Periódico
Órgano Informativo de la Asociación de Salas de Artes Escénicas de Medellín. Edición No. 54 - Marzo 2018 - 10.000 ejemplares - Distribución Gratuita
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EDITORIAL Mensaje del Día Mundial del Teatro 2018 Las Américas Sabina Berman, México Escritora, periodista Podemos imaginar La tribu caza pájaros lanzando pequeñas piedras, cuando el enorme mamut irrumpe y RUGE - y al mismo tiempo - un pequeño humano RUGE como el mamut. Luego, todos corren... Ese rugido de mamut proferido por una mujer humana –quiero imaginarla mujer- es el inicio de lo que nos hace la especie que somos. La especie capaz de imitar lo que no somos. La especie capaz de representar al Otro. Saltemos diez años, o cien, o mil. La tribu ha aprendido a imitar a otros seres y representa al fondo de la cueva, en la luz temblorosa de la hoguera, la cacería de esa mañana. Cuatro hombres son el mamut, tres mujeres son el río, hombres y mujeres son pájaros, árboles, nubes. Así, la tribu captura el pasado con su don para el teatro. Más asombroso: así la tribu inventa posibles futuros: ensaya posibles formas de vencer al enemigo de la tribu, el mamut. Los rugidos, los silbidos, los murmullos -las onomatopeyas de ese primer teatro- se volverán lenguaje verbal. El lenguaje hablado se volverá lenguaje escrito. Por otro derrotero, el teatro se volverá ritual y luego cine. Y en la semilla de cada una de estas formas seguirá estando el teatro. La forma más sencilla de representar. La forma viva de representar. El teatro, que mientras más sencillo más íntimamente nos conecta a la capacidad humana más asombrosa, la de representar al Otro. Hoy celebramos en todos los teatros del mundo esa gloriosa capacidad humana de hacer teatro. De representar, y así capturar nuestro pasado para
entenderlo, o de inventar posibles futuros para la tribu, para ser más libres y más felices. Hablo por supuesto de las obras de teatro que realmente importan y trascienden el entretenimiento. Esas obras de teatro que importan, hoy se proponen lo mismo que las más antiguas: vencer a los enemigos contemporáneos de la felicidad de la tribu, gracias a la capacidad de representar. ¿Cuáles son los mamuts a vencer hoy en el teatro de la tribu? Yo digo que el mamut mayor es la enajenación de los corazones humanos. Nuestra pérdida de la capacidad de sentir con los Otros: de sentir compasión. Y nuestra incapacidad de sentir con lo Otro no humano: la Naturaleza. Vaya paradoja. Hoy, en la orilla final del Humanismo –de la era del Antropoceno- de la era en que el humano es la fuerza natural que más ha cambiado y cambia el planeta- la misión del teatro es inversa a la que reunió a la tribu originalmente para hacer teatro al fondo de la cueva: hoy debemos rescatar nuestra conexión con lo natural. Más que la literatura, más que el cine, el teatro -que exige la presencia de unos seres humanos ante otros seres humanos- es maravillosamente apto para la tarea de salvarnos de volvernos algoritmos. Puras abstracciones. Quitémosle al teatro todo lo superfluo. Desnudémoslo. Porque mientras más sencillo el teatro, más apto para recordarnos lo único innegable: somos mientras somos en el tiempo, somos mientras somos carne y huesos y un corazón latiendo en nuestros pechos. Somos aquí y ahora solamente. Viva el teatro. El arte más antiguo. El arte más presente. El arte más asombroso. Viva el teatro.
Evento apoyado por el Ministerio de Cultura Programa Nacional de Concertación Cultural
SUMARIO 3 .......................................
ENTREVISTA Victoria Valencia
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....................................... ESCENA LOCAL La Sucursal
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PROGRAMACIÓN SEMANA DEL TEATRO
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ESCENA REGIONAL El Totumo Encantado Necoclí
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.................................. ESCENA NACIONAL Casa Teatro de Cúcuta
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NOTAS EN ESCENA Cartelera de teatro
ASOCIADOS: Casa Clown, Casa Teatro El Poblado, Colectivo Teatral Matacandelas, Corporación Artística La Polilla, Corporación Artística Ziruma, Corporación Carantoña, Corporación Caretas, Corporación Casa del Teatro, Corporación Cultural Canchimalos, Corporación Cultural Nuestra Gente, Corporación Cultural Vivapalabra, Corporación La Fanfarria, Elemental Teatro, El Teatrico de Medellín, Fundación Circo Medellín, Teatro Barra del Silencio, Teatro El Trueque, Teatro Oficina Central de los Sueños, Teatro Popular de Medellín. JUNTA DIRECTIVA: Teatro Oficina Central de los Sueños, Elemental Teatro, In-fusión Teatro, Corporación Artística La Polilla, Corporación Caretas. DIRECCIÓN ADMINISTRATIVA: Ana Cecilia Hernández Gallego. REVISOR FISCAL: Darío Calderón. CORRECCIÓN DE ESTILO: Catalina Trujillo CONSEJO EDITORIAL: Cristóbal Peláez, Iván Zapata, Jaiver Jurado, José Félix Londoño. COORDINACIÓN EDITORIAL Y DIAGRAMACIÓN: María Fernanda Hernández. COMUNICACIONES: Mary Torres ISSN FOTOGRAFÍAS: Juan David Duque. Fotos cortesía. IMPRESIÓN: Alcaldía de Medellín CONTACTO: periodico@medellinenescena.com www.medellínenescena.com
ENTREVISTA
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Victoria VALENCIA «La vida puede ser solo un staccato. Y entonces eso es lo que instalo». Por Jaiver Jurado Giraldo
Había visto hace rato Por qué le ponen a Fulvia, Fulvia, del grupo La Mosca Negra, y no entendí la cosa; hasta me confundí un poco con la dramaturgia, que me parecía más una confesión —pensé—; esos actores no están hablando, es «Ella» la que nos esta contando la obra. Ellos, los actores, a la manera de Samuel Beckett, son signos de esa narrativa. Después vería Pernicia Niquitao, y vuelve y juega, la misma sensación de Fulvia aunque esta vez me detuve más en el espacio escénico y comprendí el asunto plástico. Pensaba que esta dramaturgia había que descifrarla en el espacio. Luego vi De monstruos y martirios, y la música en vivo se sumó a la plástica, al juego de los actores y, bueno, la dramaturgia se reveló, una gran experiencia. No he tenido mucho contacto con esta mujer delgada y esquiva a la que todos llaman Vicky, pero que también encuentro amable y directa. Cuando la entrevisté habló de su timidez y gusto por la soledad, pero a medida que la charla avanzaba y me contaba de sus andanzas, relaciones, locuras, pensé «y eso que es tímida y solitaria». Victoria parece una ermitaña del siglo XXI con un destino marcado: hacer teatro.
