El primer impacto de la conquista europea en América no fue sólo asombroso, sino que estuvo acompañado del uso del miedo por medio de cañones, mosquetes, y la fuerza del hombre blanco acompañado de su caballo. Así, los invasores se valieron del desconcierto indígena y dominaron fácilmente a las sociedades americanas que, si bien eran más populosas e imponentes que los hombres europeos, nunca consideraron una invasión externa fuera de lo conocido territorialmente hablando hasta la fecha.