Revista Exceso edicion nº 72 febrero 1995

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SeMréon la mayor dedicación.

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Cocina internacional y delicias del mar.

Ljna toalla caliente para refrescarse, buena música y hasta disfrutar de un, estreno cinematográfico, son cosas que usted no 'encontrará ni en el mejor Restaurant del mundo.

Cuando en Primera Clase de United usted cene nuestras especialidades del mar, tal vez lo único que extrañe sea el sonido de las olas.

Primera Clase Internacional de United Airlines. /Y La excelencia en cada detalle.

Vuele en los cielos amistosos de United.

La Línea Aérea que está uniendo al mundo.

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D IRLINES

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Corre que te come el Rex Aunque usted no lo crea, un par de años antes que Steven Spielberg imaginara Jurassic Park, incluso antes que Michael Crichton terminara el libro, Víctor y Oscar Chang maquinaban en la hacienda de Mosko Blanck cómo construir, tal cual, un parque como el de la película, no con clones sino con robots. Ahora, y por fin, los hermanos Chang suscribieron el acuerdo con el Museo de Ciencias Naturales para hacer un jardín de dinosaurios a escala 1-1 y donde la estrella en vías de desarrollo será el maluquísimo Tyranosaurius Rex —en español, el Rey Tirano de los dinosaurios carnívoros.

Doctores en electrónica y mecánica, respectivamente, los Chang montaron un equipo de cerca de 20 espontáneos y contratados, modelistas y escultores que a full time empezaron a armar no sólo el prototipo del Ty Rex sino, además, los originales del velocirraptor y el tricerraptor, e incluso insectos gigantes de cuyos movimientos —porque se van a moverse hizo cargo el también doctor en electrónica Jesús Silva, otro apasionado de la robótica. Todos gerenciados por el primo Chang, Antonio —quien, dicho sea de paso, se negó a responder adónde se meten los chinos en Caracas cuando no están en los restaurantes.

Seguros de que los robots van a enseñorearse del mundo algún día y que incluso, así como el hombre escribió la historia de los dinosaurios, las máquinas escribirán la del hombre, estos filomonstruos pretenden con su proyecto atraer al gran público a la robótica, entrando el mes de marzo. "Si dominas la robótica, puedes fabricar robots que construyan todo, incluso, otros robots. Sucede, sin embargo, que las leyes fundamentales de la robótica no han sido todavía descubiertas. Nadie entiende aún cómo hacer mover a un Arturito". "No se puede", dice Oscar. "No se ha podido", dice Jesús. Sobre todo Oscar, quien cree en dios y en Darwin también, alucina con la idea de que un día todos, sin método, sólo con las reglas básicas, piensen e imaginen cómo hacer y perfeccionar robots inteligentes. "Noventa por ciento de esa búsqueda es imaginación pura".

—Susana Soto

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EXCESO FEBRERO 1995

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Mr. Ribs, el Rancho Tejano de Las Mercedes,

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comienza a servir desde las 11 del mediodía.

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La cocina ofrece el tradicional menú Tex-Mex.

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Las originales e inigualables costillitas a la barbecue, exquisito pollo monterrey, el special y suculento sandwich de pollo, la hamburguesa Mr. Ribs de 225 gramos de pura carne y las fajitas mejicanas de carne y pollo, las mejores en Caracas.

No pienses más... ponte las botas... y ven a Mr. Ribs.

Av. Valle Arriba, Qta. Linda, Las Mercedes, Caracas, Telf: 9933125 y 913093

Escritorio Jurídico

Parada-Quintero, García Newman y Asociados Carlos Parada-Quintero Ma:ali García de Parada

"El deber y el derecho son hermanos, su madre común es la libertad, nacen el mismo día, y crecen, se desarrollan y mueren al mismo tiempo" Victor Cousin

Avenida Francisco de Miranda. Edificio Roraima, piso 3, oficina 3-E. Campo Alegre. Telefax: 953.3615 Apartado 51912. Caracas 1050-A Venezuela

1 Abandono aborigen El 2000 en puertas y todavía los escendientes de aquellos primigenios habitantes del llamado Nuevo Mundo sufren vejámenes y violaciones a sus derechos.

Como sus ancestros del Mato Grosso, surcan en sus curiaras las arterias de los caños y ríos, y dejan al paso vestigios de su cultura y su sangre entre manglares del desmesurado estuario orinoquense.

Los aborígenes de hoy, sin embargo, avanzan más —en términos físicos—, pues recorren a pie miles de kilómetros hasta embarcarse en el autobús que los conducirá a Caracas, principal Ilegadero. Entonces, aturdidos en la gran metrópolis, buscan un lugar que les recuerde su hábitat natural que dejaron atrás.

Es así cómo el parque Los Caobos se había convertido de manera intermitente en hogar provisional de las etnias Warao, Yucpa y Panare que, despojadas de sus tierras, procuran sobrevivir entre lo verde afanadas en la producción artesanal —a quien pueda interesar. Bajo los árboles construyeron pequeñas chozas y ardientes fogones con pedazos de madera o de cartón y con bolsas plásticas. Descalzos, taciturnos, los niños enmochilados, tejían, tallaban la madera, moldeaban la palma moriche y el bejuco, que transforman en sombreros, cestas y adornos. Después hacían equilibrio en la contaminada isla de la avenida Bolívar, desde donde partían a mercadear sus productos.

Alguien lo notó y tomó una decisión: depositarlos en el Nuevo Circo, donde se han mal instalado con sus breves aperos apenas cargados de historias de otros mundos. Mera rotación. Que ellos también asumen: ahora también recorren el Paseo Colón de Puerto La Cruz, o poblaciones de Monagas, Sucre, Zulia y Bolívar, donde ejercen la mendicidad.

No es necesario consultar enjundiosamente a los coordinadores del programa social Indio (Integrismo Nacional del Indio Organizado) para descubrir que intentan abrirse paso en las peores condiciones: muchos son analfabetos, no reciben asistencia médica ni becas alimentarias. España hizo mutis hace más de un siglo, pero ellos no deben haberlo notado.

—Liliana González

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EL GUSTO LAICO E INOLVIDABLE DE UN VISEDO DE EXCEPCION

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Solamente diecisiete viñedos en Champagne tienen derecho a la denominación Grand Cru. En la región de la Montaña (le Reims se encuentran los más prestigiosos.

Entre ellos ocupa un. lugar destacado M Al

ahora en Venezuela

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Es sólo un hasta luego Francia acaba de leer la última —por ahora— edición de Actuel. Fueron muchas sus irreverencias, sus ganas de reinventar el periodismo, de innovar en un campo donde todo parecía haberse hecho ya. Eso les llevó a empujar las fronteras de la realidad hasta transgredirla sin remilgos, a asumir compromisos y a arriesgarse hasta la profecía. La caída del muro de Berlín fue una de sus tantas predicciones, sólo se pelaron en el año.

El gobierno chino se la juró después de la masacre de Tiananmen, cuando Jean Franlois Bizot, su editor, publicó un número apócrifo del Diario del Pueblo donde los disidentes chinos contaban en sus ideogramas lo que sucedió en realidad.

No contento con eso, lo distribuyó anexándole un listado de 5.000 números de faxes en China para que los lectores lo hicieran volver al lugar del crimen.

Exceso estuvo siempre aliada con Actuel, y la acompañó en la aventura de echar a la mar La diosa de la democracia, un barco en el cual se instalaría una estación de radio para transmitir información hacia Pekín desde aguas internacionales. El proyecto se abortaría más tarde por razones de Estado —de Estados Unidos— y el barco no podría salir de Taiwán.

Un olfato maravilloso para todo lo que fuera underground y una sensibilidad especial para detectar nuevas tendencias, sumado a lo ambicioso de sus reportajes, en los cuales no se escatimaban recursos ni imaginación, por lo que no era extraño que enviara corresponsales hasta los más remotos rincones del planeta, le valdrían a Actuel un porcentaje altísimo de la población lectora joven de Francia. Como oyentes a Nova, la estación de radio igualmente pionera en la promoción de nuevas bandas y música, gemela hertziana que en su sustitución lanza una nueva revista, Nova Magazine, autodefinida como "la guía implacable para el parisiense exigente".

Actuel se despide, aunque sólo sea un hasta luego, pues se va para volver.

A bientót!

—Francesca Cordido

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Coullsses d'ACTUEL. Ceux qui l'ent fatt.

Femmes d'Influence.

Cent truca á labre avant l'an 2000.

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Arte de magia El futuro está de moda y, sobre todo, tenerlo claro, con tiempo. Entre un pasa-

—Faitha Nahmens

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do idílico que no volverá y un presente en crisis que no termina de irse, no queda otra que picar adelante. Así, yerbateros, hipnotistas, mentalistas, astrólogos, numerólogos, lectores de cartas, manos y café, piramidólogos y sabiondos de los poderes de las piedras, los aromas y las verdades asomadas en el iris del ojo hacen su agosto todos los meses imaginando el puente por donde se sale de ésta. El inicio de 1995 coincidió con la superventa de las runas vikingas, el tarot y el I Ching —certeza de libreros—, tendencia que venía en alza desde la pasada feria del libro, donde el stand dedicado a las publicaciones metafísicas atraía más curiosos que el cómodo salón en el que José Ignacio Cabrujas lanzaba una perorata simpaticona, en tanto la zona rental —cerquita— se llenaba hasta los topes con el Esotera, sucursal itinerante del más allá aquí en la tierra: un tiquet valía para hacer regresiones y viajes astrales, y descubrir qué revelaba la planta del pie. No cabe duda. De que vuelan vuelan será el lema en el año del chancho en curso.

Ha de ser por eso que el arte —causa y efecto—, para no quedarse atrás, cierra filas en la causa de la verdad intuitiva y del sexto sentido. Luego de visitar un rosacruz, invocar a los marcianos o hacerse imponer las manos en las chakras, conviene cerrar la gira en el Museo de Bellas Artes. Bella y seria como la magia blanca, una exposición con objetos de creación influidos por el misticismo y la suspicacia. Hasta el 26 de febrero, los interesados en ver —para creer— pueden apreciar cómo los consagrados también se dejaron seducir por el asunto del más allá en las narices. Dibujos, estampas, fotografías alegóricas o cartas de tarot, muchos de siglos atrás, con créditos de Matgena, Durat o Dalí, trocando a Oscar Wilde por algún rey de sota, porque mucho ha que los naipes dejaron de ser de uso exclusivo de los nobles. Si en el 1000 aC los chinos leían su fortuna con dados de papel y dos mil años después los árabes jugaban con naipes pintados a mano, ahora, vísperas del 2000, lo último es decir open mind.

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1 Agua la boca Las tibias aguas de Los Roques guardan aún la resaca que dejó sobre sus ondulaciones el papá de los veleros del mundo, hijo dilecto de la firma francesa Club Méditerranée, experta creadora de asideros paradisiacos con fecha de vencimiento y boleto de regreso a casa. Club Med Croisiére, a bordo del velero Club Med 1, ofrece un singular paseo de tres semanas a lo largo del cristalino Caribe, aventura prometida durante la presentación a la prensa de las chicas que competirán en el Miss Med Internacional.

Todas venezolanas —previsible—, sonrieron a bordo de esta silenciosa y gigante embarcación a vela.

A unos los ojos se les van tras aquel trigal de piernas; a otros, tras el yate de 87 metros de largo y sus siete velas amolladas sobre el cuerpo de la embarcación, izadas en un mágico espectáculo de minutos, que en complicidad con las estrellas, tienden una emboscada a la memoria. No sin sagacidad, la corta es-. tadía de este transatlántico en aguas patrias fue aprovechada por la organización para hacer un alto en los preparativos del evento electoral —la reina de la belleza de los siete mares—, a llevarse a cabo en la sede del Club de las Bahamas, para dar a conocer —vía medios de comunicación— las bondades de la proa del Med 1 sobre la cual deambulaban los agraciados pasos de las doce participantes, dignas representantes de la belleza venezolana. La noche tan linda, desfilarán sus proporcionadas medidas en traje de gala y luego serán corona; das, en dos mínimas piezas de bañador, con el tridente que identifica en el mundo entero al Méditerranée.

Para hacerse de un paquete vacacional en las Bahamas y jugar a Osmel Sousa, basta ponerse en contacto con la oficina del club en Caracas —285.0616, 284.7032 y 285.0417, sus teléfonos—, donde le informarán del sol, las dos piscinas, el fitness, las posibilidades de practicar esquí náutico, buceo y windsurf, de la boutique, el room service las 24 horas, el casino, la peluquería, los dos restaurantes y la discoteca que verá cuando sea jurado y testigo del triunfo de una miss venezolana.

—Carla Tofano

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Glamour a domicilio

Pez en mano Perdida en el tremedal bullicioso de la avenida Francisco Solano, en un local pequeñito está la Pescadería Oracio City —así sin hache—, a donde acuden no sólo las amas de casa del sector, sino también las matronas de la comunidad japonesa de la capital y los encargados de hacer la compra para las cocinas de algunos de los más afamados restaurantes nipones de la ciudad.

Tienen más de 30 años ofreciendo un variado surtido de pescado nacional de la más alta calidad, limpios y preparados para hacer más fácil la tarea a aquellos que se aventuran en los intrincados caminos de prepa-

rar sashimi o sushi. Esquina con calle Santos Erminy, Las Delicias de Sabana Grande.

Telf. 71.5004.

Otro japonés abierto Con varios meses en el mercado local repartiendo sushi a diestra y siniestra, el dueño de Sushi Delivery, Alberto Leggio, se aventura ahora con un restaurante de la misma inspiración.

Con inauguración pautada para finales de febrero o principios de marzo, el Wasabi Terrace —en la Torre Oxal, nivel mezzanina—, ofrecerá un amplio menú de delicias niponas en un local al aire libre. Para información precisa sobre la apertura es preciso comunicarse con Sushi Delivery, entre 11:00 am

Avenida los Congos, Quinta La Esmeralda. Urbanización Campo Migre • Cnacao Telelonos 951 0017 • 951 0864 • 951 4036 - 95 , 6084 • 951 2094 • Fax 951 4992

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Con aroma de café

Jose Luis Morales, discíDos nuevos locales para pulo de José Rafael hacer las delicias de los Lovera y Mercedes aficionados al café, esa Rivera, se dedica desde infusión cuyas múltiples hace ya bastante tiempo variables criollas a ofrecer una alternativa —guayoyo, negro corto a aquellos que prefieren o largo cerrero, marrón comer en casa. Su especlaro, marrón oscuro, cialidad son las cocinas con leche, tetero y tantas criolla y caribeña, pero otras— podrían enloqueigualmente se maneja cer a cualquiera. Adolfo con destreza y sazón Artiles y Luis José Silva, para ofrecer menús de dos apasionados del arodistinta catadura —no mático grano, se aventuen vano trabajó al lado raron en esta empresa de Pierre Blanchard. La idea de este joven chef es que lleva por nombre Expresso Americano brindar a la gente la po—cuya casa matriz está sibilidad de llevar el resen Seattle—, con la intaurante a la intimidad tención de ofrecer a tandel hogar, trasladándose con todos sus bártulos y . tos otros amantes del sabroso bebedizo no sólo enseres, cosa que da mucho cachet. Miembro del un amplio menú de brebajes preparados con Centro de Estudios Gastronómicos, su servi- granos seleccionados, cio de catering es comsino también informapleto y si le avisa con ción acerca de éstos y sotiempo —cinco días míbre una tradición que es nimo— está en capacivigencia de lo dad de atender banqueauténticamente vernácutes de hasta 150 lo. Además, ofrecen una personas. Pero también atractiva variedad de ga-

RECEPCIONES PARQUE LA ESMERALDA C.A. 16

cenas para grupos pequeños, aun de dos personas. Telf. 461.6897.

Beeper 693.1822, clave 43457.

lletas y pastelería para acompañar esos cafés cultivados especialmente para ellos en Santa Clara, estado Táchira. Centro Plaza, nivel PB, Villa Mediterránea, local 3.

De Upata con amor En la carretera entre San José de los Altos y San Diego, en una curva desde la cual puede observarse una huerta fabulosa cuyos productos se venden en una pequeña verdulería en plena vía, todos los fines de semana está Eduardo Mujica con sus quesos de mano y guayanés, fresquecitos, llegados en el avión desde Upata en la mañanita, y un loable casabe bien crujiente. El local es la maleta de su carro y para conseguirlo basta con preguntar.

Via Applay al fin Este mes se lanza, con una reedición corregida y aumentada, en el nuevo edificio Coinasa de la avenida San Felipe en La Castellana, el restaurante con mayor duende que haya conocido la Caracas de la última década.

Porque los buenos recuerdos son para siempre

La sartén

por el mango

Petróleo, cultura y poder en Venezuela

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Monte Avila Editores

Ecléctica no sólo la cocina, como adjetiva el menú. Es así el decorado teatral con cielorraso de lona que filtra a medias el sol canicular en medio de aquella mole de ladrillo añoso. Es la mixtura de aromas con predominio del cebollín cuando sustituye al incienso de la entrada. Es la vajilla desechable soportando unos platillos inusuales servidos con coquetería. Y sobre todo, es la dirección de aquel hallazgo gastronómico que resuelve con gracia la desazón del mediodía de los comensales del centro de la ciudad: confines de la Catedral de Caracas. A partir del nombre, el Café del Sacro saca provecho a la rareza de su santa sede para ganarse fieles que han de restringir sus apetencias báquicas —ni tan siquiera vino en la carta— pero reconocen que el lugar, con Vivaldi como telonero, tiene ángel.

La variedad es parte del estilo. Cada día, entrada de sopas cremosas; la de ñame, aromatizada con Pernod y cebollín, tiene sabor de dioses. De plato principal, panes rellenos —como llaman a los sandwichs— con nombres por demás alegóricos: Angelicum o Divinis, coronados con higos frescos o melocotón y construidos con queso parmesano húngaro, jamón serrano, paté casero, miel, aceitunas negras y demás exquisiteses. O ensaladas frescas —Gregoriana, Urbaniana, Basílica— con base de arroz o pastas y aderezos de nueces, céleri, pasas, jamón de pavo, gajos de toronja, pescado ahumado, manzanas en juliana, ají dulce o cilantro. Abundosas y naturales, precipitan un almuerzo tan ligero como suculento que puntualizan tartas, helados o frutas.

No se cuece nada allí por la delicadeza de unas tuberías coloniales y por respeto a los puros humos blancos. De manera que el servicio, portátil, llega de casa, suerte de garantía de pulcritud. Sana y original opción, sazón a punto, abre, de nueve a cuatro, religiosamente.

Alejandro Dumas, nieto Café del Sacro

Latinoamericana

El petróleo: ¿maldición o don?

No se trata de un libro más sobre el petróleo, sino de un examen critico de los discursos forjados y de las actitudes asumidas por los líderes intelectuales y políticos de Venezuela con respecto al recurso primordial de la economía nacional. Oro negro, excremento del diablo, gigante con pies de barro, el petróleo ha sido objeto de lo que la autora de Petróleo, cultura y poder en Venezuela considera un "irracional universo simbólico".

Por la vía de un incisivo análisis, y desde una original perspectiva, la socióloga María Sol Pérez Schael desenmascara la ambivalencia de una relación conflictiva, perversa incluso, con el elemento que tan profundas transformaciones ha generado en la sociedad venezolana del siglo XX. Un documento imprescindible para abordar de otra manera una realidad del país.

De venta en todas las librerías.

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Torre a Gradillas Teléfono (014)26.2476 FEBRERO 1995 EXCESO 1

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La crónica de

Joé I Robuchon

Crepitantes crépes Desde la noche de los tiempos, en febrero, las crépes saltan alegremente en la sartén.

Originalmente, era una galleta rústica. Luego, la receta se afinó para placer de los gourmets.

Si hay un alimento que se parece a la Luna, ése es la crépe: el mismo color, los mismos cráteres. Y a ambas se les atribuye la esperanza de fortuna y felicidad.

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Las crépes son tradicionales en Carnaval.

He ahí una costumbre testimonio de ritos muy antiguos. Compartirlas es crear, retomar, reforzar los vínculos familiares o amistosos. Los huevos son la base de la masa. Es, pues, cuando las gallinas vuelven a poner que aparece el tiempo de las crépes. Por supuesto, se pueden preparar en otras épocas del año. Es verdad que se comen en todo momento, no sólo como postre, sino también acomodadas de formas distintas, con frutos del mar, con roquefort, con jamón.

Primero la masa. De cualquier manera, una buena crépe debe reunir tres condiciones: que sea liviana y quede bien cocida y seca. La liviandad viene de la masa. La cocción es cuestión de cuidado y experiencia. Con la receta que les propongo, ustedes tendrán una masa liviana y suave: el secreto reside en la fluidez.

Coloque cien gramos de mantequilla en una cacerola. Lleve en fuego medio hasta que adquiera color de avellana.

Retire y transvase a una terrine eliminando los restos de caseína. Haga un pozo de harina de 200 gramos en una terrine.

Vierta tres huevos completos en el pozo de harina y dos yemas batidas con antelación, una pizca de sal, incluso para las crépes dulces, pues así se realza su sabor.

Agregue cien gramos de azúcar, más un decilitro de leche. Sólo entonces mezcle con un batidor a fin de lograr una masa dura y sin grumos. Incorpore luego cinco decilitros de leche poquito a poco, sin

dejar de remover. Vierta la mantequilla color avellana, primero un poquito, bata e incorpore el resto. Cubra la terrine con un trapo y deje reposar la masa por lo menos una hora en el refrigerador; para entonces, estará lista. Pasado el tiempo de reposo, si se ha puesto más espesa, desleír con leche.

Asegúrese que cuando la masa corra del cucharón a la terrine tenga aspecto de cinta.

A partir de ahí se pueden modificar los ingredientes: escoger como líquido cerveza, sidra, jugos de fruta o leche y crema.

Reemplazar la mantequilla color avellana por aceite, perfumar con conchas de limón o naranja picaditas, con ron, GrandMarnier, Cointreau, etcétera.

Si la fluidez de la masa es primordial, la cocción juega un papel fundamental.

En mantequilla o aceite —los mejores— se cocinarán las crépes a fuego vivo si se quieren esponjosas. Si se quieren crujientes, la cocción se hará a fuego lento, preferiblemente en una sartén especial (crépiére) que se habrá de calentar antes de engrasarla; lo mejor es utilizar una sartén antiadhesiva. Si se va a usar una sartén negra, frotarla antes con sal gruesa y un trapo, y untarla con mantequilla.

Fuera del fuego, verter un poco de masa con el cucharón en mitad de la sartén e inclinarlo en todos los sentidos para que se riegue uniformemente. Cocinar hasta que la masa tome consistencia —unos 30 segundos de cada lado. Las crépes deben quedar apenas doradas. Despegar por fuera con una espátula y voltearlas.

Para mantenerlas calientes, apilarlas sobre un plato grande colocado en una cacerola llena dos tercios con agua hirviente. Recubrir con una servilleta.

Se pueden servir espolvoreadas de azúcar o untadas de miel, de mermelada, de coulis de mandarina o de chocolate, o acompañadas de ciruelas pasas, de dados de manzana cocinados en mantequilla y flameados al Calvados, y en un sinfín de recetas más, de las cuales la más conocida es la crépe Suzette.

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Receta realizada por Eduardo Martínez, chef de "La Créperie"

Ingredientes (para seis personas, 12 crépes pequeñas): 1' 100 gramos de chocolate de pastelería 35 gramos de harina 'W 60 gramos de mantequilla ramolli 'W 50 gramos de azúcar 'é' 2,5 decilitros de leche `"W 3 huevos completos y una yema de huevo Para la salsa: íé 100 gramos de chocolate de pastelería 'é' 1 decilitro de agua 'W 10 gramos de mantequilla '

Preparación: Calentar la leche e incorporar el chocolate hasta que la mezcla quede untuosa. la, Mezclar la mantequilla y la harina en una cacerola y calentar hasta que haga espuma. Agregar la leche achoccdatada y llevada a ebullición.

Retirar del fuego. la, Separar los blancos de las yemas; agregar la otra yema a la preparación y luego el azúcar, removiendo vivamente. le, Montar en nieve firme los blancos e incorporarlos con delicadeza a la masa de chocolate. s-

?s. Rellenar la crépe hasta la mitad y doblar la otra parte por encima.

Colocarlas en una fuente enmanteguillada y cocinar en el horno a 180 grados durante diez minutos.

Para la salsa: /a, Hervir el agua y agregar el chocolate cortado en pedazos, mezclar vivamente y agregar la mantequilla. Mantener en baño María.

11), Sacar las crépes del horno y servir la salsa de chocolate como acompañamiento.

O Le Journal de Dimanche, 1991

FIRRIRO 1995 EXCESO

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Carla Tofano

Francia para todo bolsillo Opción culinaria la de un clásico bistró francés, cuyo ambiente de cómoda informalidad brinda a sus clientes, de lunes a sábado y de 12 del mediodía a 11:30 de la noche, la tentación de comer los platos típicos de la gastronomía gala sin que la cuenta golpee en demasía la chequera: los platos del día siempre están por debajo de los mil bolívares la porción. En un clima de sencillez —prescinde del sofistica-

Cuarenta a palos El grupo Compás, que conduce el infatigable Romeo Costea, se asoma a su cuarentena con humor: montan a partir del 13 de febrero, en el Teatro de Bolsillo, el clásico 20

EXCESO FEBRERO 1995

do acento que caracteriza al resto de las opciones de cocina francesa—, cuenta con un atractivo menú que incluye, además de las entradas convencionales, recomendación diaria y cinco variados tipos de carnes y pescados grillés, con distintas salsas de acompañamiento. Cuenta asimismo con una terraza abierta y un salón interno naturalmente ventilado. Calle Beethoven, edificio Paraima, Colinas de Bello Monte. Telf. 752.7226.

de Moliere Médico a palos —se especializan en repertorio francés— para celebrar su aniversario sin alusiones a violencia callejera alguna. Por el contrario, sonrisa pura.

Alianza Francesa, Chacaíto.

Para el cotilleo En los dominios de Irene Sáez aparece el nuevo Café Restaurant Roso. Este agradable centro de regodeo social se suma a las alternativas de la circunscripción anotándose un punto de glamour con una carta constituida por ricas entradas — carpaccios, plato mixto ahumado y crema del día—, ensaladas —capresa, mixta, del chef, Café Roso— y una larga lista de sandwichs típicamente americanos, servidos según la elección con ensaladas de tole slaw o rusa y papas fritas, además de seis posibilidades de pan (pumpernickel, francés, kosher blanco, kosher negro, pita y kaiser). Avenida San Felipe, entre la calle José Angel Lamas y la segunda transversal de La Castellana, Centro Coinasa.

Parasol de la India Opciones decorativas de procedencia hindú llenan los anaqueles de Parasol y constituyen el punto fuerte de la variedad que este oasis de compra pone al alcance de sus clientes. Destacan en la lista de alternativas piezas de mantelería, estantes, tallas de madera, cubrecamas, edredones, tapices,

Noche de estrellas Karl Hoffmann y Aroldo Betancourt —ambos actores de la nómina de televisión— inauguraron el penúltimo mes del año pasado el primer American's Pub de la ciudad de Valencia que, bajo el lema de ser el lugar de la gente con

candelabros, cojines, alfombras, cortinas de baño y ventana, joyas de plata, y todo con ese halo de misterio que atañe a los objetos de procedencia asiática. Los precios arrancan del piso y van en ascenso proporcional a la calidad y vistosidad. Calle La Paz, N° 11, El Hatillo (al lado del Banco Consolidado). Telf. 963.4412.

clase, reúne al público más exquisito del enclave y promete una nueva alternativa para la recreación noctámbula, tragos y música de fondo. Akarot queda en el Centro Comercial La Granja, Av. Universidad, Naguanagua.

Rarezas en vitrina Raro asalta la curiosidad de transeúntes a la caza de la mejor opción consumista, desde su cristalina vitrina que ofrece un surtido cofre de objetos curiosos ante los cuales la vista pueda explayarse a sus anchas. Piezas utilitarias de gres o cerámica, llamativos artículos de marquetería, afiches montados y sin montar, postales, piezas de platería y tarjetas varias y de presentación por pedido. Un lugar que desboca las fantasías de quienes hubiesen querido ir de compras por los predios de Alí Babá. Local 4 del Centro Comercial Jardin des Crepes, calle Madrid, entre Trinidad y New York, Las Mercedes.

Telf. 91.5981.

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41 La más fresca fragancia de la prestigiosa firma Carolina Herrera, hoy también una referencia en el universo de la alta perfumería internacional, buscó nuevamente inspiración en el mundo personal de la diseñadora y el profundo vínculo afectivo que mantiene con lo floral. En esta ocasión, la fórmula

combina exquisita e inesperadamente la inocente ternura de la flor de Muguet con la esencia de Iris, rica y preciosa materia prima. Ambas flores son responsables de las notas medias de Flore y acentúan el aspecto verde, acuoso y cristalino de brisa de jardín que posee.

'111 Mitsubishi Motors estrena toda una familia Lancer integrada por los modelos GL (sólo disponible en versión manual), GLX y MX Extra (manual y automático), con motores de 1.300 cc y 1.500 cc, respectivamente, y el potente 1.600 con inyección directa. El lanzamien, to responde al interés manifestad_

por los consumidores en los últimos sondeos: para quienes sugerían más potencia, la industria japonesa ha respondido con el MX Extra 1.6 inyectado, mientras que para quienes pedían precios más accesibles, la marca de los tres diamantes ofrece la opción GL.

'h La producción vinícola de Carora consolida su presencia internacional gracias al nuevo galardón obtenido en uno de los más importantes concursos de vinos del mundo. Con oro premió el Challenge International Du Vin Blayebourg de Burdeos al vino ve-

nezolano Pomar Reserva Tinto, añejado en auténticas barricas de roble francés, que destaca por su gran bouquet y cuerpo, y que por tratarse de un producto de colección ha sido lanzado al mercado en restringida edición numerada.

