Lucía Garro y Mario Encinas

Días después dequevolvierana cruzar las puertasde nuestrocentro con motivo de La GraduaciónQue No Fue , volvimos a invitar a Lucía Garro y Mario Encinas a sentarse con nosotros para, esta vez, responder a unas preguntas sobre la celebración que sí fuey su paso por el IES Joaquín Rodrigo.

¿Cómo recordáis vuestro último día (10 de marzo 2020) en el IES?

LUCÍA: Mi último día no fue el 10 de marzo, sino el 9. Para mí fue un día totalmente normal, y recuerdo que estaba constipada y no sabía nada sobre que nos iban a confinar.

MARIO: Yo me acuerdo de que se escuchaba que el Covid-19 había llegado a España, y toda mi clase creía que el confinamiento serían dos semanas y luego se volvería a la normalidad.

¿Cómo os hubiese gustado que hubieseacabado vuestro paso por el instituto?

M: A mí me hubiese gustado que la graduación se hubiese realizado.

L: Sí, a mí también, y habría sido un gran acto y yo habría llorado seguro, y nos hubiésemos despedido del centro, de nuestros compañeros, del profesorado…

M: Y yo habría recitado mi discurso, que ya estaba preparado. Y una vez acabada la ceremonia nos habríamos ido de fiesta.

L: ¡Y habríamos vuelto por la mañana con churros para desayunar! (risas)

¿Que pensaron vuestros familiares cuando en verano se enteraron que se iba a realizar la graduación que no fue? L: Lo primero que dijo mi madre es que si podía ir, a lo que yo le respondí que no, que iba a ser un acto informal para los alumnos a modo de despedida.

M: A mis padres les gustó la idea y que se acordaran de los alumnos que no habíamos tenido graduación. Creían que iba a ser como todas las graduaciones y se esperaban poder haber ido, pero a pesar de no poder asistir están agradecidos de que hayamos podido tener una despedida.

¿Qué os dijeron cuando les contasteis cómo fue?

M: Les gustó que fuera un acto informal con sorpresas, una forma de pasarlo bien y de despedirse, que era lo que le faltó a ese 2020.

L: Además dijeron que fue un acontecimiento muy bonito y que les gustó mucho el detalle de la foto que os dieron.

¿Qué os pareció el teatrillo del comienzo, que simulaba una realidad alternativa donde no había habido confinamiento?

L: ¡A mí me encantó! El estar otra vez en una clase fue como una vuelta al pasado, volver a estar en 2º de Bachillerato otra vez. Yo lloré mucho al recordar cómo era todo.

M: Yo creía que nos iban a poner un vídeo o algo parecido, pero me llevé una gran sorpresa al ver que la mayoría de los profesores que nos habían dado clase estaban ahí haciendo esa especie de teatrillo de una realidad alternativa en la que el confinamiento nunca hubiera ocurrido.

¿Qué recordáis de vuestra EVAU?

L: Yo recuerdo que en mi casa no me concentraba, no podía estudiar. Hacía mucho calor y pensaba que lo que tuviera que ser, sería. Una vez allí me acuerdo que nos dejaron quitarnos la mascarilla para hacer los exámenes, porque hacía mucho calor, era muy agobiante. No fui con demasiadas expectativas, pero al final salió bien.

M: Yo iba más tranquilo porque cambiaron el modelo a uno más sencillo y si llevabas bien el temario y estudiabas no habría problema. Me acuerdo de las Matemáticas de Rubén y de sus videos. Y luego allí en la Facultad me acuerdo de que no había aire acondicionado y de que en nuestra aula no nos dejaron quitarnos las mascarillas. Y también fue un rollo que no nos dejaran irnos de fiesta al acabar.

¿Quépasó con vuestro viajedefin de curso?

L: Al final estuvo bien porque fuimos a Mallorca, pero faltaron muchas cosas, una de ellas las fiestas, Nos las teníamos que buscar por nuestra cuenta porque estaba todo cerrado, e Íbamos a la playa o buscábamos algún bar.

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Lucía y Mario posan en una de las aulas donde daban clase, y donde tuvo lugar parte de La Graduación que No Fue .

