


ISSN 2322-7761
Saludo del Mes
La importancia de cultivar vínculos sanos
Septiembre, día a día
Santo Rosario
Momentos de Esperanza - Devocional
ISSN 2322-7761
Edición correspondiente al periodo: Septiembre de 2025
Una publicación de:
Organización La Esperanza
Diagonal Santander N°8-93- Cúcuta (Norte de Santander)
Dr. Diego Fernando Montes Gutiérrez Gerente General
Editor: Coordinación de comunicaciones Publicación Mensual
San José de Cúcuta, Septiembre de 2025
Querida familia de fe,
Con la llegada de septiembre se nos presenta una nueva oportunidad para detenernos y reflexionar en el camino que estamos recorriendo con Dios. Cada día que se abre frente a nosotros es un recordatorio de su fidelidad, de su amor inagotable y de la gracia que nos sostiene. Este mes queremos animarte a vivir con propósito, a que cada jornada no sea solo parte de la rutina, sino un espacio para agradecer, confiar y sembrar semillas de esperanza en quienes te rodean.
Que este tiempo sea propicio para renovar tu relación con el Señor y abrir tu corazón a su guía. Permite que la oración, la gratitud y la obediencia sean el centro de tus días, pues en cada pequeño gesto de fe Dios se manifiesta y fortalece tu espíritu. Cada paso dado con Él es un recordatorio de que no estamos solos, sino sostenidos por su mano poderosa.
Que las palabras y acciones que broten de tu vida estén inspiradas en el amor de Cristo. Aprovechemos este mes para crecer en fe, cultivar la paz interior y compartir la esperanza con quienes nos rodean. Que septiembre sea un mes para reafirmar nuestra confianza en que Dios tiene el control de todo, incluso de lo que no entendemos, y que en sus manos siempre estamos seguros.
el amor: una celebración diaria
Las amistades son uno de los pilares más importantes del bienestar psicológico. Diversos estudios muestran que las relaciones de apoyo reducen la ansiedad, fortalecen la resiliencia emocional y contribuyen a una vida más larga y plena. Tener un amigo verdadero significa contar con un espacio seguro para compartir pensamientos, emociones y experiencias, lo que alivia la carga emocional y fomenta la salud mental.
Sin embargo, no se trata solo de tener compañía, sino de cultivar vínculos de calidad. Las amistades auténticas se construyen con confianza, escucha activa y reciprocidad. Desde la psicología, se sabe que las relaciones positivas actúan como un “colchón emocional” que protege en tiempos de dificultad y multiplica la alegría en los momentos de gozo.
Por eso, este mes es un llamado a cuidar y nutrir
nuestras amistades. Practicar la gratitud, expresar afecto y estar presentes en la vida de los demás son acciones sencillas que fortalecen lazos y promueven nuestro propio bienestar. Así como cuidamos la mente y el cuerpo, también estamos invitados a invertir tiempo y energía en las relaciones que nos inspiran, nos sostienen y nos ayudan a crecer.
- Kassandra Sánchez Chinchilla, Psicóloga
San Lucas (4,16-30):
En aquel tiempo, fue Jesús a Nazaret, donde se había criado, entró en la sinagoga, como era su costumbre los sábados, y se puso en pie para hacer la lectura. Le e n t r e g a r o n e l l i b r o d e l p r o f e t a I s a í a s y, desenrollándolo, encontró el pasaje donde estaba escrito: «El Espíritu del Señor está sobre mí, porque él me ha ungido. Me ha enviado para anunciar el Evangelio a los pobres, para anunciar a los cautivos la libertad, y a los ciegos la vista; para dar libertad a los oprimidos, para anunciar el año de gracia del Señor.» Y, enrollando el libro, lo devolvió al que le ayudaba y se sentó. Toda la sinagoga tenía los ojos fijos en él.
Y él se puso a decirles: «Hoy se cumple esta Escritura que acabáis de oír » Y todos le expresaban su aprobación y se admiraban de las palabras de gracia que salían de sus labios.
Y decían: «¿No es éste el hijo de José?»
Y Jesús les dijo: «Sin duda me recitaréis aquel refrán: «Médico, cúrate a ti mismo» y’ «haz también aquí en tu tierra lo que hemos oído que has hecho en Cafarnaún».»
Y añadió: «Os aseguro que ningún profeta es bien mirado en su tierra. Os garantizo que en Israel había muchas viudas en tiempos de Elías, cuando estuvo cerrado el cielo tres años y seis meses, y hubo una gran hambre en todo el país; sin embargo, a ninguna de ellas fue enviado Elías, más que a una viuda de Sarepta, en el territorio de Sidón. Y muchos leprosos habla en Israel en tiempos de] profeta Elíseo; sin embargo, ninguno de ellos fue curado, más que Naamán, el sirio.»
Al oír esto, todos en la sinagoga se pusieron furiosos y, levantándose, lo empujaron fuera del pueblo hasta un barranco del monte en donde se alzaba su pueblo, con intención de despeñarlo Pero Jesús se abrió paso entre ellos y se alejaba.
Palabra del Señor
Septiembre Lunes
Sal 95,1.3.4-5.11-12a.12b-13
R/. El Señor llega a regir la tierra
Cantad al Señor un cántico nuevo, cantad al Señor, toda la tierra. Contad a los pueblos su gloria, sus maravillas a todas las naciones. R/.
Porque es grande el Señor, y muy digno de alabanza, más temible que todos los dioses. Pues los dioses de los gentiles son apariencia, mientras que el Señor ha hecho el cielo. R/.
Alégrese el cielo, goce la tierra, retumbe el mar y cuanto lo llena; vitoreen los campos y cuanto hay en ellos. R/.
Aclamen los árboles del bosque, delante del Señor, que ya llega, ya llega a regir la tierra: regirá el orbe con justicia y los pueblos con fidelidad. R/.
Nuestra reflexión
Hoy da gracias por lo que tienes, aunque parezca pequeño. La gratitud cambia la manera en que ves la vida y abre tus ojos a la bondad de Dios.
Septiembre
Propósito para hoy
Sembrar palabras de vida.
San Lucas (4,31-37):
En aquel tiempo, Jesús bajó a Cafarnaún, ciudad de Galilea, y los sábados enseñaba a la gente. Se quedaban asombrados de su doctrina, porque hablaba con autoridad.
Había en la sinagoga un hombre que tenía un demonio inmundo, y se puso a gritar a voces: «¿Qué quieres de nosotros, Jesús Nazareno? ¿Has venido a acabar con nosotros? Sé quién eres: el Santo de Dios.»
Jesús le intimó: «¡Cierra la boca y sal!»
El demonio tiró al hombre por tierra en medio de la gente, pero salió sin hacerle daño.
Todos comentaban estupefactos: «¿Qué tiene su palabra? Da órdenes con autoridad y poder a los espíritus inmundos, y salen.»