'4" Con el objetivo de facilitar al máximo la experiencia de poseer una computadora personal (PC), IBM anuncia una nueva estrategia de marca que allana el hecho de buscar, comprar y tener un PC. En adelante, la complejidad de opciones se verá simplificada,

los productos tendrán menos marcas, diseños comunes, diseño de producción a pedido, garantía de tres años, programas exclusivos preinstalados y todas las innovaciones propias en cuanto a sistemas de aplicación.

Sunday reggae

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i iiiO4 44 00és

Convencido de que la realización de un buen programa de radio requiere de una esmerada producción en todo el sentido de la palabra, Fernando Rojo, ex locutor del espacio radial Rastavaganza, inicia todos los domingos, de ocho a 11 de la mañana, un nuevo espacio, Jam Reggae, acorde con las exigencias del radioescucha, en 92.9.

Pinceles hembras Seis formas de mirar. Tal es

el nombre de la más reciente exposición que monta el Maccsi con obras de artistas danesas y venezolanas: Irene Griegat, orfebre de origen marroquí, con exposiciones en Dinamarca, Francia, Suecia y Estados Unidos; Ann Sofie Ricard, arquitecto, tejedora y artista de la herrería, con exposiciones en Dinamarca; Merete Zacho, tejedora, artesana del papel y pintora, con exposiciones en Dinamarca, Sue-

Tiempo de oro El famoso diseñador francés Christian Lacroix, caracterizado por la audacia que destila la opulencia de sus diseños, en sociedad creativa con Swatch, concibe un nuevo modelo —Xmas by Xiam 1,ax— que, además de ser una hermosa pieza de joyería, refleja la filosofía que el diseñador tiene en relación al tiempo: un lujo que no

Reggae News —noticias nacionales e internacionales—, Reggae Stars —protagonistas— y Reggae Top Ten —mejores álbumes, temas más sonados, artistas más cotizados— constituirán sus secciones básicas, además de la presencia de la radio en la calle, llevando a cabo las transmisiones desde locaciones foráneas al estudio de grabación.

cia, Islandia, Francia, Austria, Estados Unidos y Luxemburgo; María Cristina Carbonell, venezolana, estudios de pintura en Boston, trabajos premiados en vidrio y mármol; Aída Gruebler —se inicia en el arte de la cerámica con su suegra, la ceramista mexicana Maja Gruebler— ha exhibido en Bélgica, Colombia y Venezuela; y Sydia Reyes, pintora y escultora, y profeta loada en su tierra. En Parque Central, el arte es femenino este mes.

ha de cuantificarse con obsesión.

Se trata de un reloj extravagante creado para la mujer consciente de la moda, que no escatima en demostrar su gusto por el lujo.

La pulsera es una combinación de oro y plata con incrustaciones de rubíes, esmeraldas, zafiros, perlas y topacios, y la firma del diseñador grabada a ambos lados del brazalete.

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A golpe de Rivas Después de pasar por la experiencia de dos discos que dentro del panorama nacional la situaron como una de las principales vocalistas, María Rivas completa una trilogía multicolor con trabajo en esencia latinoamericano. Mapale es una muestra de ideas y sentimientos que musicalmente expresa la típica mezcla cultural y que resulta del tránsito por los diferentes ritmos

Ego amplificado Las canciones del disco Amplificado de Alter Ego se pasean desde el más puro rock hasta los ritmos de reggae, pasando por los acordes melancólicos, temas instrumentales a cuerda de violín o baladas con reminiscencias de blues. La variedad musical que d erpo jo fu as

Enan Marciano Cantero, Felipe Staiti y Daniel Piccolo son los tres argentinos de Los Enanitos Verdes, una agrupación que en los últimos años ha recogido en toda Latinoamérica el germen de su popularidad, gracias al tono ligero de sus letras y melodías. La última placa editada por la banda fue producida por ellos mismos y grabada en dos eta-

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ciadas trayectorias individuales de cada uno de los integrantes de la banda que, sin estereotipos, produjo —grabación y mezcla

digital mediante— una concreción compacta de ideas, tendencia que han venido desarrollando desde su consolidación en 1990. EMG Editora de Música Global).

pas en los estudios Panda de Buenos Aires y en el Rusk Estudio de Los Angeles, donde se completó la mezcla final. En Btg Bang, Los Enanitos Verdes logran plasmar toda su fuerza interpretativa con un sonido más crudo que el de sus anteriores producciones y bajo el concepto de composición y ejecución en trío. EMI.

Castillo personal

gráfica, deambula casi todos

Algo personal es la concreción mu-

los caminos estilísticos —blues, pop, balada— y requirió para su composición invertir dos años de tiempo. La producción estuvo a cargo de Germán Landaeta, Boris Centeno y el mismo Pedro Castillo.

Airó Music.

sical de una importante trayectoria, la de Pedro Castillo —no necesita presentación—, cuya última creación, en grado de solista, resulta un trabajo que trasciende los límites de lo musical para acercarse al oído desde la perspectiva 24

del continente. Se trata de una acción romántica —las letras intentan dar vuelta al actual estado de cosas— en conjunción con la intimidad femenina de su autora.

Mapale es de hecho el nombre de una de las piezas de la grabación y está basada en un golpe de tambor que encarna la seducción y el rítmico ritual de apareamiento de la zona costera. EMI.

Mijares heterodoxo La producción de la grabación más reciente de Mijares se llevó a cabo en tres distintas locaciones —Barbados, Miami y New York— y se trata del noveno golpe que acierta este cantante cuya potente voz debutó como solista apenas en 1986.

Manuel Mijares Morán, emergido de la urbe mexicana, interpreta 13

Canta la reina Una hermosa caja con tres elepés recopila lo mejor de la más contundente voz del blues femenino, uno de los ídolos más desesperados de la fantasía psicodélica de los sesenta, Janis Joplin, apóstol de una revolución cultural que tuvo una ambiciosa visión de la liad y murió entregada p el b r al zo de las dro en

jt

En sus trece Uno de los cqpjdflifos más sólidos del panorama hispano —siete discos y 13 años de carrera— logra plantear un álbum nuevo y demostrar con ello que el género pop en español tiene aún p,_,der de renovación. Danza Invisible procura rescatar las diferencias estilísticas de sus integrantes con el fin de mantener la distancia justa que la música

Violent femmes Este trío de cantantes ambulantes que vivían tranquilos en el anonimato de las calles de Milkwaukee, se mantiene desde su primera presentación en la fórmula básica del sonido unplugged, aliado de la trilogía instrumental bajo acústico, guitarra y batería. Con una pro-

temas bajo el título del primer sencillo promocional, Vive en mí, que logra mantener un balance perfecto de ritmos y cuyos temas atraviesan no sólo la clásica balada romántica, sino que hacen un alto en el pop acústico para detenerse por último en ritmos bailables como la salsa y el merengue.

las grabaciones que su voz convirtió en inmortales, además de la participación instrumental de las bandas que la acompañaron a lo largo de su historia en el escenario ding —Big Brother & T es Band c eco de ob Irwin en ony Music de NueSony Music. cio

necesita para estar al alcance del gusto de todos. Tras la consola de grabación de Clima raro —último álbum de la banda— estuvo Mike Vernom, productor de figuras como David Bowie, Carmel y Level 42, y con la producción de 13 temas que buscan un sonido similar al que los Danza logran en vivo, celebran su décimo tercer aniversario.

puesta musical auténticamente desenfadada, continúan vigentes en el panorama artístico y encabezan la corriente moderna del rock and roll en Estados Unidos, y aunque señalan que su primer disco es el más popular, estrenan con Tiempos nuevos su más reciente apuesta discográfica.

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Malo Macaulay Rodven Videos pone a disposición un nuevo título para ser sumado a la videoteca casera. Se trata de la película El ángel malvado, interpretada por los pequeños actorazos Macaulay Culkin (protagonista de Mi pobre angelito y Mi pobre angelito 2) y Elijah Wood (Las aventuras de Huck Finn y Joven para siempre). La

historia narra las ex-

Novela novel Bárbara Piano —siempre entre letras— procede a descubrirse —gajes del oficio— armada con las ambivalencias del desarraigo, las dudas de la soledad, la ternura del amor, la identidad de la vocación dual de la periodista jalonada por otros cuentos. El gusto del olvido, ópera prima de la escritora de ascendencia italiana y voz quedita, entre saltos de tiempo y espacio y

Un Oso en el Celarg El chileno Ricardo Larraín recibió por su película La frontera, el Oso de Plata del Festival de Berlín, el Sol de Oro del Festival de Biarritz, premio al mejor guión del Festival de La Habana y el premio Goya, entre otros reconocimientos a la historia de un profesor de matemáticas condenado al exilio interno, que llevó a la pantalla grande para ilustrar las paradojas de un mundo

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periencias de un jovencito de 12 años que conoce los diferentes rostros de la maldad cuando va a vivir con unos parientes después de la muerte de su madre y se ve involucrado en las travesuras de tono maquiavélico de su asesino primito. La dirección del filme corre por cuenta de Joseph Ruben, conocido por su conducción en Durmiendo con el enemigo.

confesiones en primera persona, atrapa al lector que reconoce en la saga íntima, familiar y definitivamente caraqueña, los resquicios de una ciudad volátil, de una migración con secuelas, de una confrontación con ciertas convenciones. En prosa sutil y de encanto. Como si Ifigenia, posmodernidad mediante, saliera a los 38 a repasar con humor sus sensibilidades.

—desde el puerto de Saavedra— en donde la realidad y el mito se mezclan al tiempo que corren los últimos años del gobierno pinochetista. Durante todo febrero, en la sala 2 del Centro de Estudios Latinoamericanos Rómulo Gallegos —marcando el inicio de la programación de la Cinemateca Nacional en este nuevo espacio—, la exitosa obra será exhibida sin tregua.

A dónde ir Dice la editorial de Salir en Caracas que el quehacer cultural y su divulgación son aspectos que están en concordancia con el desarrollo social. En este sentido, la nueva publicación mensual aspira erigirse en amena bitácora para dar a conocer todo lo referido al acontecer citadino. Y pretende convertirse en

Banquete a bordo El personal especializado que se dedica al servicio en los aviones de la línea aérea alemana Lufthansa tiene gran experiencia en el área de la gastronomía y sabe bien que lo que es rutina en cualquier restaurante, a bordo puede significar grandes dificultades. Hasta abril del año en curso se presenta el servicio Gastronomía a bordo, que ofrece especialidades de seis chefs de exclusivos restaurantes de dife-

Vacación en verde En pleno corazón de los Llanos centrales se encuentra ubicada Chinea Arriba, una hacienda turística de 3.000 hectáreas a sólo tres horas y media de Caracas y a cinco minutos de Calabozo, en el estado Guárico. Sus visitantes tienen la oportunidad de entrar en contacto con la naturaleza de la región a través de una magnífica hacienda ecoturística que ofrece actividades como salir de pesca a la laguna, montar a caballo, organizar excursiones en las que podrán ser ob-

una tribuna abierta al diálogo y la participación de quienes tienen que ver con este sector en el país.

Obvio, la guía de actividades: cine (salas de arte y ensayo y salas comerciales), conciertos, exposiciones, talleres y teatro. A la venta en los kioscos de la capital por 200 bolívares el ejemplar.

rentes regiones alemanas. Las comidas serán acompañadas de bebidas especiales, como vinos escogidos y probados por expertos —deben resistir fuertes movimientos y cambios de presión sin perder su calidad—, además de otras 60 variedades alcohólicas y no alcohólicas de bebidas.

Lufthansa está en la avenida Tamanaco, El Rosal, Torre Bayer.

Telf. 951.0044 y fax 951.0572.

servadas y fotografiadas innumerables especies de la fauna criolla en su hábitat natural, y baños en jacuzzi de agua mineral. La hacienda cuenta con 11 confortables habitaciones dobles y cuádruples con aire acondicionado y baño privado, y la tarifa por temporada incluye tres comidas completas, bebidas nacionales y actividades recreativas sin ningún recargo. Los niños menores de 12 años pagan 50 por ciento de la tarifa normal.

Telfs. 781.4595 y 781.4241.

Fax 793.2191.

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os t Merary Lander

/Antes, cuando Madonna se encontraba en la cúspide de su carrera, la prensa internacional le otorgaba amplio centimetraje en sus publicaciones, bien para alabarla, bien para criMadonna morosa ticarla. Hoy en día, cuando se dice que ya explotó buena parte de lo que su talento podía ofrecer, la cantante reaparece del barranco apenas para enfrentar un nuevo escándalo. Según los recaudadores de impuestos estadounidenses, Veronica Ciccione no ha sido muy honesta en lo que a la declaración de sus ganancias por ventas en el exterior se refiere. Para sus portavoces, ésto es sólo cuestión de rutina. /La toma de posesión del nuevo presidente, Fernando Henrique Cardoso, llenó de invitados internacionales a Brasilia, en donde no había un smoking ni un carro de lujo más para alquilar. La prensa local, repleta ya de las noticias que Rod Stewart y Jean Paul Gaultier dejaron a su paso por Río de Janeiro, no se dió abasto para reseñar al detalle la recepción que se ofreció ese primero de enero. Pasada la euforia, la presión que la opinión pública ejerce sobre Cardoso y su gabinete a fin de que se continúe con ese Plan Real que ha sacado al país, al menos temporalmente, del caos vivido en los años anteriores, ha cedido ante los preparativos del carnaval carioca que, como todos los años, promete ser el más espectacular IA propósito del rockero inglés Rod Stewart, contratado por una em28

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presa privada y por la alcaldía de la que el artista en una ocasión asistió ciudad, ofreció un concierto de tres a una fiesta caracterizando a María horas seguidas en la playa de Co- Antonieta. 11..a colección del pacabana pasada la media noche pintor francés Claude Model 31 de diciembre. Debido a los net, perteneciente al Museo excesos cometidos durante el día, Marmottan de París, está de gira que incluía la ingesta de una no por los Estados Unidos. Veintidós muy liviana feijoada, toma de sol de las obras que Monet produjera como pocos y juego de fútbol con en Giverny desde que anunciara su amigos, tuvo que ser sacado en he- retiro hasta su muerte en 1926 estalicóptero por el malestar. Al día si- rán expuestas todo el mes de febreguiente un avión lo estaba alejando ro en el Museo de Arte de New de aquellas tierras, desproporcio- Orleans, para luego trasladarse a nadas en actividades, según él San Francisco donde se exhibirán /Entre los estrenos que más hasta finales de mayo 1E1 más han obtenido crítica elogiosas y reciente matrimonio de aceptación del público parisino se Hollywood ha causado estupor y encuentran Un indio en la ciudad hasta desilusión, a decir de la publique, por su trama, fue filmada en cación francesa Voici. El casamienparte en Venezuela, y Farinelli, ba- to, realizado según la tradición jusada en la vida de uno de los más famosos cantantes de ópera del siglo dieciocho que perteneció a la estirpe de los castrados, verdaderos prima donnas del canto lírico /Los Farinelli, castrado para cantar allegados se apresuran a decir que es sólo una broma, pero los comentaViene Un incendio rios de la indus- en la ciudad tria musical hablan cada vez más alto de la transformación del cantante inglés Elton John: ha trascendido que cada vez que tiene un día difícil en el estudio de grabación pide a los presentes que lo llamen Sharon y, que cuando la presión se torna insoportable, le da por lucir un verdadero look travesti por las calles de la ciudad. Sus mismos amigos tratan Elton John alias ella de restarle importancia diciendo

Irgrrirm comparactos día, reunió a personajes como Elizabeth Taylor, Steven Spielberg, Cindy Crawford y Claudia Schiffer, teniendo como marco las instalaciones del restaurante La Coupole de Los Angeles. Luego que el terremoto de 1993 uniera sus destinos, Keanu Reeves, que a los 29 años se le considera uno de los hombres más atractivos del cine, decidió contraer nupcias con el magnate del espectáculo Davi effen, de 51. Al final de la ceremonia, Geffen quebró un vaso de cristal enrollado en un lienzo, como dicta la práctica hebrea para quien funge de novio 1"Los americanos, italianos y alemanes hace tiempo descubrieron el

mapa de la mina. En los últimos meses ya es de los brasileños". Así

MAL.

Keanu Reeves (Izquierda) y David Geffen (derecha), marido y hombre

comienza un reportaje sobre Margarita que la revista Veja, una de las más leídas por el público brasileño, publica en una de sus ediciones más recientes, respondiendo así a la expectativa que ha creado en los países del sur el ofrecimiento de la isla como "el Caribe barato".

Por 760 dólares semanales, con pasaje, hospedaje cuatro estrellas, desayuno y paseos han hecho que los vuelos procedentes de Sáo Paulo y Río de Janeiro se vean repletos de turistas, enloquecidos.

Fermín Mármol León Criminólogo, ex director y fundador de la PTJ, ex ministro de Justicia, académico, en la actualidad trabaja junto a su primogénito como asesor jurídico y, en compañía de los suyos, instaura la Fundación Mármol y Mármol, para asistir a los niños de la calle y a los Hogares Crea.Cuatro crímenes, cuatro poderes, su obra cumbre, plasmada por el celuloide, deja caer sobre él los colores destellantes del triunfo y le abre el camino a Confesiones de un Gabinete, bautizada recientemente.

El libro. Su gusto recorre los géneros de historia, novela y ficción. Al hablar de preferencias cita a Arturo Uslar Pietri, y su obra La isla de Robinson, como el libro de cabecera.

El disco. Ama la música venezolana y en especial a María Teresa Chacín.

El lugar de vacaciones. Las Mercedes de Papa-

ro, su guarida; además de permitirle el encuetro con el mar, funge como trinchera a la hora de escribir sus libros.

El sitio de reunión. Hombre de fibra hogareña, es su casa el lugar preferido para departir y jugar dominó.

La suscripción. Ninguna.

—Mercesabel Guevara

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1/4 de hora

Los juegos Nobel Virtudes que convergen en una

mujer exitosa: talento intelectual y alma noble. Julia Barragán, por añadidura, impregna el aire con un

halo de elegancia. Huésped académico oficial, es decir, entorno o miembro de la comitiva que acompañó en diciembre pasado al profesor Jhon Harsanyi a recibir en Estocolmo el premio Nobel de Economía —quien por cierto visitó este país antes de hacerse del galardón, invitado por ella—, esta afable genio es

En pañales y esperanzado cual

niño recién nacido —L'Info en Francais, periódico galo que recoge mensualmente los acontecimientos más relevantes ocurridos en Suiza, Bélgica, Canadá y la luminaria París— espera ser recibido con palmas por todos los lectores francófonos de Venezuela. Ideado por el jurista Nelson Socorro y apadrinado por el embajador de Francia, Henri Vignal, el órgano informativo presenta un mosaico de artículos publicados por los principales diarios europeos —Le Monde, 30

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el segundo venezolano acreditado con tan prestigiosa nominación —antes, Miguel Otero Silva lo fue de Miguel Angel Asturias.

La Teoría de los Juegos, definible como teoría de la interacción estratégica, propone que los contrincantes deben detectar, analizar y aprender de la relación con sus oponentes (interactuar), para luego tomar la posición óptima que permita vencer (estrategia). Planteamiento que, aunque nacido en el campo de la Economía, es polivalente —puede ser aplicada con éxito a distintos ámbitos de las relaciones interactivas— y ha causado revuelo entre los estudiosos europeos. Julia Barragán está entre los pioneros de su desarrollo en Venezuela, su patria por asimilación. Un acento confuso engendra el enigma de su gentilicio —causas políticas la obli-

garon a abandonar Argentina.

Mas, ve su exilio como "un hecho positivo que me permitió conocer la idiosincrasia de un país que me abrió las puertas generosamente".

Femenina hasta la médula —para desmitificar estereotipos— abona la huerta del saber con un intenso currículum: doctora en Derecho y Sociología, estudios postdoctorales en Matemáticas y, una vez en la tierra que la prohija, profesora de la Escuela de Derecho de la UCV. Consagrada a la investigación y a sus alumnos —a quienes ha dedicado varios libros—, confiesa una profunda pasión por su trabajo.

"Maravillosamente casada" desde hace 34 años, confía también haber aprendido de sus hijos "el placer por las computadoras y el gusto por la música rock: Queen, Pink Floyd y Guns'n Roses, mis preferidos".

—Mercesabel Guevara

L'Expansion, Libération, L'Express, Le Monde Diplomatique y otros— con el fin de so-

segar la avidez informativa en distintas áreas —cultura, tecnología, política, cine y economía— que experimentan los profesionales venezolanos formados académicamente en Francia pero residenciados aquí y con nostalgias. Después de respirar el aire parisino, de degustar los más exquisitos y variados quesos y estudiar en universidades francesas comprime el corazón el

desarraigo. Por ello, el tabloide —valga la suscripción— funge como vínculo para los eternos enamorados de esa tierra de contrastes.

—Liliana González

1/4 de hora Viva la tele En un destello absoluto de optimismo, mientras algunos, entre lágrimas, se lamentan del futuro económico que se encima gris, otros, seguramente más visionarios, posan su fe en un promisorio sistema de televisión multicanal por suscripción, con pocos meses en el mercado, autodenominado Viva, la hipertelevisión. Que, con la expectativa geográfica puesta en un pedacito del mapa de la ciudad capital, ataca con su fuerza promocional de "trato directo con el cliente" a los edificios de la zona noreste y sureste de Caracas.

Luego que le instalan, previa autorización de su junta de condominio, todo el cableado necesario, Viva empieza su promoción con eventos realizados en el propio salón de fiestas, donde durante cinco horas se reunirán promotoras,

material impreso, pantallas de televisión y todo el aparataje promocional necesario para evidenciar con nitidez quiénes son y a quiénes buscan.

En esta ciudad donde pareciera que ya no cabe nada más y que al mismo tiempo tiene la duda perenne de que está todo por hacerse, la empresa viene dispuesta a forcejear contra las dudas de identidad a punta de información y entretenimiento, apoyada en 43 canales, entre conocidos y por conocer, que surcarán el espectro electromagnético en una banda de 28 GHz sin competencia, captados por una moderna antena

de apenas 28 centímetros de radio, se ufanan. Calidad versus desánimo.

Pues, más que optimistas, prometen a corto plazo traer a la ciudad, previa autorización de Conatel, la televisión interactiva, donde el usuario saltará de la hipnosis a la participación, de la opción a las múltiples opciones: con el sistema pay per view (pague por ver), la videotelefonía, los juegos de video y la posibilidad de 50 canales de música digital.

Si usted se encuentra entre los elegidos, prepárese para lo hiper.

Matilde Corral Páez —

El arte toma asiento Supóngase que en una prisión

cualquiera se encuentran un brasileño y un venezolano condenados a muerte y que la única manera de salvar sus vidas es a cambio de contestar correctamente tres preguntas sobre diseño de muebles. ¿Quién es Pedro Useche?, sería la primera interrogante y con la cual, es posible, el venezolano perdería todas las oportunidades de salvarse; el brasileño, en cambio, casi seguro, exhalaría un suspiro de alivio. Aunque nativo de estos lares, Pedro es Pe-

dro por su casa en Brasil, no aquí.

No es —todavía— profeta en su tierra; pero bien puede. Arquitecto y diseñador, alzó vuelo en 1981 con destino —inicial— a Estados Unidos para estudiar un postgrado; ahí conoció a varios brasileños que le cambiaron su sino: tres años después, la curiosidad lo depositó en el país carioca. En Sao Paulo, donde se residenció, trabaja con remodelaciones y sueña con montar una oficina para dar forma a su filosofía espacial. Al cabo de un lustro ve en el mobiliario un camino que puede ser explorado y, albricias, abre la tienda Useche Diseño y Arquitectura. Proyectando los mismos elementos que se usan para la construcción de un edificio a los muebles, su creación se divulgó por sí sola debido a la originali-

dad de la propuesta. Resultado: en 1991 el Museo de la Casa Brasilera lo galardonó por su silla Mujer, arte para sentarse que, como cada una de sus obras, tituló echando mano de todo cuanto deja huella en su existencia. Pero que quede claro: su idea no es innovar por innovar. Es el resultado de una necesidad de expresión y de pensamiento. Con obsesión razona en la estructura, y ahora se devana los sesos por una forma de apoyo diferente a la silla, lo que para él sí sería realmente innovación, porque "los muebles van a existir mientras el hombre esté en la tierra, sólo variará la estética contemporánea". Brasil le dio la apertura para triunfar y, por el momento, allá se queda.

—Gladys Torres

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Algunos accionistas minori-

han estado agitando las aguas de un escándalo que parecía definitivamente reparado. Echando mano de los recursos que les ofrece la justicia, Pablo Ceballos Eraso y Eloy Anzola Montauban no han cejado en sus reclamos, poniendo en peligro la delicada estructura del acuerdo logrado en la asamblea de capitalización de la hasta entonces respetable compañía de seguros, llevada a cabo en el mes de agosto pasado.

tarios de La Seguridad

En Barcelona, Espa-

un pequeño grupo de inquilinos se niega a desalojar el edificio de habitación de La Pedrera, obra maestra del célebre arquitecto catalán Antoni Gaudí, que la propietaria, una importante entidad financiera de la Generalitá, intenta dedicar a uso exclusivo de oficinas. Entre los irreductibles que se atrincheran en la pétrea pero ondulante mansión del Paseo de Gracia, figura la caraqueña Clementina Liscano, quien en el trance de verse desalojada de tan entrañable terreno de elección —allí vive en exilio dorado desde hace años— ha intentado internacionalizar el conflicto buscando el apoyo del Consulado de Venezuela en aquel puerto mediterráneo. ña,

Dos hombres son tomados en cuenta por Andrés Mata a la

hora de trazar una línea editorial en su periódico hoy por hoy, arguyen en conversaciones de sobreme32

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sa periodistas de El Universal: Oscar García Mendoza y Jorge Olavarría. El fundador de Resumen se perfila, cuando el tema es abordado en estas pláticas digestivas, como fuerte candidato para ocupar la dirección del matutino de la Urdaneta.

Incrédula, una vecina de Tesalio Cadenas recibió, en pleno

estallido de la crisis provocada por la huida de Orlando Castro, nada menos que las comprometedoras actas forjadas del Banco Progreso. El superintendente, antagonista convencido del cubano —en el segundo semestre de 1994, Castro se quejaba de que aquél estaba empeñado en entorpecer un inminente arreglo de su situación con las autoridades—, no habría vacilado en confiárselos a la buena señora , ara que los pusiera a buen resguardo hasta su regreso de un corto viaje al exterior. A la vuelta se habría presentado ante la nerviosa depositaria de los documentos de la discordia, en efecto, pero disfrazado de la cabeza a los pies, para evitar que lo reconocieran parroquianos y periodistas. No era para menos, la agitación provocada por la revelación de la doble contabilidad que camuflara a ojos de las autoridades, de los auditores y del públi-

co en general, la verdad organizada en la penumbra por Castro, Palacios et alia, bordeaba los límites de la histeria informativa.

La Cantv invitó hace unos meses al diseñador Angel Sánchez a participar en un concurso para reinventar —cambios de imagen mediante— los uniformes del personal femenino de atención al público. Contra todo pronóstico pesimista, el modisto más brillante de su generación se mostró entusiasmado con el gesto.

Que el vino europeo haya

con nuevos impuestos por este gobierno sorprende a quienes conocieron a Andrés Caldera en sus años mozos, cuando redactaba en París una tesis sobre Veuve Clicquot y Canard Duchéne, dos casas bien conocidas de Champagne. sido castigado

Maritza Bosque de Pérez Perdomo —sí, la esposa del abogado de Carlos Andrés Pérez— recibió en la notaría número 31 de Caracas, al decir de allegados suyos, la visita de ciertos uniformados cejijuntos que obviando los modales empujaron la puerta y la pusieron de patitas en la calle sin dar mayores explicaciones.

Los índices apuntan a

como el alto funcionario gubernamental de fresca imagen que dejó, recientemente, unos cuantos millones en los casinos caribeños.

Ciro Zaa

Las cosas buenas

se disfrutan en compaĂąia.

Con tal de que sea...

El consumo en exceso puede ser nocivo para la salud.

BENEDETTI

MARCOS PEREZ JIIVIENEZ VOZ Y BOTAS

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M IL R EN I NVIE RNO !My

Transcurridos 37 años de su voluntario destierro, el general sale de su laberinto redimido por la benevolencia del tiempo para hablar del pasado, del presente y del futuro de una patria ante cuyo solo nombre respinga. Justificando sus métodos por los resultados, aunque reconoce ser el peor político que ha dado la historia venezolana, se tiene por el mejor administrador y el mejor servidor público que su ex país haya tenido jamás. En su octogenario juicio, despotrica de Pérez, desdeña a Caldera y reivindica a las señoritas de La Orchila en detrimento de las barraganas --(Amaya Fano desde Madrid> No habita ya el general en su laberinto ni esconde la cabeza como el avestruz, esperando el olvido. Piadosamente avecindado a Nuestra Señora María Madre Reparadora, en el madrileño —y de sugestivo nombre— coto de La Moraleja, reserva señorial de fortunas sin señorío, de políticos y banqueros sospechosos de exceso de velocidad en sus cuentas corrientes, y deportistas y artistas de medio pelo afectos al alpinismo social, 37 años después de asumir a voluntad la condición de proscrito, Marcos Pérez Jiménez abre las puertas de su purgatorio personal de alfombra persa y oropel y solicita visa para el cielo, ofreciendo el fracaso de sus adversarios como aval de su inocencia.

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Corto de vista pero largo de olfato, a sus 80 años, alega sordera parcial y fragilidad de memoria cuando se trata de desdoblar los pliegues del pasado, pero dice sentirse satisfecho y realizado, libre de rencores y de envidias, curado de nostalgias y escarmentado de tentaciones de poder, dispuesto a batirse en duelo con una leyenda ingrata de la que parece estar hasta las mismísimas coronarias.

