que hayan dado para un disco completo es increíble, un regalo.

—Muchas gracias, Gabriela. Seguro que lo de Nueva York será un nuevo éxito de Paco. —Esto va a ser increíble. Y vamos a tener muchas sorpresas.

2014-2024. Diez años después

El flamenco reconquista la Gran Manzana

Las pantallas de Times Square brillan por bulerías. Bailaores pisan fuerte en la Gran Manzana y los guitarristas tararean con orgullo Entre dos aguas mientras pasean entre los rascacielos. Es el flamenco reconquistando Nueva York y el mundo al compás que marca, una vez más, Paco de Lucía.

En el décimo aniversario de la muerte del artista, la ciudad de Nueva York ha acogido el festival Paco de Lucía Legacy, posiblemente el mayor homenaje a un flamenco jamás realizado. Los mejores escenarios neoyorkinos se han llenado de conciertos, presentaciones, proyecciones, el lanzamiento de un disco inédito y actos institucionales.

Más de treinta artistas pasaron por el escenario del Carnegie Hall de Nueva York el pasado 20 de febrero, donde el genio de las seis cuerdas actuó por primera vez con 16 años. José Mercé, Diego El Cigala, Carmen Linares, Rubén Blades, Farru, Sílvia Pérez Cruz, Al Di Meola, Alain Pérez, Carlos Benavent, Farruquito, Jorge Pardo, Rubem Dantas, Antonio Rey, Antonio Sánchez, Duquende... El arte algecireño presente también en la guitarra de José Mari Bandera y, por supuesto, con el gran Pepe de Lucía, que haciendo de niño travieso de La Bajadilla bajó desde el palco para cerrar la juerga flamenca con Buana Buana King Kong.

La gala reunió además a unas 150 personalidades de la sociedad neoyorkina y a unos 40 directivos turísticos de Estados Unidos. Un éxito artístico y de convocatoria de una iniciativa impulsada por la Fundación Paco de Lucía con la colaboración de la Junta de Andalucía y cofinanciado con Fondos Europeos.

Redacción: Francis Mena. Fotografías: Fundación Paco de Lucía

Pepe de Lucía canta en el fin de fiesta en el Carnegie Hall.

Actuación del Paco de Lucía Legacy.

La fundación que sigue una mirada

Un genio con un propósito: llevar el flamenco por el mundo como idioma universal. La Fundación Paco de Lucía nace con ese objetivo de dar a conocer, difundir y engrandecer la figura de uno de los mejores músicos de todos los tiempos y dotar al flamenco del prestigio internacional que merece, como hubiera querido el maestro del sur del sur.

La fundación que impulsa sus hijos y su viuda invita a recorrer un sendero donde la hoja de ruta sea explorar, entender y difundir la figura del artista Paco de Lucía. Ahondar en su testimonio musical y humano para continuar enriqueciendo el arte flamenco desde su punto de vista.

Como organización aspira a convertirse en una referencia internacional y fuente de inspiración para los amantes de la música. Además, introducien-

do iniciativas artísticas y musicales para enriquecer el ecosistema del flamenco y la cultura española en el mundo. ¡Dejar fluir para crear!

Todo ello con la visión personal de “evolución desde la tradición” que encarnó Paco de Lucía.

Entre los proyectos en los que participa la Fundación se encuentran el Centro de Interpretación, junto al Ayuntamiento de Algeciras, colabora en un programa de becas de innovación pedagógica en la enseñanza musical general y en concreto del flamenco, el archivo musical que abarca un rico patrimonio musical del algecireño, y la exposición del legado, conciertos y festivales, premios, entre otros.

Curro: entre el recuerdo y el legado

Curro Sánchez Varela (Madrid, 1983) recordaba para este medio en una entrevista hace seis años que vivió los momentos de la muerte de su padre, Paco de Lucía, “como si estuviese en un sueño transitorio”. “El dolor era demasiado grande para poder afinar con claridad lo que estaba ocurriendo”, decía. Diez años después transmite precisamente todo lo contrario: esa claridad que le borró tan inesperado golpe.

El cineasta reconoce que “los aniversarios son complicados, porque sientes la presión de querer devolverle a esa persona que tanto ha dado a la cultura y a la ciudad de Algeciras”, pero asegura que “en este décimo aniversario Algeciras y el Campo de Gibraltar están a la altura”. “Hemos arropado desde el minuto cero a la ciudad y al ayuntamiento para que la figura de Paco esté al nivel que se merece y que esa figura le devuelva a la ciudad todo lo que le

ha dado, porque Paco no sería quien es sin Algeciras”, expresa Curro Sánchez, que muestra su satisfacción de que pronto abra el centro de interpretación, de que se estén dando los pasos adecuados para el conservatorio, y de que la ruta y el Encuentro estén consolidados.

El hijo de Francisco Sánchez y Casilda Varela recordaba a su padre en aquella entrevista como “una persona muy tolerante, que sabía escuchar y buen consejero, nada dogmático”. Conoció al genio de la guitarra como hijo, y también con la visión del documentalista,

para el trabajo Paco de Lucía: La Búsqueda, un título con el que obtuvo el Goya a mejor película documental en 2015. Desgraciadamente el protagonista no llegó a verlo.

Hoy, junto a sus hermanas Lucía y Casilda y otros miembros de la familia del maestro, trata de preservar y difundir su legado. “Mi padre lo hacía todo por y para el flamenco y este es el espíritu de todas las iniciativas que se celebran y de la Fundación Paco de Lucía: proyectar, impulsar y difundir el flamenco por cada rincón y si conseguimos que más gente descubra esta increíble música, única e irrepetible, no daremos por satisfecho” comenta Sánchez, que actualmente trabaja en una docuserie sobre el comunicador onubense Jesús Quintero.

Redacción y fotografía: Francis

Redacción: Sofía Furse. Fotografía: Gabriela Canseco.

Mena.

Curro Sánchez, junto a sus hermanas Lucía y Casilda, en Fitur 2024.

Algeciras después de Paco

La concha del genio caracol

"Algeciras es la única manera que he tenido de subsistir, de que el mundo no me coma, yo soy como los caracoles, yo tengo mi concha y yo vivo en Algeciras. Yo siempre estoy en Algeciras" . Paco de Lucía hablaba así de su ciudad, mucho más que una inspiración. A lo largo de su carrera bautizó a muchas de sus creaciones con nombres que hacen referencia al lugar que le vio nacer. Desde La Bajadilla hasta el Cementerio Viejo, recorremos esos rincones de la vida y obra del genio con la banda sonora de su guitarra.

La historia de uno de los mejores músicos de la historia de España, y este paseo musical, arranca en un barrio humilde de una ciudad situada Entre dos aguas, nombre de una improvisada rumba que alcanzó la categoría de himno. Francisco Sánchez Gómez nació el 21 de diciembre de 1947 en el número 8 de la calle San Francisco, entre La Cañada y la Fuente Nueva, título el primero de una composición que abre el disco Siroco, y el segundo para su tema que cierra Recital de Guitarra (1971). Una humilde placa señala hoy el punto de partida de aquel que cambió el flamenco.

Calle San Francisco

Patio Custodio

Las referencias a la Algeciras que respiró Paco de Lucía abarcan desde los sitios más monumentales hasta los más cotidianos. Patio Custodio, bulería con el que se abre su disco Cositas Buenas (2004), hace referencia a una de las corralas o patio de vecino del barrio de San Isidro, un pueblo blanco anclado en mitad de la bulliciosa ciudad algecireña. Situado en la actual calle Teniente Miranda, aún hoy conserva su nombre en la entrada y su fisonomía. "Una fiesta se hace con tres personas: uno canta, otro baila, y el otro toca... Se me olvidaba... De los que dicen ole y tocan las palmas", cierra la canción.

La Plaza Alta es el corazón de Algeciras y también una soleá de Paco de Lucía que describe con su música la alegría de un rincón que, como hoy, es un lugar de juegos y esparcimiento entre su singular ornamentación de solería sevillana. Ahí se encuentra la Capilla Europa, a la que Camarón cantó así: “De la Capilla de Europa se divisa la bahía más bonita y más hermosa de la baja Andalucía”. A su espalda, el Callejón del Muro, que da nombre a una minera del disco Siroco (1987) y que baja hacia el icónico mercado Ingeniero Torroja, donde su padre tenía un puesto.

