◆ Entrevista: Pepe Huelves ◆
Almería es como tu lugar de referencia.
Una fotografía “ tiene que tener un
protagonista claro y los demás elementos deben apoyarlo. esas imágenes intervengo colocando las piedras, buscando una composición de formas y de color, pero son piedras que están trabajadas, pertenecen a una mina y son el resultado de la intervención del hombre. Esa unidad involuntaria que hay entre el trabajo del hombre y la naturaleza, está contando una historia. La serie “El Jardín”, está inspirada en el concepto de jardín japonés. Durante un tiempo estuve meditando en esa idea, en el trabajo minimalista con muy pocos elementos. Jugar con el agua y con las rocas. La serie “Industriart” tiene que ver con paisajes industriales, donde el formato panorámico y el color tienen un fuerte protagonismo. ¿Qué sentido tiene hacer fotografías a una balsa en una mina o un desguace de coches? Ahí es donde reside el concepto de paisaje para mí. Y siempre la actividad humana, sin la presencia del hombre.
Casi siempre, sí. En la mayoría de las fotografías. La última serie: “¡Agua!”, tiene que ver más con la ausencia del agua. Por eso es “¡Agua!” con exclamación, como un grito de necesidad. lysmå lermagazine
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Sí, es como una huida. Además acabo de realizar un libro llamado “Crónica del Sur”. Has comentado que comenzaste con analógico y ahora trabajas en digital, ¿fue una transición traumática?
A nivel profesional sí, porque en analógico te limitabas a realizar una buena toma y entregar una diapositiva correcta al cliente, luego la fotomecánica se encargaba de hacer los ajustes necesarios para su correcta impresión en CMYK. Con el digital ese trabajo lo tiene que asumir el fotógrafo y debes empezar a desarrollar nuevas técnicas de gestión de color que te permitan obtener en el papel lo que ves en la pantalla. Pero por otra parte, como mi formación profesional viene de la parte de la electrónica industrial, era como cerrar el círculo y me adapte de forma relativamente fácil. Y aún así tus fotografías siguen teniendo ese sabor a la fotografía clásica.
Es debido a que uso el Photoshop a modo de cuarto oscuro. Trabajo sobre todo con niveles, selecciones, capas de ajuste y poco mas, que es lo que correspondía a los tapados en el laboratorio. ¿Algún trabajo del que te sientas más orgulloso, o eres de los que una vez que has terminado un trabajo empiezas a odiarlo?
No, en general me gustan todos, si tuviera que elegir algún trabajo que me ha motivado especialmente quizás sería “El Jardín”, porque tal vez me define como fotógrafo de lo extremo en cuanto a luces y sombras en el Blanco y Negro y sobre todo la composición muy minimalista. Me motivaron estéticamente las imágenes que tomaron los astronautas en La Luna. Esa dualidad de escenas iluminadas por el Sol pero con cielo nocturno