Madrecita. Una experiencia infinita

Una experiencia infinita

Eligia RodrĂ­guez Ponce Amaya Marquina de Vidania

2020

RODRÍGUEZ PONCE, Eligia Madrecita : una experiencia infinita / Eligia Rodríguez Ponce, Amaya Marquina de Vidania ; [ilustraciones, Yanira del Pino Padrón Díaz … et al.]. -- Las Palmas de Gran Canaria : Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, Servicio de Publicaciones y Difusión Científica, 2020 120 p. ; 24 cm ISBN 978-84-9042-365-3 1. Marquina de Vidania, Amaya (1990- ) - Diarios 2. Estudiantes, Movilidad de 3.

Síndrome de Asperger 4. Veterinaria – Estudio y enseñanza I. Marquina de Vidania, Amaya, coaut. II. Padrón Díaz, Yanira del Pino, il. III. Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, ed. IV. Título 821.134.2-9

La publicación de este libro ha sido promovida y financiada por el Vicerrectorado de Internacionalización y Cooperación de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria

Idea original de Eligia Rodríguez Ponce © del texto: Eligia Rodríguez Ponce y Amaya Marquina de Vidania © de las ilustraciones Yanira del Pino Padrón Díaz: “Tortuga verde con piezas de puzzle en varios tonos de verde”y “Piezas de Puzzles” Irene Noemí Domínguez Cabrera: “Letra A con piezas de puzles de colores” Eligia González Rodríguez: “Strelitzia y Sol en forma de flor” Virginia Doreste Melián: “Letra E con flores de girasoles” © de la edición: Universidad de Las Palmas de Gran Canaria Servicio de Publicaciones y Difusión Científica https://spdc.ulpgc.es • serpubli@ulpgc.es Primera edición, 2020 ISBN: 978-84-9042-365-3 Depósito Legal: GC 114-2020 Thema: DND, 2ADS, MKJA, 4CT, JNSL, MZ. Impresión: Advantia. Comunicación Gráfica Impreso en España. Printed in Spain Reservados todos los derechos por la legislación española en materia de Propiedad Intelectual. Ni la totalidad ni parte de esta obra puede reproducirse, almacenarse o transmitirse en manera alguna por medio ya sea electrónico, químico, óptico, informático, de grabación o de fotocopia, sin permiso previo, por escrito de la editorial.

" Agradecimientos Creo que dar las gracias a las personas que se han implicado desde el primer momento en este proyecto constituye un acto necesario, pero para el que temo no estar a la altura.

La UNIVERSIDAD con letras mayúsculas, ha apoyado esta maravillosa aventura a través de sus representantes, Rector, Consejo Social, Professor Kietzman y su equipo, Coordinadores de Movilidad, especialmente Dr. Christine Winter, Maritta Ledwock, Johanna Kroll... y el resto de personas que desde el primer día dijeron SÍ a la realización de la movilidad.

Pero, una vez hemos llegado a este momento, quisiera dejar constancia del gran honor que siento cuando compruebo el nivel de amigos que han acompañado mi vida, en muchas de sus etapas. Siempre he presumido de ello y, sobre todo, de ellos pero, por si me quedaba alguna duda, insisten en recordármelo cuando, al pedir su colaboración con este Proyecto del que nada saben, aceptan de inmediato, sin saber bien qué les estoy pidiendo. Y es que, entre los mayores tesoros que un ser humano puede desear tener, la AMISTAD es probablemente uno de los mas importantes.

La idea de publicar este diario en un formato que considero novedoso, viene desde que llegó a mí un libro de poemas inspirados en el burro. Dicho libro pueden consultarlo en la [7]

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web https://www.landscapeswithdonkey.com/ de mi querido amigo y pariente el Dr. José Manuel Marrero Henríquez, profesor de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria. Desde que compartió su proyecto conmigo, se convirtió en un referente me para llevar a cabo la publicación de este diario.