Plaza Alta

Calle Munición

Su infancia tuvo una gran influencia a lo largo de toda su vida. Muchas son sus geniales creaciones que rememoran el entorno en el que se crio. La alegría Calle Munición, de su disco Luzía (1998), hace referencia a la actual calle Comandante Gómez Ortega, vía que desemboca en las murallas medievales del siglo XIII , y que muestra la importancia de la ciudad como puerta de Al-Ándalus. Sin embargo, la elección de ese nombre obedecía a que durante la década de los cuarenta y cincuenta era una zona de tascas y juergas flamencas, donde solía actuar su padre y mentor: Antonio Sánchez Pecino.

La mar y Paco: una conexión. El guitarrista casi siempre vivió, y hasta murió, cerca de la orilla. Ninguna playa hay en el mundo más flamenca que El Rinconcillo, donde el guitarrista y su familia disfrutaban muchos veranos. Por allí pasaron también Alejandro Sanz con su padre, Malú, José Carlos Gómez, o Manuel Molina con su padre Manuel El Encajero, entre otros. A este rincón algecireño dedicó un tango con sus hermanos Ramón y Pepe de Lucía en el disco El mundo flamenco (1971). Un mural recuerda al artista, que puso a una rumba de Cositas buenas el nombre del reconocido establecimiento Casa Bernardo.

El Rinconcillo

Punta del Faro

El músico también homenajeó, en una bulería del disco Luzía, a otra playa algecireña El Chorruelo, ya tristemente extinta, y que se situaba a los pies del legendario Hotel Cristina, otro punto digno de visitar situado en la zona conocida como Villa Vieja, nombre que el flamenco tomó para una elegante soleá del mismo álbum. Pero la Algeciras de Paco de Lucía sigue por costa hasta sus confines, hasta la Punta del Faro, un lugar al que dedicó una bulería incluida en El duende flamenco (1971) y de parada obligada para contemplar el Estrecho y África.

No solo la mar, la fuente y caudal de las aguas dulces de Algeciras también inspiraron a Paco de Lucía. Por El Cobre, barriada que da nombre a una sevillana del algecireño, el visitante puede encontrar uno de los muchos tesoros naturales de la ciudad, como el Río de la Miel, visitado por miles de personas y que el maestro convirtió en una bulería en su disco Luzía. Río Ancho es también el nombre de una de las más famosas, pegadizas y personales rumbas del guitarrista.

Río de la Miel

Cementerio Viejo

Y se hizo el silencio. Ese que dominó con su instrumento y que es omnipresente en el cementerio viejo de Algeciras, donde descansan los restos del guitarrista eterno. El mausoleo es lugar cargado de simbolismo: un azulejo portugués del siglo XVIII en recuerdo del origen de su madre Luzía Gómes, dos columnas de la añorada plaza de toros de La Perseverancia, un busto, sus manos, obras del escultor linense Nacho Falgueras, y una guitarra de cobre en la que se lee: "Aceptó siempre la tradición pero la desobedeció". Un lugar donde nunca falta un ramo de flores ni el silencio ni el descanso.

Paco de Lucía por Algeciras, playlist de Spotify para disfrutar de la ruta.

Algeciras después de Paco

La nueva casa del maestro Centro de Interpretación Paco de Lucía

El décimo aniversario del fallecimiento del artista será también el año de la apertura de un espacio para profundizar en la vida y obra, y también un lugar de eventos y actividades que lo convertirá en un referente cultural y turístico

El Centro de Interpretación Paco de Lucía abrirá sus puertas este 2024, cuando se cumple el décimo aniversario del fallecimiento del guitarrista. Las obras se encuentran ya muy avanzadas después de haber superado numerosos contratiempos, como el hallazgo de restos arqueológicos. De forma pareja se trabaja en el contenido y en la gestión del recinto, siempre con la colaboración y supervisión de la familia a través de la Fundación Paco de Lucía.

EL EDIFICIO

Precisamente la familia del artista apostó por levantar este centro de interpretación en el palacete de finales del XIX que hace unos años acogía la Jefatura de la Policía Local. Contará con dos plantas, una baja con el acceso prin-

cipal, y una primera planta superior al que se accederá por las escaleras centrales y por ascensor. También tendrá un nuevo edificio que acogerá el auditorio y entre ambos se crearán espacios abiertos al aire libre. El inmueble mantiene muchos de sus elementos originales, como los suelos y la estructura. La madera, el hormigón y el acero cortén estarán muy presentes en todo el recinto, en el que también habrá protagonismo del agua y la vegetación, con especies que interesaban a Paco de Lucía.

EL CONTENIDO

El Centro de Interpretación Paco de Lucía es más que un museo. Será un lugar en el que podrá disfrutar desde el curioso que quiera acercarse a una de las figuras más relevantes de la

Recreaciones y fotos de cómo será el Centro de Interpretación Paco de Lucía.

música española del siglo XX al experto flamenco. También habrá contenido destinado a la difusión del arte flamenco entre los jóvenes. Así se distribuirán las salas:

El hijo de la portuguesa

La visita comenzará en la primera planta con la sala que explicará a través de objetos personales, textos y fotografías, el origen de Francisco Sánchez Gómez, Paco de Lucía el nacimiento en una familia de músicos, sus primeros conciertos, la partida a Madrid; y la eterna relación con su ciudad, y cómo está presente en su obra.

El dueño de la guitarra

Esta zona, ya en la segunda planta del edificio, abordará la trayectoria musical de Paco de Lu-

cía, las influencias que tuvo, sus colaboraciones con otros grandes del flamenco, como Camarón. Mediante textos, fotos y objetos personales se podrá conocer la obra del guitarrista algecireño, como el sexteto creado con sus hermanos Ramón y Pepe.

Genio del Flamenco

A modo de visión general, esta sala presentará la relevancia de Paco de Lucía como artista y maestro, como virtuoso a base del esfuerzo y del trabajo, que inspiró a otros artistas. Los objetos personales, familiares, las guitarras, partituras, fotografías, pasaportes, nombramientos y distinciones, como el Honoris Causa que recibió de la Universidad de Cádiz, llenarán esta y el resto de salas del centro.

Guitarrista del mundo

Paco es mucho más que flamenco. En esta sala se mostrará su inigualable creación, su singularidad llevada a todos los rincones del mundo en escenarios que compartió con artistas de talla internacional como Al Di Meola, Chick Corea o John Mclaughlin, la mezcla entre el flamenco y lo clásico, los ritmos brasileños y la fusión con el jazz.

Algeciras es música

Entre salas habrá espacios dedicados al archivo sonoro de enorme valor que cederá mediante convenio la Sociedad del Cante Grande de Algeciras, y también se contempla aplicaciones interactivas.

Paco en imágenes

La visita se cerrará con imágenes audiovisuales de momentos de su vida, de reconocimientos, nombramientos, momentos familiares, conciertos... En ella, el visitante podrá sentarse a disfrutar de su música y de la personalidad de un genio musical a través de documentales de vídeo.

EL AUDITORIO

El auditorio contará con una capacidad para unas 260 personas de pie o unas 150 cuando se coloquen asientos, ya que este espacio podrá modificarse para acoger distintos tipo de actos, incluso hay una versión del auditorio con mesas al estilo de peña flamenca. Este auditorio multiusos, que estará recubierto de madera, podrá acoger actuaciones, cursos, presentaciones, ponencias y otros eventos. Será un espacio vivo y activo, con numerosas actividades. También habrá lugar para eventos al aire libre.

El Centro de Interpretación Paco de Lucía es una apuesta firme de la familia y el Ayuntamiento de Algeciras, y cuenta con el apoyo económico de la Junta de Andalucía para convertir este espacio en un referente turístico y cultural tanto para el ciudadano como para el visitante.

Redacción: Francis Mena.

Imágenes: Ayto. Algeciras.

Algeciras

Algeciras después de Paco

Un conservatorio a la altura del genio

Redacción: Mari Ángeles Benito.

Imágenes: Junta de Andalucía.

Tras cerca de 30 años de itineraria docente, la ciudad de Algeciras por fin tiene proyectada la construcción de un conservatorio a la altura del genio.

El futuro centro se ubicará en una parcela de 6.083 metros cuadrados situada en la calle Fuente Nueva y contará con una superficie total construida de 3.756 metros cuadrados. Tendrá capacidad para 600 alumnos, tanto de enseñanzas elementales básicas (dos ciclos con dos cursos cada uno) como de enseñanzas profesionales (seis cursos).

