Durante los dos días (en el verano de 1999) que Inma Rodríguez, ayudada por Pompeyo, daban los últimos retoques a los decorados del corto de animación Un matrimonio bien avenido en el plató que La Mirada (productora del corto) tenía en Tegueste, Tenerife,hice estos dibujos a lápiz.
Rubén Garrido