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GBC CHILE: Desmantelamiento de asentamientos mineros y el factor humano
Chile Green Building Council (GBC) es una organización sin fi nes de lucro que junto a socios y partners estratégicos del sector público y privado, trabaja con el objetivo de que el sector construcción crezca en el marco de desarrollo sostenible.
“El tema del decommissioning o desmantelamiento de Asentamientos Mineros, no es algo nuevo en el quehacer de la Corporación y tampoco es algo reciente, la discusión del impacto que el ciclo de vida de este tipo de infraestructura tiene en el entorno sino en términos de habitabilidad”, con estas palabras explica María Fernanda Aguirre, Directora Ejecutiva de GBC. La profesional agrega que el año 2013, Aramark y Aprimin, llevaron a cabo una encuesta de “Bienestar en campamentos Mineros”, que arrojó datos interesantes como que el 87% de los trabajadores, cree que la calidad de los servicios recibidos durante su estada incide en la decisión de quedarse en la empresa, un 80% de los consultados aseguró que los servicios en el campamento impactan directamente en su permanencia en la faena y el 85% de los trabajadores piensa que la calidad de los servicios tiene consecuencia directa en la productividad de la industria (rendimiento). Para Aguirre, un factor importante para los trabajadores de las faenas es que los asentamientos cuenten con instalaciones que permitan el descanso y esparcimiento, que las empresas provean los medios de transporte necesarios, que estos sean cómodos y que además, los sectores donde se realizan las actividades de reposo y pernocte, garanticen la privacidad y el confort.
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Agrega que existen asentamientos de distintos tamaños, algunos pueden albergar hasta 10.000 trabajadores y su existencia va a depender principalmente del mercado; como sabemos, Chile es el primer productor de cobre, litio, yodo y nitratos naturales, el tercer productor de molibdeno y el quinto de plata (SONAMI 2012), y en virtud de cuan variable sea la demanda por estos recursos será la permanencia en el tiempo de un campamento.
Para la directora ejecutiva de GBC hay una genuina preocupación por levantar información que tiene que ver con el bienestar de los trabajadores, pero no hay iniciativas concretas que tengan relación con un enfoque más holístico que lleve a pensar en los impactos del desmantelamiento, entendiendo que muchos asentamientos una vez que cumplen su ciclo, no solo dejan una huella importante en el sector donde estaban emplazados, sino que además, no vuelven a rearmarse inmediatamente en otro lado. Además, no existen datos de trazabilidad de cuántos recursos son reutilizados, reciclados o almacenados de forma de evitar su deterioro y descarte.
El año 2015, Chile GBC comenzó a desarrollar un instrumento que tenía como objetivo entregar a quienes gerencian y administran asentamientos mineros, lineamientos que les ayudaran, por un lado, a mejorar las condiciones de confort de los trabajadores, y por otro mejorar la gestión de las instalaciones, además, tener en cuenta conceptos como la efi ciencia en el uso de recursos, la innovación tecnológica, la gestión de productos y residuos y las auditorías. El objetivo era que cada vez
que se planifi caba un asentamiento, se tuviera en consideración el proceso de decomissioning como parte de la estrategia.
María Fernanda Aguirre precisa que le hubiese encantado haber llegado a buen puerto con este desarrollo, pero lamentablemente el interés en cambiar la forma de hacer las cosas muchas veces representa una brecha para este tipo de iniciativas. Pero al mismo tiempo indica que les entusiasman los compromisos actuales de descarbonizacón y urgencia por la acción climática ya que esperan que despierte un interés genuino de parte de la minería por proyectos de estas características para volver a ponerlo en carpeta de ser necesario.
Normativa chilena y plan de tratamiento de residuos
Existe la Ley 20.551 que Regula el Cierre de Faenas e Instalaciones Mineras. Esta fue publicada el 11 de noviembre del año 2011 y entró en vigencia al año siguiente cuando también fue publicado el reglamento, el cual requiere que se desarrollen planes de acuerdo con determinados requerimientos tanto para cierres defi nitivos como temporales. Este marco regulatorio, incluye temas como tratamiento y disposición fi nal de residuos no mineros.