Responde a las preguntas por un par de horas, una soleada mañana de invierno de esas en las que el frío vuelve de escarcha hasta el aliento, cómodamente arrellanados en uno de los juegos de salón, estilo Luis XV, que disfrazan de fasto el hall de la nívea mansión en la que habita

—una especie de palacio islámico con cenefa de pinos, de sauces y de cedros—, observado de reojo por uno de los 14 empleados del servicio doméstico, con más guisa de botones que de mayordomo, una secretaria con acento de mar Caribe, una enfermera en edad de retiro y una docena de perros guardianes que velan por la tranquilidad de su sueño. Y, a medida que la memoria se desparramaba sobre esa alfombra caprichosa de arenas movedizas que suele ser la historia, hundiéndose más y más en la ciénaga de los recuerdos con la excusa de rescatar un episodio de reciente conmemoración, una fogosa transpiración comenzó a humedecer sus prominentes mejillas arreboladas, delatando las prisas de su corazón. "Es que sufro de tensión arterial, no vaya usted a creer que es por la entrevista", matizaba enrojeciendo el general, enjugando el sudor que lamía sus despobladas patillas.

Treinta y siete años después, lo justifica todo en función de unos resultados que, según dice, todavía permanecen incólumes, vertebrando el endeble esqueleto de una Caracas que se ha quedado en los puros huesos; y sostiene con orgullo la convicción de que la historia ha acabado por darle la razón, aunque hace ya tiempo que Venezuela no entra en sus planes de vida. El fin a pesar de los medios, los hechos y no las palabras. Ya nada lo alcanza. Marcos Pérez Jiménez ha sido redimido por el juez más benévo-

lo de todos: el tiempo. Y hoy, tal día como aquella madrugada de 1958, al margen de la palestra política y a nueve mil kilómetros de distancia, parece sentirse por encima del bien y del mal, aunque su condición de ciudadano venezolano no le permita celebrar en voz alta el fracaso de la democracia.

—Ahora que se cumplen 37 años de su derrocamiento, ¿cómo recuerda aquel 23 de enero de 1958?

—Permítame una rectificación. Lo mío fue un caso típico de abandono del poder y no de derrocamiento. Yo no escuché a nadie que me dijera "usted tiene que irse" ni me pusieron una pistola en el pecho para que me fuera. Tampoco vi manifestaciones en las calles solicitando mi destitución.

—¿Entonces, la historia miente cuando habla de alzamiento cívico-militar?

—Digamos que no dice la verdad. Yo no vi al pueblo a las puertas de Miraflores.

Es más, antes de producirse estos acontecimientos, me había presentado ante la nación en un plebiscito para que ésta dictaminara si debía quedarme en el poder por un período más, y los venezolanos, unánime y masivamente, dijeron que sí.

De manera que tenía el suficiente respaldo popular para continuar gobernando.

—Si es así, ¿por qué se fue?

—Porque, de haberme quedado, habría tenido que ser muy represivo en el orden de castigar la traición dentro de las Fuerzas Armadas y porque la sensación era que mi obra, la obra administrativa más fecunda que había tenido Venezuela en toda su historia, no había sido entendida. Pero no me arrepiento de haber tomado tal decisión, por el contrario. Fíjese usted en las consecuencias. Han transcurrido casi 40 años y yo vivo feliz, tranquilo, sosegado, libre de rencores y de envidias; en cambio, la nación venezolana se encuentra en una situa-

ción de extrema pobreza. Supongamos que efectivamente hubiese habido caída, ¿quién cayó?, ¿cayó Pérez Jiménez, que se siente satisfecho y realizado, o cayó Venezuela, que ha sufrido el expolio y la burla de quienes pretendían liberarla de mí?

—¿Tiene usted conciencia de haber pasado a la historia como un dictador?

—Lo que en última instancia califica a un gobierno es su rendimiento en bien público, y yo estoy convencido de haber sido un buen gobernante para mi país.

Póngame la etiqueta que quiera, llámeme dictador o tirano si prefiere, pero dentro de mi sistema, cualquiera que éste fuera, tengo el orgullo de haber producido la mayor suma de beneficios públicos que el pueblo de Venezuela haya tenido jamás.

—¿Qué me dice de la represión?

—La represión se caracteriza por muertos, exiliados y encarcelados, y el sistema democrático los ha tenido por millares. Al menos en dictadura la seguridad personal estaba garantizada, pero hoy en día, con la democracia, sólo en Caracas mueren cada fin de semana más de 40 personas a manos del hampa. Dígame usted si esa cifra respalda la idea de que la democracia es el mejor sistema para Venezuela, dígame usted entonces qué es lo que conviene.

—Pero el fin no justifica los medios, ¿o sí?

—No en todos los casos, pero es mucho menos lesivo castigar de manera ejemplar al ladrón que generarlo, fomentando la injusticia social como ha hecho la democracia.

—¿Qué es para Marcos Pérez Jiménez la democracia?

—Un sistema que puede resultar bueno o malo, en función de quiénes lo ejerzan. Hay democracias en el mundo que funcionan magníficamente, pero hay otras, como las latinoamericanas, que sólo han producido inseguridad, injusticia y pobreza.

—¿Pretende usted decir que la democracia es un sistema condenado al fracaso

Llámeme dictador o tirano si prefiere Hizo mutis a toda carrera

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en América Latina?

—A mí no me gusta pontificar sino razonar basado en los hechos, y lo cierto es que nunca la América Latina había estado tan arruinada y tan convulsa como ahora.

—Ya en 1956 planteó usted ante la OEA la necesidad de crear un fondo de ayuda iberoamericana. ¿Cree que el futuro de América Latina pasa por el hermanamiento de sus regiones?

—Mi discurso en Panamá fue el más corto de todos, duró exactamente cinco minutos. En principio yo no iba a ir, porque sabía que iba a ser una reunión inútil, como han sido todas las cumbres de jefes de Estado que se han celebrado hasta ahora. Pero el presidente Eisenhower insistió. Mi tesis fue la siguiente: Venezuela había contribuido como ningún otro país, con su sangre y su riqueza, a la liberación de muchas regiones de la América del Sur. Sin embargo, los pueblos latinoamericanos no habían sido, ni han sido aún, redimidos desde el punto de vista económico. Sus economías han sido dependientes de economías foráneas. Así que, con el fin de independizar a estos pueblos y darles soberanía económica, propuse estructurar un fondo de cooperación tributaria, acorde con los ingresos de cada país.

—¿Qué opinión le merecen los esfuerzos de adhesión económica y comercial que se están dando hoy en este sentido?

—Permítame ser un poco duro pero, para mí, de nada sirven las asociaciones de mendigos. Antes de dar cualquier paso en este sentido, yo creo que es menester que, individualmente, cada país intente recuperarse a sí mismo.

—¿Cree usted que sería viable hoy un alzamiento militar a la vieja usanza en América Latina?

—No lo sé, pero lo que sí ha habido en muchos países latinoamericanos, últimamente, es levantamientos populares y guerrillas. Hoy mismo las hay, y hasta de nuevo cuño como la guerrilla zapatista.

Por algo será.

—¿Existen militares de izquierda?

—Supongo que sí, porque en Venezuela no sólo parece pecado decir que no se es demócrata, sino también decir que se es de

Wolfgang Larrazábal entre la muchedumbre que Pérez Jiménez no vio

derecha. Aunque la mayoría tenga la mentalidad del demagogo que promete y luego no cumple. Yo, sin embargo, no concibo la diferencia. Fíjese, nosotros hicimos una política social de primer orden, destinada a compensar el desequilibrio social, y éramos militares. Es más, yo diría que los regímenes autoritarios han sido los más socialistas que ha tenido Venezuela, porque creábamos fuentes de trabajo de tal magnitud que no solamente empleábamos mano de obra venezolana sino que tuvimos que importarla de Italia, de España y de Portugal. Esos trabajadores iban a nuestro país con ánimo de emprender, porque encontraban fuentes de trabajo bien remuneradas que permitían que sus salarios pudiesen retornar a sus países de origen. Además, fuimos los primeros en crear las colonias vacacionales para obreros en Los Caracas y las casas sindicales, sin exigirles a los trabajadores su adhesión, haciendo sencillamente lo que considerábamos elementalmente justiciero.

—¿Se siente víctima de la historia?

—No, me siento víctima de la propaganda política que, durante más de 30 años, ha hecho aparecer al régimen de Pérez Jiménez como nefasto para Venezuela, sobre la base de que la democracia es el mejor sistema, a pesar de los males que produzca.

—¿Cómo define al político venezolano?

—Como un hábil engañador de colectividades. En este sentido, yo me considero el peor político que ha tenido Venezuela, pero el mejor administrador y el mejor servidor público que el país haya tenido jamás.

—Es cierto que hoy hay tres aspectos positivos que el venezolano le reconoce a su mandato: uno es la seguridad ciudadana, otro el impulso a obras públicas de infraestructura y, por último, la implantación de la industria petroquímica y siderúrgica, apoyada y usufructuada por capital estadounidense. ¿Fue la nacionalización el gran error de los gobiernos democráticos venezolanos?

—Las nacionalizaciones, como los gobiernos, se justifican por sus resultados; en algunos casos pueden ser muy útiles y en otros, un completo desastre. En época del general Cárdenas se nacionalizó el petróleo mexicano y México, que había sido hasta entonces el primer exportador y el segundo productor mundial de petróleo, dejó de serlo en beneficio de Venezuela. En nuestro caso, el problema fue que los beneficios de la nacionalización, en el supuesto de que existieran, fueron mal administrados.

—Su gobierno fue condecorado por el general Eisenhower por su "sana política FEBRERO 1995

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económica y financiera". Sin embargo, no estuvo exento de acusaciones de corrupción, como no lo ha estado ninguno de los gobiernos de Venezuela.

—Sí, pero la corrupción tiene que verse, no atribuirse. En el caso de los últimos gobiernos democráticos, ahí está el tremendo empobrecimiento del país y el enriquecimiento inesperado de la clase política dirigente para evidenciarla.

—Usted no vive muy mal que se diga...

—Yo vivo bien porque, desde temprana edad, supe administrar mis haberes. Se supone que el jefe del gobierno, a quien el Estado le paga todo, tiene más razón que nadie para ahorrar y poner eso a funcionar de forma que le produzca. Pero, ya desde antes de ser Presidente, me arbitraba muy moralmente, extrayendo fondos adicionales con mi trabajo de profesor oficial de las Fuerzas Armadas, y eso no es estafar sino servir a la nación.

—Sin embargo, estuvieron a punto de extraditarlo por delito de peculado.

—Usted lo ha dicho: a punto, pero no lo hicieron. Y en última instancia, es verdad que dicen que en época de Pérez Jiménez había corrupción pero había prosperidad. Entonces, bendita sea la corrupción que produce prosperidad al país.

—Gonzalo Barrios, Rómulo Betancourt, Raúl Leoni, Jóvito Villalba... Usted ha sobrevivido a muchos de sus principa-

les adversarios políticos, líderes del pensamiento democrático venezolano. ¿Siente acaso el dulce placer de la venganza al ver su proyecto empantanado?

Sentirme satisfecho por el dolor que hoy experimenta Venezuela sería rebajar mi condición de ciudadano venezolano.

Sinceramente, hubiera deseado que mis adversarios políticos triunfaran y que el país estuviera disfrutando de un grado de prosperidad y de paz extraordinario, pero hay que ser realistas y ése no es el caso.

—¿En qué concepto tiene al pueblo venezolano? ¿Conserva antiguos rencores o ha hecho las paces con la historia?

—No tengo por qué guardar resentimientos contra un pueblo que siempre me ha demostrado su estima. Un pueblo que, cuando volví al país, en 1978, me prodigó tales manifestaciones de aprecio que obligaron al doctor Caldera, entonces Presidente por vez primera, a dictarme auto de detención y a reformar la Constitución, de manera que yo soy el único venezolano que está inhabilitado a perpetuidad para el ejercicio de las funciones políticas.

—Usted vive en España desde hace más de 30 años. Ahora, cuando en este país se cuestiona la actuación del aparato de seguridad del Estado en la lucha antiterrorista, ¿qué ideas pasan por su cabeza al evocar antiguos recuerdos como el asesinato de Leonardo Ruiz Pineda, la Seguridad Nacional, Guasina o Sacupana?

—No existe paralelismo alguno; todo país tiene sus características y sus acontecimientos específicos. Lo único que recuerdo es que un tribunal de Estados Unidos dictaminó que no había posibilidad de extraditarme por muertos. Todo eso pertenece a la leyenda negra, como es leyenda el alzamiento popular del 23 de enero.

— ¿También la Seguridad

Desde su búnker madrileño nimia contra este país

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Nacional pertenece a la leyenda?

—La Seguridad Nacional existió porque era necesaria para mantener la ley y el orden, pero le repito que los muertos de la dictadura se pueden contar con una mano y sobran dedos, mientras los de la democracia se cuentan por millares.

—¿Un jefe de Estado está siempre al corriente de las acciones que emprenden sus subordinados?

—Tiene el deber de estarlo. En mi caso y en el caso de Venezuela específicamente, yo tenía que saber y me consideraba responsable de todo lo que acontecía en el país.

—¿Cómo recuerda a Carlos Delgado Chalbaud?

—Sé que hay quienes me acusan de su muerte, pero ¿qué razones podría tener yo para matarlo? No sólo era mi amigo, era primo de mi mujer y fue Presidente por disposición mía. Su muerte a manos de Rafael Simón Urbina trastocó todos mis planes, porque yo no quería ser Presidente de la República sino seguir al frente de las Fuerzas Armadas para estructurar desde ese cargo una institución modélica.

—¿Responden hoy las Fuerzas Armadas venezolanas a sus expectativas?

—Las Fuerzas Armadas de Venezuela no están en condiciones de cumplir el papel de defensoras de los intereses específicos de la nación venezolana. Su deterioro llega hasta tal punto que si el país tuviese la necesidad de mantener un enfrentamiento armado para defender su soberanía, no servirían de nada, porque han perdido su capacidad de combate y están integradas por oficiales poco capacitados. Por otro lado, están tan corruptas que para ascender de rango en Venezuela ya no se requieren méritos de profesionalidad ,castrense sino vinculaciones de carácter político.

—¿Se arrepiente usted de algo?

—No tengo de qué, porque no hay unanimidad acerca de mis pecados.

"No había posibilidad de extraditarme por muertos"

¿Qué mal le hice a Venezuela? ¿No colocar al cuñado de alguien en la administración? ¿Llevar señoritas a La Orchila?

Yo no tengo nada de qué avergonzarme; ahí no había reuniones de homosexuales ni de lesbianas, y llevo 50 años casado con la misma mujer. En todo caso, mucho más inmoral y más lesivo para Venezuela es darles poder de decisión en la administración pública a las barraganas de los Presidentes y botar el dinero a mansalva sin construir algo perdurable para el país.

—¿Cómo resolvería hoy Pérez Jiménez el problema de la inseguridad? ¿Inventaría nuevas fórmulas o aplicaría viejos métodos?

—Sintetizar algo como eso me llevaría más tiempo del que dispongo.

—Pero, es obvio que está usted consciente de que mucha gente clama hoy por su mano dura. ¿Es disciplina lo que falta en Venezuela?

—No es un sistema blando ni uno duro lo que va a redimir al país. Es una buena labor de gobierno, hecha por gente que tenga inteligencia para captar los verdaderos problemas, y talento para aplicar los remedios apropiados.

—Durante su gobierno, Carlos Andrés Pérez conoció la cárcel por conspirar contra el régimen. Recientemente, ha tenido que volver a ella por estafar a la nación. ¿Qué opina del personaje?

—Carlos Andrés Pérez ha sido el mandatario más derrochador que ha tenido Venezuela. En los cinco años de su primer gobierno ingresaron más de 75 mil millones de dólares por concepto de renta petrolera, y no solamente los gastó sino que endeudó al país. Yo no sé si los empleó en obras de caridad o se los embolsilló, pero un Presidente que haga desaparecer esas enormes cantidades de dinero es, definitivamente, un mal gobernante.

—¿Cómo valora las últimas intentonas golpistas protagonizadas por sectores insurrectos de las Fuerzas Armadas venezolanas?

— Mi impresión es que los militares se hicieron eco del malestar popular. Ahí sí puede hablarse con propiedad de movimiento cívico-militar, porque antes y des-

pués de los intentos de golpe, el pueblo se manifestó mayoritariamente contra el presidente Pérez.

—Rafael Caldera era un joven intelectual bastante promisorio cuando usted lo envió al exilio. ¿Cree que es el líder que Venezuela necesita hoy?

—Rafael Caldera fue de los escaladores de la deuda pública.

Durante su gobierno, ésta se incrementó en 30 mil millones de bolívares y la gestión realizada en obras tangibles de bien colectivo no alcanzó a cinco por ciento de los dineros administrados. De manera que lo poco que hizo Caldera en su primer mandato, todavía la nación lo debe con creces. ¿Qué importancia tiene que fuera un sabio si no supo gobernar de forma fructífera?

—Sin embargo, en comparación con el resto, parece que supera la media.

—Es cuestión de apreciaciones. Puede ser que Caldera haya sido el menos malo de los gobernantes de Venezuela, pero de ninguna manera se puede decir que haya sido el mejor.

—¿Qué me dice de su carisma y de su imagen de hombre honesto?

— Déjeme decirle que ese tirón popular no existe. Caldera es el fruto de unas elecciones donde solamente fue a votar 30 por ciento del electorado, y salió electo con 15 por ciento de los votos. Dígame usted si a eso puede llamarse respaldo popular.

—¿Quién es el hombre para Venezuela?

— Yo no creo en prodigios; a los hombres tengo que verlos venir. Al mandatario se le juzga por sus actuaciones anteriores y desgraciadamente, no sé si será por mis cataratas, pero hoy por hoy no vislumbro a ninguno.

—¿Y usted, qué ha ganado y qué ha perdido en estos 80 años de vida?

— He perdido vista, oído y energía, pero he ganado en olfato, en serenidad y en sabiduría. Tengo las disminuciones propias de la edad, pero con los años he

Caldera le temía y Pérez le parece un fiasco

intensificado mi antigua manía —no voy a decir la virtud— de estudiar todos los días. Siento la satisfacción de nutrirme de conocimientos, aun a sabiendas de que muchos de ellos son inaplicables.

—¿Le molestan las críticas?

—No soy ajeno a lo que dicen de mí, pero digamos que me he independizado sobre lo que de mí opinen en Venezuela, no por desprecio a los venezolanos sino porque es una realidad que, para bien o para mal, ya no me alcanza.

—¿Ha sentido alguna vez la necesidad de volver a gobernar?

—No siento nostalgia por mi país, ni siquiera como ciudadano, porque yo no quiero vivir en una patria tan convulsa y tan sumamente insegura como es hoy Venezuela. Mucho menos gobernarla.

Es cierto que, en alguna oportunidad, estructuré un partido con el objeto de dejar sentir mi influencia; pero, como era de esperarse, el partido se pervirtió y el proyecto fracasó. Si volviera ahora, encontraría a una Venezuela deshecha, con necesidad urgente de labores de cirugía reconstructiva; es decir, de extirpación de males, labor poco grata, poco convincente y poco popular. Además, la recuperación tomaría por lo menos tres lustros, porque el organismo nacional, como el cuerpo humano, necesita un tiempo para sanar de sus heridas, y yo ya no estoy para proyectos a largo plazo.

—¿Qué espera de la vida?

—Mantener lo que tengo. En mis oraciones diarias no le pido al altísimo que me aumente, sino que me conserve mi suerte. LA FEBRERO 1995

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Orlando Castro

Al unísono crecían rozagantes mofletes, poder y bolsillos, hasta que el coloso de las finanzas, el ferrocarril de los seguros, el guapachoso del monopolio radial fue reventado sorpresivamente sin derecho a pataleo. Huida a Miami por toda respuesta. Cubano de estilo y gentilicio, con innegable vocación de político, el líder de la gente útil compró el silencio hasta que alguien dijo. Lo indician de estafador.

Lo tildan de conspirador. Lo creen lavador. Se presume culpable 4O

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icharachero, fama ganada. Escandaloso y rumbero, o sea, cubano.

Procaz, baste sólo buscarle la lengua. Quienes dicen conocerlo, dan cuenta de un talante festivo, de un ánimo siempre dispuesto para la juerga, la chanza, la broma oportuna. Y, qué duda cabe: tremenda broma que echó Orlando Cas-

tro Llanes cuando, después de hacerse como el que más de un suculento auxilio

No fueron pocos los políticos, los periodistas, los parlamentarios que lo defendieron a capa y espada, con un "calor que evidenció el soborno", atiza Poleo.

Pero, "¿qué más se podría esperar de Orlando Castro, una persona que en 1989 declaraba a la prensa en Venezuela que si no lograba sus negocios por la vía normal, él se bajaba de la mula?", se pregunta, también desde Miami, Thor Halvorssen, uno de sus inefables archirrivales. "Tal vez esa frase resuma su filosofía de la vida, aquella que aprendió en la Cuba batistera. Esa filosofía de pagar empleados públicos, de comprar

joder. En Estados Unidos, seguro que v2. a tener problemas con la justicia; en Venezuela, difícil que se recupere; ni en Cuba, la gran frustración de su vida —ha sido uno de los más conspicuos financistas de la contrarrevolución—, podrá desarrollar sus ansiados sueños de poder político. Esta, así parece, ha sido su última gran fechoría". Tiene 68 años.

L

os orígenes de estos particulares financiero, pica los cabos, antes de la procederes de Orlando Castro hay estatificación de su multicéfalo grupo Laque empezar a rastrearlos en los tinoamericana-Progreso. La broma costó tempranos años cincuenta, cuando al país unos 600 mil millones de bolívaen Cuba, tras el cuartelazo de 1952, cores, de acuerdo a cálculos de Rafael mienza la dictadura de Poleo, 400 mil, según los Fulgencio Batista. Nacido expertos varios. Sin embaren La Habana el 30 de Ocgo, ahora, a espaldas de la tubre de 1926, sangre gajusticia, desde su oficina en llega en las venas, de oriBrickell, Miami —ya un lugen medio, sus pinitos en gar común en materia de las aulas los hizo con los escondrijos—, el supuesto curas salesianos y desde coloso de las finanzas hoy en el saco de los pillos, en muy joven, de acuerdo a la mira de muchos de quielo escrito por el periodista nes lo admiraron y comievenezolano Ramón Maceiron de su mano, acusa ras en su biografía del ajuste de cuentas, retaliapersonaje, se vinculó a la ciones: venganzas de este actividad política de su gobierno. "Perdí todo. Topaís. "Orlandito era un do", languidece (¿acaso niño malcriado y no sabía otro chiste?). peinarse cuando empezó a Quizás haya algo de meterse en la política, con cierto en sus torpes defenapenas 13 años". Líder LAS tenia una relación simbólica; con Bernárdez, ca óti ca sas. Quizás el pase de fac- a.un matungo tunua estudiantil durante el pritura haya constituido la única fórmula periodistas, de intimidar a cualquiera con mer gobierno de Batista (1940-44), pronposible para destapar la olla de una de las grandes sumas de dinero, de practicar el to se incorporó al izquierdoso Partido más grotescas estafas que conozca la histerrorismo, de inclinar la balanza de la Revolucionario Cubano Auténtico. En toria patria. Los cinco dedos regordetes justicia —comprándola—, es la que le plena oposición, se alía a figuras sindicade Orlando Castro hacía tiempo que depermitió construir uno de los más impre- les ("de ahí aprendió toda esa palabrería jaban su huella negra en donde se posa- sionantes poderes económicos del país, demagógica suya de catequizar a sus emban: ¿cuántos rumores no se tejieron al- que ahora se le derrumba". Alguien que pleados con aquello de que su principal rededor de su abombada figura desde que coincide con tales opiniones y que solici- dirigente sindical era él", señala alguien saltó a la luz pública?, ¿lavador de dóla- ta expresamente el escudo del anoni- que años después lo vería en plena acción res, conspirador, estafador? Atropellador mato, da cuenta de uno de los tantos obs- como empresario), encabeza la acción jue impertérrito, Castro hizo y deshizo a su táculos —acaso el más turbulento— que venil del partido, participa en protestas y libre albedrío. Tenía los medios, el poder Castro habrá de enfrentar para levantar manifestaciones en contra del régimen, y, por añadidura, la picardía para pasar su torpedeado imperio: "Si bien es cierto organiza brigadas y estrecha su relación sonriente por entre las situaciones adverque se llevó muchísimo dinero y eso to- con Eduardo Chibás, figura de renombre sas. Las investigaciones, las denuncias davía le garantiza obvias cuotas de poder y fundador del posterior Partido del Puesiempre llegaron a nada. Supo hacer las e influencia, hay algo que no puede evitar blo Cubano Ortodoxo. Durante la gescosas. Y el consenso entre los consulta- y eso es la vejez, la senilidad. Orlando ha tión presidencial de Grau San Martín, dos apunta hacia el mismo punto: sus in- perdido fuerzas, vitalidad, energía; ya no Castro, de apenas 20 años, llega a ser difluencias sobre todas las esferas de poder. es el mismo. Y es por eso que se dejó putado por el partido Ortodoxo, cuya 01

popularidad se hace cada vez mayor entre la población.

"A raíz de esa amistad con Eduardo Chibás, un hombre honesto, de demostradas virtudes, es que Orlando Castro toma conciencia de la importancia de los medios —específicamente la radio— dentro de los asuntos de maniobras políticas.

No es gratuita esa obsesiva manía suya de adquirir emisoras de radio. Represen-

ciar la corrupción del régimen. El país entero se paralizaba para escucharlo y Castro lo acompañaba con frecuencia al estudio. En una ocasión —año 1951 — , presentó acusaciones formales en contra de Gonzalo Sánchez Arango, ministro de Educación. Este le exigió pruebas y ante la carencia de ellas, una noche, Chibás, tras una dramática intervención radial, optó por el suicidio. Al aire. Castro, dicen, estaba a su lado.

Tan tremebunda circunstancia vino a modificar dramáticamente la situación del partido Ortodoxo. Al año siguiente, el cuartelazo de 1952 corona de nuevo a Batista en el poder, lo que termina por desmembrar la organización. De los movimientos que surgen, ilegales todos en tanto que el dictador decide N eliminar los partidos políticos, el más importante resulta ser el 26 de Julio, liderado por Fidel Castro, quien antes había militado junto a Orlando en el Ortodoxo. Ambos personajes fueron rivales en los años universitarios, aunque el empresario siempre reconoció las facultades del sempi-

Tras la muerte del dirigente ortodoxo, Orlando Castro se vio imposibilitado de culminar sus estudios de Derecho. Sus primeros hijos existían, debía mantenerlos, y por aquel entonces —la putrefacta gestión de Batista en su máximo apogeo— empezó su trayectoria en el ramo de los seguros: en la Godoy Sayan —hermanos peruanos que, tras fracasar en Venezuela, tuvieron buen éxito por allá en La Habana—, primero de vendedor, luego algunas demostraciones de garra, tanta que ascendió hasta la vicepresidencia de la empresa. Al propio tiempo, el movimiento de Fidel Castro cobra vigor, se intensifican los ataques, las expediciones en la Sierra. El 1 de enero de 1959, Batista huye de Cuba, la revolución se hace con el poder. Orlando Castro conoce al Che Guevara y Fidel Castro le ofrece —cuenta él mismo— la embajada de Japón. La rechaza. Prefiere mantenerse en la línea de las aseguradoras. Tenía futuro. Y mientras el gobierno de Fidel establece los nuevos lineamientos: reforma agraria, confiscaciones, nacionalizaciones —es decir, se declara de carácter socialista, celebran la victoria de Playa Girón y toda la historia harto conocida—, Orlando Castro opta por reconocerse como contrario a la causa. Es un opositor declarado de Fidel Castro. En 1961 abandona la isla, y para siempre. "Desde entonces, una gran nostalgia se apoderó de él. Sentía que había perdido el papel histórico que debió tener dentro de los destinos de Cuba. En cuanto al fantasma de Fidel, jamás lo pudo exorcizar".

taban una plataforma ideal para sus obscenas ambiciones de poder", apunta otro observador. Era Prío Socarrás presidente de Cuba, cuando Chibás empieza a transmitir por la ya legendaria emisora CMQ de La Habana su dominguero programa de denuncias. El espacio, que salía al aire a las ocho de la noche, era casi un objeto de culto. Chibás aspiraba a la Presidencia, de modo que se encargaba de denun-

terno revolucionario. Incluso —cuenta en sus memorias— hicieron buenas migas.

"Hicimos buena amistad. Fidel quiso entrar al partido y yo le abrí la puerta. Pero Chibás no era muy partidario de dejarlo, porque lo consideraba un individuo agresivo en política y pensaba que le iba a traer problemas con los militares. Fidel nunca se llevó bien con Chibás. Pero ingresó al partido".

se mismo año llegó a Venezuela. Y comenzó a armar su rumba. Llegó sin dinero, pero con evidentes ganas de hacerlo. En este país tenía más chance que en Miami, el destino lógico de los refugiados cubanos; a su familia sí la envió temporalmente hacia allá. Entretanto, cierta mentalidad parroquiana y naive presente en los locales —los usufructuanos del régimen comenzaban apenas a de-

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E

Un Castro en la lona

linearse— contrastaba con la bullanguera, entradora y confianzuda capacidad del habanero. Recuérdese que Orlando Castro era un político, por encima de cualquier otro adjetivo que merezca.

