Cambio de Paradigma en la Cadena de valor

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TRANSFORMANDO PARADIGMAS: El porqué y el cómo de una gestión de suministro eficiente y sustentable. RESUMEN La gestión de la cadena de suministros puede comprender entre el 45% y 50% de los costos de una empresa. Comúnmente los modelo de compras en las empresas se focalizan en la negociación del precio y del plazo en relación a pagos, en conjunto con otros componentes decisorios, entre estos podemos nombrar la calidad, capacidad financiera del proveedor, cumplimientos de entrega, tiempos de producción, entre otros. Sin embargo, en muchos casos, considero que de un tiempo a esta parte se han desarrollado iniciativas por parte de las empresas en las compras sustentables, el componente basado en los Objetivos de Desarrollo Sustentable (ODS) no se logra instalar transversalmente dentro de las políticas o iniciativas desde la perspectiva de una gestión de compras eficientes y sustentables. Desde hace algunos años nuestra agencia PS desarrollo un modelo de compras eficientes y sustentables, donde la gestión de la cadena de valor asume un rol principal logrando ir más allá de la mera negociación del costo, abordando un concepto sistémico. Este modelo conlleva a grandes beneficios transversales (económicos, sociales, ambientales, educativos y culturales, todos ellos impactan unos sobre otros) a corto, mediano y largo plazo, transformándolo en una herramienta de competitividad para el gran desafío del Siglo XXI, que es lograr un desarrollo sustentable. Palabras claves: Objetivos de Desarrollo Sustentable; Cadena de Suministro; cadena de valor, competitividad. INTRODUCCIÓN A pesar de la notable trayectoria del concepto de Desarrollo Sustentable (DS) como un reconocido paradigma de desarrollo a largo plazo, con el objetivo de alcanzar de forma simultánea y equilibrada el crecimiento económico, el progreso social y la protección ambiental, con un foco particular en la equidad ínter-generacional, la implementación de los ODS para alcanzar el DS ha demostrado ser en la práctica una tarea compleja. La Agenda 2030 marcan un camino claro, imperativo y decisivo de retomar el crecimiento económico pero a partir de prioridades muy claras que son transversales a todos los ODS. Adoptando un enfoque sistémico que pretende lograr la cooperación y alianzas entre todos los participantes de la cada de suministro de un producto, www.productosustentable.com info@productosustentable.com

desde el productor hasta el consumidor final. Una de las principales tareas es involucrar a cada parte interesada mediante la sensibilización y la educación (ODS4 - Garantizar una educación de calidad inclusiva y equitativa, y promover las oportunidades de aprendizaje permanente para todos) sobre el consumo y los modos de vida sustentables. Frente a lo expuesto cabe señalar que para que exista un consumo sustentable debemos lograr una producción bajo criterios de desarrollo sustentable. Hoy el hecho de que exista la NORMA ISO 20400 de compras sustentables es porque previamente en la última década se viene impulsando la inclusión de aspectos ambientales, sociales y culturales en los modelos de compras; así podemos mencionar el Green Public Procurement (contratación pública verde) es un concepto que tiene su origen en la Ocse y que posteriormente ha sido confirmado por la Unión Europea y por las normativas de los Países miembros; y de la norma británica BS8903 - Principles and framework for procuring sustainably. Guide. De hecho han sido desde el comienzo nuestro ejes para nuestro modelo de gestión de compras eficientes y sustentables. A partir de esto podemos decir que las compras con criterios ambientales se enmarcan en el ámbito público, esto se debe a que el desarrollo de este tipo de políticas se centro en que las compras estatales representan entre el 10% y el 15% del Producto Bruto Interno mundial (WTO,2011). Por lo tanto el desempeño del Sistema de Compras Pública es clave para cualquier economía y su desarrollo, ya que representa una gran oportunidad para cambiar patrones de consumo hacia modelos sustentables, a través del uso de herramientas que permitan influir en el mercado, fomentando la producción y el suministro de bienes y servicios amigables con el medio ambiente y socialmente responsables. Mediante este simple artículo me propongo presentar brevemente el enfoque y modelo innovador de “Compras Eficientes y sustentables” que viene desarrollando PS (2015), este modelo permite articular el componente ambiental, social y cultural con el componente financiero-económico; es decir, logramos que mediante la inclusión de los componentes del DS la empresa transforme su sistema de gestión de la cadena de valor actual a una gestión eficiente y sustentable, a la vez que se apoya la optimización de su competitividad y se complementan las acciones de responsabilidad social empresaria apoyando y logrando el ODS12 y el ODS4. LA IMPORTANCIA DE LA PRODUCCIÓN Y EL CONSUMO SUSTENTABLE Al día de hoy una de los postulados más relevantes se asocia al surgimiento de la ISO 20400 de Compras Sustentables, también al rededor de está existen iniciativas globales para promover patrones de producción y consumo sustentables. Entre ellas,