El edificio dispondrá de seis aulas no instrumentales; tres de música de cámara; dos de orquesta, banda y coro; diez cabinas de estudios; treinta aulas instrumentales individuales; siete departamentos; una biblioteca-videoteca-fonoteca; un salón de actos con acceso desde el exterior; una cafetería; un porche exterior cubierto; zonas ajardinadas; y un área de estacionamiento de vehículos. Todos estos espacios tendrán su correspondiente aislamiento y acondicionamiento acústico, así como la iluminación y ventilación.

Además, contará con un salón de actos para un aforo de 350 personas que contará con acceso desde el exterior para poder ser usado fuera del horario escolar. Habrá un porche exterior cubierto vinculado a la cafetería, el auditorio y las zonas exteriores, así como un aparcamiento.

El conservatorio se situará en un eje estratégico para conocer la vida y obra del genio de la guitarra algecireño, al estar a pocos metros de la casa natal y próximo al Centro de Interpretación Paco de Lucía.

Los terrenos llevan cedidos por el Ayuntamiento a la Junta de Andalucía desde 2015 pero realmente ha sido en 2024 cuando el conservatorio parece que ha recibido el impulso definitivo. El proyecto se encuentra actualmente en fase de redacción. Su coste está fijado en 5,4 millones de euros, financiados completamente con fondos europeos.

Además, la Junta de Andalucía ha anunciado que por fin se incorpora la modalidad de guitarra flamenca en la oferta educativa para el próximo curso 2024/25.

PUTA

LA GUITARRA ES UNA HIJA DE

MÁS QUISIERA YO TENER UN CUARTO DE LA FELICIDAD

QUE TENÍA CUANDO ERA UN NIÑO

LA GUITARRA ME HA LIBERADO

YO QUERÍA CRECER MUY RÁPIDO PARA AYUDAR A MI FAMILIA

EL ENVOLTORIO PUEDE SER IMPORTANTE, EL CONTENIDO DEBE SERLO

EL MAYOR ORGULLO QUE TENGO ES HABER APORTADO A UNA MÚSICA

EMPEZÓ A CANTAR CAMARÓN Y YO NO ME LO PODÍA CREER, YO SENTÍA COMO QUE HABÍA LLEGADO EL MESÍAS

QUE QUIERO TANTO EN ANDALUCÍA SE LE DAMUCHO VALOR AL INGENIO, A LA GRACIA

Algeciras después de Paco

ENCUENTRO EN UN VERGEL FLAMENCO

Redacción: Francis Mena | Fotografía: Nacho Márquez

El Parque María Cristina se convierte cada verano en un vergel flamenco con el Encuentro Internacional de Guitarra Paco de Lucía. Tras el fallecimiento del genio de Algeciras se puso en marcha, con el impulso del Ayuntamiento y con la dirección de José Luis Lara, un festival por el que ya han pasado algunos de los mejores guitarristas del planeta y artistas de talla internacional, junto a destacados flamencos locales y de otros puntos de Andalucía. En 2024, el cartel contará con el Sexteto de Paco de Lucía, Rafael Riqueni y la cantaora Argentina, entre otros artistas.

El Encuentro surge por el interés de José Luis Lara, gerente de la empresa Emell Eventos, de dar a Algeciras un festival sobre flamenco y guitarra de primer nivel al igual que otras ciudades cuentan con festivales de música, cine o danza. Asegura que tuvo buena acogida desde el primer año y destaca la apuesta municipal para hacerlo posible, y que actualmente es un acto cultural consolidado.

La lista de artistas es amplia y de mucho peso. “Paco de Lucía es el reclamo, no es un aforo grande, por lo que a veces supone un esfuerzo económico del artista, pero todos quieren estar y muchos me llaman comentándome que todavía no han venido al

Encuentro”, asegura José Luis Lara, que destaca que por el Parque María Cristina, donde se celebra desde la segunda edición, han pasado los guitarristas más grandes como Al di Meola, Tomatito o John McLaughlin, y artistas geniales como Poveda, Cigala, Sara Baras…

Además, la semana del Encuentro Internacional de Guitarra llena la ciudad de actividades en torno al flamenco y a la guitarra con conferencias, masterclass, encuentros de lutieres, exposiciones, flashmob y otras actividades gratuitas.

“La ayuda del ayuntamiento y de instituciones como la Mancomunidad, el Puerto o la Junta de Andalucía es fundamental y para la ciudad este Encuentro tiene mucha repercusión; los vendedores de cerveza me dicen que la semana del festival venden el doble de barriles en el centro”, declara. “Mucha gente de fuera viene a la ciudad y hay muchas revistas de flamenco y portales pendiente de la programación. Algeciras se convierte en el epicentro del flamenco esa semana”, incide.

Lara considera que en este Encuentro prima la calidad sobre la cantidad, algo que tiene que ir irremediablemente unido al nombre de Paco de Lucía.

Una edición especial

La concejal de Cultura, Pilar Pintor, desveló durante la Feria Internacional de Turismo de Madrid (Fitur) el cartel de artistas que llegarán a Algeciras para actuar entre el 9 y el 13 de julio en el décimo aniversario del fallecimiento del genio.

Contará, como cada año, con artistas locales. En esta ocasión Salvador y Pastora Andrades. Rosario Montoya, la Reina Gitana, traerá su espectáculo de piano. También pasará por el Parque María Cristina, escenario de este Encuentro Internacional, Manuela Carrasco con su gira de despedida, acompañada por Enrique el Extremeño, Pedro Sierra, El Perla, Samuel Cortés, Samara Carrasco y Manuela Carrasco hija.

Uno de los destacados es el guitarrista Rafael Riqueni, que recientemente ha lanzado un magnífico disco con Estrella Morente, que participó en ediciones anteriores de este Encuentro. El sevillano traerá hasta Algeciras su último trabajo titulado Nerja . El Sexteto de Paco de Lucía será otra de las actuaciones para el décimo aniversario del Encuentro y del fallecimiento del maestro. Antonio Sánchez, sobrino de Paco, Jorge Pardo, David Jacobo, Farru, Israel Suárez Piraña y José del Tomate forman parte de un espectáculo de mucha maestría.

Y como epílogo, la actuación de María López Tristancho, conocida artísticamente como Argentina.

JOHN MCLAUGHLIN · AL DI MEOLA · SARA BARAS · MIGUEL POVEDA · EVA YERBABUENA · TOMATITO · DIEGO EL CIGALA · DORANTES · RAIMUNDO AMADOR · JOSEMI CARMONA · PASTORA SOLER · SEXTETO · JOSÉ MERCÉ · EL ARREBATO · JOSE CARLOS GÓMEZ

“Todas las cosas buenas que me están pasando son gracias a Paco”

Redacción: Sandra Domínguez.

“Estaría orgulloso de cómo se están haciendo las cosas”

José Luis Lara es, además de promotor de conciertos y espectáculos, un enamorado del flamenco y fue amigo personal de Paco de Lucía. De lo que significa el guitarrista para el mundo dice: “Pepe o Manolo hay muchos pero cuando alguien dice Paco todo el mundo sabe quién es, Paco solo hay uno”.

“Paco era de las personas más importantes de España, como artista era un genio, y como persona era extraordinaria, muy culta, muy preparada”, expresa Lara con admiración hacia un amigo con el que compartió muchos momentos. “Era un enamorado de esta tierra, pudo enterrarse en cualquier sitio y quiso que se le enterrara en su pueblo, cuando estaba en el escenario siempre se acordaba de Algeciras”, comenta.

Y, a cambio, considera que su Algeciras “le está haciendo justicia totalmente”. “Desde el minuto uno el Ayuntamiento se ha volcado con el tema de Paco de Lucía, de una manera muy respetuosa y haciendo todo con la familia”,

Son muchos los artistas que beben del legado de Paco de Lucía, que se descubren, aprenden y reinventan a partir de su obra. La cantaora Argentina, una de las máximas figuras del flamenco actual, se reconoce como una de ellas. La onubense será la encargada de clausurar el X Encuentro Internacional de Guitarra Paco de Lucía.

“Yo sé, me da en el corazón, que todas las cosas buenas que me están pasando son gracias a él, al maestro Paco de Lucía, y el próximo 13 de julio, en su tierra, voy a explicar más detalladamente por qué digo esto”, comparte con 8Directo la dos veces nominada a los Latin Grammy.

