
1 minute read
4-4-2020 María Rosal Tregua
Tregua es la suspensión temporal de una lucha o una guerra. Necesitamos una tregua, (ya la necesitábamos antes de este virus). La forma enumerativa del poema recuerda la de una letanía o una oración.
Tregua
Advertisement
Tregua para bañar el pensamiento, para lavarlo y perfumarlo, para raspar la rémora de sargazos.
Tregua para quien bebe un vaso de vino y la nostalgia le obtura la garganta. Tregua para quien pide amor y le dan una piedra de sílex.
Para quien se acuesta solo y confunde su olor con el cuerpo de otro.
Tregua a los que han llevado a la plaza pública los diminutos goces del esclavo.
Para quien cabalga una jornada y encuentra una fuente y el agua es morada y sabe a besos.
Para quien tiene un arpa y la toca con los picos brunos de las golondrinas.
Tregua para la llave que intenta penetrar la alacena tapiada. Para quien pide un beso y le dan un estuche de saliva.
Para quien abandona el hogar y sostiene su pie en páramos de viento. Quien enciende una lumbre con los despojos del amor que insiste. Quien ha crecido entre rastrojos y planta un olivo y todavía le asiste la esperanza. Quien tiene la espalda plateada por el silicio amante de una lengua ausente.