Y a medida que voy desarrollando la idea y contactando con los amigos que quiero me acompañen en este proyecto, empiezo a recibir las muestras de cariño de todos y cada uno de ellos. Muestras con un nivel de implicación TOTAL. Sorprenden sus respuestas cuando, sin llegar siquiera a entender qué es lo que espero de ellos, me dicen que les da igual lo que vaya a hacer, que puedo usar sus nombres o su trabajo, sin más explicaciones. No se puede ser más generoso.

El objetivo de trabajar es conseguir un dinero, necesario para vivir y conseguir alcanzar un estatus. No seré yo quien niegue esta máxima pues, vivir en este mundo tan materialista, sin dinero ni posición es bastante difícil. Pero valores como la lealtad, la honradez, la palabra o la amistad, entre otros, llegan y enriquecen el alma. Y en ese sentido presumo cuando afirmo que soy millonaria.

Pero soy Veterinaria, Profesora Titular en la Facultad de Veterinaria y Amaya acaba de conseguir el Grado en Veterinaria.

Nuestra movilidad Erasmus+ ha sido para ir a la Facultad de Veterinaria de Hannover, en Alemania, bajo la dirección de un Profesor Veterinario. Y, aunque también tengo amigos de otras profesiones, sin ánimo de ser corporativista, pues estoy segura que habrían querido colaborar, mis peticiones para esta idea han ido exclusivamente a aquellos cuyo denominador común es ser Veterinarios y que, además de dedicar su vida profesional a este campo, destacan también por su faceta artística.

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El Dr. Luis Medina Canalejo, hoy Catedrático del área de Nutrición y Bromatología de la Universidad de Córdoba, a quien conocí antes de que comenzara sus estudios en la Facultad, es hoy Vicerrector de Coordinación, Cultura y Comunicación en la Universidad de Córdoba pero es, además, un consagrado cantautor con un amplio curriculum como creador de canción de autor desde haber sido el ganador del Certamen Andaluz de Canción de Autor en 1994, premio que fue fundamental para el pistolezo de salida para una carrera musical llena de éxitos. Es además el responsable del área formativa del Festival de la Guitarra de Córdoba.

A Miguel Ángel Ortega Chavaldas le conocí desde que empezamos juntos la carrera en Córdoba, allá por 1981. Estuvimos juntos en la Facultad cinco años, y hasta que decidió cambiar los estudios de veterinaria por su otra gran pasión, el piano. Acababa de terminar sus estudios de música y tocaba elegir su futuro porfesional y se marchó. Los actuales grados universitarios, en su mayoría de cuatro años (aunque en el caso del Grado en Veterinaria sean cinco), hace que lo sienta casi como un colega pues muchas fueron las horas que pasamos juntos estudiando algunas asignaturas. Hoy día, es Catedrático de Piano en el Conservatorio Superior de Zaragoza, Profesor Pianista Colaborador en la Escuela Superior de Música Reina Sofía de Madrid e imparte cursos de Interpretación Pianística y Música de Cámara por distintos centros superiores. Y, por si esto no fuera suficiente, desde sus inicios, es profesor habitual en la Escuela de Verano de Lucena y Director del Curso Santa María del Paular en Rasacafría (Madrid).

Juan Víctor Blanco, ex-alumno de nuestra Facultad. Todo un orgullo, no sólo como Veterinario, sino en su faceta de fotógrafo. Se ha convertido en un referente entre los amantes de la fotografía de Canarias. Como él mismo dice en su Blog,

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se considera un Apasionado de la fotografía y enamorado del paisaje que me rodea en mis islas Canarias.

Y muy en consonancia con la temática que nos ocupa, destaco sus ganas para tratar de inmortalizar un momento determinado y mostrar su belleza o rareza y... transmitir emociones o sensaciones. Yo no lo podría haber definido mejor.