Así, logró que su conocido, Roberto Salas Capriles, le consiguiera un puesto importante en Finaco (Financiera de Construcción), que formaba Otro Castro en conteo regresivo, alguna vez socios parte del Banco Construcción. Y al poco, No les iba mal. La verdad es que las valga la ayuda de algunos amigos cuba- arcas de Castro engordaban y engordanos, de un ojo único para ver las oportuni- ban con el programa de las casitas. A dades y de una serie de relaciones cultivaprincipios de los años setenta, sin embardas, se hace Orlando Castro, junto a go, desvía la brújula, se separa temporalCésar Rodríguez y Carlos Salas, con la mente del ramo de la construcción y se mayoría de acciones de Finaco. "Siempre inmiscuye de nuevo en el negocio de los supo que la mejor manera de entrarle a la seguros, área que conocía desde sus días gente era a través de los bolsillos, una novicios en Cuba. Si bien la fuerte comconstante en su vida", señala alguien que petencia dificultaba las cosas a cualquier se precia de conocerlo. El grupo Mendoza arriesgado que osase pisar un pequeño los ayuda y se dedican a la venta de casas espacio de su terreno, éste decide hacerle Viposa en las parcelas de Finaco. frente a las adversidades: Latinoamerica-

na de Seguros C.A. inicia sus funciones en Venezuela al tiempo que Carlos Andrés Pérez comienza su primera gestión.

"Castro supo sacarle provecho a su confesa amistad con Cecilia Matos. Amén de su indudable visión, su vocación para el riesgo y las innovaciones que planteó en negocio, como la póliza AMD —hospitalización—, logró que la dama, de amplias influencias y poder de decisión, le garantizase una interesante porción de aquel desbordado torrente de dólares que manejó el gobierno en los años sauditas", recuerda un enterado de los pinitos de Castro en tales menesteres. La política del 0,5 por ciento de comisión personal, añade, le funcionó más que bien al cubano, pues supo captar decenas de millonarios seguros del Estado. Y la curva de Latinoamericana empezó a trazar una flecha violentamente ascendente.

"Su natural vocación de liderazgo, esa FERRERO 1995

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que desplegó desde su época de muchacho en Cuba, la transfirió al área comercial. Castro maneja mucho mejor a la gente que al dinero. Compraba conciencias y a quien no se dejaba, lo hundía. Su ambición siempre fue el poder y sabía que la única manera de lograrlo era a través de la incursión en el área financiera", reflexiona un antiguo cercano. "Además, debe reconocerse que Castro revolucionó el mundo de los seguros: Seguros Progreso, por ejemplo, especializada exclusivamente en automóviles, fue algo nunca visto en Venezuela". En efecto, el crecimiento desbordado de Latinoamericana de Seguros le permitió fundar Sofilatín,

Expande más tarde sus inversiones en el exterior. En República Dominicana abrió una gemela de Latinoamericana de Seguros y luego una sociedad financiera —bancos hipotecario y comercial. A su hijo Rafael Castro y a su nieto Jorge les tocó encargarse de aquellas empresas. "Y ahora, ambos son prófugos de la justicia dominicana; huyeron en barco y avión, luego de demostrárseles miles de manejos dolosos en la isla", filtra un oportuno asomado. También en Panamá —"el paraíso del narcolavado"— montó una reaseguradora; en Miami, otra, de su propiedad, pero le dio pérdidas. "No nos fue bien, pero luego supimos recuperarnos", reconoció Castro.

J:

rlando Castro no fue figura pública sino hasta principios de los noventa, cuando su grupo inició los movimientos orientados hacia la adquisición de la mayoría accionaria del Banco de Venezuela. La historia, hartamente reseñada por la prensa, divulgada como la más impresionante operación bursátil de que se tenga noticia, se cuenta más o menos así: tras la compra del paquete accionario, cuatro por ciento, de manos del grupo Mendoza, Carlos Bernárdez, presidente de la institución, se negó a aceptarle un puesto en la junta directiva. Ese fue el detonante de una enconada guerra que se desató por el control del banco. Progresivamente, el grupo de Castro empezó a fagocitar las acciones, compra, compra y compra. Entre febrero y marzo de 1990, eleva su capital accionario a nueve por ciento; la negativa a aceptarlo en la directiva se mantiene.

No obstante, una serie de jugadas clave (como la Oferta Pública de Acciones, OPA, aplicada por Castro por vez primera en Venezuela), algunas alianzas, como la que estableció con José Alvarez Stelling, el uso compulsivo de los medios, varias amistades sembradas en puntos estratégicos (los espaldarazos de Esperanza Martinó, primero en el Banco Industrial y luego en Fogade fueron fundamentales, dicen), corolaron en la victoria: en muy poco tiempo, el grupo Latinoamericana-Progreso tomó el control del

O

titán: "Iré a Éstados Unidos a procurar su extradición" luego el Fondo Financiero Latinoamericana, después una arrendadora, una reaseguradora. Y vino entonces la necesidad de meterse en un banco. Al poco, abre el Banco Progreso, antiguo Banco Zulia, y nombra a Cristóbal Palacios como su presidente. Palacios, un próximo de lustre que lo acompañó en más de una batalla, movió sus influencias con los hombres del Estado --primo del ex ministro de Hacienda, Luis Ugueto—, lo que le permitió obtener suficientes permisos y licencias.

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La historia en boca de terceros se desvía por otros derroteros: "En Florida ocurrió que Orlando Castro Castro, su hijo, y Nancy, la esposa, ambos al frente de los negocios, birlaron astronómicas cantidades de dinero, lo que originó, además del quiebre y el cierre por varios meses, una terrible crisis familiar". Castro, cuentan, los excecró del clan, aunque posteriormente los perdonase. "Fueron simples muchachadas", confiaría una vez el patriarca.

banco de mayor tradición de Venezuela.

"Castro abrió una nueva era en la leyenda de la banca nacional. Rompió su tradicional elitismo y por eso pasará a la historia. Su guayabera logró adueñarse del mayor símbolo del mantuanaje criollo", pontifica un admirador. "Siempre fue visto como un recién vestido. Ocurre entonces que tuvo grandes resentimientos (a su hijo le fue negada la solicitud de entrada al Caracas Country Club) y por ello se enfrentó con los amos del valle", desliza otro.

Castro se cuidó do no firmar ningún documento Se entendía con Matos mejor que con Pérez

La batalla fue dura. En aquel tiempo comenzaron a circular las denuncias acerca del oscuro origen de la riqueza del cubano triunfador. Una pregunta iniciaba el maremágnum de señalamientos: ¿de dónde podría sacar tanto dinero? En julio de 1991, compró también, por 3.444 millones de bolívares, el Banco República. "Hay versiones que vinculan a Orlando Castro con Miguel Recarey, prófugo de la justicia estadounidense, por una estafa multimillonaria al gobierno de aquel país. Se comentó mucho que del dolo de 1.200 millones de dólares haya salido parte del dinero que permitió a Castro realizar algunas de sus inversiones", reconstruye un informante. Por supuesto, la especie que obtuvo mayor quórum entre sus detractores fue la del lavado de dólares. Se le señaló como cercano al Cartel de Medellín, socio de Pablo Escobar Gaviria. Castro respondió, acusó guerra sucia de parte de Bernárdez y su llamado cuerpo de seguridad parapolicial. "Mi dinero no proviene del

asidero en manejos ilegales de dinero", lanza el abogado Alejandro Terán, quien desde Venezuela trabaja en conjunto con Thor Halvorssen, uno de los supuestos miembros de la Bernarpol, como calificó Castro al equipo de seguridad de Bernárdez, preso durante algún tiempo por el caso de las bombas para dar con la pista del cubano. "En 1992 un fiscal de New York, Robert Morganthau, solicitó la apertura de una investigación por el delito de smurfing (un mecanismo fraudulento, específico de legitimación de capitales). Ese caso no fue cerrado, como se hizo creer. Se mantuvo paralizado; pero ahora, a raíz de la intervención del grupo Latinoamericana, se va a reabrir. Yo me voy a convertir en acusador directo, voy a hacer lo posible por traer a Orlando Castro a

procurar su extradición". "Este es el primer capítulo de la historia", dice Halvorssen. "Vendrán otros, muchos otros, porque no puede ser que, por un

principales son Luzmelia Briceño —la verdadera dueña del corazón de Castro, cosas del amor— y Eccio León, abierta en marzo de 1992, con un capital de un millón de bolívares. "En menos de 15

lavado de dólares. Y no conozco a Miguel Recarey", se defendería.

"Pero, ¡por supuesto que Orlando Castro es un lavador de dólares! Su poder económico es una centrífuga gigantesca con

proceso de manipulación de la información, la gran mayoría de los venezolanos desconozca la verdad sobre un hombre que es la esencia de la mentira... Voy a demandar, con todos los hierros".

días, movilizó un total de 15 mil millones de bolívares".

Unos movimientos de cuenta efectuados el 4 de septiembre de 1992 en el Banco Progreso por Inversiones Galeota son, al

Venezuela. A principios de febrero iré a Estados Unidos a presentar la moción y

De vuelta a los mecanismos para blanquear dinero, a decir de Terán, el principal consiste en la apertura de decenas de empresas fantasmas, las cuales abren cuentas del propio banco, utilizan el capital del banco, lo transfieren de una firma a otra y de ahí al exterior. Un documento presentado por el abogado da cuenta de más de 40 empresas registradas en Venezuela, pertenecientes al grupo de Castro. "Lo difícil del asunto", ataja un profesional enterado de estas lides, "es que la firma de Castro no figura en ninguna de ellas. En casi todas aparecen los nombres de los testaferros". Terán ejemplifica el asunto con el caso de Inversiones Galeota C.A., cuyos accionistas

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al decir de Terán, más que reveladores: a las 19 horas con 35 minutos y 27 segundos, se deposita un millón de bolívares; cumplíansel4 segundos más cuando abonan un millón 200 mil; 11 segundos después, abonan 50 millones; a las 19 horas con 36 minutos y 35 segundos, suman 100 millones; once segundos después depositan dos millones y medio, y a las 19 horas con 36 y 59, ingresan 35 millones. En total, a lo largo de un minuto y medio de depósitos, Inversiones Galeota —"sin sede conocida, no se sabe a qué se dedicaba, ¿cómo se expli-

orque Orlando Castro es lo que los cubanos llaman un globo inflado", prosigue Alejandro Terán, "esto es, un tipo que tras la creación de una matriz de opinión positiva, a cualquier precio, se dedica a realizar operaciones en las que el único beneficiario es él". Es por eso que Castro tuvo carta blanca para llevar adelante una serie de acciones que le permitió acumular una excesiva cuota de poder en Venezuela. Financió campañas electorales, de todas las orientaciones. Otorgó dinero a parlamentarios, gobernadores, empresarios.

"La intimidación fue su arma predilecta. Las emisoras de radio, el mecanismo para lograrlo", coincide la conseja.

Dentro del proceso de expansión de su imperio, una de las tareas que Castro se tomó con mayor determinación fue la acumulación de estaciones de radio, incluyendo el Circuito Mundial, 37 en total. "Nunca supo explicar por qué invertía en radios que no daban ganancias", reflexiona el diputado Alexis Rosas. "En todo caso, estaba al tanto de que eso le garantizaba poder. Muchas de ellas, incluso, las compró ilegalmente, con concesión y todo. Desataba campañas, apoyaba gente. Les daba espacios a políticos, a cambio de favores". Muchos de éstos lo defendieron a morir con aquello de que "se había quedado en Venezuela, te-

p

ria de esa clase dirigente y la trató con el desprecio que ella ha sabido merecer".

Hasta Miraflores fue arropado por la sombra guapachosa de Castro. "En tiempos de Velásquez", interviene Alexis Rosas, "entraba como Pedro por su casa. Con la venia de Ramón Espinoza, ministro de la Secretaría, con quien se reunía todos los lunes en el edificio del Banco República. Daba órdenes". Igual en Fogade y la Superintendencia de Bancos. Tales eran sus influencias en las instituciones públicas, que en alguna ocasión, previa a la intervención del Banco Progreso, el grupo Latinoamericana llegó al punto de presentar documentos comerciales del Seguro Social para camuflar una evidente situación de iliquidez. "Los manejaba como si fueran suyos. Recurrió a papeles del IVSS para mostrarlos como pasivos. Rodaron de compañía en compañía y luego fueron devueltos", rumia un testigo.

Sin embargo, tantas cuotas de poder, pareciese, se le escaparon de las manos.

Se hizo eco de intrigas, comenta alguien que lo trata con condescendencia. "Fue minando su propio piso. Su obsesión lo llevó a extremos peligrosos. Por ejemplo, no pocos fueron los policías que le hacían llegar falsas grabaciones telefónicas de sus enemigos y se las vendían a precios exorbitantes; él las pagaba con gusto",

Halvorssen: "¡Voy a demandar con todos los hierros!" can estos movimientos?"— colocó 189 millones 700 mil bolívares en el Banco Progreso. Más adelante, presenta un documento que demuestra una transferencia de más de 15 mil dólares al Banco Atlántico, "que es una institución investigada por lavado de dólares". Terán, más que suspicaz, añade que el propio presidente Caldera tiene conocimiento de la situación, en tanto que él mismo le envió una carta explicativa. "¡Coño!", exclamaría, fiel a su académico vocabulario, nuestro habanero amigo.

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niendo la oportunidad de no hacerlo".

Castro mantuvo siempre su muy personal estilo. Elegante no era; amable con su gente, sí. Los guardaespaldas no gozaban de su aceptación, prefería andar solo y, tan pintoresco él, le fascinaban las hamburguesas de McDonald's. Viajaba poco, pagaba bien y se consentía una rutinaria manía: desayunar religiosamente en el hotel Tamanaco.

"Decía que desde allí dominaba al mundo". Se citaba con sus adláteres, no importaba la orientación, y les diseñaba las líneas. Rafael Poleo, preciso él, escribe que "el tipo realmente penetró la mise-

refiere un simpatizante. De modo que tanto flirteo con los sectores políticos lo llevó al desenlace conocido. Y por ello, el personaje de marras habla de venganzas.

No sólo porque ahora dominen sus adversarios. Sus actuaciones privadas también le ganaron cierta fama de conspirador. Si de un lado, Thor Halvorssen mantiene la certeza de que tras la famosa explosión del coche bomba en el CCCT, se escondía la sombra del empresario —"¿ por qué crees que Castro es quien va a la PTJ a denunciarme? Recuerda que yo lo estaba investigando"— y un tercio asegura que Ramiro Helmeyer, el principal

indiciado en tan explosivo asunto, recibió ron". Asegura además que, tras la inter- pecto, no está de más añadir que ahora un cheque del Banco Progreso a nombre vención, el hombre pasó de ser el tipo han salido a relucir ciertas relaciones no de uno de sus tantos alias —William campechano que siempre fue, a una per- del todo claras entre Gustavo Roosen y Angarita— por 175 mil dólares; por el sona ensimismada. La crisis le produjo Orlando Castro. "El quería salvar a su otro, hay quienes lo vinculan al fulano bronquitis. Un día confesó que "lo peor grupo y no pudo. Planteó incluso la idea golpe que, presuntamente, estaría prepa- de todo esto es que no me ha dado tiem- de hipotecar sus inversiones en Colombia, para traer 50 millones de dólares. Se rando Radamés Muñoz León. Súmese, el po para la imaginación".

"Toda esta historia", prosigue el con- lo impidieron". singular apoyo que brindó a la Causa R. Hasta que, a mediados de diciembre, fidente, "no sólo la de Orlando, sino la La vez que allanaron su domicilio, el jefe ocurre el desenlace. El grupo de Orlando de la Disip, general Rafael Rivas Ostos, le de todas las estatificaciones que ha sufriaclaró que "la emisora YVKE Mundial do la banca durante este primer año de Castro pasó a manos del Estado y él se está dándole muy duro al gobierno y está gobierno, es el producto de una evidente mudó al estado de Florida. El aval de 39 mil millones de bolívares —la ciapoyando un cacerolazo. Adefra oficial— no fue suficiente más, usted es muy amigo de la para que Latinoamericana-ProCausa R y de Hugo Chávez greso cancelara sus cuotas de fiFrías". deicomiso. No pudo cumplir No obstante, una versión de con sus obligaciones en la cámatal allanamiento, ocurrido el 1 ra de compensación y, de acuerde julio de 1994, orienta más do con la Superintendencia de hacia cuestiones hormonales Bancos, las pérdidas del grupo que subversivas. Resulta que al llegaron a 112 mil millones de coquetón Orlando, en compabolívares. El espinoso embrollo ñía de alguna pimpolla, se le habría ocurrido visitar un nidito apenas ha comenzado. Tras la retirada de Castro, lógico, de amor que mantiene, casualmente, en el mismo edificio que emergieron denuncias acerca de —en otro apartamento— a vedecenas de maniobras que habría realizado a fin de mantener ces cobija al comandante Chávez. Luzmenia Briceño se su emporio: falsificación de acenteró y su corazón barquisitas, programas de computación metano se partió en mil pedaparalelos para modificar balanzos. Furiosa, hizo un par de llaces, complicidades en todas las madas y convocó a sus amigos instancias, etcétera. Con ello, en los cuerpos de seguridad. Al "se las arregló para estafar a poco, se producía la visita doFogade, metiendo activos que miciliaria. "Voy a matar dos valían menos de la mitad de lo pájaros de un solo tiro", predijo estimado; también, para sacarles la afectada. Al enterarse Castro, auxilios de 50 mil millones y no le quedó otra salida que inteluego llevárselos al exterior". En rrumpir su idilio y regresar al efecto, el grupo entregó sus emihogar. "No pude siquiera echar soras sobrevaluadas (6.500 miel polvo", se lamentaría luego Ruta obvia de una saga en entredicho: de La Habana gozona al llones por las 37 emisoras). Y Miami Vice ante un amigo íntimo. hubo que tomar sus casas, fincas El bochornoso allanamiento, sin duda, estrategia política. Por primera vez, el sis- y avionetas. lo afectó mucho. "Castro sabía lo que le tema financiero se cuadró abiertamente "Perdí todo. Todo", insiste y nadie le venía encima", comenta un fiel del cuba- con un candidato: Oswaldo Alvarez Paz, cree. La certeza de que sus cuentas en no. "Después de aquello, logró reunirse a excepción de José María Nogueroles, Miami, según los entendidos, se hayan con Rafael Caldera, para demostrarle del Provincial". Castro, evoca, hubo de elevado en casi 400 mil millones de bolíque no era banquero de oposición, que luchar con mucha gente, aunque tenía sus vares, es demasiado fuerte. La tormenta, estaba de su lado. Viajó a República Do- cuantos amigos en las alturas. "Más aun, sin embargo, no termina de amilanar sus minicana a reflexionar. Trotaba mucho, el alto gobierno lo quería ayudar. Se reu- ánimos para la guasa. "Pero, ¿cómo pude pensaba. Prefería entregar las acciones nía frecuentemente con Andrés Caldera, sacar 39 mil millones de bolívares, si en del grupo a los trabajadores antes que cecon Ciro Zaá. Julio Sosa decía que Cas- Venezuela había control de cambios?".0 derlas al Estado. Sus ejecutivos se opusietro hacía cosas por el país". A este resFEBRERO 1995 EXCESO

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tentando metástasis de hormigón, su colocación en la lista de edenes preferidos por los hombres: "Sólo faltaban los casinos", proclaman los defensores de la tesis que apoya la infraestructura urbano-playera. "Si Margarita quiere algún día estar a la par de Aruba, Curazao o el resto de las islas antillanas, debe dar puerta franca a la ruleta".

En Venezuela, siempre y cuando sean acatados los límites constitucionales, no es pecado dedicarse libremente a la actividad económica que se prefiera, y como no existe normativa legal que prohíba de manera expresa la puesta en funcionamiento del envite y azar, el desarrollo de ésta en la isla ha ido en vertiginoso ascenso como complemento al paquete de atracciones y negocios que provocó el boom de la construcción. Acciones de grupos afiliados como Asojuegos (la asociación local que aglutina a los empresarios de la industria del azar) pelean la aceptación en el Congreso de una ley reguladora en ese sentido y como primer paso en el camino hacia la explotación legítima del ramo —garantía de seguridad requerida por la inversión estadounidense— esperan que los parlamentarios aprueben un proyecto que incluye exhaustivos análisis financieros y promete cumplir en partes iguales con las expectativas del Estado y del sector privado.

Omar García, abogado y propietario del Casino Margarita Mirage, presidente de Asojuego y jugador ocasional, frente a la diatriba aún viva acerca de la legalidad de estos Michael Boettcher compara centros de recreación y Margarita con Moscú apuesta, se defiende explicando que la activi1 Caribe reserva a canadad de los casinos en la isla cumple con la nordienses clase media e mativa legal y no viola italianos ¡viva la playa! las bellezas naturales de ninguna disposición jurídica: "La Constitución una isla favorecida por la bonanza reciente del milagro señala que la falta de una turístico. Margarita, la proley reglamentaria de la actividad no menoscaba puesta patria en ese mar, destila váadero son. Su gente, el libre ejercicio de nina diferencia del prefabricado guna empresa de esta naestilo turístico que caracteriza turaleza". Si los impuesal resto de los anfitriones del tos se cobran de la forma área, ronronea una apuradita debida —aspecto de la Omar García apuesta por una ley de juego idiosincrasia sangre liviana y aplicación que siempre parlanchina que, en metros está por verse—, para el cuadrados, sobrepasa la oferta de agencias de viajes, siempre listas a fisco nacional y en particular para la tributación, serán considerablemente importantes los aportes que los casinos generen a la advender salados paquetes de goce terrenal. Y lejos de ser un peladero de chivo con hoteles cinco estrellas, sabe de pescadores, comidas típiministración margariteña. cas, fiestas patronales e historia con héroes nativos y cañones.

El anteproyecto de ley que se discute en el Congreso se refiere El despliegue de resorts y edificaciones gigantes data de fechas a que 20 por ciento del ingreso bruto sea liquidable mensualmenmás o menos recientes, siempre en pro de la movida de concreto te, independiente del impuesto sobre la renta del 36 por ciento que los estándares de confort internacional exigen a la hora de del ejercicio fiscal anual y el impuesto municipal. La tesis que ha competir de tú a tú en el renglón de la aventura vacacional. La que tenido mayor aceptación por parte del ministerio responsable es en tiempos remotos fuera una isla bendita por los dioses —pescala que hace referencia a un pago de 20 por ciento sobre el ingredores dueños de sus playas, taguaras de poca monta y vendedores so neto mensual, o bien tres por ciento de la entrada diaria de diambulantes de empanaditas de cazón—, en la actualidad pelea, osnero a las mesas del casino. Por lo pronto, a falta de una ley espe50

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lizara una importante inversión casi de un modo simultáneo, a pesar de las diferencias culturales de una población acostumbrada a funcionar en términos cuadriculados, y de las graves dificultades que han tenido que superar al enfrentarse casi a diario con grupos de la mafia local que ejercen el control del poder y de las operaciones comerciales, inauguró en diciembre de 1994 "uno de los mejores casinos del mundo". Dice: "Los casinos son instalaciones operacionales de tipo internacional por lo que su evaluación, para bien o para mal, debe equipararse a la calidad que implanta la norma "Aún las inversiones realizadas no están en mundial. En ese sentido, Margarita no ha supecondiciones óptimas para recibir a jugadores rado aún su etapa inicial, aunque muchas señaacostumbrados a visitar los casinos de Las Ve- les hacen vislumbrar, en un período de cinco o seis años, una significativa depuración del nivel gas, Atlantic City, Aruba y otras islas del Caribe" turístico que hasta el momento impera".

cial que rija la materia, los casinos han estado viviendo de la gracia del Estado: sólo cumplen con el compromiso del impuesto sobre la renta común a cualquier actividad comercial y liquidan diez por ciento sobre los premios (artículos 69 y 70) en los casos —bingos y torneos— en los cuales el ganador recibe un monto cuantificable de dinero.

Válido preguntarse entonces, por qué tanta preocupación del

sector empresarial por el logro de un reglamento especial si, lejos de la norma, convocan a viva voz y sin rendir tributo ni gracia. A la cuestión, los empresarios o directores, responsables de la conducción de estos sofisticados garitos de estreno, alegan que otorgarle un marco legal al desempeño de la faena reforzaría la confianza de jugadores e inversionistas; y si la isla Salvatore di Vincenso tiene el más grande logra seducir la apuesta de empresas estratégicas, a futuro quedaría asegurado el desarrollo vertical de este nuevo sector de explotación comercial.

De todas formas, nadie lo niega: son 16 los casinos que flotan dentro de la circunscripción del territorio isleño, y a pesar del despliegue de neones y de los muchos bolívares invertidos en las enormes salas de suntuosa infraestructura, exudan cierto aire de provincianismo con aspiraciones de gran lujo que le otorgan al proceso rostro amateur; quizás la condena tropical obliga a que sean muchos los peldaños por ascender antes de alcanzar el nivel de excelencia al que se aspira. Cuenta de este hecho da Michael Boettcher —presidente de Storm International Ltd.—, quien se instalara también en Margarita para completar el dominio que sobre el mundo del juego ejerce desde sus 22 consagrados centros de apuesta: "Aún las inversiones realizadas no están en condiciones óptimas para recibir a jugadores acostumbrados a visitar los casinos de Las Vegas, Atlantic City, Aruba y otras islas del Caribe. Honestamente, no he visto aún una operación de casinos de

verdad profesional. Me refiero tanto a la supervisión de los juegos y la antigüedad de los equipos como a la actitud y el look de los dealers". Cree que desde el principio el estándar operacional debió ser más alto.

En Moscú, por ejemplo, una ciudad donde su compañía rea-

Baraca: el casino fue sede de torneo

M

il metros cuadrados tiene Le Casinó, hasta el momento, la sala de juegos más grande del país. La instalación conjuga a la mitad los sistemas de juego americano y europeo (ruletas con cero sencillo estilo francés) y pone

en funcionamiento la primera mesa de chemin de fer, un juego poco difundido en el cual la pelea es entre jugadores. Salvatore di Vincenzo —hombre de viajes y propietario de la agencia Salvatore— desde hace 28 años dedica su vida a la expansión del turismo en esta patria del tercer mundo y, considerando que era O FEBRERO 1995 EXCESO

S

este el momento oportuno para echar mano a la suerte, se aventu- retribución a la concesión otorgada, han aportado una serie sigra en la magna empresa que por un lado afianza la atención de via- nificativa de donaciones para el beneficio de la comunidad. jeros foráneos y por otro, ofrece a los venezolanos la oportunidad Por su parte, La Perla es, después del recién inaugurado Le de disfrutar dentro de los márgenes del territorio una actividad que Casinó, el reducto más grande de la isla en la especialidad. El estaba sólo permitida mar afuera y pasaporte mediante. suntuoso dorado, con vino, madera y luz blánca, decora una Grupos italianos —el caso de Le Casinó es un ejemplo— y enorme sala tapizada de espejos, en donde la música de fondo se confunde con las exclamaciones de quienes se entregan al azar y españoles han invertido y arriesgado —por aquello de la ausencia de ley reguladora— grandes capitales en tierras margarite- enuncian en voz alta sus números de la suerte. Apuraditas se ven ñas y ya recogen los frutos de una prosperidad inaudita en épo- pasar las anfitrionas, ceñidas en breves faldas negras y siempre dispuestas a complacer la petición que la vena etílica de los jugacas de crisis generalizada. Entre compañías se pisan los talones y los casinos compiten en tamaño y lujo, y en definitiva, salvo escasas excepciones, las mesas de Apuraditas se ven pasar las anfitrionas, cetodos los recintos rebosan de jugadores, expertos ñidas en breves faldas negras y dispuestas a o aficionados, que sin pausa lanzan sus apuestas y a quienes la gloria de los billetes bien habidos complacer la petición que la vena etílica de les sonríe intermitente.

los jugadores demanda

La Perla, el segundo en expansión cuadrada

Un enorme aparcamiento ofrece Reina Margarita para la seguridad de sus clientes, que si bien pueden estar dispuestos a arriesgar fortuna en el bingo-casino, dudable resulta suponer que quieran perder en la proeza el automóvil que los llevara a fajarse en tales lides. Este punto a su favor se traduce en afluencia de público: la sala es una de las más concurridas y la masividad de la convocatoria, según los entendidos, debe atribuirse al hecho de que dispone de un gran salón de bingo, juego que ha exhibido siempre carácter popular. Rafael Rodríguez, quien también tiene intereses en establecimientos de juego en España, comparte la dirección de este gran salón con la señora Reina, y ambos, en 52

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dores demanda. La noche avanza y los rostros de croupiers y apostadores se turnan con regularidad y sincronía: el gusano del juego engancha a los más vulnerables y mientras beben gratis porque la casa ofrece, muchos clientes se empeñan en hacer realidad sus sueños de fortuna al instante.

Los operadores del Oasis fueron entrenados por Storn International y 52 de ellos son venezolanos, aunque Boettcher recuerda haber tenido que rechazar a muchos de los jó%;enes que se entrevistaron con él por no considerar que reunieran el nivel mínimo requerido: la gracia de estos personajes radica más que nada en la desenvoltura y el estilo con el cual se manejen; se trata principalmente de un problema de actitud. El juego es una empresa de servicios y estar sentado en una mesa en donde el dealer ni siquiera se inmuta con la presencia del jugador y no lo mira a los ojos cuando éste le habla, es estar en un casino en el que las cosas no están funcionando del modo correcto. Gerentes ingle-

ses, algunos venidos de Moscú y otros de Suramérica, entrenan en varios casinos simultáneamente a grupos de 125 aspirantes, entre quienes se seleccionarán a los mejores que seguirán empleando los casinos.

El Oasis está también en la lista de las nuevas opciones del juego margariteño. Queda en el hotel Stauffer y su arquitecto, Massimo Villani, contempló una llamativa decoración oriental que sugiere analogías con el nombre del recinto. A modo de tienda árabe relucen los colores de las máquinas traganíqueles que, rodeadas de dorados y satenes de color, destellan entre vegetaciones falsas y camellos tamaño natural. El casino estará equipado con los artefactos acostumbrados: ruleta inglesa o europea, ruleta americana, póker de cinco cartas, Black Jack y baccara, y pretende tener horario corrido de 24 horas si la ley de casinos no dispone al respecto ninguna cláusula restrictiva.