“Estoy muy contenta, muy feliz de for mar parte ya de la historia de lo que es y lo que será este encuentro dedicado al maestro. Para mí es un honor recordar a Paco de Lucía en este espectácu-

y pone de ejemplo: “Hay artistas a los que se le tardan 25 años en levantar un museo”. “Paco estaría orgulloso de cómo se están haciendo las cosas, desde el entierro con tantísima gente, que no se cabía en el centro, hasta todo lo que se está haciendo en estos diez años”.

Redacción: Francis Mena. Fotografía: Nacho Márquez.

lo que llevo a Algeciras; va a ser muy especial, tradicional, donde voy a hacer flamenco, pero muy pensado también, con guiños al maestro en cada tema, preparado con mucho cariño”.

Para Argentina cantar en la tierra de Paco de Lucía es una oportunidad para conocer más de cerca, para reencontrarse, de alguna forma, con el genio de La Bajadilla. “No tuve la suerte de conocerle en persona, sí fui a verlo a sus conciertos pero siempre sentí ese apuro de molestarlo. Por eso tengo mucha ilusión por estar en este festival en Algeciras. Estoy muy emocionada de poder cantarle al maestro en su tierra y agradecida porque sé que allí hay mucha afición al flamenco y voy a encontrarme con ese público que estoy deseando conocer y darle lo mejor que tengo”. Aquí te esperamos.

JOSE

BANDERAS · ANTONIO SÁNCHEZ · PEPE DE LUCÍA · TOMASITO · LA TANA · ARCÁNGEL · RUBEM DANTAS · CAPULLO DE JEREZ · JORGE PARDO · CARLES BENAVENT · DIEGO CARRASCO · ESTRELLA MORENTE · PEPE HABICHUELA

La huella de Dios

Paco iba por delante, iluminándonos

José Carlos Gómez pone banda sonora a la vida de su maestro en su último trabajo discográfico

Paco de Lucía era la avanzadilla de los flamencos, aquel que iba con la guitarra como el que va con una linterna abriendo paso por la oscuridad. El resto seguía esa luz, sus huellas, y de una manera especial en su ciudad hasta el punto de crear sello y escuela. Uno de sus más aventajados discípulos es José Carlos Gómez (Algeciras, 1972), que le muestra su devoción casi en cada acorde, en cada paso, como en Las Huellas de Dios, su séptimo disco, que recorre en nueve temas los pasajes y paisajes más importantes de la vida del maestro. Con el guitarrista conversamos en la playa de El Rinconcillo, lugar donde vivió y compartió con Paco y su entorno momentos que marcaron su vida y su obra como músico.

—¿'Las Huellas de Dios' sería una biografía musical de Paco de Lucía?

—Sería una especie de banda sonora sobre la vida de Paco. Egoístamente es usar su vida para inspirarme. A mí me gusta componer sobre imágenes, viendo cosas y necesitaba una inspiración, y escuchando el disco Tauromagia de Manolo Sanlúcar pensé que no había discos flamencos que fueran conceptuales, que cuenten una historia y pensé en la vida de Paco

porque me apasiona su vida y empecé a darle forma, y a elegir momentos y a cada uno le he dado un aire de la época a la que pertenece.

—A lo largo del trabajo recorre los principales momentos de la vida del genio. ¿Cuál diría que lo convirtió en lo que fue?

—Su vida parecía que estuviera diseñada por alguien, como si alguien hubiese movido los hilos. Que se fuera tan pequeño de gira por EEUU me parece fundamental, el encuentro con Camarón o con los músicos jazz... Es difícil en la vida de un artista que se den tantos momentos funtamentales para el desarrollo de ese artista. Empieza por la tierra en la que nace. Que naciera aquí, en Algeciras, y no en Sevilla o en Jerez.

—Pero en esos otros lugares podría haber encontrado un ambiente más flamenco.

—Por esto tuvo que luchar más para darse a conocer al ser una tierra no tan flamenca, aunque aquí paraban todos los flamencos de la época porque es donde había dinero, lo que pasa que nunca se ha vendido como tierra flamenca. Para él eso es fundamental, o el haber visto a su padre pasarlo mal, cosas que le imprime rabia y un carácter que está en su guitarra. La copla en su niñez también es fundamental.

—A las coplas dedicó el que sería su último disco, 'Canción Española'.

—Claro, la copla fue fundamental en la musicalidad de su obra desde muy joven. La copla, que le cantaba su hermana, era mucho más rica en armonía que el flamenco, y eso lo tiene ya en la cabeza, compone con una musicalidad que no tenía el flamenco. Lo de Paco es muy musical, pero a la vez tiene un trabajo de armonía y de inconformismo.

—Algo diferente al flamenco de entonces. —Sabicas, el Niño Ricardo, Marío Escuero habían compuesto ya cosas muy bonitas, la guitarra estaba creciendo, pero en Fuente y Caudal, por ejemplo, hay un cambio ya abismal, hay una narrativa musical impresionante. A partir de ahí cada disco son saltos abismales. Almoraima tiene un concepto de música acercándose a los clásicos, y ya en Solo quiero caminar parece otra persona. Y además avanza muy rápido, lo que hizo en una vida se podría haber hecho en varios siglos. Cada disco volvía loco a todo el mundo, ponía a todos a estudiar.

—¿Era un guistarrista pero también un pensador de la música, no?

—A Paco hay que mirarlo desde muchos prismas, el Paco creador es impresionante. Creo

que hay muy poca gente que sabe realmente quién es Paco; pensamos en un guitarrista con mucha velocidad y que tocaba muy bien, pero eso es el 0,5%, era lo que más llamaba la atención pero está a la altura de los grandes compositores.

—¿Es 'Las Huellas de Dios' su disco mas influenciado por Paco de Lucía, más allá de que haya hecho algo conceptual sobre su vida?

—Sí, en el aspecto en que cada parte quiero que suene a la época que estoy contando de su vida pero quiero que suene a mí también, ese ha sido el trabajo difícil de este disco, darle personalidad. En la bulería Calle Ilustración quiero hacerla al estilo de los 70, pretendo que suene a esa época, pero imprimiendo mi personalidad. Me ha costado la misma vida.

—En este disco también ha vuelto a cantar. —Pensé que lo podrían hacer otros cantaores pero también pensé que era un sentimiento mío y decidí hacerlo yo.

—Hay un tema llamado 'El Mesías' sobre Paco y Camarón. ¿Quién aportó más a quién?

—Se aportaron de manera diferente. Camarón era como un tarro de las esencias, que cuando se abría te podía impregnar de cosas bonitas y luego convertirlo en música, y eso le pasaba a Paco; Camarón le regaló camiones y camiones de inspiración. Cuando murió lo dijo, que se le había ido la inspiración durante muchos años. Y Paco a él le aportó mucho porque era el creador, un guía, hay muchas cosas en los discos de Camarón que eran de Paco. En los discos Como el agua , Calle Real y Viviré está para mí la ver-

dadera evolución del flamenco. Ahí llega Paco y empieza a incorporar en discos de Camarón todo lo que está aprendiendo con los músicos del jazz y hay una armonía y una secuencia de acordes que no se hacía.

—En el cierre del disco cantas "hoy me siento huérfano, perdí mi camino". ¿Es tan grande el vacío que dejó hace diez años?

—Sí, estábamos acostumbrados a que él fuera por delante con la linterna abriendo las puertas. Esa letra la hice cuando falleció, porque fue un shock muy grande. Ha sido muy duro, porque además de como músico era como persona, lo que significaba para nosotros, su compromiso con el flamenco.

—¿Seguir la huella de Paco de Lucía hacía dónde lleva?

—Creo que lo que tengo más presente de él es que lo que haga tiene que sonar a flamenco. Dentro de que suene a ti y que estés intentando crear algo nuevo, pero que no deje de sonar a flamenco. Esa es la mayor enseñanza, el respeto a las raíces del flamenco aunque intentes crear algo nuevo.

—El País nombró a 'Las Huellas de Dios' como uno de los mejores de 2023. Supongo que esto supone un espaldazaro.

—Hombre, te da mucha alegría que reconozcan tu trabajo, hay mucho esfuerzo detrás, hay una campaña crowdfounding, no hay dinero para los discos, las compañías discográficas pasan del flamenco. Es un momento muy delicado, no se puede crear.

Redacción: Francis Mena.

Fotografía: Juan Manuel Galindo.