Noticias de él iban llegando a todos los lugares de la comarca.
Palabra del Señor
Salmo
Sal 26,1.4.13-14
R/. Espero gozar de la dicha del Señor en el país de la vida
El Señor es mi luz y mi salvación, ¿a quién temeré?
El Señor es la defensa de mi vida, ¿quién me hará temblar? R/.
Una cosa pido al Señor, eso buscaré: habitar en la casa del Señor por los días de mi vida; gozar de la dulzura del Señor, contemplando su templo. R/.
Espero gozar de la dicha del Señor en el país de la vida.
Espera en el Señor, sé valiente, ten ánimo, espera en el Señor. R/.
Nuestra reflexión
Que lo que digas hoy edifique y anime. Tus palabras pueden convertirse en un bálsamo de esperanza para alguien que lo necesita.
San Lucas (4,38-44):
En aquel tiempo, al salir Jesús de la sinagoga, entró en casa de Simón. La suegra de Simón estaba con fiebre muy alta y le pidieron que hiciera algo por ella. Él, de pie a su lado, increpó a la fiebre, y se le pasó; ella, levantándose en seguida, se puso a servirles. Al ponerse el sol, los que tenían enfermos con el mal que fuera se los llevaban; y él, poniendo las manos sobre cada uno, los iba curando.
De muchos de ellos salían también demonios, que gritaban: «Tú eres el Hijo de Dios.»
Los increpaba y no les dejaba hablar, porque sabían que él era el Mesías. Al hacerse de día, salió a un lugar solitario.
La gente lo andaba buscando; dieron con él e intentaban retenerlo para que no se les fuese.
Pero él les dijo: «También a los otros pueblos tengo que anunciarles el reino de Dios, para eso me han enviado.»
Y predicaba en las sinagogas de Judea.
Palabra del Señor
Septiembre
Sal 51,10.11
R/. Confío en tu misericordia, Señor, por siempre jamás
Pero yo, como verde olivo, en la casa de Dios, confío en la misericordia de Dios por siempre jamás. R/.
Te daré siempre gracias porque has actuado; proclamaré delante de tus fieles: «Tu nombre es bueno.» R/.
Nuestra reflexión
Aunque no entiendas el proceso, cree que Dios dirige tus pasos con amor. Su plan siempre es mayor que tus temores.
Septiembre
Jueves 4
San Lucas (5,1-11):
En aquel tiempo, la gente se agolpaba alrededor de Jesús para oír la palabra de Dios, estando él a orillas del lago de Genesaret. Vio dos barcas que estaban junto a la orilla; los pescadores habían desembarcado y estaban lavando las redes. Subió a una de las barcas, la de Simón, y le pidió que la apartara un poco de tierra. Desde la barca, sentado, enseñaba a la gente.
Cuando acabó de hablar, dijo a Simón: «Rema mar adentro, y echad las redes para pescar.»
Simón contestó: «Maestro, nos hemos pasado la noche bregando y no hemos cogido nada; pero, por tu palabra, echaré las redes.»
Y, puestos a la obra, hicieron una redada de peces tan grande que reventaba la red. Hicieron señas a los socios de la otra barca para que vinieran a echarles una mano. Se acercaron ellos y llenaron las dos barcas, que casi se hundían.
Al ver esto, Simón Pedro se arrojó a los pies de Jesús diciendo: «Apártate de mí, Señor, que soy un pecador.»
Y es que el asombro se había apoderado de él y de los que estaban con él, al ver la redada de peces que habían cogido; y lo mismo les pasaba a Santiago y Juan, hijos de Zebedeo, que eran compañeros de Simón.
Jesús dijo a Simón: «No temas; desde ahora serás pescador de hombres.»
Ellos sacaron las barcas a tierra y, dejándolo todo, lo siguieron.
Palabra del Señor
Propósito
R/. El Señor da a conocer su victoria
El Señor da a conocer su victoria, revela a las naciones su justicia: se acordó de su misericordia y su fidelidad en favor de la casa de Israel. R/.
Los confines de la tierra han contemplado la victoria de nuestro Dios. Aclama al Señor, tierra entera; gritad, vitoread, tocad. R/.
Tocad la cítara para el Señor, suenen los instrumentos: con clarines y al son de trompetas, aclamad al Rey y Señor. R/.
La paciencia no es esperar sin hacer nada, sino aprender a confiar en el tiempo de Dios con serenidad.
San Lucas (5,33-39):
En aquel tiempo, dijeron a Jesús los f a r i s e o s y l o s e s c r i b a s : « L o s discípulos de Juan ayunan a menudo y oran, y los de los fariseos también; en cambio, los tuyos, a comer y a beber.»
Jesús les contestó: «¿Queréis que a y u n e n l o s a m i g o s d e l n o v i o mientras el novio está con ellos?
Llegará el día en que se lo lleven, y entonces ayunarán.»
Y añadió esta parábola: «Nadie recorta una pieza de un manto nuevo para ponérsela a un manto viejo; porque se estropea el nuevo, y la pieza no le pega al viejo. Nadie echa vino nuevo en odres viejos; porque el vino nuevo revienta los odres, se derrama, y los odres se estropean. A vino nuevo, odres nuevos. Nadie que cate vino añejo quiere del nuevo, pues dirá: «Está bueno el añejo.»»
Palabra del Señor
Septiembre
Sal 99,2.3.4.5
R/. Entrad en la presencia del Señor con vítores
Aclama al Señor, tierra entera, servid al Señor con alegría, entrad en su presencia con vítores. R/.
Sabed que el Señor es Dios: que él nos hizo y somos suyos, su pueblo y ovejas de su rebaño.
R/.
Entrad por sus puertas con acción de gracias, por sus atrios con himnos, dándole gracias y bendiciendo su nombre. R/.
«El Señor es bueno, su misericordia es eterna, su fidelidad por todas las edades.»
R/.
Escuchar con atención es una muestra de amor. Hoy dedica un momento para oír de verdad a quienes tienes cerca.
Septiembre
Sábado 6
Evangelio de hoy
San Lucas (6,1-5):
U n s á b a d o , J e s ú s atravesaba un sembrado; sus discípulos arrancaban espigas y, frotándolas con las manos, se comían el grano.
U n o s f a r i s e o s l e s preguntaron: «¿Por qué hacéis en sábado lo que no está permitido?»
Jesús les replicó: «¿No habéis leído lo que hizo David, cuando él y sus hombres sintieron hambre? Entró en la casa de Dios, tomó los panes p r e s e n t a d o s , q u e s ó l o p u e d e n c o m e r l o s sacerdotes, comió él y les dio a sus compañeros.»
Y añadió: «El Hijo del hombre es señor del sábado.»
Palabra del Señor
Propósito para hoy
Servir con alegría.
