Especial
Fotografía: Denisse Cámara Díaz.
ANA CLAUDIA CHACÓN
“Mi mamá fomentó en mí y en mi hermano el deporte desde pequeños porque así es la vida: una carrera de obstáculos para la que debemos estar en for-
UNA CANCUNENSE COMPITE EN LA QUINTA TEMPORADA DE EXATLON ma en cuerpo y mente”.
“
Cuando tus pasos inspiran a los demás, significa que algo estás haciendo bien, así que mis metas nunca han variado, al contrario, esa gente que me apoya con sus comentarios positivos y optimistas alimentan mi espíritu y el de ellos mismos también al ver que todos podemos estar en un podio, en una pista, en una competencia o simplemente en un campo de entrenamiento porque las oportunidades de crecimiento están para todos en la vida, todo es cuestión de decidirse a experimentarlas y comprometerse con uno mismo”. Dice que en la vida nada es gratis, todo tiene un precio y con el que le pagó el destino por compartir su pasión como deportista le abrió una oportunidad de negocio a la bella Ana Claudia Chacón Rodríguez quien empezó a ganar seguidores cuando empezó aparticipar en diferentes competencias tanto nacionales e internacionales, pues realmente toda su vida ha sido deportista y lo de influencer vino después… 26 ProyectoBrújula.com
¿Cuéntanos un poco de ti Ana Clau, cómo te defines, eres una deportista apasionada, pero has empezado a explorar en otras oportunidades de negocio? “Me defino como una mujer apasionada, trabajadora, optimista, zapatista y amante de la vida, me gusta llenarme de aventuras, de momentos, de personas nuevas y sobre todo de experiencias bonitas”. ¿Cuál es tu relación con el deporte y de dónde proviene el gusto? “Creo firmemente que el deporte me lo ha dado todo; los valores que hoy me representan, los campeonatos que son mis más grandes recuerdos, las personas que he conocido y con las que he tenido la fortuna de coincidir, los viajes y sobre todo la oportunidad de inspirar a otras personas en una disciplina que tanto me apasiona como lo es el Tocho Bandera. Realmente el punto de partida de esta pasión se la debo a mi mamá, mi querida Martha Rodríguez. RevistaBrújula
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