el Marco Decenal de Programas sobre Consumo y Producción Sostenibles (10YPF por sus siglas en inglés). La importancia de una producción y consumo sustentable es tal, que fue reafirmada al incluirse en el ODS12 de las Naciones Unidas: “Garantizas modalidades de consumo y producción sostenibles”. El ODS 12 está conectado con los principios: 1 y 2, 7, 8 y 9 del Pacto Global El Objetivo de Desarrollo Sostenible 12 está conectado con los principios: 1 y 2, 7, 8 y 9 del Pacto Mundial. Desde la visión del Pacto Mundial el ODS12 pretende cambiar el modelo actual de producción y consumo para conseguir una gestión eficiente de los recursos naturales, poniendo en marcha procesos para evitar la pérdida de alimentos, un uso ecológico de los productos químicos u disminuir la generación de desechos. Asimismo, pretende impulsar los estilas de vidas sustentables entre toda la población, conseguir que el sector privado actúe bajo criterios de sustentabilidad e impulsar el cambio de modelos a través de políticas públicas. Así las empresas del sector privado juegan y tienen un rol clave para lograr una producción sustentable que se transforma en consumo sustentable; deben incorporar en sus modelos de producción y consumo criterios de sustentabilidad, para mí el punto más significativo es lograr una gestión eficiente y sustentable en la cadena de valor, así logran generar un circulo sustentable, siendo el hito el ODS4 para lograr el ODS12. BASES CONCEPTUALES PARA LA IMPLEMENTACIÓN DE NUESTRO MODELO CADENA DE VALOR En 1985 el Profesor Michael E. Porter de la Escuela de Negocios de Harvard, introdujo el concepto del análisis de la cadena de valor en su libro Competitive Advantage (Ventaja Competitiva). El punto de partida del concepto de análisis de la cadena de valor de Porter identificaba dos fuentes separadas y fundamentales de ventaja competitiva: el liderazgo en costo bajo y la diferenciación. Porter enfocó su nuevo concepto, argumentado que el liderazgo en costo bajo o la diferenciación dependía de todos aquellas actividades discretas que desarrolla una empresa y que separándolas en grupos estratégicamente relevantes la gerencia podría estar en capacidad de comprender el comportamiento de los costos, así como también identificar fuentes existentes o potenciales de diferenciación.

