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17-5-2020 William Wordsworth Oda a la inmortalidad

El Romanticismo inicia el camino que conduce a la modernidad literaria cuando abandona los aspectos grandilocuentes y retóricos y se hace intimista e introspectivo. Es la función que asume Bécquer en la poesía española, siguiendo la estela del alemán Heine o el inglés Wordsworth, del que hoy hemos elegido el poema del día. Cuando éramos más jóvenes, escuchamos recitar este poema a una maravillosa y jovencísima Natalie Wood en Esplendor en la hierba y ya se nos hizo inmortal; y es que los momentos más intensos de la vida son eternos porque perviven en el recuerdo. El tono coloquial del poema lo hace mucho más verdadero.

Oda a la inmortalidad (fragmento)

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Aunque el resplandor que en otro tiempo fue tan brillante hoy esté por siempre oculto a mis miradas. Aunque mis ojos ya no puedan ver ese puro destello Que en mi juventud me deslumbraba Aunque nada pueda hacer volver la hora del esplendor en la yerba, de la gloria en las flores, no debemos afligirnos porqué la belleza subsiste siempre en el recuerdo… En aquella primera simpatía que habiendo sido una vez, habrá de ser por siempre en los consoladores pensamientos que brotaron del humano sufrimiento, y en la fe que mira a través de la muerte. Gracias al corazón humano, por el cual vivimos, gracias a sus ternuras, a sus alegrías y a sus temores, la flor más humilde al florecer,

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