ORACIÓN DE LA MAÑANA Viernes 14
CELIA Y MARCELO MIRABAN PARA VER QUÉ NECESITABA LA GENTE…
Del evangelio de San Mateo (9,36 ) Al ver Jesús a las gentes, se compadecía de ellas, porque estaban agotadas y abandonadas, como ovejas que no tienen pastor Canción… Con el corazón en la mano
Como Jesús, Celia y Marcelo estaban siempre muy atentos para ver qué necesidades tenían aquellos que tenían cerca: las familias, las personas de la parroquia, los profesores del colegio, los alumnos, las monjas de la comunidad, los enfermos del barrio, las niñas y los niños que andaban sin colegio, las personas mayores que estaban desatendidas, etc
Ellos entendieron que la vida es tiempo de amar, y lo hicieron luchando por la verdad. Nosotros, que formamos familia con ellos y con todos los “Spínolas” del mundo, queremos ser así. ¡Es hora de decidirnos!: hay muchas personas que esperan nuestra ayuda, muchos gritos que llaman nuestra atención. Que nuestra forma de vivir sea decirles a los demás, con la mano en el
Alguien que con su historia quiso construir, alguien que su mirada supo transformar: fieles siempre a su Voz dieron paso a la Vida atrapados por su Amor el corazón en la mano. ¡LEVÁNTATE Y MÍRALES ES EL TIEMPO DE AMAR EL CORAZÓN MOVIÓ SUS VIDAS, LUCHARON POR LA VERDAD DECÍDETE, NO TARDES MÁS ÉL CONTIGO VA ESTAR HAY MUCHOS HOMBRES QUE TE ESPERAN Y MUCHOS GRITOS QUE HOY ANHELAN EL CORAZÓN SIEMPRE EN LA MANO SEA NUESTRA FORMA DE VIVIR. Buscando tus raíces las encontrarás acogiendo su herencia nuestro árbol crecerá dos vidas multiplicadas en miles de rostros muchos colores que hoy son fruto de su siembra
ORACIÓN Jesús, tú sabes cómo te querían Celia y Marcelo. Y tú sabes también cómo querían a los demás. De ti aprendieron a mirar a su alrededor para que nada les pasara desapercibido. De ti, Jesús, aprendieron a mirar viendo las necesidades de aquellos que tenían cerca. Nosotros que somos su familia, queremos ser como tú y como ellos. Danos ojos abiertos para ver las necesidades que tenemos a nuestro alrededor. Danos un corazón dispuesto a enterarse de lo que pasa. Que María, tu madre y madre nuestra, a quien tanto querían Celia y Marcelo, nos ayude a ser así. Amén.