Medellín en Escena: La infancia. ¿cómo fue esa infancia tuya? Victoria Valencia: Yo nací acá en Medellín en una familia muy pequeña. Mi mamá es hija única, entonces, obviamente, no tenemos tíos como por ese lado ni tías, éramos nosotros tres. Un hermano mayor, mi hermanita y yo; y por el lado de mi papá si tenemos familia pero no muy allegada. Entonces fuimos una familia muy pequeñita, y mi abuelita, que es el amor de mi vida porque mi mamá era muy joven cuando nos tuvo, era más como una hermana mayor. Mi abuelita siempre estuvo fascinada con nosotros y con su hija única. Viví por Laureles, esta zona fue la de mi infancia y estudié en el Colombo Británico, entonces también estuve ahí con mi hermano y mi hermanita. Era un colegio mixto donde no había mucho interés por las artes. Ese es como el inicio.
que lo primero que vi fue a esa mujer tirada en el piso y tenía sangre al lado y estaba con un short rosado, hasta eso me acuerdo, descalza, era una mujer joven. Y eso para mí fue impresionante, yo empecé a llorar y a llorar, mi mamá y mi abuela — que ya habían salido a ver— trataron de cogerme y me entraron. Yo tenía siete años. ¿Quién la iba a recoger? Esa mujer ahí sola esperando a que la vinieran a recoger. Esa parte para mí es como el principio de todo. Desde entonces me entró una fobia con la muerte. Que yo le pedía a la vida, a lo que hubiera, que no me quería morir que quería ser eterna. Entonces después cuando pensaba en la eternidad me quedaba toda la noche pensando: no se acaba, no se acaba, no se acaba… Entonces más miedo me daba y tenía que prender la luz porque entonces ¿qué escojo? La muerte o la eternidad. ME: ¿Y los primeros impulsos artísticos?
ME: ¿Algún evento de la vida que impactara VV: A mí me iba muy bien en español en el colegio y pésimo en costura, geografía e historia. Entonces esa niñez? VV: Sí, hay algo que siempre recuerdo, lo tengo muy presente, presencié un accidente en frente a la casa de mi abuela; una mujer fue arrollada por un camión. Ahí supe que existía la muerte, que es una de las cosas que yo siempre trabajo: la muerte, los muertos o las personas que están en el piso. Era empleada del servicio, me acuerdo
empecé a escribir, recuerdo el momento exacto, en el salón en que estaba en cuarto de primaria, pensé y sentí que quería escribir. Un pensamiento que se me figuró aquí adentro, quiero escribir, quiero ser escritora. Tenía nueve años, pero a mí también me fascinaba, me gustaba la justicia. Y yo escribía pero no sabía que existía el teatro o la dramaturgia como carreras, no sabía; y en el
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colegio a nosotros nos llevaron a una profesora que se llamaba Olga Beatriz Sierra quien citaba a cada alumno y le decía para lo que servía. Entonces como igual a mí me iba mal en todo, finalmente no hubo un acuerdo, pero cuando me fui a presentar me gustó el Derecho porqué tenía que ver con escribir y los domingos daban una serie que se llamaba The Paper Chase, que era la historia de unos estudiantes de Derecho en Harvard y a mí eso me encantó. Entonces me presenté a la universidad a los dieciséis años, una edad muy temprana, era una peladita. De hecho yo salí de la universidad también muy sardina, entonces pasé y me gustó, pero no mucho. Pero me gustaba leer.
a leer fue Santa Juana de los Mataderos, de Bertold Brecht. Él era muy político, toda la gente del grupo se metió al comité estudiantil, salímos a marchar y todo; él nos cambió la mentalidad.
ME: ¿Y cuando apareció el teatro?
Yo viví La ruptura, de Helge Krog, escuché la obra más de 67 veces, me sentaba en el corredorcito contiguo a la sala, porque ellos estaban en temporada. Me acuerdo que actuaban Patricia Duque y Efraín Londoño. Le dije a Rodrigo que si me dejaba ser asistente. Estuve por mas de dos años, hacía el tinto, ayudaba a Rodrigo en la casa y la taquilla. Así entré al Pequeño Teatro en el 84. Estuve por ahí diez años, entre ires y venires. Hice muchas cosas en Pequeño Teatro; fue un gran aprendizaje.
VV: De hecho ni siquiera me entregaron el cartón, soy egresada pero precisamente por el teatro. Cuando estábamos en la universidad llegó Rodrigo Saldarriaga a dirigir el grupo de teatro de la Universidad de Medellín, que se llamaba Atelier Teatro, eso fue en el 82, porque yo salí en 1984, siempre quise escribir, pero cuando llegó Rodrigo abrieron lo de teatro y me metí como una cosa inconsciente. Fui, me inscribí y desde esa primera vez no he dejado de hacer teatro hasta hoy. El Mono, como le decíamos, llego con ese pelo, con un ojo de un color y otro del otro, se sentó y empezó a hablar del teatro, lo que empezamos
En el grupo Atelier hicimos muchas cosas; recuerdo la primera obra Anacleto Morones, una versión de Rodrigo sobre el cuento de Juan Rulfo. Después montamos El extraño jinete, de Michel de Ghelderode, y luego Los fusiles de la madre Carrar, de Bertold Brecht. Y vea que las tres obras son cargaditas. Cuando terminé el último año de Derecho, nunca más volví a la universidad. Yo salí y le dije a mi mamá: ya estudie los cinco años, ahora me voy para el Pequeño Teatro.
