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Bautizados & enviados

Educaciónen la misión

María del Consuelo Ruiz Torres, mla

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Todos sabemos la importancia de la educación y lo necesaria que es en cualquier etapa de la vida; sin duda, también desempeña un papel muy importante en la misión.

Nuevamente me encuentro en la Misión de Mozambique, en el Centro de Formación Chikweia, después de 10 años, en la Escuela Secundaria Comunitaria San Juan Pablo II y el Internado Femenil.

Quiero compartir con nuestros queridos bienhechores, familiares y amigos una de las más bonitas alegrías que un misionero puede recibir: ver frutos, que aquella semilla sembrada cayó en suelo fértil, a través de una pequeña charla sobre este tema con una exalumna, de la primera generación que inició este proyecto (Escuela Secundaria-Internado Femenil-Formación para Agentes de Evangelización): “¡Hola!, soy Iulavid David Amone, tengo 27 años de edad, originaria de la comunidad de Chadzuca, Machipanda. Ahora vivo en la comunidad de Chikweia porque estoy casada y tengo dos hijos. Recuerdo con mucho cariño cómo las ‘manas’ (mla) un día llegaron a la Iglesia de Chadzuca para informar que ya había un internado en Chikweia e invitar a las niñas que terminaron primaria a seguir estudiando la secundaria, viviendo en el

internado. Mi papá inmediatamente me dijo que quería que fuera para allá y continuara los estudios; muy emocionada, dije que sí porque en la zona de Chadzuca no había dónde estudiar la secundaria, era el único medio. Llegué en 2009 y mi comportamiento siempre fue bueno, pues portarse bien es muy importante para permanecer en el internado y en la escuela. A pesar de que me tocó caminar una hora de ida y otra de vuelta para ir a la escuela de Machipanda, mi experiencia fue muy buena, aproveché todo ese tiempo, porque si la ‘mana’ recuerda, aquí en el centro aún no se terminaba de construir la escuela. Gracias a Dios y a toda la formación y atención que recibíamos, tanto en la escuela como en el internado, me esforcé por ser de las mejores alumnas porque creo que el estudio ayuda a tener una vida mejor; si estudiamos, es más fácil tener empleo”.

Padrinos y Madrinas, los invitamos a leer el testimonio completo, escaneando el siguiente código:

Santa Teresa de los Andes

• Nació en Santiago de Chile el 13 de julio de 1900. • A los seis años empezó a volcar su afectividad y dedicación a Dios. • A sus 14 años de edad, inspirada por Dios, decidió consagrarse como carmelita descalza.

• El 7 de mayo de 1919 ingresó en el pequeño monasterio del Espíritu Santo en el pueblo de Los Andes, a 90 km de Santiago.

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