Un día el hombre aprendió a caminar erguido. Viajo a distintos lugares.
Conoció a otros hombres, compartió sus ideas, su comida, sus costumbres. Las hizo suyas y migro con ellas alrededor del mundo.
Cuando el hombre, primitivo o conquistador, piso suelo americano, llego
con Ia magia de las historias que había aprendido, las cantó y convirtió en una nueva tradición. Así, se volvieron leyendas tristes, divertidas, maravillosas o extrañas.
Con su estilo cargado de humor y poesía, Olga Drennen recopiló algunas de esas leyendas. Historias que aparecen en el norte de nuestro país y llegan al sur de los Estados Unidos. Martin Moron complementa muchas de ellas con Ia magia de cada una de sus ilustraciones.