¿Existe una escuela algecireña de guitarra?

"La escuela algecireña de guitarra es la de Paco", contesta a esta pregunta el guitarrista José Carlos Gómez. Otros guitarristas de la ciudad también defiende la existencia de un estilo de toque.

"Aunque no existiera deberíamos venderlo, porque hay gente que vende otras cosas y nos tragamos unas papas... Pero además creo que existe de verdad. Lo descubrí cuando iba con 15 o 16 años a tocar con Antonio Madreles a Huelva y me acuerdo que los guitarristas decían: a ese niño se le nota de dónde viene. Y luego mucha gente me dice, y cada véz más: eso suena a Algeciras, eso suena a Paco de Lucía. Eso es un orgullo y si no defendemos nosotros que hay una escuela algecireña nadie va a venir a decírnoslo", responde Gómez.

¿Qué es sonar a Algeciras en la guitarra? "La escuela de guitarra de Jerez es la de Parrilla, de Morao, también de Periquín, pero es de Jerez. La nuestra será la de Paco. Lo que defendemos es que el padre de Paco ponía mucho hincapié en la limpieza, que el sonido fuera limpio, y en el ritmo, y creo que eso nos caracteriza, porque nuestra manera de hacer el ritmo no es ni el mismo de Jerez ni de Morón. Es diferente.

El maestro de guitarristas Salvador Andrades también defiende esta idea. Cree que en esa escuela algecireña de guitarra destacan las armonías y está marcada por Paco de Lucía, que ha influido en los guitarristas de todo el mundo pero que ha nacido aquí y considera que “la semilla fue su padre”, Antonio Sánchez, que a su vez dio clase a Andrades y este a cientos de guitarristas algecireños.

La huella de dios

Salvador Andrades y la semilla de Sánchez

Redacción y fotografía: Francis Mena

Salvador Andrades lleva 40 años dando clases de guitarra. Aprendió directamente del maestro de Paco de Lucía, su padre Antonio Sánchez, y ha enseñado a gran parte de los que hoy continúan esa escuela de Algeciras de la que es firme creyente.

En su academia Arte y Compás, en la misma calle San Francisco que fue cuna de Paco de Lucía, nos habla de la influencia que el genial músico algecireño ha ejercido en otros guitarristas. “Antes de Paco, los guitarristas más conocidos de aquí en esa época fueron su padre, Antonio Sánchez, y Manitas de Plata. Antonio le dio clases a Paco Martín -padre del actual guitarrista Antonio Martín-, a Ramón de Algeciras y a Paco de Lucía; Paco Martín me dio clases a mí y luego me dio el propio Antonio. Yo he dado clases a José Carlos Gómez, José Manuel León, Carlos Llaves, Fran de Algeciras, Daniel Valenzuela…”, explica Andrades esa especie de árbol genealógico de la guitarra algecireña.

Además de profesor, Salvador Andrades ha producido siete discos, realiza arreglos y dirección musical como al bailaor linense David Morales, da conciertos y compone. Recuerda cómo eran aquellas clases con Antonio Sánchez: “Tras dar clases con Paco Martín, con Andrés Rodríguez y Pepe Fernández, empecé con 16 años a recibir clases de Antonio, tres veranos. Yo fui desarrollando mi toque con el cassette y fui adquiriendo muchos vicios y Antonio me dijo que tocaba muy bien pero que estaba tieso de compás, me corregía los fallos, me empezó a meter a compás… Le tengo que estar agradecido de por vida porque sin él no hubiese sido guitarrista”, expresa Andrades, que destaca también que a su padre “aquellas clases le cos-

taba una fortuna”. “Recuerdo que eran 500 pesetas diarias en el año 78, y el padre de Paco y el mío llegaron a un acuerdo para arreglarle a Paco la casa de El Rinconcillo”.

Afirma que el padre y mentor de Paco de Lucía “era muy recto, muy exigente, como fue con su hijo, y tenía un conocimiento de la guitarra y del flamenco impresionante”. “Me levantaba en verano a las 8.00 de la mañana para dar clases en su casa, me disciplinó y contaba con una metodología que no tenían los anteriores profesores”, cuenta.

“Así que Paco ha ejercido su influencia sobre

Sembrando guitarras

Mucho más que una música. La Asociación Cultural Sirimusa, que lleva el guitarrista algecireño José Manuel León y la cantaora algecireña Alicia Carrasco, viene desarrollando en los últimos años una serie de iniciativas que usan el flamenco como un instrumento social.

Uno de los proyectos que ha tenido más calado es el llamado Un niño, una guitarra, un corazón , en el que la asociación, con la ayuda también del Ayuntamiento de Algeciras y entidades y personas privadas, logró adquirir y entregar cincuenta guitarras a niños y niñas

Redacción: Francis Mena

en riesgo de exclusión social, a los que se les ha dado clases y facilidades para que aprendan a tocar este instrumento con tanta tradición en la ciudad. El proyecto, que comenzó en 2020, vuelve a estar en desarrollo para una nueva entrega.

Alicia Carrasco y José Manuel León compaginan sus carreras artísticas con el desarrollo de iniciativas sociales. Actualmente también trabajan en el uso del flamenco como parte del sistema sanitario. "El flamenco transforma el espacio terapéutico con el objetivo de

los guitarristas de aquí porque la mayoría hemos salido de la misma rama, pero Paco ha influido a todo el mundo, cada dos años pegaba un vuelco a la guitarra, creaba un estilo y luego cambiaba todo de nuevo, era muy camaleónico y eso hacía que los guitarrista tuviésemos que estudiar. Durante 30 o 40 años íbamos al compás que iba marcando, hace diez años quedamos huérfanos y ya se ha ramificado en diferentes estilos”, explica.

Para Salvador Andrades, la mezcla de Paco de Lucía con otros artistas y músicas enriqueció sus armonías, “que luego iba aflamencando”, también las escalas que utilizó y eso hizo que influyera a todo el flamenco a través de sus discos. Andrades sí cree en una escuela algecireña de guitarra, un estilo en el que destacan las armonías marcado por Paco que no solo es de los guitarristas de Algeciras pero que ha nacido aquí y “la semilla fue su padre”.

Una semilla que, aunque con un estilo y un método de enseñanza propio, Salvador Andrades ha ido sembrando en cientos de alumnos. Cree que “en la tierra hay mucha afición a la guitarra, pero de la guitarra no es fácil vivir".

Por eso, ve con buenos ojos que haya un conservatorio en Algeciras pero teme que esa no vaya a ser la escuela algecireña, considera que “se debería promocionar el toque de aquí, con los guitarristas de aquí, no solo yo, otros guitarristas y profesores para que esa escuela no se pierda”. Incluso va más allá: “Yo creo que la Junta de Andalucía debería crear conservatorios de flamenco”.

humanizarlo", comenta Alicia Carrasco, que recuerda que se ha realizado actuaciones y exposiciones de arte en salas y pasillos del Hospital Punta de Europa de Algeciras gracias a un convenio con el Área de Gestión Sanitaria Campo de Gibraltar Oeste. Llevar el flamento a todas partes y, especialmente, allá donde se necesite. También a los centros educativos donde forman al profesorado que luego tiene que enseñar a los alumnos.

Propuestas que merecen muchos oles y que seguro aplaudiría el mismísimo Paco de Lucía.

La huella de Dios

Nuestro recuerdo de Paco 10 años después

scribir sobre Paco de Lucía ya lo ha hecho mucha gente entendida en la materia, no obstante debemos recordar, aunque no sea nada nuevo, que Paco está considerado el guitarrista más grande que ha conocido la historia del flamenco.

rente a lo que ellos conocían.

Puede considerarse uno de los artistas del arte flamenco más conocido y admirado de la historia.

Tiene más de doscientos discos grabados, entre ellos más de treinta como solista.

Siempre grabó con el nombre de Paco de Lucía, con excepción de cuando grabó, en 1962, como los Chiquitos de Algeciras, con su hermano Pepe, y también entre 1964 y 65 cuando, con el nombre de Paco de Algeciras, grabó varios discos con Juanito Valderrama, la Niña de la Puebla, Roque Montoya “Jarrito” y algunos artistas más.