Salmo
Sal 53,3-4.6.8
R/. Dios es mi auxilio
Oh Dios, sálvame por tu nombre, sal por mi con tu poder. O h D i o s , e s c u c h a m i súplica, atiende a mis palabras. R/.
Pero Dios es mi auxilio, el Señor sostiene mi vida. Te ofreceré un sacrificio voluntario, d a n d o g r a c i a s a t u nombre, que es bueno. R/.
Nuestra reflexión
El servicio sincero refleja el carácter de Cristo. Hazlo con gozo, sabiendo que cada acto de bondad deja huella.
Sal 89 Septiembre
San Lucas (14,25-33):
E n a q u e l t i e m p o , m u c h a g e n t e acompañaba a Jesús; él se volvió y les dijo:
«Si alguno viene a mí y no pospone a su padre y a su madre, a su mujer y a sus hijos, a sus hermanos y a sus hermanas, e incluso a sí mismo, no puede ser discípulo mío
Quien no carga con su cruz y viene en pos de mí, no puede ser discípulo mío.
Así, ¿quién de vosotros, si quiere construir una torre, no se sienta primero a calcular los gastos, a ver si tiene para terminarla? No sea que, si echa los cimientos y no puede acabarla, se pongan a burlarse de él los que miran, diciendo:
“Este hombre empezó a construir y no pudo acabar”.
¿O qué rey, si va a dar la batalla a otro rey, no se sienta primero a deliberar si con diez mil hombres podrá salir al paso del que lo ataca con veinte mil?
Y si no, cuando el otro está todavía lejos, envía legados para pedir condiciones de paz.
Así pues, todo aquel de entre vosotros que no renuncia a todos sus bienes no puede ser discípulo mío».
Palabra del Señor
R/. Señor, tú has sido nuestro refugio de generación en generación.
V/. Tú reduces el hombre a polvo, diciendo: «Retornad, hijos de Adán». Mil años en tu presencia son un ayer que pasó; una vela nocturna. R/.
V/. Si tú los retiras son como un sueño, como hierba que se renueva que florece y se renueva por la mañana, y por la tarde la siegan y se seca. R/.
V/. Enséñanos a calcular nuestros años, para que adquiramos un corazón sensato Vuélvete, Señor, ¿hasta cuándo?
Ten compasión de tus siervo. R/.
V/. Por la mañana sácianos de tu misericordia, y toda nuestra vida será alegría y júbilo. Baje a nosotros la bondad del Señor y haga prósperas las obras de nuestras manos.
Sí, haga prósperas las obras de nuestras manos. R/.
Nuestra reflexión
Dedica tiempo para hablar con Dios. La oración es el puente que renueva tu espíritu y fortalece tu fe.
Septiembre
Evangelio de hoy
San Mateo (1,1-16.18-23):
El nacimiento de Jesucristo fue de esta manera: María, su madre, estaba desposada con José y, antes de vivir juntos, resultó que ella esperaba un hijo por obra del Espíritu Santo. José, su esposo, que era justo y no quería denunciarla, decidió repudiarla en secreto. Pero, apenas había tomado esta resolución, se le apareció en sueños un ángel del Señor que le dijo: «José, hijo de David, no tengas reparo en llevarte a María, tu mujer, porque la criatura que hay en ella viene del Espíritu Santo. Dará a luz un hijo, y tú le pondrás por nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de los pecados.»
To d o e s to s u c e d i ó p a r a q u e s e cumpliese lo que había dicho el Señor por el Profeta: «Mirad: la Virgen concebirá y dará a luz un hijo y le pondrá por nombre Enmanuel, que significa «Dios-con-nosotros».»
Palabra del Señor
Propósito para hoy
Salmo
Sal 12,6ab.6cd
R/. Desbordo de gozo con el Señor
Porque yo confío en tu misericordia: alegra mi corazón con tu auxilio. R/.
Y cantaré al Señor por el bien que me ha hecho. R/.
Dejar las preocupaciones en manos de Dios. Nuestra reflexión
Entrégale hoy tus cargas al Señor. Él cuida de ti mejor de lo que imaginas.
San Lucas (6, 12-19):
Sucedió que por aquellos días se fue él al monte a orar, y se pasó la noche en la oración de Dios. Cuando se hizo de día, llamó a sus discípulos, y eligió doce de entre ellos, a los que llamó también apóstoles.
A Simón, a quien llamó Pedro, y a su hermano Andrés; a Santiago y Juan, a Felipe y Bartolomé, a Mateo y Tomás, a Santiago de Alfeo y Simón, llamado Zelotes; a Judas de Santiago, y a Judas Iscariote, que llegó a ser un traidor. Bajando con ellos se detuvo en un paraje l l a n o ; h a b í a u n a g ra n m u l t i tu d d e discípulos suyos y gran muchedumbre del pueblo, de toda Judea, de Jerusalén y de la región costera de Tiro y Sidón, que habían venido para oírle y ser curados de sus enfermedades. Y los que eran molestados por espíritus inmundos quedaban curados. Toda la gente procuraba tocarle, porque salía de él una fuerza que sanaba a todos.
Palabra del Señor
Sal 144, 1-2. 8-9. 10-11
R/. El Señor es bueno con todos.
Te ensalzaré, Dios mío, mi rey; bendeciré tu nombre por siempre jamás. Día tras día, te bendeciré y alabaré tu nombre por siempre jamás.. R/.
El Señor es clemente y misericordioso, lento a la cólera y rico en piedad; el Señor es bueno con todos, es cariñoso con todas sus criaturas R/.
Que todas tus criaturas te den gracias, Señor, que te bendigan tus fieles; que proclamen la gloria de tu reinado, que hablen de tus hazañasR/.
Nuestra reflexión
Perdonar no borra lo pasado, pero abre la puerta a la paz en tu presente.
Miércoles
Evangelio de hoy
San Lucas (6,20-26):
En aquel tiempo, Jesús, levantando los ojos hacia sus discípulos, les dijo: «Dichosos los pobres, porque vuestro es el reino de Dios. Dichosos los que ahora tenéis hambre, porque quedaréis saciados. Dichosos los que ahora lloráis, porque reiréis. Dichosos vosotros, cuando os odien los hombres, y os excluyan, y os insulten, y proscriban vuestro nombre como infame, por causa del Hijo del hombre. Alegraos ese día y saltad de gozo, porque vuestra recompensa será grande en el cielo. Eso es lo que hacían vuestros padres con los profetas. Pero, ¡ay de vosotros, los ricos!, porque ya tenéis vuestro consuelo. ¡Ay de vosotros, los que ahora estáis saciados!, porque tendréis hambre. ¡Ay de los que ahora reís!, porque haréis duelo y lloraréis. ¡Ay si todo el mundo habla bien de vosotros! Eso es lo que hacían vuestros padres con los falsos profetas.»