Yeray Seminario, como le gusta que le conozcan profesionalmente, también fue alumno de nuestra Facultad. Hoy día, veterinario conservacionista de vida silvestre, vive su vida profesional a la vez que disfruta de su gran pasión por las aves, especialmente las rapaces, con las que lleva trabajando desde 1999. Pero desde su vertiente más artística destacan sus trabajos como fotógrafo (otra de sus grandes pasiones como el viajar) de aves, lo que le ha permitido disfrutar de trabajos tan interesantes como The Peregrine Fund; Whitehawk - Birdwatching and Conservation e incluso la observación de aves en El Estrecho (Birding The Strait). Me hizo especial gracia su respuesta, a pesar de no entender lo que le estaba pididendo. Me contestó un simple ¡estaré encantado de ayudar en lo que pueda!

Y qué decir de Virginia Arencibia, nuestra Vicky, con su Carrera Superior de Danza, conseguida a la vez que estudiaba Veterinaria en nuestra Facultad, teniendo que parar algún año por la falta de los cursos superiores de Danza en la isla.

Pero lejos de abandonar, al término de dichos estudios, volvió para culminar su Licenciatura en Veterinaria. Posteriormente, no sin antes trabajar con reptiles en varios paises del mundo, y llegando a recibir interesantes propuestas, aparcó de nuevo la profesion veterinaria por sus estudios de Arte Dramático en Buenos Aires, pais donde reside actualmente y que la tiene conquistada con el séptimo arte, aunque la música y la

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fotografía son herramientas que maneja tambien a niveles profesionales. Todo un lujo contar con ella.

Ninguno de ellos ha pedido algo a cambio, ni tan siquiera una explicación. Usa mi nombre para lo que quieras, usa mi trabajo para lo que necesites... son las principales respuestas de cada uno cuando les pedí su colaboración. A la primera, no lo ha entendido ninguno, pero es que, en una simple cartita por e-mail, donde en menos de un folio solicitaba su colaboración para un proyecto que me disponía a comenzar, no podía recoger la cantidad de cosas que significaba esta colaboración, pero así y todo, les dió igual. ¡No se puede ser más afortunada!

Pero, si grandes son los profesionales Veterinarios que, a buen seguro se apuntarán cuando este proyecto vea la luz, grandes son también los futuros Veterinarios. Tenemos cantera. En este caso, futuras Veterinarias, que han querido participar en la ilustración del diario. Cada una de ellas ha querido reflejar con algún dibujo lo que yo no me atrevía a hacer.

Ellas, captaron mis ideas y, cada una en su estilo, han contribuido a llenar de ilusión este pequeño librito con una imágenes totalmente sorprendentes.

Ser docente consiste en llegar al estudiante y si de algo estoy más que satisfecha es de haber llegado a algunos de ellos, haciéndolos partícipes de algo tan grande con un simple gesto. Y todavía me lo agaradecen a mí...

Gracias Virginia Doreste Melian, hija de un gran compañero y amigo, que desgraciadamente no se encuentra entre nosotros pero que, con total seguridad, donde quiera que esté, sabe la maravilla de hija que ha dejado entre nosotros. De tal palo, tal astilla, estoy muy orgullosa de tenerla cerca.

Irene Domínguez Cabrera, mi Irene, que lleva varios años trabajando en nuestro laboratorio, cuando el tiempo se lo

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permite y quien tiene una capacidad para el diseño increible.

Ya lo ha demostrado en la elaboración de algun poster para los congresos de Parasitología. Son muchas las horas que pasamos en el laboratorio hablando de la vida y del futuro mientras trabajamos en otras cositas.

Eligia González Rodríguez, como las demás, una hija más, académicamente hablando claro, pues la genética es la genética. Pero los que me conocen, creo que saben que soy igual de madre con unos que con otros, al menos en la Facultad. Ella tampoco quería quedarse fuera del proyecto, le tocaba de cerca saber que, como madre, abandonaba el nido para ayudar a volar a otra hija y también ha querido aportar sus dibujos.

