CONDENA MADRE

Page 13

13

-Sucedió hace siete días, aquí en Quito. Yo no vivo en la ciudad, es extraño que me atacaran aquí y no en donde vivo. Soy

propietario

de

una

hostería

en

la

provincia

de

Cotopaxi, en la llanura que está bajo el volcán -Solano calló mientras se humedecía los labios con la lengua; se aproximaba al recuerdo como quien se acerca a un perro furioso. -Bajo

el

volcán

-repitió

Stalin

para

incitarlo

a

que

continuara hablando, mientras bebía otro trago de pisco de su pequeña botella de metal. -Sí, bajo el Cotopaxi. El atentado fue hace una semana, el lunes 15; yo había venido a Quito para comprar algunas cosas: licores y productos de aseo... -¿Fue accidental su viaje? -quiso saber Falcón. -No le entiendo. -¿Viene siempre los lunes para esas compras? -No

siempre,

a

veces

viene

mi

administrador,

a

veces

venimos juntos. -Ese día, ¿por qué vino usted? -La hostería está vacía los lunes. Esperaba a un grupo de turistas

alemanes

para

el

día

siguiente,

el

martes,

y

quería recibirlos yo mismo. Después del asalto le pedí a un colega que se hiciera cargo del paquete de alemanes y me vine a esconder aquí, en la casa de mi padre, él no la utiliza la mayor parte del año. Dos policías vinieron a interrogarme al día siguiente; después de eso despedí a la


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.