¿Por qué el conejo de pascua?

Por: Ana Claudia Delfín

Aunque existen diversos mitos sobre el surgimiento y la relación entre el conejo y los huevos de pascua, se coincide en que su significado tiene que ver con la fertilidad, la resurrección y la vida.

Igual que muchas festividades católicas en diversas regiones del mundo, estas se han adaptado para dar forma a las fiestas a lo largo de los años.

Desde el punto de vista sociológico

En Alemania, la Dra. Karin Buerkert, directora general de la Asociación de Estudios Culturales Empíricos, ha realizado una investigación sobre esta festividad católica, en la que señala que esta apareció por primera vez en la misma región donde surgió el árbol de Navidad, en Alsacia, una región cultural histórica del nordeste de Francia, en la frontera con Alemania y Suiza.

Se cree que el conejo de Pascua viene de una tradición alemana del siglo XIII, cuando el cristianismo aún no llegaba a la zona. El conejo estaba asociado con la fertilidad y nueva vida, por lo que simbolizaba el renacer tras el fin del invierno y el comienzo de la primavera.

Según la investigación de la especialista, en el siglo XVI, la festividad tomó un giro burgués y no solo católico, dedicando más tiempo a la educación de los niños y utilizando el conejo de pascua como un elemento mitológico que encajara en el aspecto educativo, como en otras regiones fueron la gallina o el zorro.

Pero el auge del conejo llegó durante el siglo XX con la ayuda de los cuentos infantiles, como el clásico "La escuela de conejitos” de 1924 y el crecimiento de la

Pero, ¿qué tiene que ver un conejo con los huevos de colores?

La Dra. Karin Buerkert asegura que nada, todo se remontan a cuentos que se les contaba a los niños para entretenerlos.

En Estados Unidos y Australia, el “Easter Bunny” esconde sus huevos y esta costumbre ha sido todo un éxito gracias a la industria y a la publicidad que se le ha dado, donde las familias y especialmente los niños se divierten y desarrollan su creatividad pintando y buscando los huevos de colores.

Desde el punto de vista religioso

El origen del conejo de Pascua se remonta a las fiestas anglosajonas precristianas, cuando el conejo era el símbolo de la fertilidad y estaba asociado a la diosa Easter, a quien se le dedicaba el mes de abril y el honor de las fiestas de la primavera entre los pueblos del norte de Europa.

En muchas culturas, los huevos representan vida y fertilidad y tanto en Roma como en Grecia, se regalaban huevos pintados en las fiestas y festivales de primavera. Si hablamos de los huevos como símbolo cristiano, estos huevos tienen el sentido de una vida nueva, tal como significa la palabra Pascua.

La Pascua se conoce como Semana Santa y a lo largo de estos siete días, tienen lugar muchas procesiones en las que se representa la crucifixión de Cristo.