Boletín Sagrada Lanzada 11
da a la hermandad por su color y ser piedra preciosa. Queda así referida de forma velada la lanzada que recibió Nuestro Señor Jesucristo que atravesó a su vez el corazón de su madre.
Potencias En lo que se refieren al diseño de las tres potencias, también se basan en el estilo que impera en toda la cofradía, siendo este el gótico florido, inspirado en parte por el retablo mayor de la Catedral. Por ello, se desarrolla partiendo de una roseta central que reproduce una vidriera catedralicia de forma simplificada pero que recoja los colores y el concepto de esta. Esta roseta sirve de fondo al símbolo que en cada una de las tres potencias se reproduce, bajo un guardapolvo al igual que sucede en el altar mayor en cada una de las representaciones de escenas que este contiene. A este centro lo rodea roleos de nervios y hojas góticas que van ascendiendo ocupando toda la parte central de la potencia hasta acabar en un pináculo donde se aloja un zafiro. Detrás de esta decoración se distribuyen grupos de rayos de “hojas sueltas” cuya realización permite que estos vayan vibrando con los movimientos que el paso les transmite, dando un efecto de centellear. Respecto a los símbolos que cada potencia acoge, se ha inspirado en el retablo gótico de la adoración del cordero místico. El tema central del mismo es la narración bíblica sobre la redención del hombre por el sacrificio de Jesús. Los paneles superiores de los extremos representan a Adán y Eva, a la izquierda y derecha respectivamente. Están desnudos, no idealizados, sino con cuerpos extremadamente reales; el vientre hinchado de Eva hace referencia a su papel como madre de toda la Humanidad. Los protagonistas están separados, cada uno en un extremo del retablo, y la escena no muestra los elementos iconográficos tradicionales como el árbol, la serpiente, u otras plantas y animales del jardín. Han sido pintados con su púdica hoja, y Eva sostiene la fruta por la que fueron expulsados del Jardín del Edén, que en este caso no es una manzana, sino una fruta cítrica. El panel inferior central muestra la escena principal, la Adoración del Cordero Místico, representando al Hijo de Dios y su Eucaristía. La composición está basada en un pasaje del
Apocalipsis de San Juan: “Después de esto vi una grande muchedumbre, que nadie podía contar, de todas las naciones, y tribus, y pueblos, y lenguas, que estaban ante el trono y delante del Cordero, revestidos de un ropaje blanco, con palmas en sus manos.” Apocalipsis (7,9). La sangre de Jesús es recogida en la copa, lo que se relaciona con el mito del Santo Grial. En el cielo surge la paloma, símbolo del Espíritu Santo, que ilumina la escena. El Cordero está rodeado por catorce ángeles, algunos de ellos con los símbolos de la Pasión (la cruz, la columna, la corona de espinas, la lanza, la esponja). Delante, la fuente de la vida de la que nace un arroyo, cubierto de joyas. Cristo aparece representado como cordero sacrificado cuya sangre, que cae dentro del cáliz, purifica al Mundo eliminando el pecado original que representan Adán y Eva .
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