Mi buen amigo Antonio Arenas, excelente guitarrista, que fue descubridor de grandes artistas y grabó discos con muchísimas figuras del cante y baile, entre ellos Camarón, me contó que cuando Paco irrumpió de lleno en el mundo del flamenco, fue un impacto tan grande e importante, que los guitarristas de esa época se asustaron, casi se escondieron, porque no comprendían que se pudiera tocar la guitarra de esa forma, tan brillante y tan dife-

Y haciendo mención a la parte humana, decir que le gustaba, y practicaba, la gracia, la gracia flamenca, en especial cuando estaba con sus grandes amigos José Luis Lara y Antonio Quirós o con su compare Victoriano Mera. De esta faceta hay muchas anécdotas.

También, hay que rememorar su personalidad y orgullo de buen flamenco cuando en 1992 en la gran Expo 92 de Sevilla, con un contrato firmado de 5 millones de pesetas (mucho dinero en ese tiempo), para actuar con los divos Julio Iglesias y Plácido Domingo, no cumplió dicho contrato y se fue a su casa de Algeciras, cuando vio que en los carteles del espectáculo se le ninguneaba, ya que las letras de su nombre eran muy pequeñas en comparación con sus compañeros de cartel. Su comentario fue que no podía permitir esa falta de respeto hacia el flamenco y hacia su persona. Este hecho conllevó el aplauso y reconocimiento del mundo flamenco.

Solo nos queda destacar que indudablemente estamos en presencia de un genio irrepetible.

Paco de Lucía Legacy

E E

n la vida, el recuerdo por nuestros seres queridos es algo que nos acompaña siempre, alguien dijo una vez "recordar es vivir", pero cuando hablan de ti después de 20 años de tu partida y lo hacen en presente en vez de hablar en pasado, significa que llegas a ser INMORTAL.

Pues sí, Paco de Lucía es y será INMORTAL porque hablamos de él como si estuviera entre nosotros, en cualquier barrio de Algeciras, Madrid e incluso Nueva York. Los músicos del mundo, los flamencos y los no flamencos recuerdan la figura del maestro con una veneración infinita, pero lo

verdaderamente importante es cuando el pueblo te lleva con cariño y admiración en su día a día.

Que bonito es pasear por la calle Ancha y que se comente un pasaje de su vida, por La Bajadilla o El Rinconcillo y escuchar en alguna tertulia de antiguos "aficionaos" alguna de sus anécdotas e incluso leyendas, porque la leyenda se consigue cuando sobrevives al tiempo y dejas en este mundo tu legado, un legado que junto a tu hermano Ramón otro grande de las seis cuerdas hacen de Algeciras un pueblo muy "Especial"

El recuerdo de Paco en nuestras vidas es "Eterno"

JOSÉ VARGAS QUIRÓS PRESIDENTE HONORÍFICO DE LA SOCIEDAD DEL CANTE GRANDE DE ALGECIRAS

CARLOS VARGAS PRESIDENTE DE LA SOCIEDAD DEL CANTE GRANDE DE ALGECIRAS

Las grabaciones perdidas de Paco y de Pepe reviven al guitarrista en el décimo aniversario de su muerte

JUAN JOSÉ TÉLLEZ

ESCRITOR Y PERIODISTA

Era y es una voz prodigiosa. Y unas manos infantiles ensayan sus primeras falsetas sobre la base de las de Niño Ricardo, que Ramón de Algeciras aprendiera a bordo de la compañía de Juanito Valderrama. Se cumplen diez años de la muerte del guitarrista algecireño, una década en la que hemos asistido a una resurrección de su memoria: desde el Festival Flamenco Legacy de Nueva York y quizá, de Andalucía próximamente—, a la Fundación que lleva su nombre, el Centro de Interpretación que con la misma lentitud con la que el guitarrista componía probablemente abra sus puertas en Algeciras, en abril. También, las jornadas que bautiza cada año en su patria chica, la larga espera para trasladar su conservatorio a los antiguos cuarteles de la Fuentenueva algecireña, a donde condujeron a su padre en los turbios días del golpe de Estado de 1936. O el Festival de Mallorca, tres nuevos libros sobre su figura o los nuevos discos aparecidos, desde el Saturday Night in San Francisco a las sesiones de Montreux.

En este contexto, el próximo 24 de febrero, en la Ángel Orensanz Foundation, en el 172 de Norfolk Street, en Nueva York, se presentará lo que la Fundación Paco de Lucía considera como “el secreto mejor guardado” del guitarrista algecireño y de su hermano Pepe. “Las grabaciones perdidas”, le llaman.

“En una velada misteriosa dentro del evento de clausura y cocktail de cierre del Festival Legacy de Paco de Lucía, seremos testigos de algo verdaderamente especial, acompañados por los grandes talentos del flamenco disfrutaremos de un momento histórico”, explican desde dicha entidad cuando, el próximo día 25, se cumplirá el décimo aniversario de la muerte del genio de Algeciras, en un hospital de Cancún.

Con ese motivo, en la Gran Manzana, el Festival Paco de Lucía Legacy comenzará el día 20 y reunirá a 30 artistas de renombre, dentro y fuera del flamenco, entre ellos numerosos músicos que acompañaron al guitarrista en su aventura vital. También, en el mismo recinto, se exhibirá la película “La búsqueda”, de Curro Sánchez, el excelente resultado fílmico de cuatro años de grabaciones con muchos de

los testigos que cruzaron por la biografía de Paco.

Las grabaciones se llevaron a efecto a finales de los años 50 o quizá ya en 1960, en diversos lugares como un domicilio de la calle Barcelona en donde, por entonces, vivía la familia Sánchez pero, principalmente en la calle Muñoz Cobos, en la casa de la abuela de Reyes, Quique y Pepe Benítez. Su padre, Reyes Benítez, el inseparable amigo de Antonio Sánchez Pecino y de Luzía Gomes, fue el maestro de ceremonias. El magnetofón Grundig donde se impresionaron la voz y la guitarra de aquellos adolescentes había sido adquirido en Gibraltar por Juan García, una suerte de estraperlista amable que vivía por el Secano. Como insólito ingeniero de sonido, Pepe Marín, remitente de pescado, otro de los compinches algecireños del patriarca Antonio. Y, en presencia de Antonio y Tomás Herrera, los hermanos Parra como se les conocía.

Se trata de una grabación previa a la aparición de “Los Chiquitos de Algeciras”, en el Concurso Flamenco de Jerez de la Frontera, de 1962. De esa etapa prehistórica de Paco y de Pepe, se conocen otras grabaciones aisladas, como la que utilizó el cantaor en “El orgullo de mi padre”, el álbum que publicó en 1996.

do gustó tanto a Antonio Sánchez, que se la quedó para placear la grabación por Madrid, hasta conseguir su primer contrato discográfico. Pero terminó encargándole su custodia a Reyes Benítez, que inicialmente se llevó las cintas a su fábrica de corcho, junto con los muebles y los discos de pizarra que aún guardaba en la calle Barcelona, antes de mudarse toda la familia a Madrid. Aquel tesoro perdido permaneció allí, en una bolsa de plástico dentro de una caja de membrillo e incluso sobrevivió a traslados y peripecias familiares. Reyes Benítez sabía de su existencia y, al rebufo del premio Príncipe de Asturias de las Artes, que Paco recibió en 2004, pidió la grabación a su hijo Quique, que las conservaba pero ya no obraban en su poder. Tras una larga pesquisa, reaparecieron como por ensalmo.

“Se puso a componer la bulería en sol. Cuando llegaba a una nota se paraba, una y otra vez. Hasta darle forma, hasta lograrlo. Al otro día, no la volvió a tocar más”, atestiguaba Reyes Benítez, en 2004, para un serial de Canal Sur Radio, realizado por Fernando Silva y el realizador Luis.

Lo cierto es que la volvió a tocar. Muy probablemente es la misma pieza que figura en estas grabaciones perdidas, que ahora edita BMG, al cuidado de Javier Doria. Hicieron falta varias sesiones porque Antonio Sánchez no estaba conforme con algunos de los resultados, que si un techo de uralita, que si hacía falta más silencio.

Hasta que dieron con la tecla y el resulta-

Así que, una vez recuperadas, las viejas bobinas de Revox fueron digitalizadas inicialmente en los estudios algecireños de la RTVA, por parte del técnico Luis María López-Bellido y de Fernando Silva, por indicación de Reyes Benítez, el viejo amigo de Antonio Sánchez Pecino. Con su permiso, la grabación se le hizo llegar a Paco de Lucía, a través de Félix Grande. En principio, se trató de un proyecto no venal, para que la prodigiosa voz de Pepe y la guitarra de Paco pudieran ser conservadas por familiares y por allegados. Más recientemente, Pepe de Lucía recabó el DAT que conserva dicha joya para este apasionante proyecto discográfico, cuyos detalles últimos se darán a conocer próximamente.

Será un buen antídoto contra la muerte de Paco de Lucía y, también, especialmente, un reconocimiento más al poderoso talento cantaor de su hermano Pepe, afortunadamente aún entre nosotros. La música y la memoria constituyen la mejor forma de celebrar sus vidas, aunque sea en vísperas, el próximo día 25, del décimo aniversario de la desaparición de aquel niño prodigio cuyas manos vuelven a nosotros como en una milagrosa sicofonía

La huella de Dios

En busca de la guitarra maestra

Antonio Morales, el último lutier de Paco de Lucía, habla de la amistad y la colaboración entre ambos en la búsqueda de la guitarra que mejor se adaptara al maestro en una etapa en la que perseguía una nueva relación con el instrumento

A Paco de Lucía le obsesionaba la perfección, y a la vez valoraba la sencillez. Tal vez por eso acabó entablando una buena amistad con Antonio Morales Nogués (Monesterio, 1956), un extremeño afincado en Mallorca que terminó siendo su guitarrero predilecto y, más que eso, un aliado en encontrar la guitarra perfecta, que no era otra que esa con la que él se encontrara más a gusto.

Antonio Morales viene de buena escuela de guitarreros, alumno de George Bowden, y lleva 33 años creando y arreglando instrumentos de cuerdas. Las tres primeras veces que vio a Paco, tras ponerles en contacto un amigo en común para que le diera un consejo como carpintero, no le dijo que hacía guitarras. “El primer encuentro con Paco fue muy cariñoso, como si nos conociéramos de siempre; me cautivó”.

Cuenta el veterano lutier que “con Paco no había un encargo, había una colaboración”. “Era lo suficiente inteligente como para no decirle a un guitarrero lo que tiene que hacer, lo que sí te dejaba claro era qué esperaba de la guitarra en esa época de su vida”, explica Morales.

¿Y qué buscaba? “Paco usaba La Faustino, una guitarra alta y dura, que era lo que necesitaba durante muchos años, y él me decía Antonio, ya no quiero pelearme con la guitarra. La guitarra tenía que tener ese punto de flexibilidad pero no demasiado blanda para que no perdiera esa pegada; los agudos más tensos pero no rígidos, que tenga equilibrio… una serie de cosas que nos costó un proceso entender pero con el paso de los años entendí qué quería”, responde el guitarrero extremeño. Todo era cuestión de sensaciones.

Aquel cambio tenía un motivo que el maestro explicaba a su amigo guitarrero con claridad y gracia: “Decía: cuando yo empecé no había los adelantos que hay ahora de amplificaciones y tal, llegabas a un teatro y tenías que llegar a todas partes con tu sonido, yo metía mi mano y era un serrucho que lo cortaba todo. Entonces tenía que ser una guitarra de más tensión, más alta, dura”. Ya en la que sería su última gira Antonio Morales tuvo que modificar La Faustino, el instrumento favorito en gran parte de su carrera, para adaptarla.

Morales muestra su admiración por su amigo fallecido casi en cada palabra. Incluso cuando se le pregunta cómo era trabajar con Paco y no tenía más remedio que expresar que era “uf, muy, muy exigente; pero tenía una parte de suavidad, no te metía presión ni estresaba”.

Antonio y Paco charlan en la casa del guitarrista en una foto de Gabriela Canseco.

LA MAESTRO

Así, en esa búsqueda, nació La Maestro, no la guitarra perfecta sino simplemente la que mejor se adaptaba a las nuevas sensaciones del de La Bajadilla. Paco, el genio de la música que no sabía leer partituras, también era capaz de cambiar la guitarra, de forma literal, sin conocer los complejos entresijos de la fabricación del instrumento. Para ello contaba con un aliado meticuloso, amante de su trabajo y que incluso usa cálculos pitagóricos para alcanzar el punto perfecto de sonido. “La Maestro fue fruto de la

colaboración de ambos y de un proceso de evolución durante cinco años y muchas pruebas y cambios”, recuerda Morales.

“Yo le llevaba guitarras y él se pegaba meses probándolas y me iba diciendo qué le echaba en falta, y ya iba trabajando con los grosores, estudiaba el varetaje, la barra armónica, el tamaño de la boca, los grosores de las tapas en una zona u otra... ya juegas con eso y reajustas la guitarra. Yo trabajo con unos cálculos pitagóricos. Desarrollo unos cálculos de vientres de hondas y nódulos que van calculando los tipos de armónicos que quieres potenciar, y cuando tienes resuelto el diseño luego vas reajustando con los grosores”. Matemáticas griegas, sonido, sensaciones, manos y naturaleza. Para la última guitarra que no pudo tocar el músico algecireño usó una madera de palosanto de Brasil de 1954 y abeto de Alemania y un diapasón de 67 milímetros en vez de 65 como era habitual.

"Con Paco hubo un cambio de concepto a la hora de hacer guitarras que ahora aplico a todos los modelos"

Antonio Morales reconoce que trabajar con Paco de Lucía supuso un antes y un después “inequívocamente” para su trabajo como lutier. “Antes de conocerle había una tendencia y con Paco hubo un cambio y mucha gente viene buscando esas sensaciones, las cosas que le hacía para él las sigo haciendo; fue un concepto de guitarra que ahora aplico a todos los modelos”, explica el guitarrero, que asegura que “cambió el tipo de guitarra”. “Pero era tan humilde que un día me dijo que estaba preocupado por mí porque entendía que me estaba adaptando mucho a él y temía que eso no sirviera para los demás guitarristas. Me sorprendía esa sencillez y humildad”, afirma, aún extrañado.

Además, el lutier habla con orgullo de su aportación para el último de sus discos: Canción Andaluza. “Un día le pregunté que cómo iba el disco y me dijo que mal, que le faltaban matices, colores. Entonces tenía por allí un alud árabe que decía que no había quien lo afinara, cuyas cuerdas parecen de tender la ropa, también un archilaúd, y un buzuki griego. “Me los llevé y estuve indagando y modificando, y cuando se las devolví las empezó a tocar y esos instrumentos le ayudaron a encontrar los sonidos que necesitaba para el disco”.

Antonio Morales no olvida la triste noticia del fallecimiento de su amigo, hace diez años. “El día anterior habíamos hablado, me preguntó cómo se escribía un instrumento, el guitarró para ponerlos en los créditos de Canción Andaluza”, comenta emocionado. “Lloré como hacía años que no lloraba".

Redacción: Francis Mena. Fotografía: Gabriela Canseco y cortesía de Antonio Morales.

Antonio Morales trabaja en su taller de Mallorca.

Más allá de la música

“Paco de Lucía está por descubrir”

El periodista César Suárez publica el ensayo 'El enigma Paco de Lucía' (Lumen)

—Sorolla y Paco de Lucía. ¿Qué le ha llevado a escribir libros sobre estos dos artistas, a priori tan diferentes?

—Son diferentes pero he encontrado puntos en común como el atractivo que tiene el mar para ellos. Pero luego yo descubro que Paco de Lucía y Sorolla son personas que tienen una obra a priori muy conocida, pero su lado más personal, más humano, es más desconocido para el gran público. De Paco hay mucho escrito, muchos vídeos, el documental estupendo de su hijo Curro Sánchez, pero su faceta humana está por descubrir, ese lado misterioso y esa contradicción entre su genio creativo, su angustia, su ansia de perfección, y sus ganas de divertirse y de escapar de la guitarra.

—¿Cuál es el enigma de Paco de Lucía que da título al libro?

—Yo creo que el enigma es esa complejidad interior. Una de las primeras cosas que me dice su primera mujer, Casilda Varela, que creo que es quien mejor le conoció psicológicamente, es que Paco era pura angustia; lo dice también su amigo Félix Grande, que era un rayo atado a una redoma, como dice Miguel Hernández. Estaba en esa constante inquietud, nunca sentía sosiego aunque por fuera mostraba esa calma, esa pose distante, esa mirada que se ve en fotos y de la que habla todo el que mantuvo alguna relación con él. Me llamó la atención de esa dualidad entre su interior y su exterior.

—¿Qué aporta su ensayo a la biografía de Paco de Lucía?

