invitación | via jes _ tr avel
Naranjos, violetas, amarillos y celestes iluminan las playas de Niterói, los cerros dispersos de Río, su Cristo y el Pan de Azúcar en una panorámica extraordinaria, desierta y gratuita. Gusto: de Lapa a Laranjeiras En la Avenida Mem de Sá –el epicentro bohemio de Río– nos encontramos con Tom, un sibarita inglés de 38 años que lleva casi dos guiando recorridos gastronómicos a pie por cuatro barrios al norte de Copacabana: Lapa, Glória, Flamengo y Laranjeiras. Comenzamos a saborear Río en Nova Capela, en Lapa, una verdadera institución carioca, tan popular como la caipiriña y que desde 1923 tiene al cabrito asado como su plato insigne. Primera degustación de este restaurante: bolinhos de bacalhau y un energético jugo natural de piña recién exprimida con menta y limón. Luego, el Mercado Conde de Lages, en el mismo barrio, que todos los jueves al mediodía bulle con puestos de verduras, frutas frescas –acerola, graviola o cajú– y tapiocas, unas deliciosas tortillas de yuca granulada rellenas con lo que se le antoje. No se vaya sin haber probado un caldo de cana recién hecho –jugo de caña de azúcar, hielo y limón– en Pastel do Mário, justo antes de llegar a la rua da Glória. Dulce, ácido, helado. Más que perfecto cuando el termómetro llega a los 33 grados a la 1 de la tarde. Con el estómago satisfecho tomamos el metro hasta Largo do Machado, en dirección a Flamengo y Laranjeiras. Tacacá do Norte es un imperdible de la comida amazónica: aquí hay que probar la sopa que le hace honor al nombre del restaurante, hecha de caldo de yuca, camarones y jambu, planta anestésica que produce un explosivo hormigueo en la boca, la lengua y el paladar.
sun sinking behind the otherworldly geography of Rio. Orange, violet, yellow and blue hues light up the beaches of Niterói, the hills of Rio, the statue of Cristo Redentor and Pão de Açúcar in an extraordinary display, pristine and free of charge. Taste: From Lapa to Laranjeiras On Avenida Mem de Sá – Rio’s bohemian epicenter – we meet Tom, a 38-year-old British gourmand who has spent nearly two years leading culinary walking tours of Lapa, Glória, Flamengo and Laranjeiras, four neighborhoods north of Copacabana. We get our first taste of Rio in Lapa at Nova Capela, a restaurant that’s practically an institution and as popular as the caipirinha. Since 1923, cabrito assado (roast lamb) has been the signature dish at Nova Capela, but we start with bolinhos de bacalhau (cod coquettes) and an energizing, fresh pineapple juice with mint and lemon. In the same neighborhood, the Feira da Conde de Lages comes alive every Thursday at noon, with bustling stands selling fresh vegetables and fruits like acerola, graviola and cajú. Hungry? Grab a tapioca, a flatbread made with tapioca starch and stuffed anything from cheese to sweetened condensed milk and grated coconut. Thirsty? Have a caldo de cana – fresh sugarcane juice, ice and lemon – at Pastel do Mário, just before you get to Rua da Glória. Sweet, tart and cool, it’s perfect when the temperature reaches 91°F at one in the afternoon. Refreshed, we take the metro to Largo do Machado, on the way to Flamengo and Laranjeiras. Now it’s time to try some Amazonian cuisine at Tacacá do Norte. Start your meal with the dish for which
La Escadaria Selarón es una parada obligada cerca de los Arcos de Lapa. The Escadaria Selarón is an essential stop near the Arcos da Lapa.
94 in | mayo / may
F-IN_133-Travel_RIO.indd 94
14-04-15 11:06