5 minute read

La violencia en mayúscula

A través de la trayectoria de la humanidad siempre se ha distinguido por los diferentes conflictos y enfrentamientos por el control del poder de un territorio, y teniendo como método principal la política, la violencia y la guerra, de la cual Colombia también ha sido participe de esto. Para conocer el porqué de la realidad que se presenta, se debe analizar e investigar el pasado que lo acompaña. Colombia es una síntesis de diferentes acontecimientos y periodos de tiempo específicos que marcaron un antes y un después en la sociedad de esta misma. Como material de investigación y de conocimiento se puede partir para explicar la trayectoria de la violencia y todo aquello que conlleva el mandato de Rojas

Pinilla, en donde la inconformidad y el anhelo de ser escuchados predomino en los habitantes del país, y no solo por un insignificante número de personas, si no que estaba conformado desde empresarios pequeños, profesores, comerciantes, transportadores, el sector popular e incluso la misma policía, quienes se encontraban cansados de ser las víctimas de las consecuencias que dejaba la guerra de las dos grandes masas que movían al país.

Advertisement

El partido liberal surge en el año 1848, proyectando en su misión una serie de ideales revolucionarios para la sociedad de esta época y posteriormente en el año 1849, se crea el partido conservador el cual quería prevalecer con las mismas políticas que tenían y los valores de la fe católica junto con la iglesia, delimitando así en la historia de Colombia las diferencias entre los partidos y comenzando un largo proceso sociopolítico que tendría como resultado el bipartidismo. El bipartidismo tuvo un pacto llamado el Frente nacional que tuvo origen el 8 de agosto de 1958 organizado y dirigido por los dirigentes de los mismos partidos tradicionales (liberal y conservador), como solución a la violencia que se había vivido durante los años de mandato de Rojas Pinilla.

Sin embargo, aquel intento de frenar la violencia que se venía presentando años atrás fue en vano, puesto que Pinilla fue como un florero de Llorente y un boom en la sociedad colombiana de dicha época, debido a que silenció y les quito la importancia a las minorías y a los grupos sociales más afectados a tal punto de que para ellos la única salida viable de todo ello era la creación de un nuevo grupo revolucionario en donde se le diera participación y voz a todas aquellas peticiones e ideales que habían sido dejados a un lado.

Además, que poco a poco el trato realizado entre los dos partidos se fue fragmentando quedando así en el olvido y regresando con más intensidad los enfrentamientos políticos y sociales. La comunidad colombiana buscaba otra alternativa de gobierno en donde pudieran encontrar el apoyo que necesitaban y derrocar ese sistema político que solo beneficiaba a la elite colombiana; por esta razón las guerrillas liberales y comunistas lograron mayor reconocimiento a causa de que en esta fecha, el objetivo era ser un movimiento que garantizaba nuevas ideas, doctrinas y acciones que beneficiaban a todas las personas que tenían una desigualdad social, económica y política.

La unión patriótica fue y es el movimiento pluralista y democrático de la contemporaneidad colombiana. En su legado y proyección se expresan valores y símbolos importantes de la dignificación de la política. La razón de su existencia es desarrollar conjuntamente con la participación del pueblo la vida democrática integral, a nivel local, regional y nacional. Representamos el proyecto inconcluso de la paz con justicia social, cuya justeza y legitimidad se soporta en las necesidades y aspiraciones del pueblo. (Unión patriótica, 2013)

El abuelo de Ana María, quien es la protagonista del libro “El gato y la madeja perdida” de Francisco Montaña, era un personaje influyente en el nuevo mundo y cambio de la política colombiana en la época de los 80 dado que era senador del partido de la unión patriótica. Era un señor muy querido, con un gran carisma que generaba seguridad y veracidad en las personas cuando hablaba, y quien estaba fielmente comprometido en la transformación de la sociedad colombiana para que todos fueran portadores de satisfacción y empeño para construir una nación con unos hijos que velaran por ella.

Lamentablemente en estos años la imposición de un sistema político y social estaba muy presente por los partidos políticos tradicionales, los cuales buscaban los medios para poder derrocar a cualquiera que estuviera en su contra y entonces así, se obtiene como resultado los genocidios de los 80´s en Colombia, en donde miles de colombianos voceros fueron víctimas incluyendo al abuelo de Ana María, el cual fue asesinado por un roquetazo con un fusil, dando de baja a otro militante de la UP. Este hecho, en el desarrollo del libro desencadena miles de más en donde destaca el duelo, el retorno a la vida cotidiana y la búsqueda de la justicia, que permite ver un reflejo de la sociedad colombiana, retratar de manera concisa el contexto en el que se vive y recolectar fragmentos para construir una memoria de la época.

Estos acontecimientos no solo se desarrollan años atrás, sino que actualmente aún se evidencia esta violencia y pese a que de alguna manera ha disminuido su frecuencia y los hechos del pasado nos permite conocer y aprender para no cometerlos una vez más, son como una bola de nieve, que poco a poco va tomando fuerza y afectando a más personas que son víctimas de una guerra que no cesa y las personas que los rodean se ven gravemente afectadas por la pérdida de un familiar o ya sea por la ausencia de algo en su vida; pues el duelo de perder a un ser querido y cercano, es un proceso difícil y que toma tiempo, porque se puede retornar a la cotidianidad de la vida pero nunca se podrá olvidar y esto también va de la mano con el proceso del perdón, se puede perdonar y continuar pero siempre quedara marcado en el corazón y en la mente todos aquellos sucesos.

En la realidad colombiana son numerosos los casos en donde las víctimas no reciben la justicia necesaria y el debido respeto que merecen, viviendo así con el rencor y el dolor. En otros casos los afectados tienen un acompañamiento con las entidades públicas a nivelgubernamental, que viven procedimientos judiciales ya sea en conjunto con la JEP, la comisión de la verdad, unidad especial de restitución de tierras despojadas, entre otras que están encargadas de que los actos relacionados con el conflicto colombiano armado no queden impunes y les permita reconstruir memorias que son dolorosas y sacarlas a la luz pública para que en un futuro no ocurra, ayuda que las personas que sufren de dicho percance, se liberen totalmente de la carga emocional, restaura la identidad grupal de los grupos afectados o vulnerables, dan forma a la memoria hegemónica y tiene la función reparadora para conocer los procesos históricos realmente y obliga a que el estado se involucre y a cumplir acciones reparadores para la sociedad; que es algo contrario a como se desarrolla el asesinato del abuelo de Ana en el libro, pues su propia familia es la que tiene que buscar la manera y la evidencia para que se logre justicia para el caso de su familiar y no quede solo en el olvido.

La justicia y el perdón son una de las mejores soluciones que tienen los colombianos para dejar el pasado atrás, construir un futuro y un presente en donde se pueda estar en paz y la madeja no se enrolle y desenrolle, para no olvidar su hilo y evitar crear nudos que no permitan avanzar y quedarse estancado en el mismo lugar, para que la evolución de la sociedad colombiana no se pierda, como el gato y la madeja perdida.