EL VISAJOZO – MAY - JUN 2017 VIDEOS Y ROLLOS. ASÍ VA EL 2017… …IMAGEN COMENTADA DE UN PRESENTE. UN PARO ¡¡¡¡MUY BIEN PARADO!!!! No cabe duda que la mella hecha por años y años de analfabetismo, sale a relucir en momentos de tensión como el que vive hoy la educación colombiana. Al decir analfabetismo, se piensa, no en la incapacidad de un ser, víctima de su entorno, para comunicarse con sus semejantes, por medio de símbolos o grafismos. El analfabetismo político y social es aún más crudo y peligroso, porque acarrea conflictos de conciencia, la que muchos hipotecan a un pastor o a un sacerdote, incapaces de reconocer el bien del mal, dada su conflicto de intereses. En el discurrir de los días, las marchas, las noticias, los comentarios, se puede evidenciar ese analfabetismo político y social, en las miradas acusadoras de personas instrumentalizadas por las informaciones de las fuentes gubernamentales, en las palabras de los esquiroles que se prestan por dos monedas y a veces gratis, para desprestigiar no solo la causa actual del magisterio sino los movimientos sociales en general, asociándolos a estereotipos morales que a nada equivalen en términos de derechos.
El analfabetismo político y social, a diferencia del de las letras y los símbolos, no lo causa la falta de aprestamiento o información, porque el ser social es político en esencia y vive en medio de las tensiones que causan el hecho político y social. Este analfabetismo está dictaminado por el gatillo ensangrentado, de quienes se incomodan cuando un pueblo sale de su ignorancia, planteándole solo dos opciones: O sigue analfabeta político y social o se muere… El paro del magisterio tiene en el fondo todas las características de la responsabilidad ciudadana de quien encara con mucha profundidad la esperanza de su pueblo, encarnada en