—He tratado de seguir esa frase fantástica de Manolo Sanlúcar con la que abro el libro que dice que “Paco encanta al que no sabe y vuelve loco al que sabe”. Soy un aficionado, no me considero un erudito ni un experto, pero he querido hacer de traductor de alguna manera de ese mundo maravilloso y complejo del flamenco, y acercarlo a esa gente, a quienes les encanta la música y la figura de Paco de Lucía y también hacerlo ameno para cualquier lector.

—¿Paco de Lucía supone un atractivo por la posibilidad de acercarse a la vida, la obra y la mente de un genio?

—Para mí está por descubrir. Su lado humano, su obra, aunque está muy estudiada, tiene mucho margen para estudiar y desarrollar. Era alguien con una inteligencia superior y a la vez una creatividad y una intuición que ha

dejado huella en todos los que le conocieron por alguna conversación, por algún consejo, o algún gesto… Todos te cuentan un momento muy especial con Paco.

—Su ensayo también muestra un Paco de Lucía con inquietudes culturales, por ejemplo por la lectura o la filosofía.

—Era un suceso inédito en el flamenco, no era habitual que un flamenco leyera, que citara a Ortega y Gasset o a Erich Fromm, y que hablara inglés. Tenía esa ambición de ir más allá del lenguaje flamenco y de las raíces flamencas que él adora y que siempre mantiene con la dificultad que conlleva el superar esos cánones sin abandonar las formas. Paco llega un momento en el que tiene tal dominio técnico del instrumento desde muy pequeño que su cabeza va mucho más allá. Era un persona muy inquieta, rebelde y se rebelaba primero contra sí mismo, y tenía una inquietud intelectual en cuanto a la lectura, a conocer cosas, a la tecnología, a la jardinería... Le inquietaba muchas cosas.

—¿Esa inquietud y ambición creativa fue clave en su carrera?

—Esa inquietud coincide en todos los grandes. Es la que tenía Camarón cuando iba a cualquier pueblo para escuchar a alguien que cantaba por seguiriya, o la que tenía Enrique Morente. En el flamenco hay historias y personajes maravillosos, y un territorio que para mí está todavía inexplorado, no sólo si te gusta o no, sino como un género, es como el western , un territorio en el que se dan personajes buscavidas, cruce de destino... La propia Algeciras de la infancia de Paco, con el contrabando, las personas que cruzaban el Estrecho, de la gente de Hollywood que venía… Un escenario de película.

—¿Hasta qué punto le marcó nacer en esa Algeciras?

—Echaba de menos su ciudad y según iba cumpliendo años aún más. A pesar de la supuesta dureza de esa infancia de horas y horas de estudio, ese paisaje, esos personajes surrealistas y con historias estrambóticas y demás le hacia mucha gracia y le despertaba mucho cariño y mucha nostalgia de la pureza. Cuando llega el momento en el que ya ha alcanzado cierta fama, cuando ha suplido ese tocar para salir adelante, dice que el hambre espiritual es más difícil de calmar y por eso vuelve la vista a atrás, creo que lo que encuentra ahí es pureza y el entusiasmo de sus principios.

César Suárez Martínez (Madrid, 1975) es periodista especializado en cultura. Desde hace quince años trabaja de redactor jefe de la revista Telva, donde ha entrevistado a las principales figuras del cine, la música, las artes y la literatura. Tras ‘Cómo cambiar tu vida con Sorolla’, su primer libro, publicó el pasado mes de enero ‘El enigma Paco de Lucía’.

Redacción: Francis Mena.

Imagen: Toni Mateu.

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allá de la música

EL PRINCIPIO Y EL FIN, HERMANADOS

Algeciras y Playa del Carmen. Ambos puntos del planeta se encuentran separados por un océano y miles de kilómetros pero unidos por Paco de Lucía.

Redacción e imagen: Francis Mena.

La ciudad andaluza y la mexicana firmaron un hermanamiento durante la pasada Feria Internacional de Turismo de Madrid (Fitur) con el objetivo de cooperar en ámbitos como la cultura y la promoción turística, entre otras.

Playa del Carmen es una ciudad mexicana, cabecera del municipio de Solidaridad, del estado Quintana Roo. Allí, en ese punto de la Riviera Maya se estableció durante muchos Paco de Lucía, en busca de mar y tranquilidad. Fue precisamente a la orilla de las aguas caribeñas, mientras jugaba con su hijo menor, cuando comenzó a sentirse mal y falleció poco después. Diez años después de ese hecho luctuoso que resonó como un crujido en su ciudad natal, Algeciras y Playa del Carmen firmaron el hermanamiento. Lo hizo el alcalde de Algeciras, José Ignacio Landaluce, y la presidenta municipal de Solidaridad, Lili Campos Miranda.

La secretaria de Turismo de Solidaridad, Samaria Angulo, resaltó para 8Directo la importancia del hermanamiento con Algeciras y las perspectivas que tiene para el desarrollo de iniciativas de distintos ámbitos. “Playa del Carmen es un municipio reconocido a nivel mundial por sus playas pero vamos a trabajar en conjunto para que seamos un referente respecto a lo emblemático que fue Paco de Lucía.

No sólo queremos que sea un hermanamiento cultural y turístico, queremos trabajar también en sentar las bases para que sea incluso comercial por las bondades que tiene Algeciras”, expresa.

Con esas bases del hermanamiento con Algeciras, Solidaridad espera generar una serie de actividades como la posibilidad de crear un festival anual en Playa del Carmen para rendir homenaje a la memoria de Paco de Lucía y en el que participen artistas de ambos lugares. Incluso se estudia desde las administraciones mexicanas la posibilidad de hacer intercambios y usar estas expresiones culturales para “ayudar a niños” de la zona.

Playa del Carmen tiene previsto realizar un monumento a Paco de Lucía a lo largo de este 2024, año en el que se cumplen diez años de su fallecimiento, y que podría tener el aspecto del que ya existe en Algeciras. “Vamos a contar con un espacio dedicado a este referente mundial de la música, que vivió aquí con su familia y se fusionó con los habitantes de Playa del Carmen”, anuncia la secretaria de Turismo, que también trabaja en un proyecto integral sobre la figura del algecireño y su estancia en la zona para sumar un atractivo cultural y turístico a un reconocido destino de playa.

Las delegaciones de Algeciras y Solidaridad tras la firma del hermanamiento en Fitur 2024.

Una portada de colección

Diez años sin Paco. El tiempo pasa muy deprisa pero de alguna forma hay personas que permanecen en nuestra mente y parece que conviven algunas veces con nosotros...

Siempre ha sido una inspiración para mí a pesar de trabajar en distintas artes. Desde hace muchos años me decía a mi mismo que quería ser como mi paisano más universal, que traspasó fronteras con su música y su forma de ver y cambiar las cosas de su entorno. Cuando alguien me decía cosas como... “una persona de Algeciras es muy difícil que triunfe, tendrías que haber nacido en Madrid o Barcelona para dedicarte al arte...”, en esas ocasiones siempre me acordaba de Paco y pensaba que si él pudo hacerlo siendo algecireño por qué no iba a poder yo (salvando las distancias por supuesto).

Desde entonces lo he pintado en varias ocasiones y con muchísimo respeto porque su vida y su forma de verla me han ayudado muchísimo en toda mi carrera. No pude conocerlo en persona pero a través de todo su legado, sus documentales (no sé cuántas veces he visto “La Búsqueda” dirigida por su hijo Curro) y la cercanía que he tenido con miembros de su familia hacen que lo sienta muy cerca y siga inspirándome más aún si cabe.

No soy un entendido del flamenco ni mucho menos, pero es cierto que desde que nos dejó me he convertido en un gran aficionado y su discografía for ma parte de mi música más personal, la que me lleva a esos mundos donde todo se detiene cuando paso horas y horas de trabajo pintando.

Este cuadro lo he pintado con toda mi alma, mi admiración y respeto. He intentado representar tres etapas de su vida... a un Paco eterno, al Paco que transmitía con su mirada cercanía y algo especial y al genio universal de la guitarra por excelencia. Todo ello entre dos aguas que marcaron su vida y la de todos los especiales.

Con estos trazos le doy las GRACIAS por todo lo que me ha aportado a nivel personal y en mi carrera y ojalá desde algún lugar lo pueda contemplar y saber que diez años después me sigue inspirando cada día mas.

Redacción e imágenes: Víctor Jerez.