Palabra del Señor
Propósito
Vivir con esperanza.
Sal 144,2-3.10-11.12-13ab
R/. El Señor es bueno con todos
Día tras día, te bendeciré y alabaré tu nombre por siempre jamás.
Grande es el Señor, merece toda alabanza, es incalculable su grandeza. R/.
Que todas tus criaturas te den gracias, Señor, que te bendigan tus fieles; que proclamen la gloria de tu reinado, que hablen de tus hazañas. R/.
E x p l i c a n d o t u s h a z a ñ a s a l o s hombres, la gloria y majestad de tu reinado
Tu reinado es un reinado perpetuo, tu gobierno va de edad en edad. R/.
La esperanza en Dios es firme como un ancla. Recuerda que lo que viene será mejor porque Él camina contigo.
San Lucas (6,27-38):
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «A los que me escucháis os digo: Amad a vuestros enemigos, haced el bien a los que os odian, bendecid a los que os maldicen, orad por los que os injurian. Al que te pegue en una mejilla, preséntale la otra; al que te quite la capa, déjale también la túnica. A quien te pide, dale; al que se lleve lo tuyo, no se lo reclames. Tratad a los demás como queréis que ellos os traten. Pues, si amáis sólo a los que os aman, ¿qué mérito tenéis? También los pecadores aman a los que los aman. Y si hacéis bien sólo a los que os hacen bien, ¿qué mérito tenéis? También los pecadores lo hacen. Y si prestáis sólo cuando esperáis cobrar, ¿qué mérito tenéis? También los pecadores prestan a otros pecadores, con intención de cobrárselo. ¡No! Amad a vuestros enemigos, haced el bien y prestad sin esperar nada; tendréis un gran premio y seréis hijos del Altísimo, que es bueno con los malvados y desagradecidos. Sed compasivos como vuestro Padre es compasivo; no juzguéis, y no seréis juzgados; no condenéis, y no seréis condenados; perdonad, y seréis perdonados; dad, y se os dará: os verterán una medida generosa, colmada, remecida, rebosante La medida que uséis, la usarán con vosotros.»
Palabra del Señor
Septiembre
Sal 150
R/. Todo ser que alienta alabe al Señor
Alabad al Señor en su templo, Alabadlo en su fuerte firmamento.
Alabadlo por sus obras magníficas, alabadlo por su inmensa grandeza. R/.
Alabadlo tocando trompetas, alabadlo con arpas y cítaras, alabadlo con tambores y danzas, alabadlo con trompas y flautas. R/.
Alabadlo con platillos sonoros, alabadlo con platillos vibrantes. Todo ser que alienta alabe al Señor. R/.
Incluso un pequeño acto de bondad puede iluminar la vida de alguien más. Sé luz donde otros ven oscuridad.
Septiembre
Viernes 12
Propósito para hoy
Reconocer la belleza de lo sencillo.
San Lucas (6,39-42):
En aquel tiempo, dijo Jesús a los d i s c í p u l o s u n a p a r á b o l a : «¿Acaso puede un ciego guiar a otro ciego? ¿No caerán los dos en el hoyo? Un discípulo no es más que su maestro, si bien, cuando termine su aprendizaje, será como su maestro. ¿Por qué te fijas en la mota que tiene tu hermano en el ojo y no reparas en la viga que llevas en el tuyo? ¿Cómo puedes decirle a tu hermano: «Hermano, déjame que te saque la mota del ojo», sin fijarte en la viga que llevas en el tuyo? ¡Hipócrita! Sácate primero la viga de tu ojo, y entonces verás claro para sacar la mota del ojo de tu hermano.»
Palabra del Señor
Salmo
Sal 15,1-2a.5.7-8.11
R/. Tú, Señor, eres el lote de mi heredad
Protégeme, Dios mío, que me refugio en ti; yo digo al Señor: «Tú eres mi bien.» El Señor es el lote de mi heredad y mi copa; mi suerte está en tu mano. R/.
Bendeciré al Señor, que me aconseja, h a s t a d e n o c h e m e i n s t r u y e internamente. Tengo siempre presente al Señor, con él a mi derecha no vacilaré. R/.
Me enseñarás el sendero de la vida, me saciarás de gozo en tu presencia, de alegría perpetua a tu derecha. R/.
Nuestra reflexión
Dios se revela en los detalles cotidianos. Aprende a disfrutar lo simple, ahí también habita su grandeza.
San Lucas (6,43-49):
En aquel tiempo, decía Jesús a sus discípulos: «No hay árbol sano que dé fruto dañado, ni árbol dañado que dé fruto sano. Cada árbol se conoce por su fruto; porque no se cosechan higos de las zarzas, ni se vendimian racimos de los espinos. El que es bueno, de la bondad que atesora en su corazón saca el bien, y el que es malo, de la maldad saca el mal; porque lo que rebosa del corazón, lo habla la boca. ¿Por qué me llamáis
«Señor, Señor», y no hacéis lo que digo? El que se acerca a mí, escucha mis palabras y las pone por obra, os voy a decir a quién se parece: se parece a uno que edificaba una casa: cavó, ahondó y puso los cimientos sobre roca; vino una crecida, arremetió el río contra aquella casa, y no pudo tambalearla, porque estaba sólidamente construida. El que escucha y no pone por obra se parece a uno que edificó una casa sobre tierra, sin cimiento; arremetió contra ella el río, y en seguida se derrumbó y quedó hecha una gran ruina.»
Palabra del Señor
Septiembre
Sal 112,1-2.3-4.5a.6-7
R/. Bendito sea el nombre del Señor, ahora y por siempre
Alabad, siervos del Señor, alabad el nombre del Señor. Bendito sea el nombre del Señor, ahora y por siempre. R/.
De la salida del sol hasta su ocaso, alabado sea el nombre del Señor. El Señor se eleva sobre todos los pueblos, su gloria sobre los cielos. R/.
¿Quién como el Señor, Dios nuestro, que se abaja para mirar al cielo y a la tierra? Levanta del polvo al desvalido, alza de la basura al pobre. R/.
La vida refleja lo que alimenta tu mente. Elige pensar en lo noble, lo justo y lo verdadero. Día 14
Domingo 14 Septiembre
Evangelio de hoy
San Juan (3,13-17):
En aquel tiempo, dijo Jesús a Nicodemo: «Nadie ha subido al cielo, sino el que bajó del cielo, el Hijo del hombre. Lo mismo que Moisés elevó la serpiente en el desierto, así tiene que ser elevado el Hijo del hombre, para que todo el que cree en él tenga vida eterna.
Tanto amó Dios al mundo que entregó a su Hijo único para que no perezca ninguno de los que creen en él, sino que tengan vida eterna. Porque Dios no mandó su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo se salve por él.»
