Desde Primera Edición Costa Oriental del Lago, por quinto año consecutivo, seguimos maravillados con nuestra historia, aunque esta vez, un poco más movida y con un son particular.
Promesas, devoción, gratitud y fe sobra para el Santo Negro en su recorrido. Una tradición que pasa entre generaciones y se afianza con los que llevan el ajé, ajé en sus venas.