(1

ue los casinos y el juego han florecido en las épocas de apogeo de las grandes culturas instaladas en el mundo occidental parece una realidad indiscutible, según la tesis del sociólogo francés Paul Yonnet. Sin embargo, la literatura esta plagada de sórdidos personajes cuya dimensión psicológica se ahoga en los excesos del azar, y nunca falta en los recuerdos familiares de la mayoría de los mortales la existencia remota de algún miembro del árbol genealógico que hiciera añicos la fortuna familiar entre giros de ruleta. El juego ha sido visto con cierto peyorativo desdén y asociado por mecánico acto reflejo con el alcohol y demás vicios de la noche. Mas, a pesar de las visiones ortodoxas de las sociedades —verbigracia, ésta—, la oferta de los casinos ha existido siempre, luciendo como una de las actividades de catarsis urbana menos desdeñables.

En el resto del país sólo existen garitos de poca monta. La verdadera amenaza expansiva en el renglón la constituyen las zonas de atractivo turístico como Margarita o Puerto La Cruz.

Pero uno de los puntos que pelea el proyecto de ley presentado al Congreso tiene que ver con el privilegio de exclusividad que la isla neoespartana pretende en este sentido. Guillermo Ramírez —personaje clave en la promoción y publicidad del fenómeno en discusión y miembro directivo de Asojuego— considera que "no tendría razón de ser, en términos de desarrollo turístico y comercial, que Venezuela se convirtiera en un gran salón de juego; desde un punto de vista estratégico, la isla debe tener la licencia de exclusividad del desarrollo de la actividad de casinos, lo que añadiría a la promesa vacacional un punto más de interés y limitaría de algún modo la amplificación indiscriminada de este tipo de recintos".

Massimo Villani a por la suerte de Aladino

Parte de la concurrencia que se asoma al casino cualquier día de la semana forma parte de un público ocasional que invierte en el ocio una porción escasa de su presupuesto; pero dentro de la clasificación a la que puede ser sometida la clientela, también existen los jugadores que asumen la faena de un modo profesional y constituyen el interés capital de los casinos. Los jugadores de oficio pueden ser reconocidos por la cantidad de cábalas con las que sazonan el desempeño de sus apuestas y como buenos creyentes afiliados al partido de la suerte, exploran los favores de la fortuna prefiriendo algunos números antes que otros, vetando algunas fechas del año o de la semana, evitando que cualquiera se coloque a sus espaldas durante sus apuestas porque las malas energías de la otra persona pueden ser absorbidas para desgracia del apostador o haciéndose acompañar por damas consideradas amuletos de buen presagio. Una cultura llena de apasionamientos y cánones particulares se esconde juego adentro y a pesar de que se trata de una actividad comercial garantizada por la demanda, nunca le faltarán detractores. "Muchos personajes de la política local mantienen intereses comerciales con los casinos de otras islas, razón por la cual poco les interesaba que los venezolanos tuvieran dentro de su circunscripción inmediata recintos igualmente equipados y bastante competitivos en términos económicos. Pero, a estas alturas —sea aprobado o no el plan de ley—, el asunto no tiene marcha atrás: en la isla no existe inversionista que no contemple dentro de cada nuevo centro comercial, hotel o centro nocturno, la sonrisa dorada de un respectivo casino con nombre de neón", redondea la gravedad de una voz anónima a la vez que se soba las manos abrazadas, y dobla su última apuesta interrumpida por la apelación. u FLORERO 1995

EXCESO

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A la luz del día es abogado en ejercicio pleno. Debajo del agua gusta experimentar con el submarinismo. Frente al teclado, su alter ego, Otrova Gomás, comba-

te el ocio y escribe zandeces sin recato alguno. Y durante los carnavales, Jaime Ballestas suele tomarse en serio eso de la fotografía para desmontar decenas de complejos y multicolores arti-

ITTVII

Con ra la pared

lugios concebidos con la pura intención de ocultar rostros.

Un portafolios de abreboca a la ambiciosa exposición que, bajo el título La mascarada y

desde el 4 de febrero hasta el 4 de marzo, presentará en la galería de la Alianza Francesa —el ojo curioso se cuela por las festividades de Venecia, New Orleans, Munich y Río de Janeiro. De acuerdo a las palabras del propio autor, la muestra se construye bajo la premisa de que el hombre vive bajo una máscara, buscando eternamente impresionar a través de colores, para luego descubrir que "lo que le produce el asombro real es cuando se la quita y se ve que es él mismo"

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En blanco, en dorado; un encuentro disfrazado

Recreaciรณn fantรกstica de un triste y aparatoso pierrot

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El afĂĄn de ocultarse ricamente rebasa el rostro para alcanzar el atavĂ­o

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ue tan Avenida de románticas aguas y limpísimo reducto de leyendas de vino y muerte, amén de musa del famoso vals, el Danubio convocó a empresarios, comerciantes y periodistas de los cinco continentes para que presenciaran cómo los siete países orillados a él intercámbian sus productos prímermundistas. Y para que compraran, también

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DIEZ HORAS DE CARANTOÑAS LUFIHANSIANAS A

30 MIL PIES, un sutil aterrizaje en Frankfurt, tres horas más en tren y metro hasta que por fin, el destino, Ulm. Por fin, el Danubio. Durante tres días, la coquetísima ciudad germana a orillas del río de marras —Stuttgart al noroeste, Munich, al sureste y cero grados entre los huesos— deviene salón de fiestas de un sarao babilónico y de inspiración corporativa que, sin lugar a dudas, luce baladí. El séptimo congreso del comité económico de países atravesados por la misma corriente del vals azul, léase Alemania, Austria, Hungría, Rumania, las repúblicas Checa y Eslovaca, Ucrania y Bulgaria —éstos ausentes pues sus navieras están en proceso de privatización— pretende vender a los invitados de los cinco continentes, aquí presente's, las bondades del minimercado común del área, como si fuera una novedad el éxito alimentario o turístico de cualquier región del primer mundo. Fácil, los anfitriones dan con la meta. El gesto común de los que se asoman a la ventana del hotel Maritim, a la hora de llegar, es el mismo: bocas abiertas, ojos verdes, azules, negros o marrones desorbitados de puro asombro. La imagen real de postal con patos graznando y barcarolas, bosquecillos y ardillas socializadas no necesita promoción alguna, valga la objetividad. Como tampoco la necesita el paraíso.

De todas formas, tozudos que son, los locales convocan en inglés universal a comerciantes, agentes viajeros, representantes de empresas varias —maquinarias de construcción o fabricantes de barcos—, agencias de turismo, hoteleros, periodistas —en total, 130 expositores, compradores de 25 países, más de 200 invitados, 40 representantes del gremio de los fablistanes que llegaban por cuentagotas desde 17 destinos a cual más recóndito— para que vean que los quesos, los vinos y las historias de cada recodo medioeuropeo navegan según la oferta y la demanda a buen recaudo, sin contratiempos ni crisis, con las reglas de juego claras, a quien pueda interesar, y que la sobreproducción de, por ejemplo, leche y derivados lácteos hace que los teutones —en este caso— se esmeren en el intento de colocar, cuanto antes, la sobredosis de FEBRERO 1995 EXCESO

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uno de sus ítem donde se la compren. Un

ordeño da, por lo bajo, SO litros diarios. Y en los gaznates domésticos, a estas alturas, no cabe tanta liquidez. Es hora de establecer vínculos con los amantes del corn flakes que en el mundo hay para salir de este atolladero de la exultante bonanza.

Se nota con el recibimiento. Luego que la heterogeneidad racial y de gentilicios está completa comienza la feria con fuegos artificiales y una cena que deja en pañales a Spielberg; y no sólo porque el menú de bienvenida es servido en porciones que saciarían a un velocirraptor. Un show bilingüe que mezcla leaders y jazz culmina con una sorpresa de efectos especiales: estallan petardos de las raciones de strudel de manzana. Que la sorpresa dé idea del calibre de los preparativos. Lo demás está a la vista: en la bavariana ciudad ondean banderas de esquina a esquina y los 110 mil rubicundos habitantes, comprometidos con la causa del orgullo nacional en tiempos de preventa, recuerdan, frente a cada turista, sonrisa de por

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Ulm: un menú sin salchichas medio, a los paisanos que saben con quiénes por re o por fa pueden darse lija: que si allí nació el inteligentazo de Albert Einstein, que si también el primer hombre que en el planeta, según se tenga memoria, intentó volar —cayó de bruces sobre el Danubio— y dejó la herencia de los ícaros; que si, igualmente, de allí es oriundo algún vecino de apellido Welzer, nomenclatura que puede resultar familiar a la única venezolana en muchos kilómetros a la redonda; a la que le castañean los dientes. Se ufanan con igual pasión de su fábrica de cerveza —lidera el ranking nacional desde un honorable quinto puesto; bueno saber que la Republik Deutschland produce 220 marcas—, la Ulmer Münster Bier, en sus paladares desde hace 500 años, productividad máxima y 180 empleados.

A los cisnes —elegante novedad para todos los invitados— en cambio, no los ensalzan tanto. Con esa estudiada dignidad de las novias, los palmípedos, sin embargo, parecen los más involucrados 62

EXCESO FEBRERO 1995

+ La ternura trepa las paredes Iglesia -0de Wiblengen, toda barroca

+ Biblioteca de incunables

con aquella franja de 50 kilómetros que convoca a medio mundo. Blancos y radiantes, antifaz en la mirada, fantasmales entre la bruma que exudan las aguas al borde del hielo, sobreviven sin la zozobra de la extinción junto al progreso. Claro, no hay ni un excepcional papelito lanzado a lo largo de su hábitat, para confirmar la ecológica regla local: los alemanes podrán —estadísticas dixit— cambiar la lencería de sus colchones con frecuencia

La catédral más alta del mundo

tierra a cielo

de rémora, la menor cantidad posible al año en comparación con otros desaliñados europeos; pero no aceptan una mácula en sus glaucas lomas —todo está podado al ras y la responsabilidad no es precisamente de sus pródigas vacas pastoras— o en las fachadas de sus casas añosas, o en las verjas de sus corrales.

Verde verdad que se constata ya sea caminando por el sendero que conduce a la casa donde dejó este mundo el general Rommel, o hacia a la cueva enrejada de un paseo peatonal donde pernocta repatingado un oso enorme.

El roma n- -0ticismo va a caballo O(udad ~cal para todas las edades

KLAUS LUKAS, DIRECTOR GENERAL DE LA OFICINA DE TURISMO DE AUSTRIA —la cita precedente, dos años atrás, fue en Linz y Viena es una opción turística posterior en

saben que por ahí el río no es navegable, no. Piensan en alguna ocurrencia mientras los miembros del Danubio Travel Mart, en funciones desde 1972, meten el hombro por el interés común, gesto que los acredita como visionarios: bregan juntos, saltando diferencias políticas, desde mucho antes que cayera el muro de la cercana Berlín. Son un clan monolítico cuya nómina conforman seis organizaciones de turismo y seis compañías transportadoras por cada país que, en bloque, han de decidir gobierno, asistencia y todo lo demás: desde la creación de la identidad visual uniforme del cónclave bajo el logo de la ola azul del Danubio hasta la producción de afiches, videos, invitaciones a periodistas, publicaciones en alemán, inglés, francés e italiano y ferias de turismo, verbigracia.

iena: un vistazo en tiempo dlya s .-Dulces para redundar Schwarzenegger: músculos vieneses de exportación

Los pilares de la realeza f

esta visita de nueve días—, se asume vocero en la convención: "Esta vez vinieron 50 compradores menos que la pasada, pero aquí hay un contingente, sin duda, más diversificado: llegaron 15 de Canadá, 14 de Japón, 16 de Estados Unidos y se han sumado, con ganas de cerrar negocios, businessmen de Argentina, Australia, Brasil, Chile, Colombia, Hong Kong, México, Perú y Suráfrica, y, por primera vez, de Taiwán, China, Dinamarca, Francia, Gran Bretaña, Hungría, Italia, Noruega, Suiza, Suecia, los Países Bajos e Israel. ¿Que qué es por ro que más se interesan?

Bueno, por viajar en barco".

Y si es posible, por remontar el alto Danubio, sendero particularmente idealizado por la nostálgica seducción que ejercen las leyendas románticas tejidas sobre aquellas aguas mansas a ritmo de un dos tres y que involucraban a nobles y princesas. Los alemanes, las pilas cargadas, se matan por hacer posible el sueño, aunque 71 ,11111 Itil Mit

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En 1982 se inauguraron con Viena.

Siguió, en 1984, la feria de Belgrado; en 1986, la de Budapest; la de Regensburgo en 1988, la de Bratislava en 1990, la de Linz en 1992 y está por verse el bis de Budapest: en 1996 la cita es en la capital húngara, segundo destino turístico de esta feria a ojos vista, rociada por lo demás de vino blanco y delicados bistés de ternera; las plebeyas salchichas brillaron por su ausencia. Que no la prisa. En Ulm, itinerario apretado. Agasajo en el Ayuntamiento aderezado de un concierto marcial con la música típica interpretada por un conjunto de enrojecidas narices.

Embelesamiento en la catedral más alta del mundo y dentro de ella, concierto en órgano con menú bachiano. En alguna tienda de delicatessen, compra de chocolates con forma de pajarito; el que lleva una ramita en el pico es el emblema de la ciudad; viéndolo cómo hacía su nido, los habitantes introdujeron por la estrecha puerta romana que la protege los troncos con que la levantaron. Visita y cata, por supuesto, a la fábrica de cerveza Ulmer Münster Bier: instalaciones modernísimas y limpísimas que no cesan de sonar, menear, triturar, embotellar, etiquetar.

Entrevistas, a primera hora, en sendas sesiones bilingües, con los organizadores y FEBRERO 1995 EXCESO

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expositores que vienen en plan de ver y dejarse ver. Asombro en la antigua biblioteca de la ciudad que alberga bajo su techo movedizo en perspectiva y entre sus paredes dorado rococó libros escritos en el siglo doce, antiquísimas biblias incluidas.

Inspección a la universidad meramente científica ubicada en Neu Ulm, del otro

El re--0flojo nocturno de un ensueño

lado del río. Sonrisillas en el museo del pan. Caminatas a todo frío. Comidas puntuales y exhuberantes que consentían vista, olfato y gusto.

Ulm, a juzgar por tal despliegue —no tanto por la invasión en las calles de Mercedes y BMW, de manufactura casera—, luce próspera, cara a la Selva Negra. Es una mezcla grata de ciudad y pueblo. Las fachadas de sus edificaciones prefieren los dibujos en mahlaray de motivos domésticos y religiosos —flores o queru-

Navegación a ritmo de un dos tres

un sonido de violines y la solemnidad a la vista de las construcciones avisan que el tierno y cuadriculado ínterin campestre ha terminado. Ahora es otra historia —pese a Hitler y demás guerras— y Schónbrunn descuella en aquella plaza real y el éxtasis monárquico parece más fidedigno. ¡Ah! ¡Oh!, se oyen. El larguísimo palacio y los imponentes jardines cortados por patrones solicitan la reverencia. ¿Dónde quedó el Danubio? Nadie lo ve, pero todos oyen el ritmo decimonónico de Johann Strauss zumbando en las orejas. ¿Y dónde está la orquesta? Ilusión del inconsciente colectivo. Fantasía absolutamente romántica que animan los carruajes tirados por monumentales caballos que se desplazan sobre las avenidas de adoquines, las flores que se chorrean paredes abajo desde las macetas y las elegantes ca-

Budapest y Danubio: un diálogciiCiós A bordo, "I- baile alegre y festivo La ocasión para reconocer el pa prika

-o- La legendaria nobleza de cara al mítico río

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EXCESO FEBRERO 1995

bines— en dinteles, aleros y ventanas que otras artes y que por supuesto el fiberglas. Sus vitrinas ofrecen productos internacionales de primera, así como cualquier cantidad de artículos elaborados en harina de trigo que vende una chica con trajecillo cortado con la típica mantelería de cuadritos. Y su gente —leit-motiv en Europa— se mantiene en sus trece a la hora del nacionalismo, en su caso, regionalismo. Se creen lo mejor y así parecen. Se quieren a muerte.

Julie Andrews, entonando el clásico soundtrack de La novicia rebelde, más que distraer el hilo disparatado de las propias lucubraciones, sirve de enlace amable y a la mano entre culturas occidentales y orientales de toda ralea que, adormecidas por su canto del do re mi, comparten el superautobús que va a depositar a esta liga de naciones en el siguiente punto: Viena. Completa el almíbar de la atmósfera, el paisaje de la ventanilla: impepinablemente, azul cielo, verdes prados, negros pinos. Sólo altera el modelo algún hueco turquesa coronado de patos. O una vaquita manchada. O un promontorio bien apilado de troncos al borde de la mullida carretera. Austria se parece a Alemania, vecindad obliga, y sin embargo cierto tufillo a pastelería, la aparición de

feterías decoradas con el mismo gusto de aquella época épica del galanteo y los descotes: sillas pulidas y negras en forma de herradura y asientos breves. Para degustar un café vienés y saborear los manjares untuosos que, al primer bocado, te cuentan de la sensibilidad de un país de dolores recientes. Un par de días más de gratos trajines entre hoteles que eran palacios, pocas autopistas y caramelos con la cara de Wolfgang Amadeus Mozart, para rozar con los ojos lo que los nativos han erigido en siglos, se disuelven con placer.

Despedida con la oferta de un atractivo carnaval y, splash, entrada triunfal y nocturna en la señorial Budapest de luces y reflejos, castillos y estatuas, calidez y folklore vívido. A bordo resulta imposible negarse a dar unos pasos en círculo, los brazos en cruz enlazados unos con otros, mezclados los atavíos invernales con las faldillas floreadas y las camisas blancas de los actores que cantan y hacen palmas en una despedida de Europa sobre las legendarias aguas del Danau, como llaman al Danubio, impregnadas de cuentos: de aquel arrecife lanzaba a sus enemigos un sanguinario rey; en aquel convento se hace el famoso vino tinto que mientan sangre de toro; de este lado de la orilla, los souvenirs bordados más tiernos y la esperanza de volver.L

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al es la lógica de su sexualidad, de su identidad antropográfica, de su música. El celebérrimo cantautor escudriña la hora y el espacio de selva y asfalto brasileños. Repasa con su voz de beso el sino de ser latinoamericano.

Y reconoce su admiración por la sensualidad de Romario y por la música de Simón Díaz, de quien toma una tonada para el disco que grabó en castellano, ese idioma que es "un portugués con osamenta".

Inteligente, en este diálogo particular incrustado de sonrisas, teorizó a su ritmo sobre lo que hace y es, sufre y compone. El, el mejor

N TA E CA Tercero incluido EXISTE -SE HA DICHO- UNA AMÉRICA CONQUISTADA Y OTRA COLONIZADA. A los efectos, esta última se presenta, transcurridos 500 años, como una sociedad que alcanzó niveles elevados de prosperidad sin por ello renunciar al ejercicio de una fuerte cultura democrática. Esto se ha logrado en muchos casos apelando a variados expedientes impugnables, ejercitando arrogancias de toda suerte, insoportables muchas de ellas para nosotros

los latinoamericanos. Al propio tiempo, no deja de ser cierto que en ningún lugar del planeta se escuchan en la midia escrita o hablada las opiniones más duras contra el racismo o la intervención de marines. Es proverbial el ejercicio crítico que se actualiza a diario en la vigilante sociedad de Estados Unidos. La disonancia crítica y autocrítica, sumada a la tradición protestante, con lo que ella reúne de contrición, de puritanismo, de es-

Aquiles Esté desde Seío Paulo Ilustración: Julio César Rodrtgua

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fuerzo y laboriosidad, produjo en tiempos de posguerra lo que es sin discusión posible la comunidad más compleja del globo.

Entretanto, las sociedades de la América Latina, descritas en su momento como el Edén de la Tierra por el embustero redondo de Cristóbal Colón, parecieran desvanecer para siempre la visión del Paraíso. Y eso no apenas porque florezcan hoy como antes en las bocas ,del Orinoco el calor, los zancudos incesantes, las montañas infranqueables, al contrario de lo que apuntaba el Almirante, sino porque a la postre, todos los recursos se han malgastado, el grueso de los pobladores vive en la oscura pobreza y a la dictadura le suceden la anarquía y la corrupción, hoy revelada como el princi-

dos, hemos renunciado inconscientemente a contribuir al diseño de nuestras propias vidas. "Todo nos viene de afuera, pues nos quedamos en la más paupérrima periferia de la ciencia y la técnica, sin más creación propia que la del arte y la literatura".

De esa América conquistada hay dos mayoritarias, la hispana y la portuguesa.

Estas se parecen aquí, se alejan allá, y es sobre el diálogo y la diferencia de estas dos culturas que apuramos la conversa con Caetano Emanuel Viana Teles Veloso. Bahiano de Santo Amaro de la Purificación, un pequeño poblado del noreste brasileño, donde la gente le teme a Dios al tiempo que celebra a su hijo más polémico, contradictorio y amplificado.

Caetano, uno de esos raros artistas que

diendo como nadie la plasticidad del portugués brasileño.

Lo admirable es que esta provocación intrusa se alzaba en momentos en que el continente se dejaba embrujar por el sueño revolucionario venido de Cuba hoy convertida en una pesadilla siniestra, navegando contra el lirismo ideológico autorreferido que iría a cambiar supuestamente, no apenas el destino cubano, sino el de toda Hispanoamérica. Pero eso ya va siendo asunto para otro espacio y ocasión, ahora estamos en Leblón.

—Nos ha tocado leer a Sergio Buarque de Holanda, mejor conocido como el papá de Chico Buarque, y deslumbra el modo como trata la diferencia entre la América castellana y la portuguesa. Por cierto, Sergio Buarque es uno de los grandes ensayistas e historiadores latinoamericanos y no cuenta con ese reconocimiento, ni siquiera dentro de Brasil.

Brasil es un país enorme hablando portugués en América con una población en su mayor parte mestiza. Todo eso resulta Ineluctablemente original. Nosotros —Lo tiene y no lo tiene, es decir, quien tenemos por tanto sabe sabe. El que dice esas cosas dice un deber de originalidad exactamente lo que estás diciendo y no pal obstáculo de cualquier adaptación liberal. En este Paraíso, los propios ángeles quisieran renunciar al vuelo. Tierra ingobernable, o mejor, gobernada en muchos casos por Blakamán, el vendedor de milagros, tan reacio a decir la verdad y a solicitar de su pueblo un esfuerzo de lucidez y realismo. En otros, por tecnócratas sin habilidad política, sin maña para detenerse en las cualidades diferenciales de estos países. En verdad nunca estuvimos tan confundidos.

Cuatro siglos atrás, cuando todavía nos concebíamos como potencialidad, todo esto era impensable. Nosotros —observa Carlos Alberto Montaner—, con más habitantes que Estados Unidos, con la misma riqueza geográfica, desovados de igual forma por universidades que tenían más de 400 años y núcleos urbanos formados cuando Chicago era una pradera recorrida por búfalos aburri68

EXCESO FEBRERO 1995

visitan de tiempo en tiempo al planeta y seguramente, el intelectual más conocido e influyente dentro de la sociedad brasileña. Eso, al menos desde finales de los años sesenta, cuando le dio por resetear a la música popular de su país al mando de una guerrilla cultural que denominaron Tropicalismo, un nombre que ha calado, pese a su rancio exotista, contrario a las líneas de fuerza que le animaban a él y a los demás, es decir, a Gil, Bethania, a Gal Costa, a Tom Zé.

Nos referimos al deseo de intervenir los medios de masas, buscando un arte puta, aprovechado de lo banal y en diálogo desculpabilizado con la tradición occidental y muy especialmente con la cultura pop. Todo en la estela del influjo modernizador de la bossa nova, particularmente de Joáo Gilberto, el gran minimalista, que siempre hizo lo mismo haciéndolo siempre diferente, compren-

son pocas las personas. Pero no se dice con la frecuencia con que se debería. El caso es que Sergio Buarque es ideal para explicar esa diferencia entre estas dos culturas.

—La gente dice que es el papá de Chico.

—No, espera un momento, en un ambiente académico, en un artículo serio, Sergio Buarque aparecería con luz propia. Sergio Buarque es inmenso y Chico es inmenso pero por otras razones.

—Chico Buarque es inmenso también por ser hijo de Sergio.

—También. Uno siente en Chico que ya nació en un ambiente de aristocracia y densidad. Su buen gusto proviene del ambiente en el que se formó, un refinamiento que ya estaba en los cromosomas.

Ahora yo conocí a Sergio como papá de Chico Buarque, es decir, personalmente.

Lo conocí en Sáo Paulo y alguna vez conversé con él, lo cual es para mí un gran

Caetano Veloso abraza a Gilberto Gil, su entrañable

honor, pero intelectualmente lo conocí como un gran escritor. Es maravilloso que su hijo se haya dedicado a la música popular en el sentido de que eso me permitió estar algunas veces con él en su propia casa.

—Entonces, ¿lo luso-tupí-afro-árabe es efectivamente diferente?

---¡Ah!, no hay duda. A mí me gustan mucho Sergio Buarque y Roberto Freire por ser ellos autores que han subrayado los mitos de la brasilidad que se fundan precisamente en esas originalidades. Esos mitos sirven para imaginar proyectos para Brasil y, sobre todo, dan cuenta de una cosa que es una fatalidad nuestra: Brasil es un país enorme hablando portugués en América con una población en su mayor parte mestiza. Todo eso resulta ineluctablemente original. Nosotros tenemos por tanto un deber de originalidad.

El problema de Brasil es tomar en las manos ese destino. Pero eso es, esa originalidad no necesita ser construida y lo que es más, ella no es necesariamente un mito como algunos antropólogos de Sáo Paulo pretenden hacer ver. Estos aspiran

a ser intelectuales internacionales sin ninguna marca de originalidad, como si tuvieran miedo de ese aspecto étnico, porque actualmente existe un patrón blanco del Oeste, de lo occidental, como si todo el mundo tuviese que manifestarse en ese molde y si no, pues no se existe y se es una figura étnica, extraña, con ropas raras y de un lugar exótico. Pero todo ese pensamiento es imbécil ya que por el contrario esa fatalidad es nuestra originalidad y nosotros lo que debemos hacer es animarnos a hacer las cosas a partir de ella.

—Brasil ha sido un país tradicionalmente de espaldas al resto de América Latina. ¿Eso es culpa de Brasil, de la América hispana o de ambos?

—De ambos. Por parte de Brasil está el hecho de que nuestras ciudades se desarrollaron en la costa, lejos de las fronteras y con otro idioma, eso contribuye en mucho a alejarnos. Hay lugares donde uno siente la proximidad de la frontera y la situación pareciera ser otra, por ejemplo en Buenos Aires, que era hasta hace poco la única ciudad que conocía del

continente y donde voy desde hace muchos años. Meses atrás estuve en Montevideo y me sentí como en una ciudad brasileña. Si bien, en Ciudad de México, que también visité recientemente y que queda tan lejos y sabe tan poco de Brasil, me sentí, para mi sorpresa, en casa. Hubo una identificación profunda y natural.

—México es el país más católico, más español y más indígena de América Latina. Es un país muy fuerte. Uno entra en una plaza y aquello resulta que tiene dos mil años. Eso sólo ocurre en China, en Egipto, en Roma.

—México es muy fuerte, aquellas pirámides de Teotihuacan, aquel valle, la plaza con la catedral barroca, edificada sobre la antigua explanada aborigen. En Salvador de Bahía hay una catedral proyectada en ese mismo estilo y es única en el Brasil, por eso está en la contraportada de mi último disco.

Caetano viene de grabar una antología con 15 canciones cucarachas, como se le llama cariñosamente a lo latinoamericano allá en Brasil. La selección incluye composiciones ya clásicas, piezas que haFEBRERO 1995 EXCESO

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cia los años cuarenta y cincuenta tenían fuerte influencia sobre Brasil. Hoy eso ha cambiado completamente, ya que el repertorio latino más actual es ignorado en Brasil. Por el contrario, nosotros sentimos desde los años sesenta —fecha cuando se estabiliza la bossa nova— la presencia determinante de la música popular brasileña, sobre todo después que ésta pasara por el embudo amplificador neoyorkino. Así encontramos en el disco número 26 de Caetano obras emblemáticas como La golondrina (1886, tema de El derecho de nacer), Fina estampa (que da nombre al disco), Recuerdos de Ipacarai, María bonita, Lamento borincano, al lado de canciones menos conocidas y más recientes como Un vestido un amor, de Fito Páez, Vuelvo al Sur

una gran atracción por ese ambiente premoderno, eterno y desde luego universal. Esa múdica fue grabada como un homenaje y espero que mi versión no le parezca desagradable, porque lo mío es apenas un reconocimiento, pues lo que él hace es incomparable. Yo le digo a todo el mundo aquí en Brasil, a los amigos, en las entrevistas, "tienen que escuchar a Simón Díaz".

—A los latinoamericanos nos asalta siempre una duda que se mueve entre la nostalgia por aquel mundo estático que perdimos y la seducción que ejerce la cultura occidental y su ideal de cambio permanente. Con la edad, uno se vuelve más contemplativo y más seducido por las culturas de vocación estática. Por ejemplo, sabemos de tu identificación con

nuevo, uno busca y busca hasta encontrar el asunto que interesa y cuando lo encuentras tienes que quedarte haciendo aquello. Dicho de este modo, a mí me gusta Andalucía justamente porque me gusta el cambio. Andalucía es sin duda un estilo fuerte que si bien tiende a perpetuarse, su contenido interno es la idea de llama, de cambio, de creación y destrucción permanentes, y eso para mí es diferente de la idea que me hago de una cosa estática.