SUSTENTABILIDAD EMPRESARIAL Si bien la RSE ha sido el motor de las grandes cambios en el sector empresarial introduciendo la importancia de lo social y lo ambiental, se ha relacionado más a lo social, hoy frente a los grandes desafíos para el DS presenta algunas limitaciones para vincularse a la cadena de valor. Una línea de avance clara hacia los ODS en nuestro país sería comenzar a consolidar el concepto de Sustentabilidad Empresarial - Sustentabilidad Corporativa. Hace algunas décadas atrás, la expresión “Desarrollo Sustentable” era poco menos incomprensible. Hoy, sin embargo con mucho esfuerzo, no existe actor social que no declare su intención a contribuir al DS. Lo más extraño es que las actuaciones así declaradas difieren ostensiblemente entre sí y difieren especialmente según el tipo de actor social que haga la declaración. Caben dos respuestas para este fenómeno: o el parámetro para catalogar la “sustentabilidad” es poco exigente o en realidad el significado del DS (y sus implicancias)no está del todo claro. Creo que parte del problema se centra más en la segunda alternativa: difícilmente se puede ser exigente cuando no hay claridad conceptual. Las empresas no escapan a este fenómeno. Comunmente escuchamos declarar a gerentes o directivos de empresas declarar que sus empresas son “sustentables” por el hecho de realizar tal o cual acción relacionada al ambiente. Esto quizas se deba a que el movimiento de la Sustentabilidad o del DS ha estado más ligado a lo medioambiental, la primera definición de sustentabilidad aparece en el denominado informe Brundtland (en homenaje a Gro Harlem Brundtland - Madrina del Desarrollo Sustentable; política noruega que dirigió la redacción del informe Nuestro Futuro Común) y fue adoptada por la Asamblea General de Naciones Unidas en 1987, bajo el siguiente concepto: “Desarrollo sustentable es aquel que satisface las necesidades del presente sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras sus propias necesidades”. Por su parte la primera aproximación a la “triple cuenta de resultados” se atribuye a Jhon Elkington quien en 1997 acuño la idea de que para que una empresa sea sustentable, tiene que garantizar un triple objetivo: ser económicamente viable, ser socialmente beneficiosa y ser ambientalmente responsable. Otros afirman ser “sustentables” cuando se preocupan de sus grupos de interes de manera continua. Sin embargo, esas posturas no corresponden siempre a los desafíos que impone el DS para la sociedad en general y las empresas en particular, por lo que si bien esas acciones pueden ser de utilidad para las empresas, no está claro que sean sustantivas para acercarse al DS. La preocupación ambiental no es necesariamente


preocupación por el DS, así como realizar actividades de RSE no significa siempre realizar acciones que lleven al DS. Frente a esta realidad, debo ser justa. Que la mayoría de los actores sociales asocien el DS con temas ambientales no es producto del azar. El termino tiene justamente sus orígenes en la preocupación por el ambiente que comienza a surgir en el mundo a principios de los 70’. Luego en la década de los 90’, el concepto se siguió discutiendo y profundizando. Así comienzan a surgir varios modelos de análisis como el Modelo de Stock de Capital del Banco Mundial; el Modelo de Prisma del DS, el Modelo de Prisma MAIN, o el Modelo de Huevo del DS; que no evaluaremos en este artículo. Si puedo afirmar que el objetivo de estos modelos era estructurar los distintos componentes del DS de una manera tal que permitiera disponer de una herramienta práctica para la evaluación y análisis del grado de DS en una determinada comunidad o un determinado proyecto y, de esa forma, tomar las acciones correctivas o preventivas necesarias. Los investigadores pertenecientes al ámbito de la gestión de empresas no se quedaron atrás y también desarrollaron sus interpretaciones sobre el DS y sobre cómo al empresa debía responder a esos desafíos. Más allá de una u otra concepción respecto al término, la mayoría de los investigadores conciben al DS como un conjunto de desafíos complejos para una empresa, ya que involucra elementos ínter-conectados que comúnmente no han formado parte de las preocupaciones empresariales. Algunos investigadores fueron más allá, planteando directamente que para enfrentar estos desafío la empresa requiere de un cambio de paradigma técnico-económico. La mayoría de las empresas, así como también las investigaciones académicas asociadas, han cometido dos confusiones: - Establecer como respuesta al DS acciones ambientales; - Emprender iniciativas de RSE más que iniciativas tendientes a resolver los desafíos del DS. Frente a estas dos confusiones, y considerando la sugerencia de Lozano (2006) la RSE actúa a un nivel más micro en cambio la Sustentabilidad Empresarial para el Desarrollo Sustentable actúa a un nivel más macro al insertarse en los desafíos globales del DS que involucrado los 4 puntos (económico, ambiental, social y educativo). Esto lleva aun hecho más descollante pero que pasa comúnmente pero que pasa desapercibido para las empresas, los tomadores de decisiones y algunos investigadores: una acción ambiental o social implementada por una empresa puede llegar ser

