Trastornos infiltrativos e intersticiales pulmonares
Figura 2. El mosaico de perfusión consiste en áreas de diferente tamaño, bilaterales y con diferente atenuación radiológica. Son zonas patológicas hipodensas (hipoperfusión por vasoconstricción hipoxémica) que alternan con regiones «normales» de mayor densidad radiológica (por hiperaflujo sanguíneo por derivación).
disminución de los volúmenes pulmonares, es decir una restricción pulmonar. 2. CLASIFICACIÓN DE LA BRONQUIOLITIS
En la última década se han popularizado tres clasificaciones de la bronquiolitis basadas en: la diversidad etiológica clínica, el tipo de lesión histológica y la alteración radiológica (especialmente en la TACAR)6. La clasificación clínica se basa en las diferentes etiologías o situaciones clínicas en las que se han demostrado signos evidentes de bronquiolitis en la biopsia pulmonar o en la TACAR de tórax. Las principales formas clínicas de bronquiolitis son los síndromes postinhalación, las infecciones y la inducida por fármacos y las idiopáticas que aparecen en el contexto de otra patología basal previamente conocida (Tabla I). La utilidad de esta clasificación clínica es facilitar la sospecha del diagnóstico y considerar la posibilidad de una bronquiolitis cuando, con determinados antecedentes o en el curso de otras patologías, aparecen síntomas y signos respiratorios compatibles. En algunos casos la bron984
quiolitis puede constituir un hallazgo sorpresa en la TACAR del paciente que es estudiado por ejemplo por una colitis ulcerosa, una artritis reumatoide o una polimiositis; en otros, es un antecedente clínico el que permite sospechar la entidad, como por ejemplo es el caso de los fármacos (p. ej., amiodarona, penicilamina, sirólimus, etc.), o de la inhalación de tóxicos, vapores o gases (NO2, humos de plásticos, edulcorante de palomitas, etc.)6. Esta clasificación no diferencia la bronquiolitis, enfermedad de pequeñas vías aéreas, de la que acompaña a patología pulmonar colindante neumonía organizativa (antes BOOP). La clasificación histológica ha sido la más utilizada en los últimos años, pero también es la que ha creado una mayor confusión. En esta clasificación se considera: a) el tipo de respuesta: inflamatoria epitelial (bronquiolitis celular), pseudotumoral (bronquiolitis obliterativa) o fibrosis (bronquiolitis constrictiva), o hiperplasia linfática (bronquiolitis folicular); b) los segmentos de las vías periféricas afectos (bronquiolitis respiratoria, panbronquiolitis difusa), y c) si la afectación interesa al peribronquiolo (fibrosis peribronquiolar) o el parénquima pulmonar (neumonía organizativa).