—Los creadores tropicalistas parecían interesados en estetizar la vida, eso incluso tenía trazos de proyecto político, ¿todavía es eso lo que te interesa?

—Creo que sí. Hace unos días me pidieron que hablara aquí en el Museo de Arte Moderna de Río, y luego de pasearme por varios asuntos terminé diciendo que yo no aspiraba a una vida más justa, más adinerada, ni siquiera una vida me-

Yo conozco la versión original de la Tonada de luna llena; aquello es lindísimo, algo cursi.

Simón Díaz tiene un falsete puro, una respiración que no acaba nunca

(tango de Piazzolla y Fernando Solanas para la película Sur) y la Tonada de luna llena, de Simón Díaz.

—¿Qué hay de universal en esas músicas?

—Belleza.

—¿Cómo describirías eso en el caso de Simón Díaz?

—Yo conozco la versión original de la Tonada de luna llena; aquello es lindísimo, al igual que todas las canciones de ese disco donde él aparece ordeñando; es tan simple la imagen, algo cursi, es linda.

Simón Díaz tiene un falsete puro, una respiración que no acaba nunca. Uno siente en esa pieza la luz en la noche de una manera tan especial a causa de la ropa limpia: "La luna me está mirando, yo no sé lo que me ve, yo tengo la ropa limpia, ayer tarde la lavé". Se puede ver la ropa blanca y la luna incidiendo, es maravilloso. Al mismo tiempo, yo siento 7O

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Andalucía. Andalucía que es el ojo de Dios y Dios, desde luego, un cíclope.

—La cosa que más adoro en este mundo es Andalucía y tal vez sea cierto que uno se pone viejo y se vuelve más andaluz. Pero, escucha, yo no siento a Andalucía como una cosa estática, si bien entiendo lo que me quieres decir, o sea, que existen lugares con características muy fuertes que llegaron con aquella formación que aspira a perpetuarse, por oposición al mundo moderno, de cambio y devenir. Andalucía debe ser el ojo de Dios y ¿sabes por qué?, porque si bien el razonamiento es perfecto, Andalucía destruye el razonamiento. Joáo Cabral de Mello Neto, que es el mejor poeta brasileño y además el más grande enamorado de Andalucía, siendo el más importante modernizador de la poesía brasileña, critica por ejemplo a los poetas concretos de Sáo Paulo —escritores éstos de abierta vocación moderna— por la angustia de andar siempre queriendo hacer algo nuevo. Allí les dice, no interesa hacer nada

jor, no, yo lo que quiero es una vida más bella, una vida más bonita. Yo todavía tengo eso porque para mí lo más importante es que las cosas sean bonitas, por encima de otra consideración.

—¿La realidad de estos países es injusta por fea?

—Lo que quiero decir es que Brasil me interesa fundamentalmente por su estilo estético, el modo como el portugués suena en Brasil, la forma de caminar de las personas, la malicia, la gracia. De allí que me parezca que el pueblo no deba ser juzgado apenas por su capacidad de generar riqueza material o incluso por su capacidad para distribuir bien esa riqueza.

—Sería una linealidad apenas semejante a aquella de juzgar a los pueblos por su predisposición estética.

—Es verdad, pero el caso es que pasamos por décadas de moda economicistamarxista para caer en una moda todavía más economicista que es la moda neoliberal. Hoy en día vivimos bajo el reinado de la economía; se juzga a las so-

ciedades y a los individuos tan sólo por su capacidad de enriquecerse materialmente. Evaluar a los pueblos sólo por la capacidad de enriquecimiento material es un criterio que acaba por empobrecer la vida, pues la gente necesita aprender a ser bonita, yo diría que a ser más bonita que adinerada.

—Este año habrá Fórmula Uno sin la presencia de Ayrton Senna. Yo sentí mucho su muerte y si me permites arriesgar una hipótesis individual, creo que el pueblo brasileño siente que al desaparecer Senna se va con él un ejemplo insuperable de cómo esa cosa malandra puede tener éxito en un terreno que es tan riguroso. Mal que bien, todos esos pilotos brasileños se han formado manejando en estas ciudades de tránsito anárquico y luego van afuera y traducen esa habilidad en un deporte que involucra tanta tecnología de punta.

—Yo no soporto las carreras de automóvil, pero él me gustaba mucho. Yo estuve una vez con él en un restaurante; se levantó de su mesa para saludarme y eso me hizo muy feliz. Como él, Buarque y Djavan Siempre me pareció bonito e clásicos de toda discoteca progre inteligente y me sentí triste con su muerte, además de que comprendía el sentimiento del pueblo. fuertes son seguramente síntoma de alAhora, lo que dices es verdad, claro que guna tendencia de la sociedad, y si bien en Brasil eso no es visto conscientemente se hacen posibles dentro de un determicomo una cosa malandra, aunque de he- nado cuadro, no dejan de ser en el fondo cho lo es. Y no es visto de ese modo por- expresiones individuales. Aquello es un que Ayrton, a diferencia del brasileño encuentro de temperamento, talento y folclórico, era vivido como una persona oportunidad; las carreras son eso. Enmoderna, objetiva, no malandra y sobre tonces él, que tiene talento y tuvo la todo, muy eficaz, lo cual no parece ser la oportunidad, se ve en una situación en imagen que el brasileño acostumbra tener la que puede exponer su temperamento. de sí mismo. Además, Senna no fue el pri- Romario contrasta con Senna en el senmero en brillar en Fórmula Uno, ya era el tido de que Ayrton gozaba de un recotercero o cuarto en tener brillo de primera nocimiento unánime y hegemónico en su grandeza. Ya tuvimos a Fitipaldi, después manera de hacer las cosas y en su tempePiquet, que por cierto hablaba muy mal de ramento. Romario es más polémico y Ayrton, decía que Senna era marico y... arrogante y eso divide las opiniones, —Y apareció con aquel asunto de mal pero yo lo adoro. gusto de naturalizarse portugués.

—¿Pero te gusta por polémico, por —Eso no lo sabía. crack o por qué?

—Y Romario, el crack de los noventa, —Me gusta por crack y me gusta por ¿cuál es el Brasil que representa? la cara de él, su tipo, me parece buen—Esas expresiones individuales tan mozo, el color, el zarcillo, me parece

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sexy. Lo encuentro un sujeto así, lleno de testosterona, masculino, sabroso y sensual, porque muchas veces lo masculino es una forma de no ser sensual, eso no me gusta, ¿sabes?, como si sólo las mujeres pudiesen ser sensuales.

—Escucha, no estamos pescando escándalo con esta pregunta; incluso, empiezo por aclararte que no te preguntaré si eres homosexual. No obstante, sí quisiera que hablaras sobre el papel que cumple en tu trabajo el estar permanentemente informado de esas dos sensibilidades, de esas dos inteligencias, de ambas memorias, lógico y analógico, masculino y femenino. Todo eso se siente mucho en el último disco, por cierto, esa cosa femenina. ¿Eso está haciéndose más consciente con la edad?

—Como todo y no necesariamente más que otros aspectos. Hoy tengo un tipo de felicidad que cuando se es joven 01 FEBRERO 1995 EXCESO

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ES- DIRECCION DEMUSCADEL ATENEO

gistra con perfección la feminidad. Pero él sexualmente es una persona nítida en su identificación masculina, a diferencia de mí. De modo que no hay regla para ° eso.

—Hablemos más de la vejez. En 1989 decías lo siguiente a la revista Elle: "...en ti primer lugar, no soy nada modesto: soy 9 mucho mejor que Gilberto Gil, Chico á oo Buarque, Milton Nascimento, todos ellos. Soy el mejor de todos. I'm the best!

Ahora, musicalmente soy una persona híbrida. No nací superdotado para esto.

No me adiestré para llegar a un nivel de excelencia como Jodo Gilberto". Pregunto: ¿sigues pensando eso, no son éstas el tipo de cosas que cambian con la madurez? ¿Tiene sentido ser el mejor?

—Yo dije eso como una estrategia de shock para algunos periodistas, pero todo eso proviene de una confusión, ya que se trata de una frase extraída del contexto de una conversación. Yo pienso sinceramente que no soy muy buen músico, que no tengo control real sobre la música. Entonces, cuando los entrevistadores me hablan del reconocimiento que mis discos tienen afuera, que me llaman para grabar en New York, etcétera, yo les digo de inmediato que eso me sorprende, porque yo no soy Jodo Gilberto, Djavan, Milton Nascimento, Egberto Gismonti, Gilberto Gil. Allí me reclaman que me estoy haciendo el modesto y resulta que yo digo aquello sinceramente, pues yo no soy modesto ni estoy fingiendo nada y para demostrarlo les digo eso, que soy el mejor, mejor que todos, lo máximo. Claro, es una frase periodísticamente fuerte y el redactor la aprovecha fuera de su contexto. Lo curioso es que a mí me parece que todos ellos son realmente mejores que yo, todo el mundo es mejor que yo, gil, Djavan, Jorge Ben, todos ellos.

—Pero, insisto, ¿tiene o tendría sentido ser el mejor?

—Yo no pienso en eso. Es una afirmación que, como te he dicho, no puede ser tomada en serio.

—A veces siento que tu presencia en los medios brasileños es desproporcionada.

—Es verdad, yo no merecía estar tan Ul

J

Gal Costa y Marfa Bethania, voces for expon

no se puede tener.

—¿Esa bisexualidad cognitiva y sensorial debe ser vista como una conquista?

—En mi caso es un dato, una fatalidad, no es necesariamente una ventaja ni una desventaja. Es algo que de alguna manera tiene que ver con mi formación personal, mi temperamento, mi configuración genética y psicológica. Yo crecí en una casa llena de mujeres, muchas mujeres. Mi papá era el único hombre adulto y vivía trabajando como agente de correos. Yo convivía a diario con mi mamá, dos hermanas de mi papá, cuatro sobrinas que eran de la edad de mi mamá, y a mí me sucedían dos hermanas, así que todo eso contribuyó para que tuviera una intimidad muy grande con el modo de ser de las mujeres. Entonces, para mí se trata de un dato y se puede sacar provecho de eso como se puede sacar partido de todo.

En algunos momentos de mi vida eso fue un problema y en otros una ventaja. Desde el punto de vista de la figura pública y la creación artística también coincidió el momento de mi aparición como músico en 1966 con la moda de la ambigüedad 72

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sexual, la figura del andrógino y la bisexualidad, recuerda que yo pertenezco a la época de Jagger y Robert Plant. Hoy eso no está tan de moda y ya no se puede pensar en esos asuntos como se pensaba en los años cincuenta. Eso cambió en los sesenta para siempre y yo aparecí en esa época, lo cual acabó aportando alguna utilidad. Ahora, para componer música puede también servir, pero fíjate, las personas pueden tener la configuración sexual más variada, nadie es imposible, y hacer sin embargo excelentes canciones.

Dicen que Cole Porter era parcha, pero Gershwin no era y ambos son excelentes.

Aquí en Brasil tenemos a Chico Buarque que, entre los músicos populares, es el más ampliamente reconocido como aquel que mejor entiende el alma femenina y se identifica con ella. Sus letras donde se expresa desde el punto de vista femenino generan unanimidad completa entre las mujeres, en el sentido de que aquello re-

presente, sobre todo porque desde el punto de vista del mercadeo eso no es acorde. Yo vendo cien mil discos y eso para mí ya es mucho disco. Bethania vende 800 mil discos, Chico 600 mil, Roberto Carlos vendió un millón del último que sacó. Fina estampa ya vendió 250 mil copias y es mi disco más comprado, pero esos números son todavía modestos para el mercado brasileño. Ocurre, sin embargo, que soy considerado como un tipo que quiere intervenir en todos los cuadernos culturales del país. Hay un periodista de aquí de Río que escribió que yo me quería meter en todo, dar opinión sobre todo y de hecho, eso ocurre, aunque últimamente me estoy controlando más porque se pone fastidioso eso de estar hablando sobre cualquier cosa. Está también el hecho de que a mí me gusta conversar.

—Conversar es lo mejor que existe,

obligó a los artistas a refugiarse en los medios para ganarse la vida. Estos —siendo también en su mayoría de izquierda— ocuparon incluso buena parte de su tiempo en cuestionar a los medios y a juzgarlos como aparatos diabólicos y apenas recientemente se han acercado a la midia como opción laboral y creativa, pero es muy poco lo que se ha hecho. ¿No te parece que eso tiene que ver?

—Con toda seguridad. Yo fui arrestado en 1968, dos meses más tarde salí exiliado a Inglaterra, donde permanecí dos años y medio. Al regreso, todos esos actores que trabajaban antiguamente en teatros comprometidos, en aquellos grupos de izquierda más radicales, estaban representando en la Globo y allí siguen.

Al principio eso me alarmó, pero al poco

de emisión brasileño. ¿Qué sugerencias formales aporta el español para alguien que habla portugués?

—La lengua española, sobre todo para un brasileño, suena demasiado enfática, y tal vez sea de hecho muy enfática, y yo diría que tiene algo de exagerada.

Unamuno se refería a. una observación de Cervantes que decía así: "El portugués es el español sin huesos". Allí, Unamuno decía que en su caso le parecía que el español es el portugués osificado. El español es de una regularidad tremenda, al contrario del portugués. La bossa nova, por ejemplo, no habría aparecido aquí si nosotros no hablásemos portugués; Jodo Gilberto es producto de la lengua portuguesa, si bien el portugués necesita de Jodo Gilberto.

Fui arrestado en 1968, y permanecí dos años y medio exiliado en Inglaterra. Al regreso, todos esos actores que trabajaban en teatros comprometidos, en aquellos grupos de izquierda más radicales, estaban representando en la Globo y allí siguen

uno siente cómo vibra el cráneo. Ese gusto latino por la conversa debe tener origen árabe.

—Debe ser, yo soy un viciado de conversa.

—La midia brasileña posee una fuerza y una calidad incomparables con las de todos los países de América Latina. Ese fenómeno, al menos con relación a Venezuela, me parece que tiene que ver con el hecho de que durante los años sesenta, cuando se establece definitivamente la cultura de masas en ambos países, existían en los dos casos regímenes políticos diferentes. En Brasil había una dictadura y ese contexto político obligó a los intelectuales y a los creadores —que en aquella época eran en su mayoría gente de izquierda— a buscar trabajo en los medios, especialmente en la televisión. Eso aportó calidad y densidad a los medios brasileños. Por el contrario, en Venezuela, la tolerancia hacia las ideas de izquierda no

tiempo me vi fascinado, me parecía sabroso y en el fondo, tropicalista; era lo que nosotros intentábamos hacer de cierta forma. Fue allí donde nació mi interés por las novelas de la Globo, que no veía antes. Resultó muy saludable para Brasil.

Por otro lado, eso trajo una escasa delimitación entre la alta cultura y la baja cultura. Hoy, como resaca de los años ochenta, hay una moda de "cada mono en su rama", sabes: hombre es hombre, mujer es mujer, homosexual homosexual, negro es negro; habrá por tanto que delimitar nuevamente lo que es alta cultura y lo que no es, pero en Brasil todo eso ya está tan mezclado, entre otras cosas a causa del subdesarrollo, pero es sabroso e interesante.

—Brasil es un lugar con una vocación especial para la mezcla, un país de vocación caníbal. Ahora acabas de grabar un disco cantado totalmente en español, pero haciendo mucho énfasis en el modo

—Gillespie decía que música popular era Estados Unidos, Cuba y Brasil, y que lo demás eran santos menores. ¿Estás de acuerdo con esa lista?

—Totalmente, aunque no conocía esa afirmación de Gillespie. Sin duda, la música popular en Brasil posee un archivo, una variedad y una espesura que tal vez no estén presentes en los otros países latinoamericanos. Lo interesante es que eso se produjo, al menos con relación a la bossa nova y al tropicalismo, con mucha naturalidad y no como un proyecto modernizador pensado. Es una cosa que Brasil puede naturalmente producir. El caso de Cuba es aparte, porque Cuba, aunque posee esa fuerza, acabó orientando sus energías hacia la revolución y con eso ganó otra manera de hacer las cosas, aunque con todo lo que ha pasado, hoy parece haberla perdido. L

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El despachurrado gentilicio local buscó revancha y echó mano del vers rio de la identidad: los símbolos patrios. La banderomanía está viva y adherida en los recalentados capós, el joropo reaparece en los walkman y la carne en vara sustituye al fastfood. Todo lo que expida tufílio criollo vale. Por generación espontánea —sin uno por uno que los mediatice, aunque el gobierno intente sacar una buena tajada del fenómeno— el target de los imberbes consume llano y tradición, moda en repros que intenta trocar la mueca generalizada en sonrisa.

Nacionalismo de quita y pon

a primera hipótesis de la que fue capaz mi especulativa vocación, mientras recorría las vaciadas calles caraqueñas de los días iniciales del año, señalaba a los alcaldes de la zona metropolitana como enconados agentes del antipatriotismo. Gracias a sus puntuales operativos anuales contra la economía informal, las aceras, boulevards y demás vías adoquinadas, así como semáforos y trayectos de habitual atascamiento automotor, acusaban la forzosa estampida de quienes yo tenía por principales gestores del único gesto nacionalista reconocible en los años recientes de la democracia (digamos del primer gobierno de Caldera hacia acá), el único, al menos, espontáneo y colectivo, sin mediaciones oficiales. Cualquiera que hubiese querido en esos días sumarse —algo tardíamente— a la I.0

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nueva cruzada del papel adhesivo hubiera, en un primer momento, claudicado, y dado la razón a quienes —apátridas, ellos también— en artículos de prensa y sociología de ocasión echaban un fenómeno de fervor tribal al saco roto de las modas. Los heraldos del neonacionalismo exhibido en miles de miles de parafangos habían sido proscritos por una espasmódica ordenanza municipal. Hablo de los buhoneros; esos que en los últimos meses de 1994 se paseaban entre los vapores del tráfico, bajo un sol de aluminio, mostrando las que pronto desplazaran con creces al resto de sus rubros comerciales —digamos, antenas para carro, plumeros, tomacorrientes, metros, juegos de herramientas, condones—, hablo de las en poco tiempo ansiadas pegatinas y calcomanías tricolores. A ellos les debemos, sin duda, que cada vez que nos entrampemos en una dilación del tránsito, cada vez que reparemos en los stops del carro que nos antecede y aplastemos el freno a pocos milímetros de su parachoques, recalemos una y otra vez en el ingenioso diseño estrenado en la Vela de Coro por nuestro generalísimo Miranda. Nadie puede dudar de su omnipresencia sin precedentes: Bandera de Venezuela porque yo te quiero tanto... ¿Por qué?

Hacia el último trimestre de 1994, el fenómeno de ostentación de los diseños tricolores se hizo, más que notable, furor en los parachoques, carrocerías y parabrisas de miles de carros particulares y, en especial, en los decorados del transporte público —ya tradicionalmente barroco en cuanto a su ornato. Que la cosa se haya difundido, en principio, sobre el asfalto puede tener explicación en la vehemente campaña encabezada por el locutor de radio Juan Manuel La Guardia —mejor conocido como Full-Chola— , indiscutible amo de la audiencia matutina instalada tras el volante. Otro apasionado promotor de esta insurgente heráldica pop y adhesiva es

el caricaturista del suplemento humorístico El Camaleón, Omar Cruz, quien insistía, desde su Página cruzada, en la urgencia de pegar la bandera. Pégala, rotulaba cada semana el dibujante junto a una pequeña re76

EXCESO FEBRERO 1995

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Pinceles para la patria Las artes a la vanguardia de la sociedad.

Mucho antes del furor actual, era frecuente descubrir cualquier mañana algún pedruzco o peñón de los que sobreviven en las zonas verdes de la Autopista del Este engalanado con los colores patrios. El asunto empezó a extenderse y así, también carros y chatarra abandonados se hicieron remedo de la bandera. Las autoridades, viendo en ello una afrenta a los símbolos, lanzaron una contraofensiva repintando las piedras de neutral blanco y remolcando la chatarra tricolor. Se supo que el autor de aquella pionera travesura nacionalista era el pintor Juan Loyola, conocido por otros

de amable y conciliador.

Su amor por lo venezolano lo ha llevado, junto a otros compatriotas, a conformar la Fun-

desmanes pictóricos.

dación para la Protección y Conservación de

Más allá de poses y aspavientos propagandísticos, motivos que pueden entenderse

la Hayaca. Tal como su nombre deja sospechar, esta fundación se dedica a recolectar

como nacionalistas han estado presentes en la producción plástica desde hace unos años.

información sobre el típico manjar (han dado con recetas que datan de 1894). Sus miem-

Margot Romer con sus estrellas. Ernesto León

bros han elaborado un cuerpo teórico con mi-

con sus aves y flores venezolanas. Este último

ras a establecer una metodología para la percepción y degustación del navideño plato, entendido como un producto culinario y estético.

artista, en particular, ha desandado un camino que lo ha llevado hasta las fuentes de nuestro arte colonial. Especializado en restauración y conservación, se ha consagrado a una relectura del arte colonial y sacro, ofreciendo una personalísima reconvención iconográfica.

León confiere a su arte un carácter antropo-

"Si eres joven, te gustan las finanzas, usas corbata, tienes un bonito carro. Si eres pulcro, si te gusta comer japonés, si tus zapatos son limpios. Si a tu mujer le gusta el pelo muy sedoso... y hablas pestes de Vene-

lógico, siempre en la búsqueda de una especificidad venezolana que en el arte de la colonia puede hallar señas entrañables.

zuela. Por favor, vete". Lo anterior se puede leer en una de las paredes del estudio del artista, muy cerca de la entrada. León se reser-

Este perseverante pintor toma distancia

va así el derecho de admisión al grupo de

de su tradicionalmente desarraigado gremio

compradores de su obra. Pero, aclara, nada

y confiesa sentirse muy a gusto con su país o al menos con lo que en él se puede encontrar

de chauvinismos ni de xenofobias, ni alguna

presentación del Pabellón Nacional apertrechada en algún rincón de su página, no gratuitamente adjetivada como cruzada, donde recurren los gruesos trazos y vivos colores de una venezolanista imaginería plena de humoradas que echan mano de los arquetipos del niño famélico de los cerros, el Juan Bimba de desvencijado cogollo (vernácula emblematización del hombre común, ingenua encarnación y víctima, al mismo tiempo, de la llamada viveza criolla), cuando no, del niño de piel aceitunada y guayuco que simboliza nuestro vapuleado origen, puro y primigenio, o el heroísmo de nuevo cuño coronado por la boína roja

que se dejó ver en los alrededores de Miraflores el 4 de febrero de 1992. Pronto, de simple adhesión a los parachoques de Venezuela, la bandera se multiplicó, se transmutó en muchas formas, por primera vez dejó las astas oficiales para manifestarse en pancartas, franelas y viseras. Los tres colores primarios se tramaban con tumultuosa frecuencia en televisores, vallas y pantallas luminosas, rubricados con eslóganes al estilo lo nuestro es lo mejor...

Una verdadera metástasis tricolor que alcanzó su clímax en medio de la vorágine decembrina, cuando las gaitas y las salutaciones navideñas dieron a la ecuménica ce-

otra actitud excluyente de lo universal.

lebración una impronta desusadamente nacionalista.

Por esos días, por primera vez en 30 afros, nuestra bandera accedió a los autonómicos predios de la Universidad Central de Venezuela. Un hermoso pedazo de tela de 162 metros cuadrados (9 de ancho por 18 de largo) ondeaba con solemne pereza sobre un asta de 50 metros muy cerca del emblemático reloj ucevista, como muestra de la

sión con respecto al uso de los símbolos de la patria, formalizada en tinta y papel como la Ley de Bandera, Escudo e Himno Nacional, aparecida en Gaceta Oficial del 17 de febrero de 1954, cuyas disposiciones penales establecen montos ajustados a aquellos tiempos preinflacionarios, sin que se tenga noticia de modificación alguna al respecto: multa de diez a cien bolívares para quienes no enarbolen la Bandera Nacional en las ocasiones establecidas o para aquellos que lo hagan "sin la debida pulcritud"; y de cien a mil bolívares por el uso indebido de la Bandera, el Escudo o el Himno Nacional. Se establece además la posibilidad de un arresto proporcional a juicio de la autoridad civil.

Más que envalentona-

con una de esas franelas que rezan Gloria al bravo pueblo, los colores patrios delineando sus redondeces.

Los nacionalismos son un moderno y romántico reemplazo de las religiones ancestrales por un credo laico oficiado por el Estado. Así, los rituales alusivos a la divinidad son desplazados por un ceremonial referido a momentos memorables de la conformación de la nación: batallas emancipadoras, toma de cuarteles, derrocamiento (o ascenso) de tiranos, proclamas, natalicio de héroes. Todo este ritualismo nacional está sujeto a una normativa con sus correspondientes penalizaciones para quien no se lo tome en serio. Pero, cualquiera que ahora pretenda ampararse en una ley para proscribir las calcomanías de los carros, más que un aguafiestas, sería pronto tildado de traidor. Precisamente, esta desritualización del uso de un símbolo

La tendencia tricolor se expandió por radio, a Full Chola

Cobro de multas o arresto a todo aquel que ostente tricolor en el trasero de su carro revigorizada pasión por el símbolo patrio. La cotización de tamaño trapo estaría en un orden cercano al medio millón de bolívares.

La multimedia proliferación del tricolor nacional, sin duda, tenía visos de moda. Un exceso, tal vez, a los ojos de los entendidos en el respectivo ceremonial. Un verdadero abuso que obviaba una tradicional apren-

miento ante tan blandas sanciones, mera ignorancia de la ley de marras subyace en lo que, hoy por hoy, cualquier leguleya autoridad pueda interpretar como uso indebido de la Bandera, procediendo al subsecuente operativo de cobro de multas o arresto a todo aquel que ostente el tricolor en el trasero de su carro o toda aquella que se pasee

patrio, confiriéndole la crasa cotidianidad de un llavero o una prenda de vestir, es profesada por el colectivo como una reivindicación de eso tan inasible, tan esquivo e indeterminado, que es lo atávico venezolano. Todo un fenómeno semiótico intercambiable por las facciones que se pelean el coroto. Reivindicado tanto por el statu quo como por la pretendida subversión.

Para los que quieran ahondar más en el inconsciente colectivo, hay un dato peculiar: mucho antes del uso de un pedazo de tela para inquietar el fervor tribal, se emFf BRIRO 1995 EXCESO

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plearon, con idéntica función, objetos diversos que se esgrimían al frente de las huestes guerreras. En los albores del antiguo Egipto, al parecer, se trataba de un fetiche que representaba "la placenta del rey". Algo edípico, tal vez, ronda el asunto de la multiplicación de las banderitas.

F

mecidas las fiestas de fin de año, sin embargo insisto, el furor cívico parecía haberse apaciguado hasta la desolación, las calles vaciadas de los patrióticos vendedores ambulantes. Pronto

reparé en mi falta de acuciosidad. Mientras ponía gasolina a mi automóvil en una bomba de La Castellana, descubrí las que creía para siempre proscritas calcomanías, exhibidas en la vitrina de la tienda. Me animé a entrar y preguntar al dependiente. Me mostró un par de modelos: un diseño escueto que se limitaba a un rectángulo tricolor con las siete estrellas y otro, en el cual el rectángulo se fraccionaba en tres, bidimensional representación de la bandera flameante.

Los precios rondaban los 160 bolívares. Al preguntarle el origen del producto, mencio-

En el antiguo Egipto, se trataba de un fetiche que representaba "la placenta del rey".

Algo edípico ronda el asunto de las banderitas nó una empresa llamada Formicolor 2000.

De súbito, se me ocurrió que tras ese registro mercantil se apertrechaba algún iluminado, la oculta inteligencia que mercadeaba esta suerte de revival nacionalista. Pero el empleado, tras revisar sus facturas, no dio con el número telefónico ni con la dirección de la empresa. En la guía telefónica tampoco aparecía. En el 103, no tenían noticias. En otras bombas y tiendas de autoperiquitos que disponían de las calcomanías sólo sabían de un anónimo vendedor que se aparecía cada tanto ofertándolas. "Hay unos muchachos por ahí que las hacen", especuló uno de los comerciantes. Un mercado marginal y anónimo. La intriga aumentaba.

Díaz y Del Rey ¡caracha negro!

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EXCESO FEBRERO 1995

No tardé en recalar, finalmente, en La Casa de las Banderas. Ubicada en el primer piso de un viejo edificio entre las esquinas de Salvador de León y Socarrás, funciona desde 1899, regentada por la familia Bendayán. En el piso, abarrotado de todos los colores patrios que congrega la ONU, es posible encontrar hasta la bandera de la última república africana. Dedicado a la confección y venta de banderas, banderolas, banderines, estandartes y pendones, el negocio de los Bendayán anexó recientemente el rubro de las calcomanías, pegatinas y llaveros tricolores. Contrariando mi desánimo, el gerente, David Bencid Bendayán, confirmó que el negocio de los adhesivos va en aumento. Cada día concurren más pedidos y han iniciado el año con la impresión de 20.000 nuevas calcomanías, uno de cuyos modelos configura el mapa de Venezuela surcado por los tres colores y las siete estrellas. La salida de las banderas de tela, sin embargo, no acusa significativos incrementos. Las hay de diversas dimensiones: la de uso oficial (el tamaño siempre es proporcional a la altura del asta), de metro y medio por 90 centímetros; la estándar de uso doméstico, de 90 por 60; otra de un metro por 60 centímetros. Los precios varían: las hay de 940 bolívares, de 1.285. Los materiales empleados son nylon, satén y algodón.