ME: Capítulo Bogotá VV: Este primer viaje fue como de exploración, fueron seis meses intensos. Allí conocí a Miguel Durán; él montó, junto con Alejandra Borrero y
Lucio Martínez, Orinoco, de Emilio Carballido, y me invitó como asistente de dirección. Luego volví a Medellín a cerrar el periplo en Pequeño Teatro, otros dos años, en los que montamos con Carlos Gabriel Arango dirigiendo Medea montaje, hasta finalizar mi estancia en este grupo con Los viaductos del Sena y Oise, de Margarite Duras, dirigida por Eduardo Sánchez; obra que no vio la luz, estaba casi completa, era bellísima y se perdió por problemas del grupo. Ahí salimos varios de nosotros por un volao. Después de eso me quedé e hice algunas cosas con Farley Velásquez, con Jorge Pérez, nos íbamos para Castilla donde Farley tenía una taberna y nos presentábamos y decíamos poemas. Fue una época muy bacana; estuvimos en el homenaje a Freidel y ya después me volví para Bogotá. Trabajé en becas de Colcultura otro tiempo. Mi sueño era trabajar con Mapa Teatro y lo cumplí, hicimos La Orestiada y una lectura dramática de Freidel. Fueron tres meses de montaje y tres meses de funciones diarias allá en su sede. Entonces eso fue para mí lo máximo. También trabajé con Tino Fernández cuatro años, que fue una cosa que a mí me gusto cantidades: la danza teatro. Yo quería aprender. Trabajé tambien con Gustavo Llano, nos hicimos amigos y después él dijo que quería traer su grupo, pues, lo que él tenía en París; entonces montamos Sol sola y después otra, no me acuerdo cómo se llamaba, era muy bonita... ME: Se te tuvo que haber pegado la relación teatro, danza y dramaturgia VV: Claro, porque también con Víctor Viviescas y con Gustavo Llano montamos Nadie en el mundo es eterno. Él le cambió el nombre para que no tuviéramos problemas con el autor. Víctor escribía —aunque el monólogo mío lo escribí yo y Víctor lo puso tal cual—. Con Brunilda hacíamos otro, entonces Víctor nos corregía cosas y armó obras, escenas y ya con eso yo dije que quería escribir lo mío; quiero hacer mi trabajo y ahí es cuando empecé a escribir Por qué ponen a Fulvia, Fulvia, en Bogotá. La empezamos a montar con Ana Mazhari, Gabriela, Carlos Congote y Nadia Ávila, ese era el elenco. La empezamos a montar en la Casa del Teatro, pero tuvimos que parar porque todos estábamos sin un peso y nos cayó trabajo, a mí en la televisión con La Caponera, un año completo. Entonces yo empecé a escribir allá. Después dije: «no, yo lo que quiero es hacer teatro».
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Entonces me devolví para Medellín, porque ya estaba cerrando el ciclo, porque lo que yo quería era solamente escribir y aprender lo mío y montar lo mío. Lo mío no es aristotélico, no es nada, es mío, como yo lo quiero hacer. Esa era una decisión que no podría haber tomado en Bogotá. ME: Una Dramaturgia después de la acción VV: Pues digamos que está ahí en el paisaje mío, lo que yo quería encontrar, porque a mí sí me interesa mucho la pintura, la plástica. A veces he intentado. De hecho, mi abuela pintaba, se pasó la vida pintando. A mí eso me encanta. Y yo me di cuenta de que había cosas en el teatro que no me gustaban. Para instalar mi universo omito lo que no me gusta: la cámara negra, las odiosas patas, la trasescena. Me gusta el color blanco. No me interesa manejar los opuestos o las convenciones, el equilibrio del plató y esas cosas. No, instalo para hacer un buen montaje. No estoy pendiente del equilibrio ni de resolver conflictos. Quiero rendir homenaje a los cuerpos, al destrozo de los cuerpos, y el orden que eso traiga, es el orden que sigo. La vida puede ser solo un staccato. Y entonces eso es lo que instalo. ME: Pasa otra cosa, que tus personajes, actores, siempre están abandonados en la escena, atrapados en el espacio... VV: Sí, ellos no pueden salir de ahí, entonces tienen que estar vivos en todo el momento, tienen que estar habitando la escena porque la escena no es del que le va tocando hablar, sino que tengo que construir la dramaturgia del actor, de mi vida. Entonces yo les digo a ellos que no hay un personaje principal, cada uno está haciendo que suceda su vida, está transitando por un territorio en el que, cuando interceda con otro, puede que le pase algo, puede que no, pero al otro con el que interceda cae muerto, como pasa en Pernicia, por ejemplo, que se mueren todas, pues se encuentran con conejo blanco, pero ellas están en el escenario y él todo el tiempo. Entonces esa situación de no querer ese teatro aristotélico no quiere decir que no me guste ir a ver una obra de teatro, pero para mí necesito, por ejemplo, el blanco, porque es una cosa que es un estallado como del alma, yo no sé y los personajes ahí habitando ese blanco. El trabajo con Tino Fernández a mí me dio mucho. También de ahí tengo formas de homenajear lo que aprendí, lo que viví.
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ME: Referentes que te muevan, que te inspiren. No necesariamente del teatro, VV: Pues de acá José Manuel Freidel. Para mí él es como mi amor, más que Rodrigo, que lo quise mucho. Freidel como ser humano, como hombre, como referente artístico era grande. Además, Freidell también estudió Derecho y, como yo, él tampoco se graduó. Por otra lado hay un pintor, un artista plástico llamado Anselm Kiefer, que tiene unas obras inmensas que también trabajó mucho sobre la guerra y los campos de concentración. El tipo es una cosa impresionante. Arma obras de 4 m de alto por 6 m, entonces hace un bosque pero todo está basándose en los mitos y la guerra. Casi que lo último que he hecho lo he instalado en el paisaje de Kiefer. Ahora empecé con la vestuarista, el escenógrafo, le mandé y le dije ahí es donde yo instalo las obras, partamos de ahí. Y se convirtió en otra cosa, pues los alumnos intervinieron esto y yo los dejo, la obra es de ellos, pero el inicio es casi todo vacío. A mí me encanta el piso, que el piso esté pintado y el espacio vacío. ME: Dramaturga, actriz, directora… ¿ha sido cada una una etapa o han estado siempre juntas? O ¿finalmente Victoria deriva hacia lo mismo, la escritura?