una adecuada estrategia de RSE, sin embargo no por ello aportar sustantivamente al DS. Es decir, puede incluir preocupaciones sociales y ambientales y puede satisfacer a sus grupos de interés e incluso haberse realizado con su participación, pero, como he descrito antes, el DS debe ser entendido como un meta-problema(solución) compuesto por varios problemas-soluciones con múltiples factores asociados, con lo que una acción aislada puede fácilmente caer en el vacío o tener incluso consecuencias no deseadas. Efectivamente, dado que el DS es un problema macro, en la Sustentabilidad Empresarial para el Desarrollo Sustentable los grupos de interés deben entenderse de la manera más amplia posible, lo que significa no restringirlos. Una Sustentabilidad Empresarial para el Desarrollo Sustentable pretende estar en línea con el DS, debe trascender las visiones tradicionales de los grupos de interés, por muy útiles que sean, de modo que las empresa se vincule con los actores más representativos de cada uno de los distintos sectores de la sociedad. Así la Sustentabilidad Empresaria para el DS debe contar con cuatro factores imprescindibles: económico, ambiental, social y educativo. Esta forma es totalmente coincidente con los ODS para el logro del DS, ya que implica que la empresa debe trabajar con estos cuatro “capitales”. Estos cuatro pilares se relacionan de tal forma que todos confluyen mutuamente, siendo esa combinación de influencias mutuas la que arroja ciertos criterios o ámbitos de acción. También hay que lograr y desarrollar indicadores de seguimiento y evaluación para ver si se esta tomando el camino correcto, las acciones deben ser dinámicas, sistémicas, flexibles y al mediano y largo plazo. Desde esta visión es que creemos la importancia dentro de la Sustentabilidad Empresarial para el DS la correcta gestión de la cadena de valor. A continuación desarrollaré brevemente el modelo propuesto para la gestión de compras eficientes y sustentables, el mismo puede ser replicado en pequeñas, medianas y grandes escalas como en los diversos sectores, tanto público como privado. MODELO DE COMPRAS EFICIENTES Y SUSTENTABLES Evaluación de Proveedores Al implementar un sistema de gestión de compras competitivas, eficientes y sustentables, la empresa debe dar prioridad a la evaluación de aquellos proveedores que generen valor agregado a la sustentabilidad ambiental y social de la organización a través de la cadena de suministro. Es decir, la organización debe establecer qué proveedores son am-


biental y socialmente estratégicos por tener impacto directo en la implementación del modelo. Paralelamente, esto implica iniciar el desarrollo de una estrategia de gestión de la cadena de suministro, basada en la generación de valor agregado por medio de calidad, fortalecimiento de relaciones, desarrollo de modelos de innovación y optimización de logística, entre otros. En este punto es fundamental asegurar como mínimo el cumplimiento normativo ambiental de los proveedores. Los factores como certificaciones ambientales deben tener igualmente valor agregado en los criterios de selección, por ejemplo ISO 1400 1/9001/14007/14046/26000/14040 y actualmente ISO 20400, entre otras etiquetas y certificaciones. Aquí quiero establecer un hito de gran importancia basado en el ODS4 Educación de Calidad y la Agenda2030 de Educación y el rol del sector privado en el cual deben establecer alianzas de múltiples partes interesadas, inversión, contribuciones que sean transparentes, se ajusten a las prioridades locales y nacionales, respetando a la educación como un derecho humano y sobre todo un derecho habilitador. Logrando comprender esta responsabilidad las empresas deben participar activamente y colaborar en el proceso de planificación de la educación y la capacitación práctica para comprender las tendencias del mercado laboral y las necesidades en materia de calificaciones, para de esta manera facilitar la transición de la escuela al trabajo promoviendo enfoques innovadores para asumir los desafíos del Siglo XXI, con esto hago referencia a la necesidad de replantar algunas acciones para poder educar a las generaciones futuras y que sean consumidores y productores responsables y comprometidos con el desarrollo sustentable. Este punto es de un grado de importancia alto, ya que estamos preparándonos para el futuro, estamos logrando desarrollar una prospectiva en relación a la cadena de valor. Las empresas deben asumir, también, la responsabilidad de lograr, en caso de que no lo sean, a sus proveedores y a sus colaboradores, para establecer un trabajo en conjunto a favor del desarrollo sustentable. Evaluación del Producto o Servicio La evaluación esta basada en el análisis de ciclo de vida de un producto o servicio, el cuál puede ser genérico o cualitativo para los productos o categorías de productos/servicios y específico para aquellos productos/servicios que se consideren prioritarios. Se elabora un modelo de contratación, realizando un relevamiento y mapeo de los bienes y servicios