En los casi cien años que tienen en el negocio de las banderas, los Bendayán no siempre las confeccionaron en casa. Hasta 1975, las importaban de Corea, obviamente, porque resultaba más rentable. Pero los altibajos de nuestra economía de puerto condujeron a la confección en suelo patrio, y así, desde entonces. Incluso, en tiempos de Diego Arria en la Gobernación de Caracas, en pleno CAP 1, cuando, en consonancia con la grandilocuencia nacionalizadora de entonces, hubo cierta agitación en torno del asunto de los símbolos y se adelantaba la iniciativa de agregar una octava estrella a la bandera, se asomó cierta idea proteccionista

Tablas de surf por toros coleados Calcomanías tricolores y cassettes de joropo son la ostentación portátil de una subcultura juvenil y sincrética, incipiente, pero no carente de sus requisitos iniciáticos. Las nuevas generaciones de clase media alta han desplazado el divertimento de las discotecas y pubs de Las Mercedes, a cierta ruralidad aledaña a la capital. En la carretera de Hoyo de la Puerta, se dan cita en el club La Empalizada, el Café La Unión y La Talanquera, donde la partida de bolas criollas y la libación de cerveza rematan en el banquete de carne en vara, vernácula asadura desplazada décadas atrás por los cortes a la parrilla impuestos por el desaparecido restaurante Zig-Zag, estilo importado de Argentina que irradió a casi todos los comedores de carne del país. Finalmente, la digestión deriva hacia un joropo zapateado, no con alpargatas sino con botas tejanas, timberlands y sebagos. Los signos de pertenencia de las huestes neonacionalistas van de la indumentaria a la lengua. En cuanto al vestido, se mezclan el jean y las botas Ioblan con el sombrero pelo'e guama, tenido por muy vernáculo pero importado siempre desde Checoslovaquia, donde —según reportan en la Sombrería Tudela— se confecciona especialmente para el mercado venezolano con la piel de una liebrecilla que habita en algún remoto bosque eslavo. La indumentaria se puede radicalizar con alguna franela estampada con el tricolor. Finalmente, la percha suele rematar en un chaleco de

para la fabricación local de banderas. Un

subsidio, en pocas palabras, que jamás se concretó, así como tampoco aquella estrella que representaría a Guayana entre las otras siete provincias encontró ubicación en el diseño tradicional.

Sucedieron las primeras semanas de enero y pude constatar la insistencia de los mensajes alentadores en televisión, las conminaciones al sentido patriótico: lo nuestro es lo mejor... échale una mano a

Venezuela... la solidaridad está en tu corazón... Pese al acusado patetismo de tales apelaciones, que más invitan al llanto plañidero que a cualquier iniciativa en favor del prójimo, no dejan de ser muestra de que la cosa pica y se extiende. Los buhoneros,

cuero o jean. En estas fiestas, donde recurren las canciones de Luis Silva y Carlos Baute, se admite también el sombrero tejano como sucedáneo del pelo'e guama.

Un acercamiento mayor permite descubrir que, entre los muchachos, lo propio es hablar como Abraham Paredes, personaje protagónico de la telenovela Purasangre, ambientada en un pueblo ganadero del occidente venezolano, de obligatorio seguimiento para todo habitué del nuevo restaurante que compite en tamaño con el Centro Portugués —calle Luis de Cambes, entre Macaracuay y El Cafetal—, el céntrico Toro Negro y los demás lugares de encuentro transurbano y venezolanista. Entre adolescentes y veinteañeros, lo prestigiante ya no es ser surfista o líder de una banda de rock sino corajudo coleador de toros.

mientras tanto, siempre encuentran ocasión para tomar de nuevo las calles.

E

1 estilo político y social americano ha sido reducido a la complejidad de una T-shirt", se queja el editor asociado de la revista estadounidense Esquire, Pete Hamill, en un artículo reciente titulado Endgame, donde hace amargo inventario de los signos de un suicidio cultural, examinando, a vuelo de pájaro, al fenómeno white-trash y la cultura de la violencia.

Y en Venezuela, ¿será toda esta movida de las calcomanías, los llaveros y las franelas un nacionalismo T-shirt? ¿O un nacionalismo adhesivo que se desprende con agua y jabón?

Cierta contrapartida al ideario dieciochesco —es decir, el nacionalismo romántico que sucedió a la Ilustración— encontró una inagotable fuente de sustancia nacional en aquellas manifestaciones que nos vienen de las profundidades del tiempo; eso que más tarde se llamó folklore. De ahí que ese conjunto de usos, costumbres, ceremonias, supersticiones, baladas y proverbios de un pasado sin fondo aparezca para muchos como el humus donde ha de crecer y florecer lo nacional.

Y la sustancia del folklore no dejó de producir sus accidentes para la ocasión del neonacionalismo imperante, sobre todo en lo que a música se refiere.

La música venezolana —sobre todo la llanera de arpa, cuatro y maracas, y que muchos conciben como la única criolla en verdad— ha tenido su público y su industria permanentes. Siempre, con mayor o menor grado de comercialización, se ha mantenido más o menos fiel a la instrumentación y las formas tradicionales, aunque bien se han dado intentos de fusión, efímeros, cuando no demasiado experimentales para el oído del vulgo.

Lo sorprendente ahora es que de súbito, como de un día para otro, la banda sonora que nos acompaña día a día en Caracas cambió de la salsa erótica, el tecno-merengue y el rap a las más amables cadencias del arpa, las voces atipladas de los cantantes llaneros. Los rústicos conocidos como machitos, las camionetas blazer encaramadas en cauchos todo-terreno, los jeeps descapotables, pasan raudos dejando una estela coplera, un eco de quirpa, un introito de bandola sobre el asfalto.

La industria cultural no esperó demasiado para lanzar una primera carnada de cantantes neofolkloristas (?) que con pinta de rockeros repasan el cancionero patrio, cuando no se aventuran con joropos, tonadas y corríos, pero con remozadas letras de imaginario urbano. Adiós a los becerros y esas soledades de Florentino, esa llanura que no se acaba. Ahora la montura es una 13MW y ya FEBRERO 1995 EXCESO

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no son los rumbos divergentes, infinitos de la sabana (...tierra que se hace llorar y querer...), sino la dilatada curva de asfalto de la Cota Mil a 200 kilómetros por hora.

Las cabezas visibles de este incipiente movimiento ostentan abundantes melenas y antes que liquiliqui, optan por una estética urban cowboy. Carlos Baute, un joven a quien se le había visto entre un grupo de bronceados modelos, en las vallas publicitarias de una marca de cigarrillos, apareció de pronto cantando El gavilán, en una remozada versión con batería y guitarra eléctrica.

Baute es exclusividad del sello EmiRodven y la competencia, Sony-Music, pronto lanzó su propio pupilo neofolklorista: Miguel Angel Del Rey. Con parecidas características físicas, pero distante al heroico carácter operático de la voz de Baute, este artista se muestra más lírico, con un terso registro de tenorino barroco, sin aditamentos electrónicos ni beats rockeros. La novedad radica en las letras, señalan sus productores, y aseguran la genuina vinculación con la música autóctona de este muchacho que ya había intentado sin éxito el género balada.

menos, en lo que respecta a las piezas del repertorio llanero, Hurtado garantiza la fidelidad a la tradición que sustentan los arreglos interpretados por Baute. La ópera prima de este modelo-cantor incluye además un calipso guayanés y una versión medio rapeada de la universalizada Moliendo café de Hugo Blanco, tema que ha ido a parar hasta a las cuerdas de Charly Byrd.

El disco de Baute fue lanzado con una avasallante publicidad; sin embargo, hasta diciembre pasado no había llegado a las diez mil copias vendidas. El promocional gavilán produjo un alentador primer impacto en el mercado, pero cuando se empezó a radiar un segundo tema, el Corrío Baute, donde el hombre alterna con un joven cantante llanero de raigambre indiscutible, Jorge Almada, las ventas rondaron escasas cien copias mensuales. Luego, se optó por lanzar el Calipso y la cosa mejoró.

Este pop-nacionalismo musical no deja de tener sus precedentes: el ya no tan recordado trabajo Ofrenda de Vytas Brenner, por ejemplo. Enrique Atencio con su guitarra eléctrica también había asomado interesantes posibilidades para la música tradicional venezolana. Otros intentos más recientes, como los del compositor Aquiles Báez y el grupo Maroa, apuntan a direcciones más experimentales y jazzísticas sin pretensiones de acceder a un mercado masivo.

A todas éstas, del otro lado de la frontera, Carlos Vives irradiaba con notable éxito el género vallenato, haciendo pensar en un principio, en un fenómeno de internacionalización tan apabullante como el que tuvo el merengue de la mano de Juan Luis Guerra. ¿Serán exportables las formas del joropo o el golpe estribillo, con su complicada rítmica y su atávico feeling? De momento, Baute y Del Rey apenas anuncian un mercado limitado a Venezuela, el soundtrack de las banderas.

Calcomanías y . radiorreproductores para carros deslastran de oficialidad nuestro esquivo nacionalismo, tradicionalmente ostentado con gobierneras intenciones.

Un nacionalismo pop que rompe con los

Coman sardina, decía mientras espetaba la cruel ironía del menguado presupuesto doméstico En cuanto a Baute, cierta crítica observó rasgos de prefabricación —puro empaque, denunció uno de los cronistas. De hecho, al parecer, cuando el muchacho tocó las puertas de la disquera traía intenciones de cantante pop-rock, pero la gente de EmiRodven, olfateando el caldo de cultivo neonacionalista, le sugirió probarse en los géneros tradicionales venezolanos. Baute aceptó y el productor Rafael González contactó al maestro Cheo Hurtado, uno de los más autorizados cultores de la música venezolana, para enseñarle las canciones y entrenarlo en el feeling peculiar del tres por cuatro y el seis por ocho de las formas locales. Durante meses, Hurtado trabajó junto al melenudo y lo deslastró de ciertas técnicas vocales que había aprendido y que nada tienen que hacer con un corrío. Al 80

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habituales tabúes y aprensiones que pesaban sobre los símbolos patrios y los convertían en signos de pavosa ceremonia. Pero no es pura generación espontánea; estos signos de tribalismo hegeliano que se pasean por calles y avenidas alguna deuda tienen con el bolivarianismo protestón que sucedió a los golpes de Estado de 1992. Una moda clase media que recoge, tal vez, en un gesto pacífico, aquella insurgencia violenta de militares contra el estatus corrupto.

Pero el estamento oficial no deja de afanarse en sacar tajada, y muestra de ello es una calcomanía hecha imprimir por el Ministerio del Ambiente: bajo el recurrente tricolor se puede leer una arenga ecologista.

No ha de ser gratuito, por lo demás, que la editorial del Estado haya publicado un breve volumen titulado Bolívar siempre, cuyo autor es el propio Presidente en ejercicio, como para dejarles bien claro a los golpistas bolivarianos que el patrimonio ideológico legado por el héroe sigue del lado de la institucionalidad y de los que siempre creyeron en la vía electoral. "Pocas veces llega un hombre a identificarse en tal grado con un pueblo como Simón Bolívar con la nación venezolana. Bolívar es signo de unidad y grandeza para toda América Latina, pero para Venezuela es uno de los símbolos de la patria, como la bandera, el escudo y el himno nacional", asienta el doctor Caldera.

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urante el año pasado, aparecía con angustiante frecuencia un ingenioso comercial de sardinas enlatadas. Con no poco sarcasmo, el humorista Claudio Nazoa, protagonista de la cuña, apelaba a la nutritiva y económica especie marina. Era prácticamente un regaño: coman sardina, decía mientras espetaba a la cámara con una sardónica sonrisa referida a la cruel ironía del menguado presupuesto doméstico del otrora dispendioso venezolano. Coman sardina, no hay remedio. Viéndolo bien, toda esta vorágine del tricolor y el joropo y las constantes apelaciones a la iconografía de Bolívar, que no a la sustancia de su ideario, a lo mejor pueda interpretarse como suerte de sardina ideológica para un país hambreado también espiritualmente.

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Miguel Angel Contreras Laguado

Historias dela locura corriente El encanto del buen deudor

Topten Caracas, valle rojo

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Evasivo, porque es gocho. Gocho, porque nació en San Cristóbal. Cincuentón, porque lo hizo en octubre de 1943. Paternal, porque defendió a su adolescente crío la vez que se le acusó de agredir físicamente a Lola Serpa de Osorio, hija del entonces Fiscal, Héctor Serpa Arcas, y al esposo de ella. "Aunque, si resulta culpable y debe ir a la cárcel, estoy dispuesto a llevarlo a que enfrente su responsabilidad". Es Miguel Angel Contreras Laguado, quizás uno de los gobernadores del Distrito Federal más polémicos que conozca la historia reciente —sólo superado por su díscolo sucesor, Adolfo Ramírez Torres— quien, entre otras cosas, siempre llamó la atención por su cachetona estampa, su sonrisa picarona, el abombado peinado con pelo hasta las cejas, su supuesta consanguinidad con Blanca Ibáñez, sus romances extracátedra, su admiración por las protagonistas de telenovelas. Abogado de profesión, especialista en asuntos financieros —a lo largo de su trayectoria ha desfilado por diversas instituciones del ramo: bancos, centrales hipotecarias, compañías de seguros—, fungió como diputado en la primera gestión de Pérez, senador en la de Luis Herrera y gobernador en la de Jaime Lusinchi. A este último, por cierto, le renunció, luego que los virulentos enfrentamientos entre su despacho y el Concejo de Caracas, por asuntos concernientes a la reubicación de los buhoneros que abundan entre la casa de Simón Bolívar y la plaza El Venezolano —voto de censura contra él, incluso—, lo obligaran a regresar a la actividad privada, "de donde no debí salir". Lo hizo y de qué manera —eso de lo privado—, porque nunca se supo más de él.

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La revolución

Santo Domingo

Hasta que por fin, las artesanas de las tabacaleras cubanas supieron el desenlace: Remedios la bella ascendería a los cielos. Así terminó el cuento garciamarquiano. Y la jornada.

Y todo. El culturoso hilo musical se apagó, como también los bríos de aquella industria de fama internacional. Las cosechas de uno de los principales productos de exportación de la isla han menguado, porque no hay recursos para comprar fertilizantes y pesticidas.

El temblequeo de la revolución ha socavado poco menos que la identidad del país socialista que inventó el puro al llamarlo habano. La sonrisa que exhibía Fidel Castro cuando pensanba en la hipocresía —o debilidad— de sus opositores, que deliraban fumando a escondidas cigarros de manufactura roja, está blcuiueada. Y lo peor es que el capitán de aquel barco, el celebérrimo Davidoff, abandonó timón y huyó a la derecha.

Davidoff, el sabelotodo en materia de tabacos, empapado de los secretos del proceso de seleccionar, tostar y envolver, se instaló en la República Dominicana y, realidades económicas mediante, ha empujado la industria de los vecinos antillanos a tal punto que Cuba ha perdido su tradicional liderazgo en el ramo para colocarse a la sombra de los merengueros. Con más empuje y ánimos — dentro de los márgenes tercermundistas permitidos—, los tabacos de Santo Domingo están invadiendo los mercados foránoes, tumbando a los papaúpas del humo con cifras que superan el tres a uno en la proporción de preferencias. Son la novedad en palacios y casas blancas, y sin tufillo clandestino. Es que no sólo el tabaco cubano se extinguió por fallas de producción, en términos de cantidad; algo similar ocurrió con su ancestral calidad. Y en eso llegó Joaquín Balaguer.

Rafael Montero Revette El descorche no fue de champagne sino de limonada

Orlando Castro Era de esa gente útil que juega banco

Boris Yeltsin Mejor era la guerra fría

Felipe González A todo socialdemócrata le llega su sábado

Noris Aguirre Los captores querían sus fondos

Don Francisco Algo más que chistes tenía a la mano

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LOS AMARE L. NO SON %FE RIMES n materia de medicina y gastronomía la cultura oriental se puede ufanar de su originalidad y rareza, mas no de emplear en sus recetas y guisos los arcaicos huesos de una fauna en vía de extinción, talón de Aquiles de su mesa antiecológica y flagrante provocación para los conservacionistas. Taiwán enfrenta la crítica y los potenciales embargos económicos de grupos ambientalistas locales e internacionales que protestan con énfasis el uso de nidos de vencejos —manjar culinario de alto valor nutricional— por parte de los chefs, y el contrabando de cuernos de rinoceronte y marfil de elefantes —estimados por sus poderes curativos—, seductoramente gananciosos.

La ardiente batalla entre los defensores del hábitat y los cultores de las tradiciones —la dieta china es una de ellas— coloca a los taiwaneses en un difícil dilema: conservar el patrimonio cultural o preservar las especies silvestres. El gobierno de la República China —bloqueo en ciernes obliga— al fin eligió: ha prohibido el comercio, uso, venta y exhibición de animales raros o protegidos, con la idea conciliadora de mejorar su imagen negativa y mantener el intercambio económico internacional con los melindrosos europeos y estadounidenses que iniciaron el arrase del planeta y ahora lideran feroces cacerías contra quienes violen las leyes. Angustiados, la Fundación de la Bella Taiwán, el Consejo de Agricultura y el Departamento de Salud del Estado han emprendido campañas educativas sobre la protección animal, desparramando calcomanías y panfletos por doquier y saturando la tele de anuncios.

"Los nidos de vencejos son una .secreción de pájaros con relativas proteínas. Usted tiene lo mismo en la saliva. Entonces, ¿por qué robar la de los pájaros?", arremeten. Pero, ojo, sin demasiado éxito. Farmacias y restaurantes taiwaneses se hacen los suecos pues los verdes valen

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Zona roja para los pacos, zona gris para quienes estudian en teorías de sistema la inseguridad que produce no estar en un polo, blanco o negro, lo que urbanísticamente se puede interpretar como cualquier sitio de paso: un boulevard, una pasarela, una esquina, sitios que ejercen mayor atracción sobre la delincuencia.

La ciudad, portátil toda, parece coleccionarlos. Su remoquete de la ciudad de los techos rojos podría cambiarse por el de la ciudad de los

el riesgo. Abundan los médicos que, después de diagnosticar, recetan, por ejemplo, unos paquetitos blancos dotados de una mezcla en polvo de hierbas, raíces o bayas, en cuya preparación el farmacólogo utiliza como ingredientes lagartos disecados, cuernos de rinoceronte o de antílope y variadas partes del cuerpo de animales destinados a desaparecer.

El uso del cuerno de rinoceronte se remonta al siglo III —según el Shen Nung, libro antiguo de medicina china— y se destina a bajar fiebres, refrescar la sangre, controlar convulsiones, tratar las infecciones del aparato respiratorio y la encefalitis B. Algunas personas le atribuyen poderes mágicos e irracionales como el aumento de la energía y la inducción a una mayor vitalidad sexual. En cuanto a los nidos de vencejo, garras de oso y aletas de tiburón son, sencillamente, exquisitos. Y dada la tozudez de quienes insisten en dejar tiburones sin aletas y a rinocerontes sin cuernos, el Departamento de Salud taiwanés estudia la posibilidad de elaborar medicinas fabricadas con animales sucedáneos. Como el cuerno de búfalo de agua en lugar del de rinoceronte y los huesos de cerdo o de perro en vez de huesos de tigre.

—Liliana González

hechos rojos. A saber: 1 Pasaje Asunción, mejor conocido como Callejón de la Puñalada. En encrucijada con la calle Real de Sabana Grande —un boulevard primaveral donde no puedes separar la cartera de tu costillar so riesgo de arrebatón— es un peaje del que nadie se salva —recordar al hermano de Doris Wells, al poeta Argenis Daza...

Estación de servicio Veracruz, en Las Mercedes, donde, a plena luz del día, secuestraron en un santiamén y por unas largas horas a Morris Sierraalta hijo.

La subida de Maripérez que conduce al Avila: allí deshilacharon a la hermosa chica Marisol Da Silva e hicieron parrilla con otro aficionado al aerobismo.

El barrio San Andrés, de El Valle.

Pum, pum, pum. Todas las noches suenan igual que un 4 de febrero. Favor naasomarse a la ventana.

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14 lerr adeitieg°

is or as le a ocura corr en e IE IC00 RES CO IE 1E3 LA E IVA ESTRELLA La Curumera y demás alrededores high society de la urbanización Cumbres de Curumo. Los niños bien del sureste no tienen hambre, pero sí mañas y oscuras aficiones bien espolvoreadas.

6 Pasarela entre el Teresa Carreño y Parque Central. Una encuesta arrojó el siguiente resultado: mejor ser atropellado abajo que violado arriba.

Otra, que la pasarela es tan peligrosa que supera con creces los riesgos de apurar el paso por los lúgubres pasillos de Parque Central.

Estación Colegio de Ingenieros. Hay una ley que no se infringe en el país: aquella que dice que cerca de los subterráneos hay más tránsito humano, confusión, posibilidad de hacer y huir sin ser visto, hampa, pues. Esta estación, en especial, cierra dos horas antes.

Eig Baruta toda es de pronóstico reservado y sus empalmes con los asentamientos burgueses más cercanos resulta conmovedor. En la panadería Río de Oro atracaron al propio director de la PTJ. 9 De Chapellin emana la energía que exuda un trío de blindados skin-head, salpíquese un tantito de vallenato y pasiones desatadas. La fiesta se propala a las calles aledañas de la

Alta Florida: Los Mangos.

1 0 Petare. Populosidad adentro, callejuelas arriba. Bandas a moto y sin ley. Prohibido el paso después del casco colonial.

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umor mediante y desde • , o• • .7. , su pequeña imprenta t personal ubicada en París —Imprimerie Balzac—, dio cuenta Honoré de Balzac, en 1827, de las enseñanzas de un generoso tío suyo, travieso hombre de aventuras y desventuras, de fortunas y ruinas recurrentes y aceleradas, de trampas, estafas y mentiras protegidas por una buena estrella que le duró algo más de cuatro décadas. "Un día confesó a mi padre que no poseía el más mínimo louis, pero que al mismo tiempo estaba dispuesto a hacer una apuesta de mil louis". Ya enfermo, en el eclipse de su vida, reunió a todos sus acreedores, 222 en total, a quienes, en medio de un discurso emocionado, les manifestó su evidente incapacidad de pago. Uno a uno, les leyó el monto de sus deudas, les dijo que no cancelaría un solo sou —mucho menos se atrevería a resarcirlos con diez, 20 o hasta 40 por ciento de lo que les debía. "Soy incapaz de una tal bajeza, sería una gamberrada y prefiero optar por no pagarles nada"— , les dio las gracias, no sin antes ilustrarlos acerca de las ventajas del crédito. "Le he servido de ejemplo al rico, he ayudado al pobre" (aplausos). Lloraron éstos, los acreedores, y luego de su muerte, reunieron dinero y lo enterraron en Montparnasse. Sobre su lápida fue grabada, a modo de homenaje, la siguiente inscripción: "Aquí descansa el inventor del arte de pagar sus deudas y satisfacer a sus acreedores sin gastar un solo sou. 22 de mayo de 1823.

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Resquiescat in pace".

El escritor se dedicó a recopilar las lecciones

que su tío dejó para la posteridad. Lecciones que abarcaban los temas de las deudas, amortizaciones, acreedores, deudores y otras. También incluía unas cuantas opiniones acerca de sus modos de vida. A decir del finado tío, entre las características morales que definían el espíritu de los deudores, el meollo de este asunto, el aplomo, es sin duda la que reviste mayor im-

portancia. Más aun, es una auténtica virtud. "Consiste sobre todo en dejar todo lo que parezca un juicio, una pregunta, sin respuesta. Desmentir lo obvio, confirmar lo imposible, en corto, emitir un desmentido robListo y lacónico hacia todos los hechos y todo lo que tenga el carácter de una prueba". Como si los grandes deudores venezolanos, aquellos que —negocios, maniobrillas, inversiones y préstamos— han dejado al país guindando, hubiesen seguido al pie de la letra dichas enseñanzas: es fácil, por ejemplo, imaginar al inefable Gustavo Gómez López o al fantasmagórico José Alvarez Stelling desde sus recónditos exilios —"cuando hay que cobrar, embolsar, ganar dinero u ofrecerlo para propósitos de entrega, el gobierno sin falta siempre lo encontrará allí, en carne y hueso; pero cuando se trata de pagar, es sólo sonido y humo o una quimera de aquellas que cazan una cantidad de románticos"—, negando cuanta imputación se les hace; hablando de marramucias para desprestigiarlos; acusando rencillas politiqueras. Igual destino quedaría para el resto de la plana mayor de cualquiera de los bancos auxiliados o de algunos de los institutos financieros —pudiera ser una aseguradora, casa de bolsa, etcétera—, cuyas jugarretas arruinaron la tranquilidad de su clientela. Y del país.

Tomaron prestados de las arcas miles de millones de bolívares, llevan vida de reyes, se atreven, incluso, a impartir clases de ética y moral (aforismo XVII: "¡Lo que otro tiene en el bolsillo estaría mucho mejor en el mío!... ¡Lárgate para que pueda sentarme en tu puesto!... En pocas palabras, éste es el principio básico de toda moral"). Y en cualquier caso, señalados o no, perseguidos y repudiados, a estos chicos, fieles de Balzac tío, todavía les sonríe su buena estrella.

-:-;

—MS

ierradejuego

os que es an lan I o a ora El buen yantar es uno de los placeres con más adeptos en el mundo entero, si no el que más: precisa saciarse, promedio, tres veces al día. De manera que toda cultura abre con este capítulo y todo humano que se precie de tal deambula, según dictamen de su estómago, paladar y salivaciones, a la caza de los comederos donde hacer su cometida que oscila entre el degustar, el catar, el saborear, el alimentarse y practicar la gula, entre manjares y buenos caldos, en relación con su mayor o menor grado de civilización; autores hay que creen que el hombre que ha construido catedrales ha puesto más imaginación en eso del buen comer que en lo de hacer el amor. Un resumen peliagudo de los rincones del planeta donde abrir y cerra la boca para ingerir condumios es equivalente al éxtasis, al parecer de Patricia Wells, van a continuación. Los seleccionó para el Herald Tribune y dejó teléfonos, por si le interesa reservar: Jóel Robuchon S9 Avenue Raymond-Poincaré, París 16. Telf. 47.27.12.27.

Lai Ching Heen The Regent, Salisbury Road Kowloon, Hong Kong.

Telf. (852)721.1211.

Louis XV-Alain Ducasse Hótel de Paris, Place du Casino, Monte Carlo. Telf. 92.16.30.01.

Ki-Cho (Kitcho) Chuo-ku, Ginza 1-11-2, Hotel Seiyo (Bl, sótano), Tokio.

Telf. 3535.1177.

Jiro Chuo-ku, Ginza 4-2-15, Tsukamoto Sozan Building (B1, sótano), Tokio.

Telf. 3535.3600.

Cuy Savoy 18 Rue Troyon, París 17. Telf. 43.80.40.61.

Taillevent 15 Rue Lamennais, París 8. Telfs. 45.63.96.01 y 45.61.12.90.

Restaurant Daniel 20 East 76th Street, New York. Telf. (212)288.0033.

The hin at Little Washington Middle and Main streets, Washington, Virginia. Telf. (703)675.3800.

Chez Panisse 1517 Shattuck Ave., Berkeley, California. Telf. (510)548.5525.

separados En la oferta (musical), Andrea Lewis...

En la demanda (judicial) Mayte Delgado

Rayaba cositas, Jesús Soto...

Se rayó con la Cosiata, José Antonio Páez

Bailó como nadie, Rudolf Nureyev...

Nadie le quita lo boilao, Carlos Mata

A piñas contra la Telefónica, Gastón Guisandes...

A su niña la llamó Verónica, el señor del Valle

rol e l a l es asocia vas El pavo Lucas + 20 cigarrillos Belmont + Rafael Montaño Farrah Fawcett

= Carlos Baute

Vinicio Carrera + Rasputín + Elías Santana - Irene Sáeg 37 millones de bolívares

= Angel Enrique Zambrano

al nacer FEBRERO 1995

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De Jekyll Me Hyde Luis Herrera "Se le atribuye disciplina partidista", según Dinirah Carnevalli "La democracia venezolana tiene la fortuna de contar con un líder como él.

Su presencia constituye siempre una garantía de éxito para cualquier tarea que emprenda Copei. Nadie puede tratar de desconocer o minimizar su existencia.

Hacerlo sería estorbar la plena realización de la unidad y por lo tanto sacrificar nuestras posibilidades de victoria".

(El Universal, 24.09.89). "Está visitando los Estados, entusiasmando a la población y reclamando el voto para la opción socialcristiana. Ese debe ser el camino. Todos debemos renunciar en este momento a la embriaguez publicitaria personalista para difundir el mensaje de cambio que la elección de diciembre sugiere". (Rafael Andrés Pepi Montes de Oca, El Universal, 14.10.89) "Es un hombre de probada integridad personal, honestidad a toda prueba y vida austera, y ha dado ejemplos de lealtad y de consecuencia al partido, como fue el caso de mi candidatura, a la que le dio calor y soporte que yo agradeceré hasta el resto de mi vida". (Oswaldo Alvarez Paz, El Universal, 27.11.94) "Lo más importante de Luis Herrera Campins como político es su muy particular visión de la realidad. Nunca se aparta de ella.

Una visión que se encuentra muy próxima a sus ideales como persona y al objeto en cuestión. En él, ambas realidades se confunden de tal manera que le proporcionan una percepción particularmente humana de la actividad política"... "En cuanto a su honestidad, yo creo que exagera". (Adel Muhammad, 11.01.95) "Se le atribuye haber creado el término los avanzados, grupo al cual pertenece, por su lealtad, disciplina partidista, apoyos políticos, interés por la formación ideológica y la vocación de poder". (Dinorah Carnevalli, Araguatos, avanzados y astronautas)

86 EXCESO FEBRERO 1995

ampins "Actua como un guapetón de barrio", según Gustavo Tarre Briceño "Yo no tengo vocación de exhumados. Las encuestas, todal , revelan que el ex Presidente es hoy por hoy el político que menos credibilidad y respeto tiene de los venezolanos". (Luis Piñerúa Ordaz, El Universal, 17.08.89) "Si en alguna época la corrupción campeó por sus fueros, fue precisamente durante su funesta administración.

