Fig. 2. Vibración manual ejercida bilateralmente en las bases pulmonares en posición de sedestación incorporado.
Vibración manual •
Colocación del paciente: no existe una posición determinada para la aplicación de las vibraciones. Sin embargo, una posición óptima será aquella que, respetando la fisiología respiratoria, favorezca el efecto de las vibraciones. Por ejemplo, colocar al paciente en decúbito lateral sobre el pulmón a tratar puede aumentar la densidad de este pulmón y producir una mayor transmisión de la onda oscilatoria13.
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Colocación de las manos: colocar las manos perpendiculares sobre la zona del tórax a tratar (Fig. 2).
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Aplicación de la técnica: aplicar la vibración mediante una contracción tetánica (sin movimiento articular) de la musculatura de los brazos que, además, irá acompañada de una compresión del tórax durante toda la fase espiratoria. Es importante recordar que durante toda la espiración se deberá mantener el ángulo perpendicular a la pared torácica para asegurar la correcta trasmisión de la onda. --
Siempre que sea posible, el paciente deberá realizar una espiración lenta con la boca abierta para facilitar la salida del aire. Esto producirá una reducción de las resistencias espiratorias y ayudará al fisioterapeuta a seguir la evolución y efecto de las vibraciones mediante el sonido trasmitido a la boca. 57