VV: Pues yo sí me veo más como escritora para mis obras, porque yo no sé si sea escritora simplemente. Yo le hice una obra a Rayo Luján el año pasado, pero se la hice como escribo y además le puse el tema. Ella tenía un tema y yo le atravesé otro con mi forma, pero si me la piden con diálogos no sé si me metería, no se como hacerlo, ni sería capaz tampoco. Lo de Rayo fue porque yo le dije: «Usted sabe cómo escribo y no me voy a poner a escribir una cosa que yo no sé cómo hacer ni que me interesa». y me dijo: «Yo sé, Vicky». A mí lo que más me gusta en este momento es escribir, lo que me llena, lo que más satisfacción me da porque también tiene que ver con mi soledad, con mi forma de ser. Yo solo he escrito lo qué has leído y poesía, poemitas por ahí. Pero mi forma es como lo que yo recojo en la persona que soy. Que si se puede hacer teatro o que si no, es otra cosa. Esa es la única forma que yo encontré que me interesa escribir. Puede que se transforme después en algo más, yo no tengo ningún problema. ME: ¿Y han montado tus obras? VV: Sí, en Cali, una pelada muy bacana que se llama Leo, el semestre pasado —me iba a invitar este año—. Montó la obra Pernicia Niquitao. Yo pensaba: !Ay, juemadre!, esos monólogos que dice Conejo Blanco, pero bien, no me preguntó nada. En Bogotá iban a montar un pedazo de Rubiela Roja cuando tenía ese amigo que era
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Leonardo Cano. Ellos montaron algo y lo pusieron en la calle. Otro muchacho me escribió y me dijo que quería montar una obra mía, se la mandé y no me volvió a escribir, creo que una vez que vio cómo era la cosa, pues, no. En realidad dirijo porque nadie me va a montar una obra mía. ME: Los viajes, ¿a dónde has ido? VV: Como no soy tan sociable creo que me he perdido de que la obra mía se pueda mostrar en otras partes, porque realmente no sé hacer eso. Con Tino viaje a España, a Venezuela, pero no han sido muy constantes los viajes. Luego me invitaron al Festival de Mujeres en el Festival Iberoamericano de Cádiz, fui como invitada, pero para el encuentro de mujeres, y hace un año nos invitaron a Barcelona a Casa América, y presentamos la obra La memoria de las ollas. Lo otro han sido publicaciones, en la revista Conjunto, de Cuba, publicaron la pieza Rubiela Roja. Y en Buenos Aires, Lola Proaño y Gustavo Geirola hicieron un compendio de dramaturgia venezolanacolombiana y ahí incluyeron obra mía. En conclusión han viajado más mis obras publicadas, que las que he realizado. ME: Una ilusión VV: YYo quisiera pintar, ¡pintar! Sí, me gustaría; porque también es una actividad solitaria. Y me gustaría mucho sembrar. A veces pienso cosas de colores, pero también me gustaría sembrar arracacha, champiñones… sembrar, ocuparme de la tierra porque nosotros vivimos muy en la mente y no sabemos de la tierra, entonces a mí me gustaría mucho tener un tiempo para mí, para aprender a sembrar; en principio arracacha, porque me encanta, porque me gusta, porque me parece un tubérculo muy bonito. ME: ¿Cuál es tú última obra? VV: La memoria de las ollas. Esa obra es como un homenaje al desplazamiento, a la gente que termina viviendo en la periferia, en el extramuro de una ciudad, que es peor que cualquier cosa. Vi una frase de una víctima que decía: «Y con este perdón, ¿qué hago yo?», y dije: ¡Jueputa, no estamos escuchando a las víctimas!, nadie las escucha.
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En esta obra, por ejemplo, yo digo que somos los extras de una reconciliación televisada. Esa gente son totalmente anónimos, por eso también quería juntar en fragmentos varias cosas que yo quería hacer: La Escombrera —que ha estado en mis obras varias veces—, Belén de los Andaquíes, que son las masacres —primero descubrieron unos cuerpos, después las fosas. Entonces por eso se ponen las tumbitas, nadie sabe, pero es como un homenaje silencioso que se hace a Belén de los Andaquíes, porque ahí pusieron una escuela de descuartizamiento, una escuela de la muerte. Es este homenaje silencioso a todo esto y a esas víctimas que caminan por todo el territorio colombiano. ME: ¿Y en que andas ahora? VV: Estoy en la profesionalización, porque me faltaba esa parte de la pedagogía. Ahí voy, como con mucha cosa, me parece un poquito excesivo todo lo que nos ponen a hacer, las tareas, ¡y yo que no hago tareas desde los 21 años! Pero por otro lado también es un encuentro muy loco, porque, por ejemplo, nunca en la vida había estado cerquita de Carlos, el mimo, Carlos Álvarez. Ese tipo es muy lindo, y yo lo vi y dije: !Ay, no puede ser! Él y yo somos contemporáneos, es un artista maravilloso. Es bueno también uno mirarse al espejo. Con la profesionalización vamos a ver si la puedo hacer bien hecha, pero también necesito tiempo para leerme todo ese mundo de tareas, ¡son muchas tareas!
Diez cosas que te gustan
Diez cosas que no te gustan
1. El olor 2. Las bocas 3. Las manos 4. El blanco 5. Soñar 6. Conversar 7. La arracacha 8. Los perros 9. La mañana 10. El silencio
1. Huir 2. Los charcos de sangre 3. El desamor 4. La violencia 5. La impuntualidad 6. Los mezquinos 7. La sal 8. Los cubiertos de plástico 9. El calor 10. La deslealtad
ESCENA LOCAL
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LA SUCURSAL Después de varios intentos por evitar que un espacio cultural de la ciudad se cerrara, como muchos otros, La Oficina Central de los Sueños encontró en Plataforma Cultural un aliado, que con William Gómez a la cabeza se embarcó en esta arriesgada tarea de sostener un espacio que hoy acoge a varios grupos que, deseosos de crear, encontraron en esta sede, La Sucursal, una oportunidad. Son ellos: Partenón, Escena Onírica, Teatro El Grupo, entre otros, los Y es verdad, oyendo hablar a estos dos hombres de teatro parece que dan vida a este espacio, los que ensayan en él, los que explotan que nunca se fueran a separar porque encontraron en la creación la posibilidad de mantener vivo este sueño en el Partenón, de la odisea de tenerlo abierto todavía después de tantos altibajos. una sucursal que gracias al apoyo de Jaiver Jurado y Ana Cecilia Pero los verdaderos pilotos de este barco, quienes están dando día Hernández, alimentadores de sueños, tienen un lugar donde a día la pelea para que se mantenga a flote son William Gómez, han proyectado obras como: Héroes miniatura; Érase una bestia Julián Bustamante, Valeria Gómez y Beatriz Varela, quienes con una Viskovitz; Tom Sawyer; Fábula descalabrada; Sombras de la psique; constante programación se inventan ideas como las del programa Baltazar, el mago de la Navidad; y La Navidad de la niña Belén. Letras y Café con el que esperan generar conversaciones con los Producción que habla de unos creadores que, pese a las dificultades artistas, realizar debates y recibir sugerencias que impulsen el de inventarse el día a día, mantienen vivo un espacio que no cuenta desarrollo cultural de una ciudad. con más recursos que el deseo y la fortaleza de unos batalladores del arte como lo han sido desde hace mucho tiempo la mayoría de «La Sucursal es ese espacio donde asentamos nuestros sueños», los artistas de una ciudad y un país que necesita reflexionar para manifiesta Julián Bustamante, director de La Escena Onírica, a que, como lo expresarán en su próximo estreno, no tengamos que quien no le importa que haya varios grupos en el mismo espacio si decir: Adiós a la patria. este les ofrece la oportunidad de juntar ideas. «Yo tengo un texto con Partenón», dice, y se lo ofrezco a Julián, quien lo monta. Julián tiene La Sucursal está ubicada en la Cra 42 No. 54 - 50 una idea u obra y nos la compartimos. Es un trabajo conjunto, somos (Córdoba entre Caracas y Perú) creadores y lo que nos une es mantener vivo este espacio.
