A Levi
Tú eliges tu comida, ellos no comen nada Tus juguetes se esparcen por la casa, tu casa
Amor…disculpa mis palabras
esos bebes no saben de juguetes
pero otros niños me duelen en tu pecho o el mío que es el mismo.
de pañales fresquitos, de colitas cuidadas
Otras caritas de hambre me lastiman tu carita saciada.
no cerrarás las puertas de tu alma.
Mi amor… perdona a esta mamá que hoy no puede contarte
no harás como mamá ―que no hizo nada‖
Prométeme mi amor que cuando entiendas Prométeme mi amor que cuando puedas
historias de conejos y de ardillas…
No te conformarás con dar monedas
Liendres y congoja en cabecitas tristes
ni calmarás tu inquietud en una lágrima
me duelen en tus bucles de trigo perfumado.
Lucharas por forjar un mundo equitativo
Sus harapos destrozan tu ropita planchada,
en el que la marginalidad y el desconsuelo
las moscas que se posan en sus mocos dolientes
sean cosas pasadas.
manchan tu naricita inmaculada Amor…disculpa mis palabras tus dieciocho meses, no pueden entender de tanta infamia Pero mamá te cuenta…quizá por imprudencia, quizá de apresurada Cuando crezcas, amor, sabrás de estas palabras Mientras duermes feliz en tu cunita aireada otros niños no saben de sábanas ni almohadas
Mónica Cussotti Argentina