Declaración Pública Escuela Comunitaria República Dominicana
Este Miércoles 18 de diciembre del año 2013 a las 5:00 de la madrugada Fuerzas Especiales mandatadas por el Alcalde de la Florida Rodolfo Carter hicieron ingreso sin previa notificación a las dependencias de la Escuela Comunitaria República Dominicana (Villa O´Higgins, La Florida), ocupadas pacíficamente bajo autogestión educativa por casi un año por madres y apoderadas en la defensa de la educación de sus hijos e hijas. Durante el desalojo fueron tomadas detenidas 5 personas que se encontraban dentro del establecimiento. Entre ellas había un menor de 12 años, hijo de una de las madres que encabezaba la toma, fue llevado y retenido durante algunas horas sin considerar su condición de menor de edad. Este nuevo desalojo viene a romper con el trabajo voluntario de 11 meses de madres, padres, estudiantes, profesores, profesoras y profesionales de la educación congregados por la defensa de un espacio educativo comunitario, con una historia y una memoria de lucha y construcción. Es un segundo cierre de una escuela que la comunidad logró abrir y hacer funcionar de manera autogestionada, levantando un proyecto educativo propio y preparando a los niños y niñas para rendir exámenes libres. Es justamente este último esfuerzo el que, al momento del desalojo, sigue inconcluso, pues aún estamos a la espera de los resultados de los exámenes libres realizados el 4 y 5 de diciembre, sin saber si alguno de nuestros estudiantes deberá repetir alguna de las pruebas. Es por ello que el desalojo nos parece una medida que atenta contra un proceso pedagógico y educativo en marcha, dando cuenta que las autoridades (que estaban al tanto de esto) no respetan ni promueven el derecho de nuestros niños y niñas a educarse, constituyéndose así en nuestros estudiantes un segundo trauma a partir del cierre violento de su escuela. A pesar de todo estamos decididos a continuar con el proceso de cada una y uno de nuestros estudiantes. Durante el desalojo, de manera violenta y provocando a la comunidad, se borraron los murales pintados con los niños y niñas, se rompieron puertas y se retiró material pedagógico, didáctico e información perteneciente a las madres, niños, niñas y profesores de la escuela. Mucho del material didáctico, carpetas, juegos, literatura y libros de texto retirados por los funcionarios municipales correspondían a donaciones, tanto de gente que nos apoya como de los mismos profesores y apoderados de la escuela. Solicitamos que todo aquello sea devuelto a sus verdaderos dueños: la comunidad.