Palabra del Señor
Propósito para hoy
Perseverar en lo que has empezado.
Salmo
Sal 77,1-2.34-35.36-37.38
R/. No olvidéis las acciones del Señor
Escucha, pueblo mío, mi enseñanza, inclina el oído a las palabras de mi boca: que voy a abrir mi boca a las sentencias, para que broten los enigmas del pasado. R/.
Cuando los hacía morir, lo buscaban, y madrugaban para volverse hacia Dios; se acordaban de que Dios era su roca, el Dios Altísimo su redentor. R/.
Lo adulaban con sus bocas, pero sus lenguas mentían: su corazón no era sincero con él, ni eran fieles a su alianza. R/.
Él, en cambio, sentía lástima, perdonaba la culpa y no los destruía: una y otra vez reprimió su cólera, y no despertaba todo su furor. R/.
Nuestra reflexión
No abandones los sueños que Dios puso en ti. La constancia abre la puerta al fruto abundante.
San Lucas (7,1-10):
En aquel tiempo, cuando terminó Jesús de hablar a la gente, entró en Cafarnaum. Un centurión tenía enfermo, a punto de morir, a un criado, a quien estimaba mucho. Al oír hablar de Jesús, le envió unos ancianos de los judíos, para rogarle que fuera a curar a su criado.
Ellos presentándose a Jesús, le rogaban encarecidamente: «Merece que se lo concedas porque tiene afecto a nuestro pueblo y nos ha construido la sinagoga.»
Jesús se fue con ellos. No estaba lejos de la casa, cuando el centurión le envió a unos amigos a decirle: «Señor, no te molestes; no soy yo quién para que entres bajo mi techo; por eso tampoco me creí digno de venir personalmente. Dilo de palabra, y mi criado quedará sano. Porque yo también vivo bajo disciplina y tengo soldados a mis órdenes, y le digo a uno: «ve», y va; al otro: «ven», y viene; y a mi criado: «haz esto», y lo hace.»
Al oír esto, Jesús se admiró de él, y, volviéndose a la gente que lo seguía, dijo: «Os digo que ni en Israel he encontrado tanta fe.»
Y al volver a casa, los enviados encontraron al siervo sano.
Palabra del Señor
Septiembre
Sal 27
R/. Salva, Señor, a tu pueblo
Escucha, Señor, mi súplica cuando te pido ayuda y levanto las manos hacia tu santuario. R/.
El Señor es mi fuerza y mi escudo, en él confía mi corazón; él me socorrió y mi corazón se alegra y le canta agradecido. R/.
El Señor es la fuerza de su pueblo, el apoyo y la salvación de su Mesías.
Salva, Señor, a tu pueblo y bendícelo porque es tuyo; apaciéntalo y condúcelo para siempre. R/.
Nuestra reflexión
Lo que das de corazón no se pierde; se multiplica en bendición para ti y para otros.
Martes
Propósito para hoy
Vivir en la paz de Dios.
San Mateo (5,38-42):
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Habéis oído que se dijo: «Ojo por ojo, diente por diente». Yo, en cambio, os digo: No hagáis frente al que os agravia. Al contrario, si uno te abofetea en la mejilla derecha, preséntale la otra; al que quiera ponerte pleito para quitarte la túnica, dale también la capa; a quien te requiera para caminar una milla, acompáñale dos; a quien te pide, dale, y al que te pide prestado, no lo rehuyas.»
Palabra del Señor
Sal 97,1.2-3ab.3cd-4
R/. El Señor da a conocer su victoria
Cantad al Señor un cántico nuevo, porque ha hecho maravillas: su diestra le ha dado la victoria, su santo brazo. R/.
El Señor da a conocer su victoria, revela a las naciones su justicia: se acordó de su misericordia y su fidelidad en favor de la casa de Israel. R/.
Los confines de la tierra han contemplado la victoria de nuestro Dios. Aclamad al Señor, tierra entera; gritad, vitoread, tocad. R/.
Nuestra reflexión
La verdadera paz no depende de las circunstancias, sino de confiar en que Él está contigo.
San Juan (14,7-14):
«Si me conocierais a mí, conoceríais también a mi Padre. Ahora ya lo conocéis y lo habéis visto».
Felipe le dice: «Señor, muéstranos al Padre y nos basta».
Jesús le replica:
«Hace tanto que estoy con vosotros, ¿y no me conoces, Felipe? Quien me ha visto a mí ha visto al Padre. ¿Cómo dices tú: “Muéstranos al Padre”? ¿No crees que yo estoy en el Padre, y el Padre en mí? Lo que yo os digo no lo hablo por cuenta propia. El Padre, que permanece en mí, él mismo hace las obras. Creedme: yo estoy en el Padre y el Padre en mí. Si no, creed a las obras. En verdad, en verdad os digo: el que cree en mí, también él hará las obras que yo hago, y aun mayores, porque yo me voy al Padre. Y lo que pidáis en mi nombre, yo lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo. Si me pedís algo en mi nombre, yo lo haré».
Palabra del Señor
Septiembre
Sal 97,1-2ab.2cd.3ab.3cd-4
R/. Los confines de la tierra han contemplado la victoria de nuestro Dios
Cantad al Señor un cántico nuevo, porque ha hecho maravillas. Su diestra le ha dado la victoria, su santo brazo. R/.
El Señor da a conocer su salvación, revela a las naciones su justicia: se acordó de su misericordia y su fidelidad en favor de la casa de Israel. R/.
Los confines de la tierra han contemplado la victoria de nuestro Dios. Aclama al Señor, tierra entera; gritad, vitoread, tocad. R/.
En medio de las dificultades, tu fe se purifica y se hace más firme. Confía, no estás solo.
San Juan (13,31-33a.34-35): Sal 144,8-9.10-11.12-13ab
Cuando salió Judas del cenáculo, dijo Jesús: «Ahora es glorificado el H i j o d e l h o m b r e , y D i o s e s g l o r i fi c a d o e n é l . S i D i o s e s glorificado en él, también Dios lo glorificará en si mismo: pronto lo glorificará. Hijos míos, me queda poco de estar con vosotros. Os doy un mandamiento nuevo: que os améis unos a otros; como yo os he amado, amaos también entre vosotros. La señal por la que c o n o c e r á n t o d o s q u e s o i s discípulos míos será que os amáis unos a otros.»
Palabra de Señor
R/. Bendeciré tu nombre por siempre jamás, Dios mío, mi rey
El Señor es clemente y misericordioso, lento a la cólera y rico en piedad; el Señor es bueno con todos, es cariñoso con todas sus criaturas. R/.
Que todas tus criaturas te den gracias, Señor, que te bendigan tus fieles; que proclamen la gloria de tu reinado, que hablen de tus hazañas. R/.