El fortalecimiento de la plataforma de comunicaciones es apoyado con dineros públicos priorizados por habitantes de la comuna 10 La Candelaria en el programa de Planeación Local y Presupuesto Participativo.
PROGRAMACIÓN SEMANA DEL TEATRO Medellín, Marzo 22 al 28 de 2018
EVENTOS ESPECIALES Jueves 22: INAUGURACIÓN EXPOSICIÓN Exposición Fotográfica en Homenaje al Actor Gustavo Montoya Ateneo Porfirio Barba Jacob / Galería Hora: 8:00 p.m. / Entrada libre.
Grupo: Buhardilla Teatro Obra: Amor Adicto Dramaturgo y Director: Alberto Sierra Mejía. Hora: 6:30 p.m. Ateneo Porfirio Barba Jacob / Café de Porfirio
Jueves 22 MEDELLÍN TIENE MAGIA (Velada mágica) Grupos participantes: Círculo mágico de Medellín, (maga Kania) Amigos de la magia (mago Lerent) 5 de corazones (Mago Sergio) Club de ilusionismo de Antioquia (Jey Jey) (Y mago Volantín) Lugar Corporación artística la Polilla Hora: 7:30
Lectura Dramatizada Obra: “Si te vas a suicidar, no salpiques” Dramaturgia: Eli Arias. Sala La Sucursal Hora: 7:30 p.m.
Lunes 26: Encuentro de Dramaturgia RETOS DEL DRAMATURGO EN LA COLOMBIA DE HOY Invitados: José Assad (Bogotá), Henry Díaz (Medellín). Organiza: Consejo Municipal de Teatro de Medellín Moderador: Alberto Sierra Mejía -Consejero Subsector Dramaturgia. Pequeño Teatro / Sala Tomás Carrasquilla Hora: 2:30 p.m. a 5:00 p.m. / Entrada libre. Lunes 26: MARATÓN DE LECTURAS DRAMÁTICAS Obra: Provisional Pemanente Dramaturgo: Julio César Duque Pequeño Teatro Hora: 5:30 p.m. / Entrada libre
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Lectura Dramatizada Grupo: Oficina Central de los Sueños y La Sucursal Teatro Obra: Ubú Rey Dramaturgo: Alfred Jarry Teatro Oficina Central de los Sueños Hora: 9:00 p.m. Martes 27: DIA INTERNACIONAL DEL TEATRO Ateneo Porfirio Barba Jacob Hora: 5:00 p.m. /Café de Porfirio Conversatorio: Hacia una Política de Creación e Investigación en el Teatro de la Ciudad. Organizan: Subsectores Docentes e Investigadores y Grupos de Teatro sin Sala, Consejo Municipal de Teatro de Medellín. Moderan: Álvaro Narváez Díaz y Yacqueline Salazar Herrera. Hora: 7:00 p.m. / Galería
Performance Grupo: Alejandro Londoño Título: El Juego de la Vida Hora: 8:00 p.m. / Entrada libre. Reconocimiento del X Acto de Celebración al Actor Gustavo Montoya Grupo: Teatro Santísimo Bálsamo. Obra: Dieta de Amor Dramaturgia: Horacio Quiroga. Director: Gustavo Montoya. Hora: 8:00 p.m. Entrada libre con su aporte voluntario. Miércoles 28: VI FORO MUNICIPAL DE ARTES ESCÉNICAS Legislación Cultural Invitados: Juan Pablo Ricaurte, Iván Zapata, Jaiver Jurado Organiza: Consejo Municipal de Teatro de Medellín. Teatro Oficina Central de los Sueños Hora: 3:00 p.m. / Entrada libre Marzo 22 al 28 EXPOSICIONES Exposición Fotográfica en la Semana del Teatro Pequeño Teatro / Entrada libre. Exposición Fotográfica en Homenaje al Actor Gustavo Montoya Exposición de Afiches Actos de Celebración (2009-2018) Ateneo Porfirio Barba Jacob / Entrada Libre.
Organizan: Corporación Ateneo Porfirio Barba Jacob y Asociación de Salas Medellín en Escena Apoyan: Alcaldía de Medellín, Consejo Municipal de Teatro de Medellín
ESCENA REGIONAL
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EL TOTUMO ENCANTADO PROYECTO PEDAGÓGICO “ATRAPADO” POR EL TEATRO
Flor María Cortés Zuluaga, una mujer dulce, transparente y persistente, nacida en Medellín, pero hecha en la región del Urabá; una docente artista —o una artista docente—, que hace muchos años se dejó «envenenar» por el bichito de las artes escénicas y desde entonces no ha parado de contagiar a cuanto niño y joven se encuentra en cada platanal. Por Iván Zapata R.
MEDELLIN EN ESCENA: ¿Cómo y cuándo nace “El Totumo Encantado? FLOR CORTÉS ZULUAGA: El Totumo Encantado nace en la Institución Educativa Rural El Totumo, corregimiento El Totumo, municipio de Necoclí, como proyecto pedagógico: Teatro Opción de Vida, para mejorar el uso del tiempo libre y como estrategia para evitar la deserción escolar y la vinculación de niños, niñas y jóvenes a las diversas formas del conflicto. Este proceso fue una apuesta básicamente escolar, animada por la voluntad administrativa del rector Antonio Valencia, bajo mi orientación como docente de educación artística y la monitoría en teatro del maestro Fernando Ñungo, a través de los procesos de formación de los programas Antioquia Vive y los estímulos a la creación del Instituto de Cultura y Patrimonio de Antioquia. ME: ¿Qué papel ha jugado la participación en la Red Urabá Teatral?
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FCZ: La participación en la Red Urabá Teatral ha sido decisiva en nuestro crecimiento en tanto el mutuo aprendizaje y la solidaridad. Y son los amigos, los benefactores y los teatreros quienes nos han animado para permanecer y no desistir ante las dificultades. Nunca imaginamos que el teatro saldría del espacio escolar, y se convertiría en nuestra forma de vida, ahora como Corporación Cultural el Totumo Encantado. ME: ¿Cómo surge el nombre? FCZ: Por la leyenda del corregimiento El Totumo, de Necoclí, «el totumo de oro encantado», que cuentan los abuelos y está escrita por Ismael Porto Herrera. Fue el primer montaje teatral que el grupo realizó y presentó en el festival Antioquia Vive el Teatro, en 2010. Fue tal el entusiasmo por los buenos logros y la emoción de ver y hacer teatro por primera vez, que los jóvenes decidieron que el grupo debía tener el nombre en honor a su primera obra.
