Revista Membrillo #02

REVISTA MEMBRILLO

@revistamembrillo

ME M B R IL L O

La vida como viene

#02

sumario Revista Membrillo

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3 tapa: Escher 4 cuento: No sé 5 Pienso que pienso / Alquien dice ser yo 6 lámpara 7 poesía: tempestades / La Espera 8 poesía 9 receta: Pepas

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arte de tapa

Escher Continuidad

La tapa de esta nueva edición es una obra de arte excéntrica y algo complicada de interpretar, pero también es algo sublime y maravillosa.

Escher nos muestra tres tipos de gravedades diferentes, representadas en escaleras que aparentemente van desde un sótano hacia un exterior. Lo que cabe destacar es que cada gravedad se conecta con las otras de alguna manera. Hasta acá todo bien, muy linda la explicación. Pero ahora vamos a lo invisible de esta obra, lo que Escher realmente quiso representar y dar a entender según lo que interpreta quién les habla.

Pensemos en esto ¿y si cada gravedad representa una parte de nuestro ser?

La primera es ese “yo" mundano que vive en lo terrenal, ese que habla,

que toca, que escucha y que escribe. El que usa sus ojos para ver pero solamente como uno de sus 5 sentidos.

La segunda es el “yo" conciencia, el que para ver tiene que cerrar sus ojos y para sentir tiene que adentrarse en sí mismo, sumergirse en ese mar de preguntas e inquietudes; y buscar la verdad de sí mismo.

Y la tercera pero no poco importante es ese “yo" alma, la esencia más pura de todo el conjunto. Esa fuerza mayor que da vida, que empuja constantemente y no se cansa de vivir, sin importar en que situación te encuentres.

Cada una de estas tres gravedades está conectada con alguna de las otras y todas nacen de un sótano, que es lo más profundo de uno mismo.

Todas parecen ir en dirección contraria, pero

siempre desembocan en el exterior y arman ese conjunto al que llamamos “yo". Con pensamientos, sentimientos y acciones que suben y bajan, algunas en la misma escalera o a veces todas separadas, pero dentro de un mismo lugar.

Si te ponés a pensar de esta manera, contemplando esta gran obra, te vas a encontrar en muchos aspectos y te vas a sorprender totalmente.

3

cuento

No sé Caminando escucha una voz que le dice: ¿A dónde vas?

Por ahí... ¿A qué?

Voy a ver que hago hoy. ¿Para qué?

La verdad que no sé, pero me aburro. ¿A la playa?

Puede ser. ¿Y si te vienen a buscar?

Uh! Cierto! Mejor me quedo en mi casa. Mmm no sé, puede ser, voy y vengo. Total es acá nomás. ¿Vos decís?

Sí, ya fue.

Y se va. ¿Y ahora que hacés?

Nada, tomando un helado. ¿Qué sabor es?

No sé, pero está rico. ¿Y ahora?

Me voy a dormir.

Sí, ya fue.

4

Pienso que pienso Por momentos pienso estar solo, en otros momentos pienso estar acompañado. Pienso curarme, pienso jugar al futbol. Pienso que si como de más engordaré. Pienso en irme, pienso en quedarme, pienso que soy invisible. Pienso que no soy respetado.

Pienso que exijo mucho, pienso que están enojados conmigo, pienso que me equivoco, pienso que me va mal. ¿Soy un pensamiento o soy el que piensa?

Alguien dice ser yo Si me detengo a observar mi vida actual y la forma de ser que tengo, cómo me manejo o hacia donde me dirijo. ¿Realmente soy yo?

Mi alma dice que no, que realmente yo siento, pienso y actúo humanamente. Que tengo emociones y sentimientos. Que ese que hoy está queriendo manejarme a su antojo es un impostor, que se creó a sí mismo a base de experiencias; buenas o malas pero experiencias en fin.

El supuesto impostor dice que no escuche a esa alma vieja. Que me quede en la comodidad de la frialdad y que sobreviva a base de no sentir y de adaptarme a un mundo materialista, dónde pensar igual que todos es la moda y dónde vivir plenamente se reduce a encajar con la sociedad y tratar en vano de agradar a ésta misma.

Entonces ¿Quién quiero ser hoy? ¿La verdadera esencia de mi alma o la personalidad que el mundo me pide que siga construyendo? Es una pelea muy dura la que se está disputando el poder sobre mí y sería algo extremista pensar que uno de los dos tenga ventaja. Quiera o no es una batalla constante y bastante pareja.

Pienso que todo ser humano libra esta batalla alguna vez en su vida. ¿Vos te pusiste a reflexionar si realmente sos vos o si alguien dice ser vos? Yo creo que en esta etapa de mi vida alguien dice ser yo.

5

¿qué ves?