Yanira Padrón Díaz, quien, a pesar de haber tenido menos trato conmigo, por ser de cursos inferiores a las demás, conoció esta historia y se ofreció, sin conocer apenas el proyecto, a colaborar pues es ilustradora.

El orgullo que siento como profesora me anima a enfrentarme a todo con tal de sacar este Proyecto adelante, cueste lo que cueste. Es tal el grado de implicación de todos los que se han acercado para conocer lo que hemos hecho, que vale la pena luchar y hacer lo necesario para poder llevarlo a todos los rincones, espero, de Europa, pero empezaremos por nuestro Archipiélago ¿les parece?

Para terminar, no quiero dejar a mi familia, especialmente mi marido, Óscar y mis dos hijos. Sin ellos, este proyecto no habría visto la luz. Cuando no tenía respuesta a mis solicitudes, siempre me animaron a continuar. Va por ellos.

Pero a TODOS, incluidos cada uno de Ustedes. Gracias por llegar a aquí. Sin duda es todo un acto de AMOR.

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" Presentación Para quien no me conozca, y de manera muy general, quisiera dar alguna información acerca de quién y cómo soy antes de comenzar a escribir esta publicación junto a la profesora, la Doctora Eligia Rodríguez Ponce, quien ha sido mi tutora estos años como universitaria. Pero, en primer lugar, considero que es muy importante que sepan algo de mí antes de comenzar esta experiencia de Movilidad para que pueda ser entendida por todos en su totalidad una vez se adentren en este diario.

En la actualidad, tan sólo me queda el Trabajo de Fin de Grado para conseguir el Grado en Veterinaria. Y esto es precisamente lo que me encuentro haciendo en la Tierärztliche Hochschule Hannover (Ti-Ho) en Alemania.

Soy Amaya Marquina de Vidania, tengo 27 años, he nacido y vivido en Las Palmas de Gran Canaria y tengo el Síndrome de Asperger, un trastorno del espectro autista cuyas características principales, para todo aquel que quiera tener alguna idea acerca de este síndrome y usando como fuente a la Wikipedia que, aunque no siempre es la

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fuente más fiable y considero necesario consultar otras, como persona afectada y muy bien informada, puedo decir que da una explicación muy precisa y veraz. Por ello, y sabiendo que muchos preferirán tener esta información a mano, copiaré textualmente esas principales características: − Interacción social y afectividad:

•

Egocentrismo inusual, con muy poca preocupación por los demás y falta la conciencia del punto de vista de los otros.

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Falta de empatía y poca sensibilidad hacia los demás (personalmente, no lo definiría así, pues la manifestamos, pero de forma atípica y tal vez por eso no se aprecia).

• •

No sabe demostrar cuándo le interesa una persona.

Relaciones sociales muy limitadas, en los niños o adolescentes torpe interacción con sus compañeros.

•

Ingenuidad y credulidad.

− Intereses restringidos y repetitivos:

•

Intereses e inquietudes muy acotados o circunscritos que persigue obsesivamente pero en soledad, como por ejemplo, la recolección de datos o cifras obsesivamente sin ningún valor práctico o social (En esto último también discrepo, muchos de los grandes genios de la ciencia lo fueron, y consiguieron muchos avances para el desarrollo de la sociedad).

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El individuo con Síndrome de Asperger (SA) se convierte en un excéntrico cuya vida se caracteriza por una rutina rígida, sistemática y cuyo mundo se podría reducir, por ejemplo, a los horarios de los trenes o la colección de sellos.

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− Lenguaje y discurso:

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Lenguaje formal, pomposo o pedante, con dificultades para captar un significado que no sea literal.

•

Problemas de comunicación con los demás, poca preocupación por la respuesta del otro.

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Falta de comunicación no verbal, impasividad, evitar mirar a los ojos del interlocutor.