M: Lo que sí disfrutamos fue de las calas de allí y de las playas. Fue un viaje con todos juntos en el que nos divertimos mucho.

Después del viaje de verano y el viaje de fin de curso, ¿qué empezasteis a estudiar en septiembre?

L: Yo empecé la carrera de Relaciones Laborales y RRHH.

M: Yo entré en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte, más conocida como INEF. Y los dos de forma online, lo que nos hizo perder esa parte de ir a la Universidad en la que te relacionas y conoces a gente nueva.

¿Qué planes de futuro tenéis cuando terminéis la carrera?

L: No sé si seguiré estudiando algún máster o algo parecido porque aún no tengo muy claro qué es lo que me gusta. Mi otra opción sería empezar a trabajar.

M: Yo ya lo he dicho muchas veces: al terminar la carrera quiero cursar un máster de Educación y luego opositar para conseguir ser profesor de Educación Física. Y si es en el Joaquín Rodrigo, mejor (risas).

Los dos cumplisteis los 18 en el confinamiento. ¿Cómo os sentisteisal cumplir una edad tan importante en medio de una pandemia mundial?

M: Yo tenía claro que los 18 eran especiales porque ya puedes conducir, salir de fiesta… Y me hubiera gustado poder hacer una celebración especial y no pude, aunque al final sí que lo acabó siendo porque lo celebré en unas circunstancias muy raras pero tenía a mi familia a mi lado. Además, mi vecina me bajó con un cordel por la ventana un trozo de bizcocho (risas).

L: Yo tuve la suerte de que los cumplí cuando empezaban a dejar salir un rato para dar paseos. Me acuerdo de que mi padre fue esa mañana tocando los telefonillos de la urbanización para pedirles a los vecinos que, a la hora del aplauso, me cantaran el cumpleaños feliz. Cuando llegó la hora, salí a la terraza y había hasta un cartel felicitándome mientras todos cantaban el cumpleaños feliz.

¿Cómo os sentisteis el otro día al cruzar las puertas de este instituto otra vez?

L: A mí me vinieron muchos recuerdos de cuando entraba todas las mañanas a clase y me hizo mucha ilusión, ya que es una etapa que recuerdo con mucha alegría. A mí es que este instituto me encantaba.

M: Yo sentí como si volviera al instituto, a pensar en las asignaturas, en los compañeros y en el ambiente. Fue muy bonito.

¿Habéis visto el instituto muy cambiado?

M: Yo sí he visto muchos cambios, y eso que aún me falta por ver la zona de las mesas de picnic del patio.

L: Yo igual, aunque pienso que lo fundamental, que son los edificios, no ha cambiado tanto. Y Mario ha venido más, pero yo no volvía desde aquel día de marzo que me fui, así que fijaos en todo el tiempo que ha pasado...

M: Pero yo creo que lo esencial sigue igual, y me gusta que sea así: que no importa todos los cambios que haya, o las reformas o renovaciones que se hagan, el instituto no pierde su esencia.

Y por último, unapregunta que ya seoshizoeldíade La Graduación Que No Fue : ¿qué es lo peor que habéis hecho estando en el instituto?

M: Algún que otro partido de futbol en clase… (risas). O cuando fuimos a la nieve, que nos poníamos a hacer ruidos de gallo por la noche y los profesores nos regañaban. También hubo una vez en que en mi clase apareció una rodaja de chorizo en el corcho, y ahí me metieron aunque yo no tuve nada que ver. Pero la peor con diferencia fue cuando toda mi clase se puso atrás del aula exigiendo los criterios de calificación a un profesor de Biología porque nos había corregido los exámenes de una forma un poco rara, y se cabreó y se fue de clase. Eso fue sin duda lo peor que hemos hecho…

L: Yo nunca he sido muy mala. Sí es cierto que alguna vez he hecho pellas o he copiado en algún examen. O lo típico de escaquearme de correr en Educación Física escondiéndome detrás de un seto y esperar que pasara la gente y ya continuar.

¡Gracias y muy buena suerte!