Fue así como se «bautizó» con el sonoro nombre: El Totumo Encantado. ME: ¿Y después? FCZ: La primera conquista —nada fácil— fue la propia comunidad del corregimiento. Al iniciar se nos veía como un juego de algunos, «los más locos del colegio», los pelaos talentosos; ahora nos defienden como a los mejores —eso debe ser amor puro—; y se ha logrado que una comunidad, que no veía teatro, asista masivamente, desde los más pequeños —pues llegan las madres con sus hijos en brazos— hasta la familia completa, y con su silencio o el sonoro aplauso estén a la altura de los mejores espectadores. ME: Hablemos del repertorio. FCZ: Nuestras obras privilegian la valoración de los conocimientos ancestrales y son un ejercicio de memoria permanente, de resignificación del territorio en la valoración de su riqueza cultural y ambiental, como una apuesta para rehacer
ESCENA NACIONAL los tejidos rotos por las diferentes formas de violencia que ha vivido este mágico lugar del Caribe antioqueño.
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CASA TEATRO
Algunas de nuestras obras están basadas en cuentos del escritor Ismael Porto Herrera, como un rescate de la memoria ancestral afro: Nazario está desmandao, La partera, Érase una vez la marcha del cangrejo (propone una reconciliación entre las costumbres y la conservación de la especie cangrejo azul). El Totumo de oro encantado. (montaje teatral y cortometraje).
CÚCUTA
Obras que hacen más visibles y propician el diálogo, acerca de problemáticas que afectan principalmente a las mujeres y niñas: Puertas adentro (obra de teatro foro, del teatro de los oprimidos), La niña de la sombrillita roja. Obras que proponen recuperación de la memoria del conflicto desde la mirada de los jóvenes: Inocencia, Testigo mudo (dramaturgia de creación colectiva con jóvenes del corregimiento El Mellito de Necoclí), Las dos caras de la vida (dramaturgia creación colectiva con jóvenes del corregimiento Mulatos de Necoclí), Los misterios de Cerro Alto (ganadora de estímulos a la creación del Instituto de Cultura y Patrimonio de Antioquia). Obras que ponen en escena problemáticas ambientales y de derechos del agua: Lágrimas de humo, Los tiempos del agua (obra de teatro foro, del teatro de los oprimidos). Obras de memoria e interculturalidad: Río Caimán (obra de títeres basada en el relato de una niña indígena de la comunidad Cuna Tule. Ganadora de estímulo a la creación del Instituto de Cultura y Patrimonio de Antioquia), Bullerengue (obra ganadora de estímulo a la creación del Instituto de Cultura y Patrimonio de Antioquia), El jardín de Mandela (obra de títeres), La agonía del difunto (de Esteban Navajas). ME: ¿Dificultades, sueños, proyectos? FCZ: El paso de grupo informal a corporación cultural legalmente constituida ha sido un aprendizaje en todos los campos y ha aumentado las obligaciones. Nuestro mayor anhelo es tener una sede propia con sala de teatro. Actualmente estamos en una casa arrendada en la que ofrecemos formación en pintura, danza, música, teatro y audiovisuales. Nos urge un lugar adecuado y la comunidad también lo reclama.
El inicio Cúcuta es la capital de Norte de Santander y en épocas remotas el teatro fue floreciente, dinámico y crítico del contexto nacional. Esta ciudad le dio a Colombia grandes personajes que se destacan en esta actividad. En los años sesenta y setenta el teatro era arrollador con grandes directores como René Ríos, German Moure, Ricardo Camacho, el maestro Ciro Villamizar (q. e. p. d.), Carlos Duplat y Paco Barrera. Actores como Carlos Torrado, Edgar Bello, Elkin Díaz, Jimmy Vásquez y Luz Dary Beltrán, entre otros, son muestra de esa época dorada. Se contaba con un único grupo teatral costeado por la nación a través del Instituto de Cultura y Bellas Artes, con sede en Cúcuta, y que cerró definitivamente sus puertas en 1998.
Se organizaron festivales de teatro; los más importantes fueron el Festival Nacional de Teatro de Ocaña y el Festival Internacional de Teatro Universitario que realizaba el grupo de teatro El Portón de la UFPS, logrando llegar hasta la décima edición (1999) y que pudo vincular a países como Ucrania, Eslovaquia, Eslovenia, Rusia, España, Bulgaria, Alemania, Bélgica, Portugal, India y todos los países de Centroamérica y Suramérica en sus programaciones. Se realizaron también encuentros binacionales entre Colombia y Venezuela, como el Festival Binacional de Teatro y el Festival Binacional de la Frontera, pero ninguna de estas iniciativas continuó con sus actividades.
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ESCENA NACIONAL
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Festival “la Fiesta del Teatro” Ante la ausencia de una oferta teatral permanente; el bajo acceso de creadores para exhibir sus productos regionalmente; la escasa formación de público para las artes escénicas en la región; la falta de intercambios culturales que permitieran fortalecer procesos de circulación, creación, gestión, investigación y formación teatral; los altos costos de la producción de espectáculos en teatros públicos y espacios no convencionales; la falta de una oferta de formación a creadores; y la ausencia de una política cultural incluyente departamental y municipal —como mínimo con la existencia de un programa de estímulos a la creación y la circulación—; sumado todo esto al número de habitantes de la ciudad potenciales espectadores para el teatro; se propone la creación de un festival de teatro que permita a la comunidad en general acceder a la apreciación de espectáculos teatrales favoreciendo la formación de públicos, la habilitación de escenarios existentes con programación teatral y la circulación de obras de teatro con agrupaciones nacionales e internacionales para la formación de los nuevos talentos. Así nace y se consolida La Fiesta del Teatro, que en 2018 llega a su novena edición. En todos estos años el festival ha contado con la participación de grupos internacionales provenientes de Argentina, México, España, Guinea Ecuatorial, Brasil, Chile, Cuba y Venezuela. Grupos nacionales de Medellín, Bogotá, Risaralda, Valledupar, Zipaquirá, Bucaramanga; y grupos regionales y locales. Cada edición ha logrado congregar a más de 6.000 espectadores, habilitando diversos
escenarios de Cúcuta, Los Patios, El Zulia y Villa del Rosario con presentaciones de teatro una vez al año. El resto del año no se contaba con programación u oferta teatral.
