3 minute read

La prevención de la desnutrición crónica infantil está a cargo de una plataforma digital

El sistema permite hacer seguimiento a las madres y niños y realizar derivaciones automáticas. Los resultados sobre el censo de desnutrición crónica infantil aún no se han revelado.

Uno de los principales proyectos del actual Gobierno es reducir la desnutrición crónica infantil en seis puntos porcentuales.

Erwin Ronquillo, secretario nacional del desnutrición crónica infantil, señala que hay más de una estrategia o herramienta para lograrlo, como por ejemplo, la plataforma del Sistema Unificado y Universal de Seguimiento Nominal (SUUSEN) que integra la información de los ministerios de: Salud, Educación e inclusión Económica y Social; Registro Social, Registro Civil, y de las brigadas territoriales ; para unificar acciones hacia la prevención y reducción de la Desnutrición Cró- nica Infantil (DCI).

Ronquillo señala que esta plataforma permite combinar información a nivel nacional, con el fin de conocer los servicios que ha recibido un niño desde el vientre materno.

Actualmente hay 117,494 personas a nivel nacional en el Sistema de Seguimiento Nominal.

“Por primera vez el Ecuador cuenta con un sistema de control personalizado que permite monitorear a las mujeres embarazadas, niñas y niños menores de dos años para que reciban ágil y oportunamente las atenciones de salud y otros servicios que requieren. Gracias a este sistema hemos logrado identifi- car y habilitar a beneficiarios para el Bono Infancia Futuro (1000 días), así como para los servicios de desarrollo infantil integral del MIES; de esta manera prevenimos que más niños padezcan DCI” señala Ronquillo.

La meta para 2025 es que el 90% de mujeres embarazadas y el 80% niños tengan acceso a un paquete priorizado que consiste en: control prenatal, diagnóstico de anemia, análisis de laboratorio como ViH, entre otros para madres gestantes; y para niñas y niños se contempla vacunación del esquema completo, valoración del estado nutricional, suplementación con micronutrientes y vitaminas

Datos

Desde 2018, Ecuador no ha actualizado sus datos sobre la desnutrición crónica infantil (DCI)

La plataforma de seguimiento se lanzó oficialmente el 5 de abril de 2023.

1 de cada 3 niños sufre desnutrición crónica en Ecuador

Sin datos de la encuesta

En abril de 2022, el Gobierno anunció que realizaría una encuesta para tener datos sobre las poblaciones y los niveles de desnutrición crónica infantil. El ofrecimiento también señalaba que los resultados se darían a conocer a mediados de 2022 y después se dijo que para noviembre de ese año. Ya ha pasado el primer trimestre de 2023 y se desconocen los resultados de este censo.

Ronquillo señala que la encuesta es independiente a la plataforma de seguimiento y descarta que hayan tenido problemas en la recopilación de información. ¿Cuándo se conocerán los resultados, entonces? Ronquillo dice que ya hay “algunos resultados preliminares” y que están realizando una revisión técnica. Además, señala que el único que puede dar los resultados es el presidente, Guillermo Lasso, y que lo hará “en las próximas semanas”; aunque Ronquillo no da una fecha concreta.

Pese a no tener los datos en el tiempo ofrecido, Ronquillo señala que esto no afecta la meta de disminuir la desnutrición (27,2% de niños menores de tres años padecen desnutrición crónica) en seis puntos, hasta el 2025.

Situación y acciones

La desnutrición crónica infantil se localiza, principalmente, en la Sierra-centro, la Amazonía, y en Santa Elena y Manabí, en la Costa.

Desde julio de 2022, el Gobierno trabaja junto a la Unicef con una campaña educativa para reducir la desnutrición crónica infantil.

Desde el 1 de julio de 2022 se entrega el ‘Bono 1.000 días’ a mujeres embarazadas en situación de pobreza. AVV

Por Daniel Márquez Soares

En 1988, en medio de una de las épocas más arduas de la historia del país, Santiago Gangotena decidió jugársela por aquello en lo que más creía: la educación. Junto con un pequeño grupo de académicos ecuatorianos —brillantes y díscolos, como él— echaron a andar la Universidad San Francisco de Quito (USFQ). El proyecto arrancó sin permisos legales, con poquísimos recursos y bajo un mar de críticas y advertencias sombrías, pero Gangotena estaba acostumbrado a ello. A lo largo de su vida había aprendido que buscar la perfección en las cosas equivalía a no hacerlas jamás y que, en Ecuador, los soñadores estaban condenados a la informalidad . Sin embargo, creía también que lo verdaderamente determinante, lo único, era el capital humano y que mientras se contara con ello, el resto vendría por añadidura. Desde un inicio y con contagioso entusiasmo, buscó atraer a los profesores y estudiantes más talentosos del país.

Excéntrico y patriota

La fundación de la USFQ constituyó para Gangotena la culminación de una búsqueda que lo había llevado por diferentes países y disciplinas. Formado en el Colegio Americano de Quito, en el seno de una familia de intelectuales y en el aislacionista Ecuador pre petrolero, partió a estudiar a Estados Unidos a inicios de los años sesenta.

Intelectualmente curioso, pero aún sin una vocación clara, optó por la que en aquel entonces era una disciplina prestigiosa y en auge: la física. Dicha carrera lo llevaría por diferentes lugares de Estados Unidos y lograría incluso un Ph.D. en física nuclear, pero nunca dejaría de cultivar otros ámbitos que lo apasionaban. Fiel al espíritu del lugar y de la época, se dedicó al estudio de la filosofía oriental —el yoga, el budismo, el taoísmo— y siempre preferiría, antes que cualquier ética ideológica o título académico,

This article is from: