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Editorial

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Música

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Este curso , nuestro “Colodrillo” recibe nuevos colaboradores , compañeros que han llegado a nuestro colegio cargados de alegría y con unas ganas enormes de trabajar para y por los niños. Una de las compañeras que está con nosotros , nuestra ya querida Paca , maestra de pedagogía terapéutica se encarga esta vez de nuestra editorial , expresando un sentimiento compartido por todos sobre la inclusión.

Cuando el equipo directivo me ofreció la posibilidad de escribir la editorial del periódico escolar pensé: ¿qué puedo contar yo, si prácticamente acabo de llegar? Y como me suele pasar con algunas cosas nuevas a las que me enfrento, sentí un poco de “miedo” que rápidamente se convirtió en entusiasmo.

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Todos los años, la vuelta al cole está llena de emociones, pero no solo para los niños, también para los maestros. Los días de antes, siento cosquillitas en la barriga y me cuesta dormir, dando vueltas y más vueltas a la cabeza. Este año, esas sensaciones se han multiplicado…nuevo colegio, nuevos alumnos, nuevos compañeros y familias, pero la ILUSIÓN siempre es más poderosa que los nervios. Llevamos tres meses de clase y me siento como en casa. Todos vosotros me habéis abierto de par en par las puertas del cole y habéis hecho que, en muy poquito tiempo, sienta que pertenezco a esta Comunidad Educativa, permitiéndome participar en todas las actividades del centro, desde el primer día. Gracias, mil gracias porque habéis conseguido que sienta, en mi propia piel, lo que significa la palabra INCLUSIÓN.

Y en eso consiste nuestro trabajo, en incluir. Todas las personas que formamos parte de este colegio somos diferentes, eso es lo más maravilloso y enriquecedor que nos puede pasar y estamos orgullosos de tener niños y niñas tan distintos unos de otros. Cada uno de ellos es ÚNICO, con sus fortalezas y debilidades, con sus intereses, necesidades y ritmos de aprendizaje, pero todos son capaces de aprender, todos son importantes y todos tienen un lugar en nuestra escuela. Para eso estamos los maestros y las familias, para observarlos y averiguar cómo despertar su interés y ganas de aprender y para ayudarlos a ser lo más autónomos y felices posible, en una sociedad que, poco a poco, se va adaptando a la diversidad.

Tenemos la mejor profesión del mundo. Me siento orgullosa cada vez que digo: “soy maestra” y eso es gracias a vosotros, queridos alumnos. Desde que entramos por la puerta, recibimos vuestras muestras de cariño en esas preciosas sonrisas, en la magia de vuestra ilusión o en esa alegría contagiosa tan bonita que tenéis. Somos afortunados de dedicarnos a la enseñanza y poder acompañaros en este camino en el que APRENDER Y SER FELIZ van de la mano. Me gustaría finalizar con una cita que, a mí personalmente, me toca el alma.

La diversidad debería ser causa de amor y armonía, como lo es en la música donde diferentes notas se funden logrando un acorde perfecto. -Abdul Baha-

Francisca Molera (Maestra de PT)

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