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VIDA BAJO EL AGUA: ALUMNOS DE CUATRO AÑOS ¿…y qué hay debajo del agua de la orilla del mar? – en la playa arena… ¿y debajo del mar del Túnel cuando baja la marea? – Piedras… ¿y en las rocas que hay más adelante? - Rocas y piedras…. ¿Nada Más?- pues… ¿Quién se lleva el agua del mar cuando baja la marea?- El viento, las olas… ¿Y quién la vuelve a traer? –También el viento y las olas.
Surgió la necesidad de ir a ver qué hay debajo del agua del mar cuando baja la marea. Comprobar si allí además de rocas y piedras vivía algún ser vivo.
En Laredo tenemos una gran suerte, podemos acceder al acantilado a través de un Túnel, que aunque es muy largo y da un poco de miedo, nos lleva hasta allí. Siempre nos da la agradable sorpresa de encontrarnos con el mar y sus olas cuando la marea está alta o con una rasa intermareal llena de tesoros cuando la marea está baja. ¡Fascinante!, no importa las veces que lo hayamos visto. La magia se volvió a producir en nosotros
cuando,
en
una
bonita
mañana de mayo, llegamos y nos encontramos con la mar muy lejos, con la marea en su punto más bajo.
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Llevábamos tiempo en clase estudiando los tiburones y los Arrecifes de Coral donde viven tantos peces de colores y adonde
le
gusta
muchísimo
a
determinados tiburones ir a cazar. Sabíamos que Nemo vive entre los brazos,
que
parecen
pelos
que
se
mueven en el mar, de una anémona que a él no le pica pero que a otros animalitos sí. Tuvimos que caminar mucho, porque nuestro “cole” está lejos, y hacer una parada en el parque de los columpios para reponer fuerzas a la ida y a la vuelta, comer una galleta, luego almorzar, vamos, que nos llevó toda la mañana. Eso sí, no sé si nos cansamos, pero ni lo notamos de lo interesante que estuvo todo, de lo que aprendimos y de lo que disfrutamos, tanto que no nos queríamos ir, nos hubiésemos quedado mucho más rato al solecito jugando con las piedras de la orilla y buscando tesoros.
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Nos acompañaron, por supuesto, mamás y papás, con disponibilidad de tiempo, para ayudarnos a movernos entre las rocas resbaladizas y los guijarros de la orilla o para poder llegar hasta allí .Nos dio mucha pena de los papás y mamás que no pudieron venir porque estaban atareados o trabajando. Lo primero que nos sorprendió fueron las charcas de agua transparente llena de plantas de colores: verdes claras o
más
oscuras, rositas, marrones… más adelante unas con hilos más largos…Todas eran algas: la lechuga de mar, la coralina… y entre ellas muchos caracolillos. No vimos ningún pececito, solo algún cangrejito muy pequeño. Creemos que nos oían y rápidamente se refugiaron entre las plantas.
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Lo que nos llamó mucho la atención fueron unas cosas rojas
gelatinosas en los
agujeros de las rocas Al principio nos costaba verlos pero luego había por todos los lados, eran los Tomates de Mar que creemos que son actinias que como se han quedado sin agua guardan sus tentáculos para que no se les estropeen hasta que vuelva a subir la marea . Las que estaban en el agua movían suavemente sus tentáculos, ¡preciosas! de color claro o verdes. Aunque daban muchas ganas de tocarlas, no lo hicimos para no hacerlas daño y para que ellas no nos hiciesen daño a nosotros.
Las algas, las lapas y los caracolillos estaban por todos los lados, bien dentro o fuera del agua. Dijimos muchas veces, ¡oh! ¡Ven, mira lo que he encontrado! …y ¡mira otra, y otra,
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cuantas! Miramos todo, buscamos por todos los lados, hicimos fotos pero no cogimos nada, dejamos todo como estaba para no estropear, sin hacer daño ni a los animales ni a las plantas e incluso las piedrecitas de colores las dejamos allí para que siguieran haciendo bonito. Casi no tiramos piedras, como otras veces cuando nuestros padres nos llevan al Túnel. Cuando veíamos basura nos parecía muy mal, como la que había en la desembocadura del rio Mantilla. Allí nadaba un pequeño banco de pececitos bebes y nos asomamos a verlos.
¡LA BASURA Y LOS EMBASES HAY QUE TIRARLOS SIEMPRE AL CONTENEDOR PARA QUE EL VIENTO Y EL AGUA NO LOS LLEVE AL MAR!