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Terminó el sueño mexicano
México tuvo una semifinal llena de emociones pero al final no le alcanzó para superar a Japón al caer 6-5, a un paso de continuar haciendo historia e instalarse en la final del Clásico Mundial de Beisbol.
La ofensiva azteca abrió la pizarra gracias a Julio Urías que en la cuarta alta metió batazo para poner triple cuadrangular en conjunto con Isaac Paredes y Rowdy Téllez. El momento agridulce llegó en la séptima baja cuando la novena nipona recetó de la misma manera a los mexicanos y emparejó las acciones por conducto de Yoshida, Othani y Kondoh con un palo de 4 esquinas.
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el toletero Masataka Yoshida rompió la marca de empujadas para un solo torneo con 13. México tuvo una semifinal llena de emociones pero al final no le alcanzó para superar a Japón al caer 6-5, a un paso de continuar haciendo historia e instalarse en la final del Clásico Mundial de Beisbol.
El héroe de la noche, ídolo de la afición mexicana, Randy Arozarena además de lucirse en la quinta entrada y robarle a los japoneses la oportunidad de convertir, anotó la cuarta para la escuadra nacional desde segunda base con el hit de Alex Verdugo. La quinta fue gracias al sencillo de Isaac Paredes que impulsó a Jarrén Durán, era el 5-3.
Japón se negaba a bajar los brazos y Hotaka Yamakawa pegó elevado de sacrificio para impulsar a Takumu Nakano, que estaba en tercera, para anotar la cuarta del conjunto asiático en el 8vo y llegar con todo al cierre. En la novena entrada Munetaka Murakami se alzó como la figura de la escuadra japonesa y mandó dos carreras a la registradora con la velocidad de Ohtani y su corredor emergente, que lamentablemente terminaron con el sueño mexicano de la manera más cruel.
DATO: Con su jonrón de tres carreras frente a “Jo Jo” Romero,
0 - 4 0 - 1 3 - 3 1 -0 0 -1 2 -4 0 - 2 2 - 2 5 - 6
La ofensiva azteca abrió la pizarra gracias a Julio Urías que en la cuarta alta metió batazo para poner triple cuadrangular en conjunto con Isaac Paredes y Rowdy Téllez. El momento agridulce llegó en la séptima baja cuando la novena nipona recetó de la misma manera a los mexicanos y emparejó las acciones por conducto de Yoshida, Othani y Kondoh con un palo de 4 esquinas.
El héroe de la noche, ídolo de la afición mexicana, Randy Arozarena además de lucirse en la quinta entrada y robarle a los japoneses la oportunidad de convertir, anotó la cuarta para la escuadra nacional desde segunda base con el hit de Alex Verdugo. La quinta fue gracias al sencillo de Isaac Paredes que impulsó a Jarrén Durán, era el 5-3.
Japón se negaba a bajar los brazos y Hotaka Yamakawa pegó elevado de sacrificio para impulsar a Takumu Nakano, que estaba en tercera, para anotar la cuarta del conjunto asiático en el 8vo y llegar con todo al cierre. En la novena entrada Munetaka Murakami se alzó como la figura de la escuadra japonesa y mandó dos carreras a la registradora con la velocidad de Ohtani y su corredor emergente, que lamentablemente terminaron con el sueño mexicano de la manera más cruel.