3 minute read

La bachata y la música urbana

Expresiones Distintas Con Muchas Coincidencias

La bachata y la música urbana se vinculan a través de ser géneros musicales que responden a gustos y estéticas de su tiempo, con influencias sonoras y literaris exógenas

Advertisement

MARIVELL CONTRERAS

@MarivellC

ESPECIAL PARA PAÍS POLÍTICO

(1 de 2)

El sentimiento es el único espacio del cual no han sido desalojadas las masas… Única patria libre de las invenciones”.

Luis Britto García.

Con motivo de la dedicatoria en el 2019 de la Feria del Libro de Madrid a la República Dominicana, los escritores y periodistas culturales Máximo Jiménez y Marivell Contreras fueron convocados a presentar sus libros «La gran Aventura de la bachata urbana» y «El primer bachatero del mundo» y a compartir un coloquio titulado “La bachata y la Música urbana”. En el texto a continuación se hace un resumen de las posturas enunciadas por ambos a partir de sus investigaciones sobre la música caribeña, bajo la autoría de Contreras.

La Bachata y la música urbana dominicana tienen iguales orígenes y un mismo destino: Provienen del pueblo llano -clases desposeídas- ambas sufren la discriminación de los sectores formales y una y otra se han impuesto por el apoyo irrestricto del público.

Ciertamente, son resultado de momentos sociales y políticos distintos, pero a la vez tienen notorias coincidencias, ya que surgen en medio de un nuevo esquema social y cultural en relación con el período inmediatamente anterior a su proliferación. En el caso de la música de amargue, empieza a germinar tras 31 años de tener la emocionalidad secuestrada por la dictadura, el pueblo habría de cantar sus penas en libertad, con los recursos que el entorno le había brindado.En el caso de la música urbana, coincide con el afianzamiento de la electrónica y la era digital, con el soporte de producción y difusión ideal: las redes sociales.

La bachata y la música urbana se vinculan a través de ser géneros musicales que responden a gustos y estéticas de su tiempo. Ambos con influencias sonoras y literarias exógenas logran estructurar una propuesta de factura y contenido locales.

Y, hay que denotar que estas músicas surgen a través de la inventiva individual o en conjunto de personas que no tuvieron una acabada formación académica en otras áreas y menos como músicos profesionales, lo que ha servido para alentar el pertinaz e incisivo ataque.

Para hablar de Bachata no se deben obviar los antecedentes que le dieron vida: era el reino del cine - ranchero- musicaldel bolero y del esplendor en la radio de estas músicas y otras folclóricas y populares de cada localidad. En el caso dominicano, aparte de la parrilla local,

De los artistas procedentes de México, Argentina, Ecuador y Cuba, de Puerto Rico y RD, tierras de grandes compositores y grandes cantantes, se alimentaban y engrosaban sus canciones entraban emisoras colombianas, venezolanas y principalmente cubanas.

Del bolero, el tango y la ranchera, - géneros herederos del romanticismo, que llegó decadente y tardío a Latinoamérica-, la bachata tomaría -por igual-, la tendencia “al ruego y a la mirada de los que se aman. Chantaje musical a veces, pero igualmente biografía del alma compungida en donde se invoca la felicidad sólo como parte de la posibilidad de ser amado”.

Era la época mágica de los tríos de guitarras, en la que Los Panchos, Los 3 Ases y Los Condes,etc., eran los reyes del romance latinoamericano. Y, precisamente eran las canciones pegadas de la época las que reunían -en torno a la música-, a la familia, vecinos, amigos y a veces hasta desconocidos en una bachata o “celebraciones que se hacían con la guitarra”.

De los artistas del momento, procedentes de México, Argentina, Ecuador y Cuba, artistas de Puerto Rico y República Dominicana, tierras de grandes compositores y grandes cantantes, se alimentaban y a la vez engrosaban el cancionero popular del Caribe. El bolero y el tango de juerga y serenata, despertaron las ansias de la ju- ventud de toda Hispanoamérica por entrar a ese mundo encantado de la fama y la música. Entonces, todos querían ser Jorge Negrete, Pedro Infante o Carlos Gardel. Así, fueron naciendo muchos tríos y la música de guitarra se transformó, con distintos impulsos e influencias: para cantarle al amor y el desamor.

Fruto de esas circunstancias, nació la música de amargue, hoy conocida mundialmente como bachata, bautizada por el gran compositor dominicano Víctor Víctor como “la canción romántica dominicana por excelencia”.

Una música, un baile y una canción que tienen su historia. No cabe ninguna duda de que no hay mejor aliciente para crear, que la necesidad. Y la sociedad dominicana despertó a la libertad y a la esperanza, con la decapitación del régimen de Trujillo. Por eso, un 30 de mayo de 1962, apenas un año después del ajusticiamiento, nació el embrión que dio vida a la Bachata: José Manuel Calderón y dos guitarristas entre los populosos y emblemáticos barrios de Santo Domingo: Villa Juana y Villa Francisca (lo que hoy sería Villa.com) grabarían “Qué será de mí / Condena”, reconocida como el embrión que dio inicio a lo que ahora conocemos como bachata.

Más de 50 años de historia de la evolución de una música no se puede resumir en un coloquio, de tiempo limitado, pero podemos decir que la bachata ha tenido lo que el locutor dominicano Alci de la Rosa denominó puntos luminosos, que a nuestra cuenta señalaremos, desde el inicio,

This article is from: