Llegó septiembre, con su alegría tricolor, música y sabor. Un mes en donde nos sentimos orgullosos de nuestra gran nación, de nuestras tradiciones y folclor. Orgullosos de nuestra forma de ser alegre, festiva y solidaria. De nuestra inventiva, astucia y gran talento. Orgullosos de nuestra fuerza y resiliencia. También, es momento de sentirnos orgullosos de nuestra valentía, honradez, esfuerzo y trabajo diario. Somos en verdad una gran nación, que vibra y siente con amor y fervor todos los días, así que hagamos de este orgullo patrio, de este gran sentimiento y forma de ser que nos enchina la piel y nos identifica ante el mundo, esté presente todos los días del año, uniéndonos a todos como hermanos mexicanos. ¡Que viva México, siempre!