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Poemas

Lezly G. Chibamba Hernández*

A TIENTAS

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Me encantas cuando me tomas de la mano me llevas a tu cuarto y apagas la luz

Me encantas cuando me besas cuando me tocas y tú sigues apagando la luz

Me encantas cuando me desnudas te desnudas y sigue apagada la luz

Me encanta tenerte entre mis brazos, quejarme en tus oídos, que me arañes la espalda

No me importa estar en la oscuridad a tu lado, pues siento tus manos en mi corazón, atesoro tu cuerpo erizado tus pechos desnudos rozando mis muslos Estamos haciendo el amor

Solo basta con cerrar los ojos, apretar tus manos, estirar mis músculos y así… así se hizo la luz.

* Egresada de la licenciatura en historia, Facultad de Humanidades

Unicach.

COMO UN SILENCIO

Coloco mis manos sobre tus pechos Mi lengua sobre tu cuello Deslizo mi excitación por cada una de las partes de tu sexo Toco las nubes como toco tu monte Las ilusiones crecen y las fantasías se realizan Escucho una sensual canción en mi cabeza La bailamos al compás de tu cuerpo y tu traje de Eva Creamos un mundo sin censura, donde los pecados se perdonan Nos olvidamos de que existe un Dios y te conviertes en mi diosa Embriágame de tu exquisito licor salido de tu vientre burbujeante como la champán dulce como la miel y amargo como el dolor Gritemos juntas las pasiones desgarradas Culminemos con un silencio donde la fatiga débele la entrega de nuestros excitados cuerpos.

NERVADURA

Coloco mis manos nerviosas sobre tus pechos ansiosos se sincronizan, llevan juntos un ritmo melódico de do-re-mi a fa-so-la terminando en si-do tu pezón erecto provoca cierto cosquilleo en la palma de mis manos

Deja solo tocarlos una vez más ahora deja hacerte lo que deseo aguarda silencio que mis paredes son huecas hasta escuchar el último suspiro Permíteme entrometer mis manos delgadas entre tus piernas comenzando con el roce de tu entrepierna subir y bajar desde el hueso de tu rodilla

La temperatura es húmeda y fresca con sabor a mar y olor a ti con esa tu sensibilidad cualquiera se enamora soy la cualquiera que se prendó de ti al hacerte el sexo

Así me gustas, con el despotismo cínico de tu cuerpo excitado yo, arriba de ti penetrando cada una de tus entrañas rompiendo ráfagas de vientos del sur y encontrar el verano ardiente de color azulado

Así me gustas, con tus quejidos de gozo en mis oídos tus manos golpeando mi espalda, mis nalgas, mis piernas, acercándome más y más a ti, rápido, fuerte, quiero partirte en dos

Me he ahogado en un mar profundo con los ojos cerrados distiendo mis piernas mientras aflojas los brazos y extiendes tus manos

Me bañé en ti Me embriagué de ti Me morí en ti Renací en ti

Es el sexo que tanto nos gusta deliro, apronto tenerte de nuevo entre mis brazos tus pechos, tu vientre desnudo tu alma abierta y las ansias al roce de las yemas listas de mis dedos.

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