de la empresa estableciendo categorías, dentro de las cuales se identifican los productos y servicios específicos, en los cuales podrían ser introducidos cambios en los procesos o materias primas para disminuir el impacto ambiental. Generamos valor agregado cruzando nuestra matriz de análisis de ciclo de vida ambiental y social, con una matriz de análisis de ciclo de vida económico o costo total de vida, así logramos evaluar el costo total del producto/servicio más que el precio de compra. Es importante tener en cuenta el periodo de vida esperado del producto, especialmente en temas de logística, costos administrativas, tecnología, mantenimiento, generación de residuos, huella de carbono e hídrica, lo que logramos mediante nuestro modelo de compras es contemplar todos los costos asociados al ciclo de vida desde la sustentabilidad y el costo financiero. Evaluación del Método de Compra Existen impactos ambientales que hacen ineficiente a la gestión de la cadena de valor que no dependen del proveedor ni del producto o servicio en si mismo, sino de la metodología que la empresa tiene para adquirir sus bienes y servicios. Con nuestro método se evalúa la logística, frecuencia de compra, manejo de stock, criterios de compras, entre otros, se refleja en mayores eficiencias y en menores impactos ambientales. Por ejemplo: reducir la demanda puede ser un objetivo prioritario en la gestión de compras. No se trata de reducir por reducir, comprando lo que realmente es necesario. Adicionalmente, al entender cuál es exactamente la necesidad que se desea suplir, el área de compras puede ayudar a modificar los criterios de compras y hacer más sostenible esta actividad. En este contexto se puede aplicar el concepto de desmaterialización, este criterio debe ser incorporado dentro de los diferentes parámetros que se exigen a las áreas para la elaboración de requerimientos. Seguimiento Para determinar el impacto que este modelo puede generar dentro de la empresa, establecemos indicadores de gestión y de impacto. En el mundo, uno de los más utilizados son los propuestos por el GPP: - Porcentaje total de compras verdes respecto al valor monetario; - Porcentaje total de compras verdes respecto al número de contratos - Disminución del impacto ambiental como resultado de la gestión de compras sustentables, respecto de la reducción de vida del producto.


A modo de conclusión creo que los principales paradigmas desde los cuales se gestiona la cadena de valor en Argentina están asociados a obtener el menor precio y lograr el mayor plazo en la forma de pago. Si analizamos estos dos aspectos, tenemos que el menor precio puede diferir bastante del menor costo del ciclo de vida, es decir, “lo más barato sale caro”, y esto aplica de manera muy frecuente a las compras en nuestro país, pudiendo extenderlo a nivel regional. No se logra tener en cuenta consumos futuros de energía, agua, cantidad de residuos y manejo de los mismos, transporte, logística, etc, incrementando los impactos ambientales, sociales y económicos generados y paralelamente los costos administrativos o operativos. Por otra parte, extender al máximo el plazo de pago tiene incidencia directa en la estabilidad financiera del proveedor, y es un factor negativo en una adecuada gestión de la cadena de suministros, pues afecta la generación de relaciones estables y de confianza. Laura Charliac

Producto Sustentable S.A laura@productosustentable.com

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS Producto Sustentable S.A (2015) - Manual de Compras Eficiente sy sustentables para Empresas. CEPAL (2017) - Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Una oportunidad para América Latina y el Caribe. European Commission - Green Public Procurement. BS 8903:2010 - Principles and framework for procuring sustainably. Guide. Revista Estado y Políticas Públicas Nº 3. Año 2014. ISSN 2310-550X pp 131-155 - Compras Públicas respetando el ambiente con inclusión social en la Argentina (1994-2014) Sitio web del Pacto Mundial España (ingreso 2017) ISO/DIS 20400 (2017) - Sustainable procurement — Guidance. EOI (2010-2011) - La Gestión de la Cadena de Suministro - José Ramón Vilana Arto. Entrevista con Gro Harlem Brundtland “SOMOS RESPONSABLES DE LA CALIDAD DE VIDA DE FUTURAS GENERACIONES”. Sitio web http://johnelkington.com/ - (2017) Documentación Social - Revista de Estudios Sociales y de Sociología Aplicada N°146 - Responsabilidad Social Empresaria. San Bernardo, Madrid.


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