Me identifico mucho con lo que veo. Porque estoy desenchufado y en la oscuridad. Necesito ayuda para que me conecten, para poder verme y dar luz. Para que otra persona que esté apagada pueda ver mi luz y que pueda ser luz para otras personas que estén apagadas.

Siete letras.

Mil conceptos, múltiples propuestas, geografías sin fronteras.

Ilumina su faz, noches de tinieblas.

Amaneceres de paz.

Alumbra mi oscuridad, pero no me habla, lo veo enérgico pero a la vez inmóvil. Está muy bien amoldado a su origen y se adapta al que lo dirige, separa muy bien en su lugar habitual y tiene una cabecera que resplandece su lugar.

Veo algo apagado como me encuentro yo en mi situación y que necesito que me ayuden a que pueda ser conectado para que la luz se encienda y pueda ver a mi alrededor lo que hace tiempo no veo, que sería vivir la vida sanamente.

Mi vida era como una lámpara apagada, porque mi vida era toda oscura. Pero por suerte salí a la luz de mi vida, feliz por la luz de cristo a traves de una lámpara vi mi vida porque fue una oscuridad y por la luz salí adelante.

Un objeto que causa paz.

Eso que me alumbra lo que me da.

Artefacto de decoración, belleza estática, ayuda para la visión, cable a tierra, acompañante terapéutico, energía, contacto + y -, brillo y tranquilidad.

Veo la luz de mi camino, siempre estuve apagado.

Yo veo una copa de bronce parada en un solo lugar como yo estaba afuera. Pero que hoy me alumbra el camino para poder continuar.

6

poesía

Tempestades Navegando soles, caminando mares.

Cerrando puertas, desechando llaves.

Comprendí que hay veces que de nada vale mantener recuerdos, revisar placares.

Que algunas heridas se curan con sales.

La espera

La bendita espera de la que todos quieren huir.

De la que se espera lo inesperable.

Esa espera que se torna una agonía.

Una espera asfixiante y agotadora, que cuando se pregunta, qué esperamos, solo se inundan los ojos de lágrimas, se hacen temblorosas voces y se entristecen las almas. ¿Por qué duele? Si solo es esperar, claro solo se espera ese cambio, para bien o para mal.

Se espera poder comenzar.

Se espera poder vivir, con fe de bienestar.

Afrontando todos los miedos que se deban superar.

Una espera con un camino tan rígido de transitar.

Espera tan compleja que se vive con tanta ambigüedad.

La parte dolorosa y la otra con esperanza de vista a la libertad.

7

poesía De lo más profundo de tu abismo no puede ser más dura mi agonía.

No logré ser los brazos que esperabas, no logré darle a tus días alegría.

De lo más profundo de tu angustia, me duele hijo.

No haber podido mostrarte que el sol brilla.

Solo nubes grises y miseria, solo penas, tristezas y partidas.

Más te juro que ¡Tanto te daría!

Pero soy solo esto que corre por mis venas.

Quisiera darte abrigo entre mis brazos.

Arroparte como un niño y cantarte hasta que duermas.

Más la vida lo dispone y hoy sos hombre.

Hoy te toca decidir por tu camino.

Pido a Dios que logres llenar esos vacíos, rodeado de quien elijas y te quiera.

Toca fondo, levántate y camina.

Que el camino te hace fuerte. ¡Vale la pena!

Perdóname por no ser lo que esperabas y por no saber como sacarte de la tristeza.

No pude ver que había tanto llanto acumulado.

Encandilada con verte crecer, yo me sentía plena.

Te vi maduro, capaz, inteligente.

Perdóname hijo, no pude con tu pena.

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receta

pepas Ingredientes para la masa: 100 gr. manteca fría 150 gr. azúcar 2 yemas y 1/2 clara 250 gr. harina común ralladura de 1 limón Relleno Dulce de membrillo 200 grs Pasos a seguir para la elaboración: 1. Poner en un bowl a manteca picadita junto al azúcar, pisar bien y agregar las yemas con la media clara, mezclamos bien hasta cremar, agregamos la ralladura de limón y la harina. Formamos un bollo con las manos tratando de trabajarla lo menos posible. Vamos tomando porciones pequeñas de masa y formando bolitas del tamaño de una nuez. Las acomodamos un poco separadas entre si sobre una placa previamente enmantecada y enharinada.

2. Luego con el dedo pulgar hacemos un poco de presión en el centro de la bolita de manera que quede un hoyito. colocamos un poco de dulce en cada uno de los hoyitos.

3. Luego llevamos a cocinar nuestras pepitas en horno precalentado a 190º por aproximadamente 8 a 10 minutos, no deben quedar muy doraditas.

4. Guarda las pepitas (si es que quedan algunas ja,ja,ja) dentro de frascos o envases herméticos.

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