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Arte de tapa de su primer disco: “Es Natural”
¿Cómo ven al público de Comodoro? ¿Se sienten diferentes cuando tocan en la ciudad dada su trayectoria? Daniel: Nos respetan bastante; el público y nuestros colegas los músicos. Hemos sentido un cambio en este 2009 donde la gente se empezó a acercar un poco más a la banda en los recitales. ¿Qué filosofía tienen como banda y como estilo musical? Ariel: Ante todo trabajamos desde la humildad y lo amateur. Daniel: Al transcurrir una década de estar tocando lleva a tener muchas presentaciones, lo que te da experiencia. El estilo de la banda no es parecido a los más comunes hoy en día. Nos mantuvimos en la parte del rock todo el tiempo y a lo largo de estos 10 años vimos muchas bandas pasar por los escenarios locales. Las bandas nuevas se inclinan más al punk y al punk rock y muchos lo hacen muy bien. Nosotros nos mantuvimos en el rock o bien el llamado “hard rock” todo el tiempo. No nos cambiamos a las modas. Nos gusta un estilo de música y los temas nuevos salen en esta misma sintonía. Compartimos un estilo entre todos y lo mantenemos.
¿Mantienen una línea de código entre ustedes a lo largo de este tiempo? Daniel: Hemos pasado de todo. Hemos tenido alejamientos y retornos. Muchos cambios en general. Claudio: La banda es como tener una novia, hay que estar bien y hay que cumplir (ríe). Daniel: Estas idas y vueltas nos han llevado a no tocar por un tiempo, pero nada que no tenga solución, siempre le encontramos la vuelta y seguimos tocando, que es lo que nos gusta hacer. Ariel: Hay un valor fundamental que es la amistad. Más allá de ser una banda somos un grupo de amigos. Podemos tener idas y vueltas pero hay una relación de amistad. La banda se acomoda a la necesidad de los integrantes. Lo que hacemos lo hacemos porque realmente lo queremos. Somos amigos y entendemos eso, lo bancamos y lo apoyamos. Pero pese a esta amistad y confianza entre nosotros somos muy responsables ante todo. Cada uno tiene su trabajo y en base a esto se organizan los ensayos. Con mucho sacrificio, amor y huevos. ¿Tienen afecto por algunos temas en particular que hayan compuesto? Claudio: Malo para mi, Diario, No somos ángeles y Todo termina. Esos fueron los principales con los que la gente nos conoció y nos empezó a seguir. Después se fueron sumando varios a la lista. Daniel: Empezamos con 4 temas propios en nuestra primera aparición en el escenario en el ’99 y hoy tenemos casi 30. Claudio: Después nos pasó que muchos fue-
ron cambiando y evolucionando. Hay veces que nos juntamos a zapear y vemos algunos ajustes o cambios que se le puede hacer a algún tema. Esta es la forma también que nos vamos re-versionando constantemente. ¿Se van reinventando a lo largo del tiempo? ¿Van cambiando para el público? Ariel: No cambiamos el estilo, trabajamos sobre lo mismo solo que mejores o más afilados. No nos vendemos a la moda. Hacemos lo que nos gusta. Como banda ¿Algún consejo para los jóvenes artistas que recién comienzan en el mundo de la música? Que no se descuiden entre ellos. Hay que tener mucha tolerancia y respeto. Ensayar lo suficiente, no salir a un escenario improvisando. Ariel: El lazo entre músicos se nota arriba del escenario. Nosotros disfrutamos desde el ensayo. Estos son como recitales. Claudio: Los nuestros son realmente placenteros, digamos es como cuando te juntás a comer un asado…pero sin carne (ríe). Daniel: El ensayo te da cancha para salir tranquilo al escenario. Conocés mejor a los otros integrantes de la banda y la amistad se va haciendo más firme y estás más seguro con tu instrumento para después estar distendido allá arriba y no estar tan pendientes de las notas. Ariel: La pasamos bien arriba del escenario. Nos vamos tranquilos del último ensayo. Lo importante es disfrutarlo.