E x p l i c a n d o t u s h a z a ñ a s a l o s hombres, la gloria y majestad de tu reinado. Tu reinado es un reinado perpetuo, tu gobierno va de edad en edad. R/.
Nuestra reflexión
Amar y cuidar de los tuyos también es una manera de servir a Dios. Hazlo con entrega y ternura.
Sal 113B,1-2.3-4.15-16 Septiembre
San Juan (14,21-26):
EN aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«El que acepta mis mandamientos y los guarda, ese me ama; al que me ama será amado mi Padre, y yo también lo amaré y me manifestaré a él».
Le dijo Judas, no el Iscariote:
«Señor, ¿qué ha sucedido para que te reveles a nosotros y no al mundo?»
Respondió Jesús y le dijo:
«El que me ama guardará mi palabra, y mi Padre lo amará, y vendremos a él y haremos morada en él.
El que no me ama no guardará mis palabras. Y la palabra que estáis oyendo no es mía, sino del Padre que me envió.
Os he hablado de esto ahora que estoy a vuestro lado, pero el Paráclito, el Espíritu Santo, que enviará el Padre en mi nombre, será quien os lo enseñe todo y os vaya recordando todo lo que os he dicho».
Palabra del Señor
R/. No a nosotros, Señor, no a nosotros, sino a tu nombre da la gloria
No a nosotros, Señor, no a nosotros, sino a tu nombre da la gloria, por tu bondad, por tu lealtad. ¿Por qué han de decir las naciones:
«Dónde está su Dios»? R/.
Nuestro Dios está en el cielo, lo que quiere lo hace. Sus ídolos, en cambio, son plata y oro, hechura de manos humanas. R/.
Benditos seáis del Señor, que hizo el cielo y la tierra. El cielo pertenece al Señor, la tierra se la ha dado a los hombres. R/.
Nuestra reflexión
La grandeza del cristiano se mide en su capacidad de servir a otros con sencillez.
San Juan (14,27-31a): Sal 144,10-11.12-13ab.21
EN aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«La paz os dejo, mi paz os doy; no os la doy yo como la da el mundo. Que no turbe vuestro corazón ni se acobarde. Me habéis oído decir: “Me voy y vuelvo a vuestro lado”. Si me amarais, os alegraríais de que vaya al Padre, porque el Padre es más que yo. Os lo he dicho ahora, antes de que suceda, para que cuando suceda creáis. Ya no hablaré mucho con vosotros, pues se acerca el príncipe del mundo; no es que él tenga poder sobre mi, pero es necesario que el mundo comprenda que yo amo al Padre, y que, como el Padre me ha ordenado, así actúo yo».
Palabra del Señor
R/. Que tus fieles, Señor, proclamen la gloria de tu reinado
Que todas tus criaturas te den gracias, Señor, que te bendigan tus fieles. Que proclamen la gloria de tu reinado, que hablen de tus hazañas. R/.
E x p l i c a n d o tus h a za ñ a s a l o s hombres, la gloria y majestad de tu reinado. Tu reinado es un reinado perpetuo, tu gobierno va de edad en edad. R/.
Pronuncie mi boca la alabanza del Señor, todo viviente bendiga su santo nombre por siempre jamás. R/.
Nuestra reflexión
Vivir en la verdad te da libertad. La mentira encadena, pero la luz de Cristo libera.
San Juan (15,1-8):
E N a q u e l t i e m p o, d i j o J e s ú s a s u s discípulos:
«Yo soy la verdadera vid, y mi Padre es el labrador. A todo sarmiento que no da fruto en mí lo arranca, y a todo el que da fruto lo poda, para que dé más fruto.
Vosotros ya estáis limpios por la palabra que os he hablado; permaneced en mí, y yo en vosotros.
Como el sarmiento no puede dar fruto por sí, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí.
Yo soy la vid, vosotros los sarmientos; el que permanece en mí y yo en él, ese da fruto abundante; porque sin mí no podéis hacer nada. Al que no permanece en mí lo tiran fuera, como el sarmiento, y se seca; luego los recogen y los echan al fuego, y arden. Si permanecéis en mí y mis palabras permanecen en vosotros, pedid lo que deseáis, y se realizará.
Con esto recibe gloria mi Padre, con que deis fruto abundante; así seréis discípulos míos».
Palabra del Señor
Sal 121,1-2.4-5 Septiembre
R/. Vamos alegres a la casa del Señor
¡Qué alegría cuando me dijeron:
«Vamos a la casa del Señor»! Ya están pisando nuestro pies tus umbrales, Jerusalén. R/.
Jerusalén está fundada como ciudad bien compacta. Allá suben las tribus, las tribus del Señor. R/.
Según la costumbre de Israel, a celebrar el nombre del Señor; en ella están los tribunales de justicia, en el palacio de David. R/.
Nuestra reflexión
Aunque no lo veas, Dios siempre obra en tu favor. Confía en que todo coopera para tu bien.
Propósito para hoy
San Juan (15,9-11):
EN aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«Como el Padre me ha amado, así os he amado yo; permaneced en mi amor. Si guardáis mis mandamientos, permaneceréis en mi amor; lo mismo
q u e y o h e g u a r d a d o l o s
m a n d a m i e n t o s d e m i P a d r e y permanezco en su amor.
Os he hablado de esto para que mi alegría esté en vosotros, y vuestra alegría llegue a plenitud».
Palabra del Señor
Mantener un corazón agradecido.
Sal 95,1-2a.2b-3.10
R/. Contad las maravillas del Señor a todas las naciones
Cantad al Señor un cántico nuevo, cantad al Señor, toda la tierra; cantad al Señor, bendecid su nombre. R/.
Proclamad día tras día su victoria. Contad a los pueblos su gloria, s u s m a r a v i l l a s a t o d a s l a s naciones. R/.
Decid a los pueblos: «El Señor es rey, él afianzó el orbe, y no se moverá; é l g o b i e r n a a l o s p u e b l o s rectamente». R/.
Nuestra reflexión
La gratitud transforma la manera en que enfrentas la vida. Aun en lo difícil, da gracias.
Ser instrumento de reconciliación.
San Juan (3,31-36):
EL que viene de lo alto está por encima de todos. El que es de la tierra es de la tierra y habla de la tierra. El que viene del cielo está por encima de todos. De lo que ha visto y ha oído da testimonio, y nadie acepta su testimonio. El que acepta su testimonio certifica que Dios es veraz. El que Dios envió habla las palabras de Dios, porque no da el Espíritu con medida. El Padre ama al Hijo y todo lo ha puesto en su mano. El que cree en el Hijo posee la vida eterna; el que no crea al Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios pesa sobre él.
Palabra del Señor
Septiembre
Sal 33,2.9.17-18.19-20
R/. Si el afligido invoca al Señor, él lo escucha
Bendigo al Señor en todo momento, su alabanza está siempre en mi boca.
