
1 minute read
La espera
Esperar un regalo por mucho tiempo, nos dice Elizabeth Dunn, profesora de psicología en la Universidad de Columbia Británica, afecta la cordura del hipotético destinatario, como le sucedió a una mujer de sesenta y cinco años, que estuvo por más de tres años frente a una ventana.
—Mi marido me pregunta qué espero… Intento explicarle que un amigo argentino encontró un libro autografiado por Borges… que nos volveremos ricos...
Advertisement
Se asoma por tercera vez. En la mesa que ha instalado cerca de la ventana, permanece la comida de hace una semana: fideos rosados semejantes a tendones y trozos de papa con uñas.
Me despido.
Pienso cuán equivocada está la doctora Dunn al recomendar a sus pacientes pensar más allá del momento fugaz de recibir el regalo, y tenerlo entre las manos, cuando existen casos como el de esta mujer para quien la espera tiene un propósito lógico, que podría cambiarle la vida.