Su vieja aspiración de acabar con AD es una quimera, una vana ilusión que está muy lejos de suceder". (Pedro París Montesinos, El Universal, 01.06.90) "En el tono permanentemente jocoso con que trata los temas políticos expresó que dirigentes copeyanos se han ablandado porque ellos o sus familias han recibido prebendas gubernamentales.

Lo invito a que, si tiene algo más concreto, presente los nombres de esas personas que considera que se han ablandado porque reciben contratos". (Hilarión Cardozo, El Universal, 27.08.91) "El destierro cubano en Venezuela deplora, rechaza y condena las declaraciones del ex Presidente en las que trata de entubamos a una imposible apertura hacia Cuba para favorecer así a una minúscula corriente del exilio que intenta desesperadamente entenderse, arriesgarse y entregarse a Fidel Castro". (Salvador Romaní Orúe, El Universal, 30.04.91) "Lo que genera confusión son sus actitudes: por un lado le imploró al Comité Nacional que Copei entrara al gobierno, y por otro lado actúa como un guapetón de barrio, sembrando confusión en la opinión pública. Cuando era jefe de la fracción copeyana, Caldera y Barrios escogían a los magistrados, y él nunca protestó". (Gustavo Tarre Briceño, El Universal, 15.05.92) "Dijo que sería el campeón del retorno". (León León, El Universal, 17.11.92) "Menos mal que los delegados de Copei encontraron dónde colocarlo, ya que una vez llamó a los ex Presidentes jarrones chinos, muy apreciados, pero sin un lugar donde ubicarlos". (Rafael Caldera, El Universal, 06.12.94)

Venezuela se escribe con V de ,..

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Compositores venezolanos Mariela Pérez Loreto

na interesante publicación que aborda la historia de la música venezolana fue lanzada el año pasado por la Fundación Vicente Emilio Sojo. Bajo el título de Compositores venezolanos, el compositor y filósofo Numa Tortolero, actualmente jefe del Departamento de Investigaciones de la Fundación Sojo, realiza un esquema de la historia de la música a través de los compositores, enmarcando su estudio comparativamente con el desarrollo socio-político de nuestro país.

Dejando huella de su formación como filósofo (pensador) y compositor (creador), el autor plantea desde su análisis una nueva visión del proceso de la creación artística y en especial de la musical, relacionándolo directamente —como en verdad lo está— con los procesos socio-políticos, nueva visión dentro del entorno musical de nuestro país, más aun cuando la propuesta próviene de un creador.

Nos entusiasma sobremanera la posibilidad de apreciar el hecho de la creación artístico-musical como parte de un macroproceso en el cual el hombre, el compositor en este caso, es producto de su tiempo y momento. Entusiasma el enfoque del estudio y análisis del proceso creativo como un hecho tangible y comparable al desarrollo social y político, porque —como bien plantea el autor— "la historiografía no es, pues, una práctica discursiva políticamente neutra, tiene efectos y a veces es empleada o manipula-

da con fines muy específicos".

De igual manera, Numa Tortolero refuerza la exclusión —natural por demás, en este caso— del enfoque del desarrollo de la música popular o folclórica, con un valiente enunciado: "Es en la música académica donde se registran las concepciones estéticas dominantes de cada época, lo cual la vincula con las elevadas creaciones surgidas de otras manifestaciones artísticas".

Tortolero puntualiza realidades: "Cada espacio político abre posibilidades de desarrollo diferentes a las prácticas musicales, pero especialmente a la música académica, cuyos gestores por lo general dependen del aporte de instituciones del Estado que sufragan los gastos en el marco de una política cultural".

El autor, en fin, propone la revisión de la historia musical venezolana como expresión de una estética con carácter nacional ligada, obviamente, al entorno socio-político: "La música no es sólo sonido sino también estructura, expresión de sentido. Las formas surgen junto a exigencias estéticas de la época. El presente escrito resulta así una introducción al estudio de la tradición que conforma la historia de la música académica en nuestro país, considerando su relación dinámica con el entorno sociopolítico".

Es una lástima que el valioso trabajo de una institución como la Fundación Vicente Emilio Sojo pase desapercibido tantas y tan repetidas veces. Casi se podría afirmar que de alguna manera allí existe un cierto culto al anonimato, de tal forma que el nombre del autor de Compositores venezolanos aparece perdido dentro de una larga lista de nombres, bajo el triste título de Investigación y textos, dentro de los créditos de la Fundación. Vale la pena tener esta obra en la biblioteca. Puede conseguirla en la librería del Ateneo de Caracas y en la del Teatro Teresa Carreño. O pedir información a Funves, al teléfono 793.5717.1..9 FEBRERO 1995 EXCESO

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Radiografía del corrupto Frank Baiz Quevedo

S

e me ocurre que cada acto de corrupción, por pequeño que sea, es como el batir disimulado de una varita mágica: con él exorcizamos una fragilidad que nos debe resultar intolerable. Es como la pequeña obliteración del reportero de la radio cuando se equivoca —código generalizado de la prepotencia nimia, de la evasión pueril— y sustituye con una disyunción lo que no demanda más que corrección y punto. Corromperse, en cualquier grado, es permitirse el usufructo de una omisión, hacerse el desentendido, mirar para otro lado —confróntese la mirada del funcionario de tránsito en el momento climático de la mordida— y esperar mágicamente no ser visto ni por uno mismo.

El ritual automático que engloba el acto de corrupción es en esencia el mismo, cualquiera que sea su dimensión: se espera la misma ceguera momentánea, el mismo espabilamiento cósmico cuando se sustraen dos mil millones de bolívares de un ente financiero plantado en medio de la mirada pública, que cuando se le moja la mano al guarda-cadenas del cementerio de automóviles. Hay un interregno en el que, si acaso, caben las disculpas o se mascullan ciertas íntimas justificaciones con la ayuda de alguno que otro resentimiento invocado al punto. Enseguida, se impone la volatilización inmediata de cualquier culpa. El verdadero acto de corrupción es aquel que se condena de inmediato a su total enterramiento.

Aparte de todo, cada acto de corrupción es siempre el último y se cumple por-

que —en la visión que lo precede— se ha hecho (personal, económica y políticamente) necesario. Hay toda una ética del (actual) hacer corrupto que toca desde el nihilismo finisecular y postmoderno hasta la más genética sinvergüenzura. El funcionario se corrompe (es decir, omite: no trabaja, no entrega, no declara) porque un imperativo social y psicológico lo obliga: es decir, él no es pendejo. El universitario se corrompe (omite: no enseña, no trabaja, no denuncia) porque le es, personal y políticamente, necesario: la corrupción es su manera incuestionable de enfrentarse con las injusticias del sistema. El viejo militante progresista se corrompe (omite: falsea, infunda, favorece) porque le es necesario en términos prácticamente religiosos: se trata, con esto, de golpear a los infieles. Hasta hay un imperativo de orden estético (e histórico) en eso de corromperse: es feo convertirse en arquetipo de pureza en medio de la disolución de fin de siglo.

Hay que explorar —apartando de un lado las consideraciones morales— la economía psicológica que comporta nuestro ejercicio continuo de la corrupción a casi todos los niveles, si por corrupción se entiende el hecho de dejar pasar, omitir, hacerse el de la vista gorda en algún aspecto de la vida. Casi podría decirse que lo que diferencia al honesto ciudadano del corrupto es la tolerancia personal que confiere a sus propias omisiones.

En un sentido, todos somos corruptos, en un ámbito o en otro. Es lo mismo que con la infidelidad, que para todos se mueve en un continuo que va desde la mente hasta la cama y lo que se premia (moral y ahora sanitariamente) es la entereza, es decir, el esfuerzo contra el dejar pasar, contra la omisión. (Se es infiel casi siempre por flojera). Lo mismo pasa con la corrupción. Más que un mal generalizado (o una debilidad del carácter, como diría José Ingenieros, en su cursilería) es un síntoma de la deleznabilidad de este sujeto social que integramos todos: arrimados a nuestro pasado mágico, condolidos de nuestra subestima. Sometidos a la creencia de que haciéndonos los locos por un minuto con lo que hacemos, vamos a mejorar lo que al fin y al cabo siempre somos. L.1

Ley de Reencuentro Inmediato del Asesino con la Víctima Otrova Gomás Art. 1.- La vida de los venezolanos no vale nada.

Art. 2.- Por disposición de esta Ley, de ahora en adelante la de los asesinos tampoco.

Art. 3.- A objeto de impedir la demagogia barata, los falsos sentimientos humanitarios, el populismo rastrero y todas las manifestaciones de idiotez pública que permite la libertad de expresión, se deja claro que la presente Ley no pretende: a) acabar con el problema de la delincuencia en el país; b) resolver ningún problema social; c) impedir los robos de cuello blanco ni los de franela, ni las manifestaciones de encapuchados.

Art. 4.- El único objeto de esta normativa es eliminar a ciertos miembros de alta peligrosidad de la escoria nacional, para de esta forma impedir que al escaparse, salir bajo fianza o cumplir con las ridículas penas que establece el Código Penal, ellos acaben con la vida de más personas inocentes.

Art. 5.- Está en el espíritu de esta Ley: a) Reducir el costo de mantenimiento de delincuentes en prisiones abarrotadas que son escuelas de crimen; b) Impedir que la gente al leer el periódico cada día y enterarse de que los criminales detenidos tenían varias entradas a la cárcel se haga la estúpida pregunta: ¿y por qué este hombre estaba en la calle?; c) Acatar el mandamiento bíblico de "ojo por ojo y diente por diente"; d) Eliminar de la población venezolana a la primera causa de muerte de la población venezolana; e) Darle gusto a la gente horrorizada.

Art. 6.- Toda persona, cualquiera que sea su edad y condición, que voluntariamente le quite la vida a otra sin causa justificada deberá reunirse con su víctima en el otro mundo en un plazo no mayor de 48 horas, a objeto de que le explique directamente sus razones. Los aspectos sociales, argumentos de inimputabilidad criminal, leguleyismos procesales y otros fundamentos de defensa sólo podrán presentarse en la corte celestial, si es que el imputado logra tener acceso a ella.

Art. 7.- Una vez detenido el responsable del crimen y determinada policialmente su culpabilidad, una junta tribunalicia compuesta por un juez de Paz, dos familiares de la víctima del asesino y la primera persona decente que pase por la calle al momento de constituirse el tribunal, analizando el caso acordará por vía sumaria que éste sea ajusticiado a las 48 horas.

Art. 8.- Constituye una excepción a este procedimiento el caso de los encapuchados, los cuales pueden ser ajusticiados con rifles de mira telescópica por la policía o por cualquier persona que esté colocada en una azotea frente al lugar donde cometen sus fechorías. Igualmente se incluyen por vía de excepción los tipos delictivos del secuestro, ser policía y delincuente, las violaciones de menores y otras depravaciones semejantes.

Art. 9.- De resultar un error evidente en la determinación de la culpabilidad de la persona ajusticiada, una vez que se aclare el punto se ajusticiará al verdadero culpable, y junto a él a los miembros de jurado que cometieron el error con el inocente. Con base en este artículo, se agradece a todos los miembros de las juntas de ajusticiamiento fijarse bien antes de sentenciar. A todo evento, la muerte de inocentes en la aplicación de esta Ley se considerará su cuota de sacrificio en la lucha para adecentar nuestra sociedad.

Todo inocente ejecutado tendrá derecho a estatua en plaza pública.

Art. 10. Para tranquilidad de los creyentes de religiones que señalan que sólo dios tiene el derecho de disponer de la vida de los hombres, todo ajusticiamiento, sin excepción, se hará en su nombre.

Art. 11. Respetando el tradicional espíritu humanitario existente en todos los -

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países donde se aplica la pena de muerte, todo asesino antes de morir tendrá derecho a pedir un último deseo. Pero, basado en este artículo de la Ley, siempre se le dirá que no cualquiera que sea su pedido.

Art. 12.- La ejecución de los condenados se hará en acto público en el Poliedro o en un estadio que permita la presencia masiva de espectadores. El gobierno tratará de que las entradas tengan el precio regulado, para permitir que la gente de escasos recursos económicos también pueda disfrutar de los actos de justicia. Los familiares del condenado tendrán derecho a entrada gratis. En aquellos casos en donde la alevosía y el ensañamiento del criminal sean aberrantes, el ajusticiamiento se pasará por cadena de radio y televisión y no se cobrará entrada al estadio.

Art. 13.- Los condenados a reunirse con sus víctimas en el más allá serán dados de baja de las siguientes formas: a) Asfixia horrorosa, con conección directa de la boca y las narices al tubo de escape de un autobusete Magallanes-Chacaíto; b) Dejándole caer encima desde cien metros de altura una masa de concreto de cinco toneladas. Podrá escoger entre recibirla de pie o acostado; c) Con linchamiento por parte de los familiares de la víctima; d) Volviéndolo hombre-bala y lanzándolo con el cañón hacia las gradas del estadio.

Si queda herido se recogerán los pedazos y serán vueltos a lanzar hasta que logre irse para siempre de este mundo.

Art. 14.- Según el aumento de la incidencia criminal en el país, el Ejecutivo podrá reglamentar esta Ley incorporando el ajusticiamiento para otros tipos de delito, pero sólo en los casos de reincidencia.

Art. 15.- Las ejecuciones acordadas no tendrán apelación ni indulto. La única circunstancia por la que se podrá suspender una sentencia de muerte será cuando un miembro de la Comisión de Derechos Humanos lo solicite. No obstante, para ello el solicitante deberá llevarse al criminal a vivir con él y su familia, respondiendo personalmente de lo que haga. La pena quedará suspendida hasta que él mismo lo decida.

PD: Por un tiempo se suspende la garantía constitucional que prohíbe la suspensión del derecho a la vida. L? FEBRERO 1995 EXCESO

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TODA LA VIDA A MERCED DE LAS PALABRAS, ENTRE, BAJO, CON, CONTRA ELLAS. PROFESOR UNIVERSITARIO —DE LA SIMÓN BOLÍVAR, LA DE LOS ANDES—, ASESOR DE EDITORIALES —PLANETA, BIBLIOTECA AYACUCHO, ALFADIL—, RESPONSABLE DE PUBLICACIONES LITERARIAS —LETRA NUEVA, ZONA FRANCA, SOLAR Y CRITICARTE—, COLUMNISTA, NOVELISTA —CASA DE CUBA— Y CUENTISTA —SOBRE VIVIENTES Y LUNA DE ITALIA, INÉDITO HASTA SU APARICIÓN EN ESTE COLOFÓN—, PREMIADO POR EL INSTITUTO DE COOPERACIÓN IBEROAMERICANA, POR EL CONAC —POESÍA, 1982—, POR LA PRIMERA BIENAL DE LITERATURA NARRATIVA PICÓN SALAS. CUBANO DESDE 1945 —FECHA DE NACIMIENTO—, LATINOAMERICANO POR VOCACIÓN —VIDA MEDIANTE—, JULIO MIRANDA LUQUE AÑADE A SU CURRÍCULUM LA PASIÓN POR EL CINE —CRITICO Y JURADO DE FESTIVALES— PORQUE, EN FIN, LA NECESIDAD ES LA MISMA: CONTAR. EN ESTE CASO COSAS DE AMOR, EL TEMA

Julio Miranda

LA LUNA LO APLASTABA CONTRA LA PARED, impidiéndole volar. De lo contrario, hubiera salido disparado hacia las montañas o, acaso, hacia el mar, allá abajo, invisible en la noche aunque latiendo regularmente, poderoso, extensísimo. Bueno para huir. Pero ¿quién deseaba huir? El, sí. Lo que no tenía claro era el rumbo de esa fuga. ¿Huir de Mónica? ¿O, mejor, dentro de Mónica, cuerpo adentro como tantas otras veces? Y Mónica estaba muy cerca, pared por medio, en la casa. Dormía, seguramente. Tranquila. Hasta feliz, quizás. Ella ya había resuelto su problema: no te quiero. El no lo había resuelto: te quiero. Así de simple. Dos personas se encuentran, se aman, se entregan, y eso dura lo que dura. Una, de pronto, decide terminar. La otra queda colgando, manoteando en el aire, dando bocanadas, estrangulándose cada vez más con su frenética agitación de ahogado. ¿Nunca se puede coincidir en el desamor, como sucede en el amor? No, al parecer. Así de simple.

Lo peor, sin embargo, es la proloñgación de la presencia de quien ya no ama, avivando la herida de quien sigue a tmando.

Como el arrebatado sacerdote de un dios, obligado a servirle en su templo, al que su Señor le repitiera, día a día, casi momento a momento, que estaba condenado (y condenado, aún sería soportable), que abominaba de él, que nunca gozaría de nuevo de sus dones, que lo despreciaba, que escupía sobre su

ofrenda. La vía seca de los místicos no era nada, comparada con esto. La noche oscura del alma, quizás. Pero en tal caso, no se perdía la esperanza. El creyente podía desesperar, no desesperanzarse. Y tampoco se le aparecía a cada instante su dios, para preguntarle qué quería comer, a qué hora llegaría, quién compraría el vino o el pan, con exquisita —asesina— neutralidad.

Todo se acabaría en apenas 15 días, es cierto. Terminadas las clases, los exámenes escritos tendrían lugar pasado mañana, lunes; martes y miércoles para la evaluación; reunión el jueves, en que discutiría los resultados con sus colegas; anuncio de las notas el viernes; los orales, al fin, la próxima semana. A más tardar el otro viernes tomarían el tren rumbo a Roma y desde allí el avión para Caracas. Ciao, Italia. Ciao, luna roja inmensa de Italia. Ciao, costiera amalfitana. Ciao, universitá degli studi. Ciao, alumnos, "brutotes y tiernos" como le anunciara Alessandra en su carta, al ofrecerle el puesto. Lo que no le había dicho, descubriéndolo él con asombro, es que encontraría en Salerno una especie de población venezolana cautiva de sus padres, quienes habían decidido volver al paese arrastrando a sus hijos nacidos en Cumaná, Maturín, Maracaibo, Caracas... Fumaban Belmont, masticaban chiclets Adam's, comían arepas, escuchaban música llanera y seguían viendo FEBRERO 1995 EXCESO

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Las primeras semanas creyó que los aburría. Después supo telenovelas... Al principio creyó alucinar. Luego, comprendió que, en efecto, los aburría, pero no era por eso que desertaban que al menos la mitad de sus alumnos eran prácticamente comsúbitamente. patriotas suyos. Mónica, alborozada, se unió a aquella pandiEl, sin embargo, no se aburría en absoluto. La biblioteca de lla retozona e ingenua. Al cabo, tenían la misma edad, un desSalerno no era gran cosa, pero la de Nápoles sí. Leyó mucho, concierto similar, una común falta de metas, de proyectos, de tomó incontables notas, preparó un par de ponencias para planes. E incluso un desapego semejante hacia la literatura. Sus congresos en Florencia y Palermo. Recorrió Italia con Mónica, estudiantes acudían a las clases por el diploma, bastante inútil en aquella inexplicable serie de recesos que la universidad suademás (en Italia levantabas una piedra y salían diez hispanisfría o gozaba, por huelgas, exámenes, fiestas religiosas o acatas); por retrasar la obligación de trabajar; para escapar de sus démicas. El no iba a quejarse. Menos Mónica, que salía de casas, en pequeños pueblos preciosos pero asfixiantes. En cuanto a Mónica, y aunque la hubieLos celos lo devoraban. ra conocido como secretaria en una editorial, su biblioteca se reducía al La acosaba a preguntas.

Señor de los anillos de Tolkien y a las No: no estaba enamorada de otro; Fundaciones de Asimov. ¿Y no era no, no es que tampoco le gustara otro más que él; eso, por otra parte, lo que le había atraído de ella: cierta calidad salvaje, no, claro que no tenía nada con nadie, ¡chico! algo completamente ajeno a su meSí lo amaba, dio, a sus conversaciones librescas, a su tabla de valores? Cuando le dijo: pero, "no sé lo que me pasa, "¿Para qué sirve todo lo que escridame tiempo" bes?"; cuando le susurró, besándoló ya casi: "No perdamos tiempo. Me gustas mucho", él se estremeció. EsVenezuela por primera vez. Fue una luna de miel. Piel de miel, taba claro que no era al escritor ni al profesor a quien la muchacha ofrecía su cuerpo con aquella pasmosa naturalidad, ¿no la llamaba así, no la llamó así, convicto de cursilería pero sino al hombre. El la hizo suya, colmándose de dulzura, salpifeliz? Y ella feliz también, feliz piel de miel acariciada, estrujacándose con el polvo de oro de su belleza joven, pura, animal, da, lamida, poseída, reflejada en mil gotas de sudor piel de exacta. Llevaban apenas un par de meses juntos; llegó la promiel. puesta de Alessandra; la invitó a irse con él; dudó (¿jugó?)

Ya en Vietri, el pueblecito que brillaba blanquísimo junto al unos días; dijo que sí. mar, sobre el mar, con todas sus cerámicas destellando, la vida Mónica compartía también con sus alumnos una alborotase les iba entre las clases, los paseos y el amor. Mónica lo da neolengua en la que el español se iba olvidando sin que lo acompañaba a Salerno, merodeando por las tiendas mientras sustituyera un italiano correcto, mezclando además él estaba en la universidad, o se quedaba tirada al sol en la tevenezolanismos y formas dialectales de Salerno y de Nápoles. rraza llena de flores, lánguida lagarta, espléndida lagarta, que En su presencia, se esforzaban en hablar "en toscano"; con en la noche le ofrecería el calor acumulado, la luz sorbida por Mónica, se abandonaban al frenesí argótico, que hubiera encada poro de su cuerpo. Los fines de semana daban un salto a cantado a un lingüista. Pero lo suyo era la historia de la literaCapri, a Ravello, a Positano, a Sorrento o a Paestum incluso, tura, desde unas jarchas que, para colmo, estaban escritas en para bañarse con columnas griegas al fondo. árabe, unas cantigas en portugués y unas gestas en castellano Hasta que, una noche, se hizo la dormida. Y la siguiente se arcaico, hasta el esplendor inalcanzable de los versos de declaró cansada. Y luego, abiertamente, se negó, ante la insisAleixandre o Cernuda. El daba las clases en italiano a los dos tencia de él. "No sé lo que me pasa", dijo. Seguía yendo a primeros cursos, pasando con frecuencia al español con los de Salerno, pero ya no lo esperaba a la salida. Se iba "con la pantercero y cuarto: un puñado de selectos estos últimos. Para el dilla". Volvía tarde. Los celos lo devoraban. La acosaba a precaso que le hacían los anteriores, hubiera podido perorar en guntas. No: no estaba enamorada de otro; no, no es que tamchino. Cuando más apasionado se encontraba, explicando a poco le gustara otro más que él; no, claro que no tenía nada Boscán o a Tirso, una pregunta rasgaba el aire: "¿Eso está en el con nadie, ¡chico! Se metían en un bar, miraban las vitrinas, programa? ¿Va para examen?". No, en aquel estúpido progracaminaban por la playa, ¡todos juntos, siempre! Sí, lo amaba, ma Boscán y Tirso eran apenas notas al pie de página. pero "no sé lo que me pasa, dame tiempo, déjame pensar, no Garcilaso sí, para examen. Lope. Calderón. Ahí los tienen en el me hostigues, mejor vete solo al congreso ése". libro, estúdienlo. Pero yo les estoy hablando ahora de Boscán.

El se mudó a la sala. Daba las clases distraído o con furia, Ecco. Y seguía adelante, mientras los alumnos se levantaban o las interumpía a la mitad y se marchaba por las callejuelas. se sentaban, salían y entraban dado el entrecruzamiento de los Tampoco notó burlas, risitas o el temible gesto que lo acusara horarios. Tardó en enterarse de la verdadera razón del ajetreo. de cornudo. Anna bello sguardo, su mejor alumna, le pregun-

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tó mimosa qué le pasaba. Sabía que podía acostarse con ella.

Pero ¿para qué? No era eso lo que quería. No era eso.

Le ofreció a Mónica el pasaje de regreso. ¡Que lo dejara solo, entonces! "Vinimos juntos, volvamos juntos. Ya falta poco", contestó el dios. Las puertas del templo estaban cerradas. Apagadas las velas. Los alimentos, tirados por el suelo.

Pero la imagen del dios resplandecía, cegadora, en la penumbra. El tembló.

El temblaba, aún, sentado en la terraza, en el intacto sopor de comienzos de julio. La pared a sus espaldas ardía. La luna, que siempre había sentido como su cómplice, como una gran hermana, como su madre misteriosa, lo tenía allí clavado, mientras fumaba un cigarrillo tras otro y se echaba tragos ¡de ron! Curiosamente, en los últimos días había desechado la grappa o su amadísima centerbe, las cien hierbas de setenta grados que era necesario paladear a sorbitos, volviéndose hacia el ron: ¿regresión? ¿Anticipo del despecho caraqueño? ¿Repetición del rito conocido, manejable, que terminaría en poemas? Como otras veces, se preguntó por la gente que no escribía, o que no pintaba, hacía cine, cantaba, lo que fuera.

Era una consideración estúpida. Era una consideración sincera. ¿Cómo soportaban el desamor? ¿Cómo coño podían soportarlo? ¿Cómo lo sacaban de sí, lo objetivaban, lo expresaban, lo asimilaban, al cabo? ¿Matándose? ¿Matando?

Se levantó, fue dando tumbos hasta el final de la terraza, sobre el río que desembocaba en el mar, aquella mancha blanqueada por la luna, allá abajo. Encabalgó la baranda. Se sentó del otro lado, en el borde, con las piernas colgando. Se le cayó la botella de ron. Ni siquiera la oyó romperse.

Volvió sobre sus pasos. Entró a la casa. En la sala, desnuda, estaba Mónica, sentada en el sofá. Esperándolo. Y ahora sí que tembló. "Ven", le dijo ella. Le fue quitando la ropa, mientras lo acariciaba y lo besaba. Se montó sobre sus piernas, abierta, palpitante. La penetró de inmediato. Apenas se movían. Hicieron el amor así, muy suavemente. Ella se le quedó dormida entre los brazos. La acostó en el sofá. Fue a buscar la navaja.

Probó el filo en la palma de su mano: una línea de sangre, finísima. La chupó. Pensó un verso. Y otro. Y otro más. Se dirigió a la mesa, desde donde la seguía viendo, plácida. No encendió la luz: con la luna bastaba. Y se puso a escribir: mi derrumbada, mi acariciada, mi adormecida mi amor, te clavaría la navaja ahora mismo un primer golpe certero, luego otros, lentamente para que entraras en la muerte amándome recojo con la lengua el sudor del surco que divide tu espalda toco tu vello húmedo, el suave interior de los muslos mi todadulce, mi todamojada la navaja en mi mano, su belleza•estricta su fría esbeltez, tan ajena a la tuya y me duermo a tu lado admitiendo que sea quizás la última vez.L

Una vez más, la Copa Venezuela atrajo un gran número de competidores. Franco Gusso y Paolo Pasquini lograron, en un emocionante final, ganarle a Adolfo Mendoza y Francis Vernon la categoría Nacional. En serie A, los Morganti y en serie B, las señoras Cruz y Spamer se llevaron los máximos honores. En el Altamira Tennis Club se efectuó el primer torneo Copa Marruecos. Decir que fue un éxito es poco. Realmente, un gran espectáculo. Y los ganadores fueron: Alisa Rappaport, la nueva estrella del bridge femenino, y mi maestro Mario Onorati. Mi gran amigo Teddy Phocas y yo ganamos el torneo lateral que, por cierto, tuvo muy buenos premios: dos noches en el Hilton para dos personas. En el ámbito internacional, Colombia organizó los terceros Juegos Bolivarianos y se llevó los títulos opera y femenino.

Ahora miren estos ejemplos acerca de los sistemas de declaración que se han tornado cada vez más sofisticados.

2+ 2S+ +KQ10XXX +AJXX 3+ g► 1OX 3•►

4+ 3+ 5+ 4+ ??> 5+ La apertura de 2+ muestra una mano débil con un mayor 6. 2S+ es un relay y 3+ muestra una mano no mínima con 6+. 3• ► es relay y 3+ muestra una mano de 6-8 puntos. 4+ es cue bid y 4+ nuega cue bid de • y go. 5+ es cue bid y 5+ muestra la Q de +. La declaración correcta ahora es 5S+ que es pregunta de honores mayores en 4. 6+ mostraría 2 honores y ahora sólo queda por declarar 7+.

Veamos ahora una declaración competitiva. +XXX 11► JX +KQXX +KQXX y la declaración va Partner Usted Oponente Oponente Paso 1+ 1•11 1+ ???

1+ 2<10 +QXX

+Jx

+AK1OXX +AXXX

-

-

-

Su compañero abre de un + que puede ser corto. Usted contesta un + que niega un color mayor cuarto a menos que no tenga una mano con apertura, el oponente declara un y su compañero declara una 4 mostrando 5 o más + y 4+ y una mano buena. Su adversario compite con 2••• y usted debe declarar. Es obvio que quiere apoyar a +, pero su mano no es tan buena. Utiliza entonces una convención llamada good bad 2S+. Usted declara 2S+ y su compañero alerta diciendo que usted tiene una mano de -

6-8 puntos con apoyo a +. Si usted hubiese tenido de 9 a 11 puntos honores con apoyo a+ hubiera declarado 3+ de una vez, y si hubiese tenido una mano todavía más fuerte, 12 o más puntos, hubiese doblado.

En la primera mano, el jugador no supo qué declarar sobre 5+ y declaró 6+, remate que terminó las acciones. Resultado: 6+ hechas 7. En la segunda mano, el jugador declaró 3+ y el compañero, pensando que tenía una mano de 9 a 11 puntos, declaró 5+. El adversario, que tenía 3 Ases en la mano, no se dejó intimidar por nuestro remate y dobló. Resultado: 3 douin 800 para los otros.

Steve Hamaoui M.I.

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Los cerebros de Sergio â&#x20AC;¢

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