Casa Teatro Cúcuta En 2016, la Corporación Cultural Frontera Aire adquiere un espacio físico como resultado La Fiesta del Teatro otrogando la posibilidad a los cucuteños de acceder a programación permanente durante todo el año. Todo esto ha sido motivado por el deseo de visibilizar las experiencias significativas y los modelos de casas habilitadas para el quehacer teatral en la ciudad de Medellín como: Oficina Central de los Sueños, Casa Clown, Casa del Teatro, El Trueque, El Pequeño Teatro, Matacandelas, entre otras, que fueron referentes muy significativos para pensar y creer que en Cúcuta podía funcionar un modelo similar y que además era necesario para dinamizar el quehacer teatral de la ciudad. Casa Teatro Cúcuta cuenta actualmente con una sala de pequeño formato con capacidad para 80 espectadores que permite la apreciación de espectáculos de las artes escénicas con programación permanente —todos los sábados del año—. Logra ser Sala Concertada Mincultura en 2017, realizando 67 funciones ese año. Actualmente trabaja el modelo de entrada libre con aporte voluntario como estrategia para la formación de público y debido a la escasa y casi nula producción teatral de la ciudad y el departamento; además cuenta con una biblioteca especializada en teatro, abierta al público en
general, cafetería y habitaciones para hospedar a los artistas. En este momento se piensa también en promover un grupo profesional para la ciudad. Actualmente este espacio es pionero en Norte de Santander y se suma a otros construidos para el teatro de títeres como Teatro Manotas, en Cúcuta, y el Teatro Arlequín, en Los Patios; además de los teatros públicos: Teatro Zulima, Teatro Municipal de Cúcuta, Teatro Jáuregui (Pamplona), Teatro Bellas Artes (Ocaña), todos de entidades gubernamentales con escasa o nula programación para las artes escénicas.
Un grupo profesional en Cúcuta En los últimos veinte años el quehacer teatral en Cúcuta ha estado dinamizado por el teatro universitario; por grupos de teatro de títeres como Arlequín, Manotas y El Retablo de Don Camilo; algunas iniciativas en circo que ya no están en la región y otras que recientemente empiezan a florecer sin constancia. Ante la crisis fronteriza, Cúcuta ha recibido artistas escénicos —clown, zanqueros, titiriteros, mimos—, algunos que se ha vinculado a colectivos de la ciudad como Teatro Manotas y Teatro Arlequín, y otros que hacen trabajo en semáforos y espacios abiertos de la ciudad. En enero de 2017, nace la compañía teatral Casa Teatro Cúcuta, como respuesta a la necesidad de tener producción permanente, constante y con la rigurosidad del trabajo teatral a fin de llevar a escena propuestas que permitan que la comunidad en general pueda acceder a la apreciación del teatro; que se dé la circulación de un grupo de teatro cucuteño en otros escenarios
NOTAS EN ESCENA nacionales e internacionales; que se pueda sostener una programación permanente en la sala; y como fuente de trabajo para un puñado de artistas. Actualmente la compañía cuenta con cinco actores de planta, una directora artística y tres actores en formación invitados a las propuestas. En el primer año la preocupación fue cómo formar a los interesados, por lo que la compañía tuvo en proceso de formación a diez personas. Ante la rigurosidad del trabajo escénico, en enero de 2018 —un año más tarde— se consolidad la compañía y ya cuenta con tres producciones artísticas: Pluft, el Fantasmita, de la autora brasilera María Clara Machado; Picnic en el campo de batalla, del autor español Fernando Arrabal; y Paco y Peco; producto del acercamiento al clown. Todas fueron estrenadas en 2017; para 2018 se espera estrenar Pinocho (versión libre); Se necesita gente con deseos de progresar, del autor colombiano José Domingo Garzón; e Historias en el fondo del mar (creación colectiva) en teatro de títeres. Agradecemos a la Asociación Medellín en Escena por la oportunidad de contar nuestra historia que ha sido inspirada por el trabajo de varias organizaciones de Medellín, especialmente Oficina Central de Los Sueños, Casa Clown y Casa del Teatro de Medellín. Nuestro mayor sueño es hacer que nuestro proyecto perdure en el tiempo como un legado de la región y fuente trabajo para los artistas. Trabajamos todos los días con pasión y resistencia para que no sea una casa, sino muchas casas de teatro en Cúcuta. Es nuestro mayor deseo, tenemos la esperanza de ver florecer el quehacer teatral en Cúcuta. ¡Qué viva el Teatro!
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ESTRENO EN EL TPM
LA IMPROVISACIÓN DEL ALMA
Esta pieza teatral escrita por Eugène Ionesco, se estrenó en el Studio des ChampsÉlysées en 1956, con una puesta en escena de Maurice Jacquemont, que también tomó el papel de uno de los personajes, en este caso el propio Ionesco. El montaje tuvo mucho éxito con el público más no con la crítica —por obvias razones—. El Teatro Popular de Medellín (TPM), bajo la dirección de Iván Zapata R., propone este montaje a consideración del público y también de la crítica —por obvias razones—, teniendo como pretexto la polémica entablada a mediados del siglo XX entre los postulados del teatro del absurdo y los del teatro épico en el terreno de la crítica, donde el teatro épico se ve privilegiado por la mirada de la semiótica. Ante la imposibilidad de contar con críticos importantes que defiendan el discurso del teatro del absurdo, Ionesco construye una pieza en la que hace una «crítica» a la crítica semiótica, una mamadera de gallo a tanto seudointelectual que aún pulula en este mundo y de manera particular en nuestro país —por obvias razones—. La pieza también es conocida como El camaleón del pastor, metáfora que explica a uno de los personajes el propio Ionesco: «Si usted quiere, yo soy el pastor y el teatro es el camaleón, puesto que he abrazado la carrera teatral y el teatro cambia, por supuesto, pues el teatro es la vida. Es cambiante como la vida… ¡También el camaleón es la vida!». Temporada de Estreno del 5 al 28 de Abril de 2018. Jueves a Sábado. Hora: 7:30 p.m. Clle 48 No. 41-13 - Teléfono: 216 62 62
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¡PORQUÉ 5 AÑOS NO SE CUMPLEN TODOS LOS DÍAS!
