Losa nervada o reticulada Esta losa se utilizaba mucho en los años 70, pero aún es muy efectiva. Ésta permite claros más largos gracias a su nervadura de estructuras reticuladas. Se coloca en el perímetro las cadenas de cerramiento, y posteriormente el armado de las nervaduras intermedias. Después de tener ya la retícula de armado, se colocan los casetones que son cubos de unicel, los cuales se retirarán después del proceso de fraguado de la losa. En la parte superior se coloca la malla electrosoldada, se cimbra el área perimetral y posteriormente se procede al colado, permitiendo así el amarre unificado de cadena de cerramiento, nervaduras y firme. Este tipo de entrepiso maneja peraltes muy elevados, por lo que es importante considerarlo en las alturas de muros, para poder pasar las instalaciones sin afectar las alturas de los espacios.
Trabe “t” y “TT“ Este sistema permite cubrir grandes claros con elementos estructurales prefabricados y pretensados para losas y cubiertas de cargas medias y altas, hasta de 18 metros de largo. Con peraltes variados entre los 60 cms y los 90 cms. sirve para puentes, naves industriales y estacionamientos. La ventaja es que es más económico que los sistemas tradicionales, y se utiliza la malla electrosoldada como el refuerzo del acero.
Spancrete, Precast concrete Este tipo de sistema es de los más rápidos, ya que nada se hace en obra. Basado en los planos y dimensiones de los claros se fabrican las placas que vienen huecas para aligerarlas. Para su colocación se ocupan grúas, y cualquier ajuste a menor tamaño de las piezas, solo ocupan cortarse con un buffer. Este sistema es ideal, cuando quiere uno ahorrar tiempo, mano de obra y acero. Para el sellado entre pieza y pieza solo se requiere de concreto para estas.
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Por mencionar algunas, estos son de las más comúnmente se utilizan actualmente, pero como en el diseño, la construcción siempre tiene nuevos avances y mezcla de sistemas para facilitar procesos de obra, reducir costos, o resolver nuevos detalles de diseño.