•

Hablar con una voz extraña, monótona o de volumen no usual.

•

Falta de conocimiento de los límites y de las normas sociales.

− Actos ritualizados:

•

Rutinas y rituales muy poco usuales que no soportan el menor cambio pues esto genera inmediatamente una ansiedad insoportable.

•

Desarrollo motor: a menudo se observa un retraso en el desarrollo motor y torpeza en la coordinación motriz.

Son muchas las dificultades por las que he tenido que pasar, tanto a nivel familiar como escolar, aunque no creo que eso proceda ahora mismo. Lo que si voy a hacer es describir los antecedentes de cuando llegué a la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria.

Corría septiembre del 2008 cuando Eligia Rodríguez Ponce, Vicedecana de Estudiantes y Relaciones Internacionales de la Facultad de Veterinaria de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria en aquel momento, aceptó ser mi tutora. Se convirtió en la persona de confianza durante mi andadura universitaria como estudiante con discapacidad. Hoy sé que ese mismo año tuvo la idea de conseguir que hiciera una mo-

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vilidad dentro del Programa Erasmus. Pero esta idea, esos primeros años, habría sido una locura, pues no era capaz de relacionarme con mis compañeros, ni desenvolverme con soltura en mi propia Facultad. Hacer los trámites burocráticos era para mí un suplicio, orientarme en lugares nuevos siempre me ha supuesto un problema en cuanto a la tensión que me genera y pedir ayuda y conseguir expresarme, un mundo… ¿Cómo iba a poder hacerlo en un país y una gente que no conozco de nada? Sinceramente, habría sido inalcanzable por aquel entonces. Además, soy muy casera. Me gusta mucho mi casa y hacer vida en ella y con mi familia. No soporto estar demasiado tiempo separada de los míos, y eso tampoco ayuda.

Con el paso de los años fui logrando romper esas barreras y hablar abiertamente sobre mí, cosa que, por lo mal que lo había pasado fruto del bullying sufrido en mi etapa pre-universitaria, me negaba a hacer. Sorprendentemente, mi estancia en la Universidad me cambió. Me sentí mucho mejor con los compañeros e, incluso, estos últimos años de la carrera, he logrado hacer un grupo de amigas con las que, alguna vez, he salido. Me da mucha pena haberlo hecho en el último año, pues no he podido disfrutarlo como me habría gustado.

No se trata de no querer socializar, simplemente, me aterroriza llevarme el “chasco” al intentarlo continuamente y fallar. Ha sido una coraza protectora. Por un lado me decía “quiero intentarlo”, pero otra parte de mí no quería volver a sentir la angustia de no poder encajar con alguien. Cuando lo conseguí de verdad, supuso una gran alegría y una subida de autoestima muy grande.

Hace tres años, la idea que Eligia tuvo desde el inicio, la compartió conmigo. Y gracias a esas amigas que me dieron la oportunidad de socializar, así como al resto de mis compañeros, pensé que podría dar un paso adelante y que, posible[16]

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mente, podría llegar a realizar una movilidad Erasmus. Esas sensaciones hicieron que me sintiera capaz de afrontar el reto. Sola no habría podido hacerlo, eso sin duda, pero tener a Eligia es tener la seguridad de poder preguntar cuando surjan dudas sobre cómo debo o no proceder en algún momento, es poder tener a alguien con quien hablar pero, y sobre todo, es tener a alguien que me ayude a ser más autónoma con esta discapacidad invisible llamada Síndrome de Asperger.

Sin más, queridos amigos, deseo que disfrutéis mucho de esta experiencia. Ojalá contribuya y os aporte algo, a nivel personal o profesional pero, y sobre todo, os ayude a conocer un poquito más a aquellos que estén afectados por este síndrome, sean familiares o no, conociendo esta experiencia.

Quienesquiera que seáis… ¡¡¡BIENVENIDOS!!!

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