Gustad y ved qué bueno es el Señor, dichoso el que se acoge a él. R/.
El Señor se enfrenta con los malhechores, para borrar de la tierra su memoria.
Cuando uno grita, el Señor lo escucha y lo libra de sus angustias. R/.
El Señor está cerca de los atribulados, salva a los abatidos. Aunque el justo sufra muchos males, de todos lo libra el Señor. R/.
Nuestra reflexión
Busca unir donde haya división. Cuando llevas paz, llevas el reflejo de Cristo.
Fortalecer tu fe en comunidad.
San Lucas (1,57-66.80):
A Isabel se le cumplió el tiempo del parto y dio a luz un hijo. Se enteraron sus vecinos y parientes de que el Señor le había hecho una gran misericordia, y la felicitaban. A los ocho días fueron a circuncidar al niño, y lo llamaban Zacarías, como a su padre.
La madre intervino diciendo: «¡No! Se va a llamar Juan.»
Le replicaron: «Ninguno de tus parientes se llama así.»
Entonces preguntaban por señas al padre cómo quería que se llamase. Él pidió una tablilla y escribió: «Juan es su nombre.» Todos se quedaron extrañados. Inmediatamente se le soltó la boca y la lengua, y empezó a hablar bendiciendo a Dios.
Los vecinos quedaron sobrecogidos, y corrió la noticia por toda la montaña de Judea. Y todos los que lo oían reflexionaban diciendo: «¿Qué va a ser este niño?» Porque la mano del Señor estaba con él. El niño iba creciendo, y su carácter se afianzaba; vivió en el desierto hasta que se presentó a Israel.
Palabra del Señor
Sal 138,1-3.13-14.15
R/ Te doy gracias, porque me has escogido portentosamente
Señor, tú me sondeas y me conoces; me conoces cuando me siento o me levanto, de lejos penetras mis pensamientos; distingues mi camino y mi descanso, todas mis sendas te son familiares. R/.
Tú has creado mis entrañas, me has tejido en el seno materno. Te doy gracias, porque me has escogido portentosamente, porque son admirables tus obras; conocías hasta el fondo de mi alma. R/.
No desconocías mis huesos, cuando, en lo oculto, me iba formando, y entretejiendo en lo profundo de la tierra. R/.
Caminar acompañado en la fe multiplica las fuerzas y anima el corazón.
Septiembre
con propósito eterno.
San Mateo (7,15-20):
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Cuidado con los falsos profetas; se acercan con piel de oveja, pero por dentro son lobos rapaces. Por sus frutos los conoceréis. A ver, ¿acaso se cosechan uvas de las zarzas o higos de los cardos? Los árboles sanos dan frutos buenos; los árboles dañados dan frutos malos. Un árbol sano no puede dar frutos malos, ni un árbol dañado dar frutos buenos. El árbol que no da fruto bueno se tala y se echa al fuego. Es decir, q u e p o r s u s f r u t o s l o s conoceréis.
Palabra del Señor
Sal 104,1-2.3-4.6-7.8-9
R/. El Señor se acuerda de su alianza eternamente
Dad gracias al Señor, invocad su nombre, dad a conocer sus hazañas a los pueblos. Cantadle al son de instrumentos, hablad de sus maravillas. R/.
Gloriaos de su nombre santo, que se alegren los que buscan al Señor. Recurrid al Señor y a su poder, buscad continuamente su rostro. R/.
¡Estirpe de Abrahán, su siervo; hijos de Jacob, su elegido!
El Señor es nuestro Dios, él gobierna toda la tierra. R/.
Se acuerda de su alianza eternamente, de la palabra dada, por mil generaciones; de la alianza sellada con Abrahán, del juramento hecho a Isaac. R/.
Nuestra reflexión
Recuerda que lo que haces hoy trasciende más allá de esta vida. Hazlo con visión de eternidad.
San Lucas (9,18-22):
Una vez que Jesús estaba orando solo, en presencia de sus discípulos, les preguntó: «¿Quién dice la gente que soy yo?»
Ellos contestaron: «Unos que Juan el Bautista, otros que Elías, otros dicen que ha vuelto a la v i d a u n o d e l o s a n t i g u o s profetas.»
Él les preguntó: «Y vosotros, ¿quién decís que soy yo?»
Pedro tomó la palabra y dijo: «El Mesías de Dios.»
Él les prohibió terminantemente decírselo a nadie.
Y añadió: «El Hijo del hombre tiene que padecer mucho, ser desechado por los ancianos, sumos sacerdotes y escribas, ser ejecutado y resucitar al tercer día.»
Palabra del Señor
Sal 42,1.2.3.4
R/. Espera en Dios, que volverás a alabarlo: «Salud de mi rostro, Dios mío»
Hazme justicia, oh Dios, defiende mi causa contra gente sin piedad, sálvame del hombre traidor y malvado. R/.
Tú eres mi Dios y protector, ¿por qué me rechazas?, ¿por qué voy andando sombrío, hostigado por mi enemigo? R/.
Envía tu luz y tu verdad: que ellas me guíen y me conduzcan hasta tu monte santo, hasta tu morada. R/.
Que yo me acerque al altar de Dios, al Dios de mi alegría; que te dé gracias al son de la citara, Dios, Dios mío. R/.
Nuestra reflexión
Antes de avanzar, consulta al Señor. Solo Él conoce el camino seguro.
Septiembre
San Lucas (9,43b-45):
E n a q u e l t i e m p o , e n t r e l a admiración general por lo que hacia, Jesús dijo a sus discípulos: «Meteos bien esto en la cabeza: al Hijo del hombre lo van a entregar en manos de los hombres.»
Pero ellos no entendían este lenguaje; les resultaba tan oscuro que no cogían el sentido. Y les daba miedo preguntarle sobre el asunto.
Palabra del Señor
Sal 89,3-4.5-6.12-13.14.17
R/. Señor, tú has sido nuestro refugio de generación en generación
Tú reduces el hombre a polvo, diciendo: «Retornad, hijos de Adán.» Mil años en tu presencia son un ayer, que pasó; una vela nocturna. R/.
Los siembras año por año, como hierba que se renueva: que florece y se renueva por la mañana, y por la tarde la siegan y se seca. R/.
Enséñanos a calcular nuestros años, para que adquiramos un corazón sensato
Vuélvete, Señor, ¿hasta cuándo? Ten compasión de tus siervos. R/.
Por la mañana sácianos de tu misericordia, y toda nuestra vida será alegría y júbilo Baje a nosotros la bondad del Señor y haga prósperas las obras de nuestras manos. R/.
Nuestra reflexión
Todo tiene un tiempo. Aprende a disfrutar y confiar en cada etapa que Dios permite.
Afirmar
San Lucas (16,19-31):
En aquel tiempo, dijo Jesús a los fariseos:
«Había un hombre rico que se vestía de púrpura y de lino y banqueteaba cada día.
