en ay cosas que no fueron para él. Por ejemplo, quiso jugar al fútbol profesional y no pudo; pero la vida lo condujo a otros estadios. Iván Zavala Napout confesó, sin vueltas, que la pelota nunca fue su amiga. “Pensé ser veterinario y tampoco se dio. Es que me gustan mucho los animales, y también el medioambiente. Soy partidario de cuidar el planeta”, empezó contando el artista. Sin embargo, las dotes futbolísticas en Iván fueron suplidas por un talento musical prodigioso. Para sostenerlo, basta mencionar que, con 26 años, Zavala roba corazones con cada canción que interpreta, hecho que lo ubica entre los referentes del espectáculo nacional. En un notable crecimiento profesional, el pasado 23 de octubre, el cantante del género pop lanzó Ida y vuelta, su segundo álbum discográfico. ¿Por qué ese título? ¿Guarda algún secreto? En una charla con Level, Iván se mostró íntimo y dio detalles de su nuevo material, como también de su vida personal.
Fiel amiga Seis años atrás, Zavala descubría el rumbo que debía tomar. Con la guitarra al hombro, el joven optó por encaminarse en el ambiente musical de modo profesional. Su primer disco fue Imposible, trabajo que recuerda como su despegue. Pero la historia de Iván sobre los escenarios data de sus épocas de estudiante, pues su debut frente al público se produjo cuando estaba en su último año de colegio, durante un intercolegial de la
canción, que ganó y sirvió de detonante para que incursionara como cantante. Su formación musical se inició a los ocho años, practicando el piano con diferentes profesores, mientras que el vínculo con la guitarra surgió de manera autodidacta. Es más, Iván compuso sus primeras canciones a los 11 años. “Cuando fui creciendo, desarrollé aún más mi oído de músico, pero estoy pensando en ir a estudiar música afuera; algo pendiente en mi vida”, compartió.
¿Por qué cantante? La verdad es que prefiero decir que soy músico, ya que algún día, si es que decido dejar de cantar, voy a seguir trabajando en la industria. Hay demasiadas cosas detrás de este mundo: producción, grabación, mezclas, composición, se puede hacer de todo. Es increíble crear sonidos, melodías, y escribir letras.
¿Qué tiene en especial Ida y vuelta respecto con tu primer disco? Un crecimiento profesional. A lo largo de estos tres años, fui pasando por distintas situaciones en mi vida, y tuve la oportunidad de aprender y crecer, tanto en lo musical como en lo personal. Me di el tiempo de buscar un sonido nuevo, escribir con otras personas y abrir un poco mi cabeza.
¿En qué te inspiraste para componer las canciones del álbum? En las situaciones que vivimos todas las personas, en cosas con las que nos identificamos; la permanente lucha por seguir avanzando, pese a los obstáculos
que nos pone la vida; las situaciones sentimentales, que a veces, nos dejan lindos recuerdos, y otras veces, heridas; y los momentos de alegría con los amigos. Me gusta que las personas se identifiquen con mi música.
¿En qué periodo resolviste introducirte en el ambiente del espectáculo? Desde muy temprana edad me gustó todo lo vinculado con el arte, la música y la actuación; tuve afinidad con la música, empecé a tomar clases de piano, y desde entonces experimentaba con los sonidos, melodías, probaba escribir de a poco. Pero creo que la decisión de dedicarme a esto plenamente se presentó cuando grabé Imposible, en el 2011.
¿Cómo se fue dando? Mi primo Dani Da Rosa escuchó mis composiciones y supo que había potencial. Me insistió en grabar algunos demos y mandarlos afuera para grabar con un productor extranjero. Por suerte, seguí sus consejos. Si él no hacía hincapié en mi talento, hoy no tengo idea dónde estaría parado.
¿Un artista con el que te gustaría compartir escenario? Me fascinaría poder estar en el mismo escenario que John Mayer.
Pies sobre la tierra Aunque Iván tiene claro que con su música se hizo un lugar en la escena
LEVEL I LUJO 2017 I 207