NOTAS EN ESCENA
XXVII FESTIVAL INTERNACIONAL DE TÍTERES LA FANFARRIA
Más de 70.000 espectadores, cerca de 1.000 eventos, 16 talleres de formación y más de 100 empresas e instituciones que alquilaron nuestro espacio para sus eventos empresariales, han pasado por estos 5 años de actividad y programación cultural en CasaTeatro El Poblado. Cinco años de aportes y trabajo fuerte en la formación de públicos, ofreciendo propuestas de calidad en teatro, música, cine, humor, danza, exposiciones artísticas y programación infantil, que han alegrado las noches del barrio Santa María de los Ángeles en El Poblado, Medellín. Circulación, formación y diversión son palabras que nos han trazado el rumbo en este tiempo como centro cultural. Un arduo proceso que ha aportado en el tema artístico de toda la ciudad. Por nuestra sala han pasado nuevos talentos, grupos de teatro y músicos consagrados locales, regionales e internacionales, que han nutrido nuestra propuesta semanal. Oportunidades que los asistentes han podido disfrutar desde todos los sentidos. Un teatro, una galería de exposición y un Café Restaurante al aire libre, hacen de CasaTeatro El Poblado el lugar ideal para disfrutar de las diferentes expresiones artísticas y gastronómicas que ofrece nuestra ciudad. Un sitio creado para vivir la cultura y el entretenimiento en toda su expresión. No te pierdas los próximos eventos: Jueves 12 de abril: Maricarmen (España). Alma viajera. Concierto Viernes 13 de abril: USM en Casa. Gaiteros del Hato Viejo. Caribe: noche de gaitas y baile cantao’. Concierto Sábado 14 de abril: Fundación Música de Cámara de Medellín. A cuatro manos. Sara Sierra y Andrés Gómez. Recital de piano Jueves 19 de abril: La Travesía del Alma. Concierto Viernes 20 de abril: Los gitanos de Belleville. Concierto Jueves 26, viernes 27 y sábado 28: Liga de la Incjusticia. El Morenito INC. Humor e improvisación. Cra 47B 17BSur-30 Poblado - Teléfono: 321 11 00
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“La Loca Compañía” de Uruguay Del 20 de abril al 11 de mayo, llega el Festival Internacional de Títeres La Fanfarria en su 27º edición. El festival se llevará a cabo en15 escenarios del departamento: Medellin, Bello, Copacabana, Marinilla y San Carlos, con 45 funciones y la participación de 12 grupos nacionales e internaciones, entre ellos: La Loca Compañía, de Uruguay; Ñas Teatro, de España; La Lupe, de Argentina; Espada de Madera, de Ecuador; El Carriel, de Tunja; Castillo del Gato, de Bogotá; Edgar Gutierrez, Pertrechos, Casa Taller, y La Fanfarria, de Medellín; Tecoc, de Bello; y Tironeta, del municipio de San Carlos. Viernes 7:00 p.m. - Sábados 5:00 p.m. - Domingos 11:30 a.m. Cra 84 No 42C-54 - Teléfono: 250 92 30
CONVOCATORIA PARA FESTIVAL DE CUENTERÍA El 21 de abril inicia la convocatoria del Festival Local “Medellín Sí Cuenta”, el cual se realizará del 28 de mayo al 10 de junio, y que contará con la participación de más de 120 cuenteros con edades entre los 5 y los 90 años. Los cuenteros aspirantes podrán participar en diferentes categorías: Cuenteros aficionados, Novatos y Profesionales, las categorías Infantil y Abuelos. Los ganadores serán parte del Festival Internacional entre Cuentos y Flores, que se realizará en el marco de la Feria de las Flores de Medellín. La Corporación Cultural Vivapalabra invita a todos los cuenteros de la ciudad a estar pendientes de toda la información en el sitio web www.vivapalabra. com y en las redes sociales de la entidad. También podrán comunicarse a los teléfonos: 239 61 04 - 239 44 23 - 239 52 93 y 313 615 0109.
NOTAS EN ESCENA
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EN EL TEATRICO
RÍASE EL SHOW Julián Arango y Antonio Sanint Dos expertos en hacer reír se unen nuevamente, ahora para venir a Medellín y estarán durante un mes de temporada en nuestro teatro. Ellos son Antonio Sanint y Julián Arango, dos genios que en abril se reirán de la idiosincrasia colombiana. Gracias a Ríase el show usted podrá entender de dónde salieron los paisas, los costeños, los pastusos y los viejitos cachacos que desfilan por su comedia. Todo lo que no vio en Netflix, aquí podrá disfrutarlo en vivo. Fecha: 5 al 21 de abril Hora: 8:00 p.m. Lugar: El Teatrico – Transversal 39b #circular 2 -46 Informes: 411 8878 – www.elteatrico.co Boletería: $60.000
LOS CABALLEROS LAS PREFIEREN BRUTAS Isabella Santo Domingo
¿Cómo evitar el divorcio y no morir del aburrimiento? ¿Sexo sentido? ¿Nos amamos o nos soportamos?. Esta obra, escrita y actuada por Isabella, hablará sobre el machismo, el feminismo y las relaciones de pareja en la actualidad. Con ingenio, ironía, jocosidad y polémica abordará su idea sobre «parecer bruta» sin serlo y la forma de sacar el mejor provecho de esto. Fecha: 3 al 19 de mayo Hora: 8:00 p.m. Lugar: El Teatrico – Transversal 39b #circular 2 -46 Informes: 411 8878 – www.elteatrico.co Boletería: $60.000
DIRECTORIO DE SALAS ASOCIADAS Medellín en Escena Cra 42 54-50 Centro - 2398125 medellinenescena@medellinenescena.com
Elemental Teatro Cra 42 44-46 Centro - 2176375 teatroelemental@gmail.com
Canchimalos clle 47 80-37 Floresta - 448 97 40 culturacanchimalos@gmail.com
Casa Clown Cra 44 69-71 Manrique - 2116570 colectivoinfusion@gmail.com
La Polilla clle 23 76-85 Belén - 3433627 info@lapolilla.org
El Teatrico Transv.39B Circ.2-46 Laureles - 4118878 reservas@elteatrico.co
Matacandelas Clle 47 43-47 Centro - 2151010 matacandelas@matacandelas.com
Barra del Silencio Clle 45C 75-151 - Velódromo - 4135583 barradelsilencio@gmail.com
Caretas Cra 126B 61A-71 San Cristóbal - 4270698 caretas@une.net.co
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Vivapalabra Clle 55 43-63 Centro - 2396104 corporacioncultural@gmail.com
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La Fanfarria Cra 84 42C-54 La América - 2509230 fanfarria@une.net.co
Ziruma Clle 64 39-18 Villa Hermosa 2843462 arte-ziruma@hotmail.com
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