¿Te va mejor teniendo niño? Las mujeres que vamos descubriendo nuestro cuerpo y sexualidad desde la mirada feminista, vemos los momentos de nuestras vidas de manera diferente, con otros lentes como comúnmente se dice. Pero sobre todo nos enfrentamos a la vida de manera crítica, abriéndose un mundo lleno de contradicciones y cambios, como dice Alda Faccio cuando el género suena cambios trae. Cuando entendí que ésta perspectiva era una herramienta de vida, empecé por cuestionarme muchas cosas alrededor del ser mujer y los roles impuestos por la sociedad, incluso uno de los más importantes, el ser madre. Me preguntaba si quería o no serlo, y qué tipo de madre iba ser, sin embargo debo confesar que de alguna manera estaba permanente la ilusión de dar vida y pensaba sobre todo en tener una niña. Sé que las mujeres en esta sociedad sufrimos de discriminación y exclusión, pero por experiencia, sé también que podemos ser gestoras de cambio, porque nuestra condición social no tiene que ver solamente con una situación biológica, sino cultural. Hoy me encuentro con 5 meses de embarazo y puedo resumir que ha sido una experiencia maravillosa, que conlleva un sutil dolor, obviamente soportable, pero con momentos muy hermosos. Estos meses principalmente me ha permitido escuchar decenas de historias de mujeres embarazadas deseosas de contar su vivencia, lo cual ha sido para mí interesante conocer; el momento personal en el cual se encontraban, los dolores, las complicaciones, así como los buenos y constantes momentos que una vive durante los meses de gestación. He reafirmado la complejidad del ser mujer y la perfección de la naturaleza, además de las injusticias sociales basadas en la construcción social de nuestra sexualidad. Indudablemente la influencia social se expresa en el embarazo, en esta etapa llena de mitos y realidades que forman parte de la herencia cultural de cada mujer; comentarios, consejos y opiniones plasmadas de una educación patriarcal surgen en todo momento y esa parte me ha llamado poderosamente la atención. Analizar lo vivido desde estas herramientas de análisis feminista me pareció interesante. Comparto algunas ideas desde esta nueva mirada que revoluciona de fondo ésta forma de ver la vida y mi muy particular punto de vista. En primer lugar, hay frases que recordaré por siempre, por la cantidad de veces que me la dijeron y por lo que está detrás de ella, “El embarazo es una enfermedad”, y “No hay que ser chambona”; ambas tienen una connotación peyorativa hacia una mujer en gestación. Te están diciendo que no te podés quejar porque es algo natural que todas pasan, hay http://centrosanacionqanil.blogspot.com/