Para la directora ejecutiva de CBGC, el desarrollo de un plan requiere la coordinación de una serie de actividades que no necesariamente implican que el proceso no tenga un impacto ambiental o que se incluyan lineamientos para mitigar los efectos negativos para el ambiente y la comunidad. Y debido a lo anterior es que para GBC Chile este tipo de leyes se deben complementar con iniciativas de carácter voluntario como guías o mejor aún, sellos con indicadores concretos, que contribuyan a “educar” a ciertos mercados en la importancia de incorporar variables de sostenibilidad a sus procesos y que a la vez mejoren la gestión interna y externa de las empresas y robustezcan su reputación corporativa.
El ejemplo australiano
María Fernanda hace un paralelo entre la situación de Chile y de Australia, siendo este último un país minero del primer mundo y donde la actividad minera es una de las principales actividades económicas en Australia, junto a la agricultura y la ganadería; siendo este país el primer exportador mundial de hierro. Las normativas relacionadas con construcción allá son más exigentes de las que tenemos en Chile y desde ese punto de vista hay bastantes más avances en términos de requerimientos de desempeño sostenible de este tipo de instalaciones.
María Fernanda Aguirre, Directora Ejecutiva Chile Green Building Council
En los últimos años, Australia ha realizado una serie de modifi caciones para que la minería sea mucho más efi ciente desde el punto de vista del uso de recursos como agua y energía, convirtiendo a esta industria en centro de innovación y generación de capital humano.
La profesional agrega que en el año 2011, se publicó una guía llamada “The Leading Practice Sustainable Development Program for the Mining Industry” que tenía como objetivo, promover las mejores prácticas en términos de sustentabilidad de la minería australiana. Esta publicación fue liderada por los Ministe-

rios de Recursos Naturales y Relaciones Exteriores e incluyen un capítulo completo destinado al cierre y desmantelamientos de asentamientos mineros
Este documento complementa uno que habían publicado el 2006 que tiene como título “Mine Closure and Completition” y que es una guía de buenas prácticas específi ca para el decomissioning de faenas mineras.
Diferencias entre proyectos mineros y construcciones urbanas
Existen diferencias entre todos los tipos de proyectos, por ejemplo, un proyecto residencial no es igual que uno comercial en términos de su diseño, construcción, operación y mantenimiento. Por eso para el desarrollo y gestión sustentable en construcción es tan importante, por un lado, entender el destino, tipo de ocupantes y patrones de uso. En el caso de los proyectos mineros, estos no son solo fundamentales para la actividad económica del país, sino que en su etapa de funcionamiento, tienen externalidades que pueden ser negativas para el medioambiente y la sociedad, es por eso que es tan relevante equilibrar lo importante que es para el crecimiento de nuestro país esta industria y por otro lado, avanzar en que las instalaciones que conforman los asentamientos, cumplan no solo con las normas que también son requeridas para otro tipo de construcciones, sino que existan indicadores específi cos de desempeño sostenible que evalúen la huella ambiental y social de este tipo de infraestructura.
En Chile el proceso de evaluación ambiental debe incluir el proceso de cierre
Y para María Fernanda Aguirre, directora ejecutiva de CGBC, la evaluación de cualquier tipo de proyecto requiere que todas las implicancias se aborden en etapas iniciales del mismo y este caso no es diferente. Si bien en el quehacer minero existen requerimientos para planes de cierre de faena, lo principal es que, en primera instancia estos planes contemplen la minimización de impactos del proceso tanto ambientales como sociales y que, por otro lado, se reevalúe la arquitectura de los mismos asentamientos desde la perspectiva de conservación de recursos, salud y bienestar e impactos ambientales y sociales siempre con enfoque de ciclo de vida y desde luego alineando a proveedores y subcontratos para idealmente lograr que en algún punto la cadena de valor completa gestione sus procesos con este mismo enfoque. N&C
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