CYAN MAGENTA YELLOW BLACK
NACIONAL
INTERCULTURAL
B8
MARTES 24 DE JULIO DE 2018 La Hora ECUADOR
I
Tradición ° Alver Gavilánez, morador de la comunidad Misquillí, recuerda que fue don Segundo Yanzapanta quien le enseñó a bailar. “Tenía mucha curiosidad por aprender y cuando empecé me gustó mucho, porque al ser un danzante es posible participar de las costumbres que tenían nuestros antepasados”. Don Segundo señala que hay quienes no pueden coger el paso y por esto no han podido participar en el grupo. “No es fácil danzar, a veces los compañeros no consiguen aprender, pues este no es cualquier tipo de baile; hay que seguir el ritmo de los pingulleros”, recalca.
‘Tushug’, sacerdote de la lluvia que rinde homenaje a la cosecha Este personaje, conocido como el danzante, es el símbolo del Corpus Christi.
TUNGURAHUA • El alumbrado público aún está encendido, el alba apenas se pronuncia y la gente con su azadón y botas de caucho ya se encuentra en los campos trabajando, con la mirada y las manos en la tierra. A las 06:00, don Segundo Yanzapanta, quien vive en el barrio Jesús del Gran Poder, zona alta de Santa Rosa, parroquia ubicada al sur de Ambato, poda y cuida de sus plantas de mora. Él es uno de los danzantes más antiguos de su sector. Mientras cultiva con cuidado sus plantas, cuenta que es
muy feliz bailando: “Gracias a Corpus Cristi o cuerpo de Crisla cultura que nuestros mayores to, que es una tradición religioindígenas nos han dejado la tra- sa del catolicismo. dición continúa, es una alegría Sin embargo, los pueblos inpoder danzar”, comenta. dígenas y campesinos han reEste hombre se refiere espe- tomado esta celebración con su cíficamente al ‘tushug’ o ‘Sacer- mismo nombre. dote de la lluvia’, quien antiguamente bailaba de alegría Vestimenta en agradecimiento por la EL DATO El atuendo de los dancosecha del maíz. zantes comprende un faldón, camisa blanca La elaboración y una pechera larga que Origen del traje de los representa a la chacana o Los ‘tushuk’ eran baila- danzantes costar rines de la época inca. En puede desde 200 hasta cruz indígena. En la parte de atrás tienen una franel Inti Raymi, fiesta en 400 dólares. ja de siete colores, que honor al taita Sol, simulaban la dinámica de traslación y simboliza el arcoíris y se acopla rotación de la Tierra, imitando, perfectamente con un penacho además, el movimiento de la ser- o cabezal adornado de plumas, piente, que para los pueblos ki- lentejuelas, joyas y espejos, que personifican a los dioses que los chwa significa sabiduría. Llegaron los españoles y incas adoraban, como la Luna y se dejó de llamar a la conme- el Sol. Los cascabeles también moración de los ancestros Inti son uno de los accesorios que Raymi; se la empezó a nombrar identifican a los danzantes. Es-
Trasmitir las costumbres °
Valorizar la tradición de las comunidades indígenas es importante, comenta Welington Guaman, de 21 años. “Nosotros los jóvenes debemos cuidar y continuar transmitiendo el baile de los danzantes, con respeto y amor a nuestras raíces”. Los niños y jóvenes que actualmente participan son los hijos de los bailarines adultos, ellos van creciendo y cada año participan con sus padres. Hace tiempo los únicos que danzaban eran hombres, pero en Santa Rosa hoy hay niñas que se llaman las guyanas; ellas van con las tiras de colores en el sombrero y bailan junto a los danzantes.
tos se ubican en los tobillos y, en el momento de bailar, se hace sonar con los talones. Todo el traje llega a pesar 50 libras, solo el cabezal 25. Por ello antiguamente se escogían a las personas más robustas y fuertes, porque tenían que bailar ocho días antes y ocho días después del día del solsticio, que era la noche más larga, entre el 21 o 23 de junio de cada año. La música para los danzantes la ponen los pingulleros, quienes soplan la flauta y también tocan un bombo al mismo tiempo. (MBG)
CELEBRACIÓN. Los niños también participan de la fiesta. Acomopañan al ‘tushug’ en sus rituales.
DANZA. La imponente apariencia del danzante representa la figura del cóndor de los Andes.