Y un mendigo llamado Lázaro estaba echado en su portal, cubierto de llagas, y con ganas de saciarse de lo que caía de la mesa del rico.
Y hasta los perros venían y le lamían las llagas. Sucedió que murió el mendigo, y fue llevado por los ángeles al seno de Abrahán. Murió también el rico y fue enterrado Y, estando en el infierno, en medio de los tormentos, levantó los ojos y vio de lejos a Abrahán, y a Lázaro en su seno, y gritando, dijo:
“Padre Abrahán, ten piedad de mí y manda a Lázaro que moje en agua la punta del dedo y me refresque la lengua, porque me torturan estas llamas”.
Pero Abrahán le dijo:
«Hijo, recuerda que recibiste tus bienes en tu vida, y Lázaro, a su vez, males: por eso ahora él es aquí consolado, mientras que tú eres atormentado Y, además, entre nosotros y vosotros se abre un abismo inmenso, para que los que quieran cruzar desde aquí hacia vosotros no puedan hacerlo, ni tampoco pasar de ahí hasta nosotros”.
Él dijo:
“Te ruego, entonces, padre, que le mandes a casa de mi padre, pues tengo cinco hermanos: que les dé testimonio de estas cosas, no sea que también ellos vengan a este lugar de tormento”.
Abrahán le dice:
“Tienen a Moisés y a los profetas: que los escuchen”. Pero él le dijo:
“No, padre Abrahán. Pero si un muerto va a ellos, se arrepentirán”
Abrahán le dijo:
«Si no escuchan a Moisés y a los profetas, no se convencerán ni aunque resucite un muerto”».
Palabra del Señor
R/.Aleluya
V/. El Señor mantiene su fidelidad perpetuamente, hace justicia a los oprimidos, da pan a los hambrientos. El Señor liberta a los cautivos. R/.
V/. El Señor abre los ojos al ciego, Señor endereza a los que ya se doblan, el Señor ama a los justos. El Señor guarda a los peregrinos. R/.
V/. Sustenta al huérfano y a la viuda y trastorna el camino de los malvados.
El Señor reina eternamente, tu Dios, Sión, de edad en edad R/.
No eres lo que el mundo dice de ti; eres lo que Dios declara: amado, valioso y escogido.
Amar con hechos, no solo palabras.
San Juan (1,47-51):
En aquel tiempo, vio Jesús que se acercaba Natanael y dijo de él: «Ahí tenéis a un israelita de verdad, en quien no hay engaño.»
Natanael le contesta: «¿De qué me conoces?»
Jesús le responde: «Antes de que Felipe te llamara, cuando estabas debajo de la higuera, te vi.»
Natanael respondió: «Rabí, tú eres el Hijo de Dios, tú eres el Rey de Israel.»
Jesús le contestó: «¿Por haberte dicho que te vi debajo de la higuera, crees? Has de ver cosas mayores.» Y le añadió: «Yo os aseguro: veréis el cielo abierto y a los ángeles de Dios subir y bajar sobre el Hijo del hombre.»
Palabra del Señor
Sal 137,1-2a.2b-3.4-5.7c-8
R/. Delante de los ángeles tañeré para ti, Señor
Te doy gracias, Señor, de todo corazón; delante de los ángeles tañeré para ti, me postraré hacia tu santuario. R/.
Daré gracias a tu nombre: por tu misericordia y tu lealtad, porque tu promesa supera a tu fama; cuando te invoqué, me escuchaste, acreciste el valor en mi alma. R/.
Que te den gracias, Señor, los reyes de la tierra, al escuchar el oráculo de tu boca; canten los caminos del Señor, porque la gloria del Señor es grande. R/.
El amor se demuestra en acciones concretas, no en discursos vacíos. Sé amor en movimiento.
Martes 30Septiembre
San Lucas (9,51-56):
Cuando se iba cumpliendo el tiempo de ser llevado al cielo, Jesús tomó la decisión de ir a Jerusalén. Y envió mensajeros por delante. De camino, entraron en una aldea de Samaria para prepararle alojamiento. Pero no lo recibieron, porque se dirigía a Jerusalén.
Al ver esto, Santiago y Juan, discípulos suyos, le preguntaron: «Señor, ¿quieres que mandemos bajar fuego del cielo que acabe con ellos?»
Él se volvió y les regañó y dijo: «No sabéis de que espíritu sois. Porque el Hijo del Hombre no ha venido a perder a los hombres, sino a salvarlos.»
Y se marcharon a otra aldea.
Palabra del Señor
Propósito para hoy
Cerrar el mes con esperanza renovada.
Sal 86,1-3.4-5.6-7
R/. Dios está con nosotros
Él la ha cimentado sobre el monte santo; y el Señor prefiere las puertas de Sión a todas las moradas de Jacob.
¡Qué pregón tan glorioso para ti, ciudad de Dios! R/.
«Contaré a Egipto y a Babilonia entre mis fieles; filisteos, tirios y etiópes han nacido allí.»
Se dirá de Sión: «Uno, por uno todos han nacido en ella; el Altísimo en persona la ha fundado.» R/.
El Señor escribirá en el registro de los pueblos:
«Éste ha nacido allí.»
Y cantarán mientras danzan: «Todas mis fuentes están en ti.» R/.
Cada final abre la puerta a un nuevo comienzo. Confía en que lo mejor está por venir en manos de Dios.
1. La encarnación del Hijo de Dios.
2. La visitación de Nuestra Señora a Santa Isabel.
3. El nacimiento del Hijo de Dios
4. La Presentación del Señor Jesús en el templo
5. La Perdida del Niño Jesús y su hallazgo en el templo
1. El Bautismo en el Jordán.
2. La autorrevelación en las bodas de Caná.
3. El anuncio del Reino de Dios invitando a la conversion.
4. La Transfiguración.
5. La Institucion de la Eucaristia, expresión sacramental del misterio pascual
1. La Resurrección del Señor
2. La Ascensión del Señor.
3. La Venida del Espíritu Santo.
4. La Asunción de Nuestra Señora a los Cielos.
5. La Coronación de la Santísima Virgen.
1. Por la señal de la Santa Cruz
2. Padre Nuestro
3. Tres Ave marías
4. Primer Misterio, Padre Nuestro
5. Diez Ave Marías Gloria al Padre
6. Segundo Misterio, Padre Nuestro
7. Diez Ave Marías Gloria al Padre
8. Tercer Misterio, Padre Nuestro
9. Diez Ave Marías Gloria al Padre
10. Cuarto Misterio, Padre Nuestro
11. Diez Ave Marías Gloria al Padre
12. Quinto Misterio Padre Nuestro
13. Diez Ave Marías Gloria al Padre
14. Dios te salve, Reina y Madre