ESPACIO DE
Cinco obras maestras hechas por mujeres revolucionarias Todas hicieron historia y fueron injustamente tratadas durante décadas. En sus obras rompieron los límites de la arquitectura como la conocemos y cambiaron la historia para siempre. Repasamos las obras maestras y la vida de cinco arquitectas porque sin ellas esta profesión no sería lo que es hoy.
Cini Boeri
Denise Scott Brown
Nacida en 1924 en Milán y fallecida en 2020, Cini Boeri fue una de las pioneras en el siglo XX en hacerse un hueco en el mundo del diseño y la arquitectura y de lograr éxito a nivel internacional. Su estilo, funcional y eficaz no pasó desapercibido para maestros como Gio Ponti o Marco Zanusso y en pocos años supervisó obras del segundo, como el Istituto delle Carline hasta que en 1963 abrió su propio estudio. De allí salieron piezas icónicas del diseño de mobiliario como la butaca 'Ghost' para 'Fiam' o el sofá Strips para Arflex (con el que ganó el Compasso d'oro).
A sus 90 años la estadounidense nacida en Zambia Denise Scott Brown es una leyenda viva de la arquitectura. Esposa durante décadas del arquitecto Robert Venturi, su nombre ha sido injustamente silenciado, especialmente cuando en 1991 Venturi, su socio y marido, recibió el Premio Pritzker. Ella no tuvo ninguna mención. Y eso que llevaban 26 años firmando conjuntamente los edificios y en 1977, junto a Steven Izenour, habían firmado Aprendiendo de Las Vegas, uno de los grandes manifiestos de la arquitectura posmoderna. En 2013 surgió
una iniciativa con miles de firmas para que le fuera concedido el premio de manera retrospectiva. Todavía no ha surtido efecto.
Su obra maestra: Casa Rotonda, Cerdeña (1966-67)
Su obra maestra: Sainsbury Wing en la National Gallery, Londres (1991)
Aunque muchos libros se queden solo con su sobresaliente faceta como diseñadora industrial Boeri firmó proyectos con su propio estudio a la misma altura que sus piezas de mobiliario. Entre ellos destaca su Casa Rotonda en la isla de La Maddalena, al norte de Cerdeña. Construida entre 1966 y 1967 la casa se diseñó para que volumétricamente se una a la fuerte pendiente del terreno creando un equilibrio gracias a su forma circular. El patio central funciona para unir la zona familiar a la de invitados y parte de la construcción se encuentra insertada en la roca. Curvilínea, funcional y que se integra con el espacio, igual que sus muebles.
Hablar de Scott Brown es hablar de arquitectura posmoderna y de atrevimiento y ruptura. Junto a Venturi puso las bases de lo que después continuarían arquitectos como Ricardo Bofill, Kengo Kuma o hasta Frank Gehry y Zaha Hadid. Un estilo artificioso con el ornamento y el ingenio como banderas, en respuesta al formalismo del Estilo Internacional del movimiento moderno. Entre sus numerosas obras cabe destacar la Sainsbury Wing, una ampliación para la National Gallery de Londres concluida en 1991. Alejándose de la espectacularidad de algunos de sus edificios, fue una de sus mejores obras al mimetizarse con el edificio existente y tomar como referencia la imagen de las casas victorianas o los templos antiguos de Egipto. Venturi y Scott Brown añadieron grandes aberturas, cristaleras, ventanas ciegas y columnas metálicas y utilizaron la misma piedra con la que se erige la fachada del edificio del siglo XIX.