Demencial empresario Entre otras causales, el inicio de la huelga se fincó en que la empresa en todo momento se negó a dotar del equipo básico a los mineros (rescatadores, uniformes, guantes, etc.); obligarlos a reutilizar botas usadas y lavar sus filtros en lugar de proporcionarles unos nuevos para simular que se evitaban así daños respiratorios; arriesgarlos a transitar de uno en uno por los 26 niveles de la mina (a 1,700 metros de profundidad a plomo), cuando el Contrato Colectivo de Trabajo establece que deben ser tres personas, como mínimo, las que deben estar juntas en un área para evitar riesgos durante la extracción de los minerales, y forzar a los trabajadores a realizar otras actividades para las que no estaban capacitados. Todas estas mendicidades de Grupo México vulneraron no sólo la salud de los mineros sino que pusieron en alto riesgo sus vidas, dado que de presentarse algún derrumbe
o explosión como la ocurrida en febrero de 2006 en Pasta de Conchos en que fallecieron 65 mineros, calificada esta tragedia como un homicidio industrial por el compañero Napoleón Gómez Urrutia, nuestro líder máximo.
tiva de Germán Feliciano y Grupo México de dialogar en la búsqueda de soluciones que permitan reactivar el trabajo de extracción de minerales en las minas, obviamente que con las indicadas condiciones de seguridad e higiene.
DAÑOS A LA POBLACIÓN Y ECONOMÍA ZACATECANA
El egoísmo perverso de Germán Feliciano Larrea ha permeado entre los grupos más vulnerables de la sociedad zacatecana. La falta de interés para resolver el conflicto ha afectado la economía de más de 20 comunidades en la región, que comprenden los municipios zacatecanos de Chalchihuites, Saín Alto, Jiménez del Teul, Valparaíso y Sombrerete, así como Súchil y Vicente Guerrero del estado de Durango.
De no haber sido porque se tomó la decisión de interrumpir las actividades laborales mediante los paros, hoy cientos de mineros seguramente ya habrían muerto por la brutal negligencia y mezquindad de Germán Feliciano y su Grupo México que tienen comprada una gran impunidad. La desintegración familiar, la deserción escolar y la emigración, son algunas de las secuelas que las familias mineras tanto de Sombrerete como de Taxco y Cananea, han tenido que enfrentar ante la nega-
Mineros de la Sección 201 demandaron, sin éxito, la presencia de autoridades locales y federales, después de que integrantes de la CROC los agredieron con palos, piedras y armas de fuego para desalojarlos de la mina San Martín.
Resistiendo su huelga, los 185 trabajadores mineros que aún quedan en Sombrerete –no los esquiroles-, además de recibir una ayuda solidaria del Sindicato Minero y Secciones hermanas, realizan obras diversas como la albañilería, la agricultura, trabajos de electricidad y mecánica así como el comercio, con la finalidad de llevar el sustento a su familia y continuar con la legítima defensa de sus derechos laborales. A consecuencia de ello y por la falta de recursos económicos, muchos de los hijos de los trabajadores mineros se han visto en la necesidad de abandonar los estudios. Asimismo, a la comunidad en general se le ha afectado en sus actividaPASE A PÁGINA 14
Muchos de ellos, por complacer a tiranos, por un puñado de monedas, o por cohecho o soborno están traicionando y derramando la sangre de sus hermanos. Emiliano Zapata (1879-1919) Revolucionario mexicano.
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