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PARA LEERTE MEJOR Los Derechos de Autor en un mundo globalizado
Los Derechos de Autor en un mundo globalizado
Por Lidia Alejandra Soria Vásconez
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Corporación de Estudios y Publicaciones
El dinamismo ha sido el vector que ha direccionado a la sociedad desde que esta dio sus primeros pasos; por tal razón, la naturaleza del hombre lo estimuló a crear e innovar en razón de sus necesidades; así, poco a poco, fue construyendo y plasmando nuevas ideas, que otorgaban complejidad y al mismo tiempo ayuda a su vida diaria.
Aristóteles, filósofo griego, definió al hombre como un zoon politikon, un animal político por naturaleza, es decir que el ser humano como individuo esencialmente social, necesita de lineamientos, directrices para vivir de una mejor manera en la sociedad, para desarrollar tanto su dimensión intelectual como física; sin embargo, el vivir en sociedad no significa estar libre de vicios; por el contrario, la sociedad está colmada de inmoralidades, desenfrenos, corrupción y excesos, que generan grandes imperfecciones, pero también tiene aspectos positivos que en conjunto se consolidan en armonía.
Los seres humanos son como granos de arena, idénticos entre ellos pero, a la vez, maravillosamente distintos; cada uno tiene, ideas, sentimientos, y expresiones diferentes e individuales, que cuando se plasman en aportes intelectuales, involucra un gran esfuerzo creativo, en los ámbitos científico, literario, artístico, concretado en obras escritas (libros, folletos, y cualquier tipo de obra formulada en letras, signos o marcas convencionales), en conferencias, sermones, alocuciones, composiciones musicales, obras dramáticas y dramático musicales, pantomimas, obras coreográficas, cinematográficas, de bellas artes, de arquitectura, fotográficas, de arte aplicado, programas de ordenador, entre otras . Por ello es de vital importancia proteger dichas creaciones con el uso de distintas formas legales que amparan los derechos de autor, ya sean estos morales o patrimoniales.
Cabe indicar que, previa la explicación de las normativas existentes para proteger los derechos de autor, es menester conocer brevemente en qué consisten los derechos morales y patrimoniales. Los primeros, se caracterizan por ser inalienables,
El objeto de regular toda aquella creación, innovación, producción, descubrimiento que cada día germina en la sociedad, es el de inculcar en las personas el respeto de aquel sacrificio constante de un tercero; es, también, incentivar la contribución de nuevas ideas que complementen lo que existe,
inembargables, imprescriptibles e irrenunciables; con ello el creador tendrá los siguientes derechos: derecho a la divulgación de la obra, derecho de paternidad de la obra, derecho de integridad de la obra, derecho de arrepentimiento, y derecho de acceso a la obra, mientras que los derechos patrimoniales, son aquellos que permiten al autor la reproducción, distribución y la comunicación pública.
En Ecuador, la Institución encargada de velar por el respeto de los derechos de autor es el Instituto Ecuatoriano de Propiedad Intelectual (IEPI), a quien le corresponde el registro y regulación de las distintas obras. Por consiguiente, los Derechos de Autor buscan otorgar al creador la protección de la obra, así como la facultad de autorizar o prohibir el uso de la misma de manera ilegal. En tanto que la Constitución de la República del Ecuador, la Ley de Propiedad Intelectual, adjunto a los distintos Tratados y Convenios Internacionales, en especial la Legislación Comunitaria, constituyen las principales fuentes de derecho positivo.
El objeto de regular toda aquella creación, innovación, producción, descubrimiento que cada día germina en la sociedad, es el de inculcar en las personas el respeto al sacrificio constante de un tercero; es también incentivar, la contribución de nuevas ideas que
Entrevista
No hay nada mejor que inducir a la cultura al mundo del conocimiento, a través de la lectura, de la investigación, la educación, y especialmente alentando a niños, jóvenes, adultos, y ancianos a convivir en armonía, en donde se considerará y tendrá éxito aquel honesto y creativo trabajador, estudiante, científico, literario, o artista.
complementen lo que existe, y generar una cultura en la que el plagio, la copia, la piratería, no sean los responsables de aniquilar las obras intelectuales de calidad, aquellas que sí impulsan la evolución de la sociedad y no el retroceso. Si bien es cierto, vivimos en un mundo globalizado, en donde la tecnología se encuentra en pleno auge, y existen nuevas formas de atentar contra los derechos de autor, la contra réplica está en la nutrición intelectual positiva que cada día se le otorgue a la sociedad, y no hay nada mejor que inducir a la misma al mundo del conocimiento,
a través de la lectura, de la investigación, la educación, y especialmente alentando a niños, jóvenes, adultos, y ancianos a convivir en armonía, en donde se considerará y tendrá éxito aquel honesto y creativo trabajador, estudiante, científico, literario, o artista.
Mientras en la sociedad existan mentes creativas, estas se encargarán de redimir a la humanidad. La imaginación será la que motive a la disciplina del hombre, que no necesariamente será rectilínea sino inspirada en las grandes creaciones.