Revista judicial C00
C1
MARTES 30 de JULIO de 2013 La Hora Quito, ecuador revista no: 10408
LUNES 24de noviembre de2008 La Hora Quito, ecuador
Director Dr. Francisco Vivanco Riofrío
Autor: Dr. Giovani Criollo Mayorga
Definición La anencefalia es “una malformación genética por trisomía del cromosoma 18, por la que el feto carece de cerebro y muere normalmente al poco de nacer”. En su significado médico, “es la ausencia congénita de una parte importante del cerebro y cráneo, producto de una falla en el cierre de la porción cefálica del tubo neural, el que en condiciones normales se cierra a fines del primer mes de un embarazo”1. Según los autores2 R.J.Cook, J.N. Erdman, M. Hevia, B.M. Dickens, La Anencefalia es el más grave de los defectos del tubo neural fetal, resultando en la incapacidad del tubo neural de cerrarse en la base del cráneo durante la 3ª o 4ª semana (día 26 a 28) contada desde la concepción e impidiendo la formación de ciertos huesos craneales que rodean la cabeza. Es así como falta parte o todo el cerebro, y el tejido cerebral restante queda expuesto al daño provocado por el líquido amniótico. Si bien la mortinatalidad es un resultado común de la anencefalia fetal, algunos fetos afectados nacen vivos pero con un tallo encefálico rudimentario. Sin embargo, debido a la falta de funciones cerebrales, son incapaces de lograr consciencia y experimentar dolor, si bien el tronco encefálico puede estar apto para provocar acciones reflejas como la respiración y reacciones ocasionales al sonido y al tacto. Los recién nacidos anencefálicos no son viables ni tratables y su sobrevivencia se mide usualmente en horas más que en días. El 57 % de los anencefálicos nacidos con vida fallecen dentro de las primeras 24 horas, que sólo el l5 % sobreviven tres días, y que son excepcionales los casos que alcanzan una semana, sin medidas de sostén. Según estudios realizados en EE.UU., el número de anencéfalos nacidos sin vida oscila entre un 50 y un 90% del
Editora LCDA. NATHALY SALAZAR BRITO
es una edición de diario la hora
http//www.derechoecuador.com
Dirección: Panamericana Norte Km 31/2 y Nazareth | Telf: 2475723 al 728 | E-mail: judicial@derechoecuador.com
La anencefalia en el tipo penal de aborto total de partos3. Complicaciones de un embarazo anencefálico Los embarazos con fetos anencefálicos se caracterizan por tener varias complicaciones4 que afectan el derecho a la salud de la madre embarazada, así tenemos: • Dificultad re s p i rato r i a (debida al polihidramnios). En los embarazos de fetos anencefálicos, la acumulación de líquido amniótico aumenta el volumen del útero, el cual, al desplazar hacia arriba las vísceras abdominales, comprime el tórax y dificulta la entrada de aire a los pulmones. • Hipotensión en decúbito dorsal. Es un descenso de la presión arterial que se produce al acostarse boca arriba, debido a que el útero agrandado comprime la vena cava que lleva sangre de los miembros inferiores y del abdomen al corazón. • Malas presentaciones. Habitualmente, durante el parto, el feto se coloca de manera que su cabeza presiona el cuello uterino. Por ello, lo primero en asomar es la cabeza. Esto se llama presentación normal. En cambio, la falta de cráneo de los fetos anencefálicos y el excesivo líquido amniótico hacen que, sobre el cuello uterino, presionen otras partes del cuerpo del feto, como el tórax, el hombro o el brazo. Esta situación dificulta sobremanera el trabajo de parto y se conoce como presentación
anormal o distocia. Aunque la mayoría de la doctrina médica y jurídica se ha manifestado en favor de que el feto anencefálico carece de vida vale la pena transcribir las objeciones planteadas en un importantísimo trabajo publicado por Mauricio Besio R, Francisca Besio Ha.5, sobre la concepción de muerte cerebral o coma cerebral al feto anencefálico: Se han planteado hipótesis respecto a la calidad de realidad de este feto intrauterino. Una de ellas sostiene que no es un ser vivo, o que estaría muerto. Esta opinión se funda en la aceptación de la muerte encefálica como criterio de muerte de un individuo; si se
considera muerto un sujeto en estado de muerte cerebral, entonces, por simple lógica, un individuo sin cerebro lo estaría también. Si aceptamos esta tesis, una mujer portando un embarazo con un feto anencefálico estaría entonces en la misma condición de otra con un aborto retenido, término obstétrico que se refiere a un embrión muerto in utero, que tiene clara indicación médica de evacuar de esa mujer el contenido uterino. La muerte cerebral como criterio de muerte de un sujeto, nació en 1968 en un informe de un comité de la Escuela de Medicina de Harvard, integrado por médicos, abogados
y teólogos, quienes postularon que pacientes que estaban en lo que se conoce como “coma irreversible” se podían considerar en “muerte encefálica”. Ellos propusieron que la muerte encefálica correspondía al cese irreversible y completo de todas las funciones encefálicas; que la muerte encefálica podía ser diagnosticada y que un paciente en muerte encefálica podía ser considerado muerto. El comité de Harvard, con estos tres postulados, hizo por primera vez equivalente los términos de muerte encefálica y muerte del individuo total: “nuestro principal propósito es definir el coma irreversible como un nuevo criterio para la muerte”. En una primera mirada, si aceptamos este criterio de muerte, parece tentador aplicarlo a un feto anencéfalo. Sin embargo, con una mayor detención veremos que no es posible. El concepto de muerte encefálica exige que todas las funciones encefálicas estén irreversiblemente abolidas, y esto significa que un individuo en ese estado no puede tener movimientos respiratorios ni poseer reflejos. Son entonces sujetos que están necesariamente inmóviles y conectados en un respirador, ya que sin él pasarían rápidamente a cumplir el criterio clásico de muerte, es decir un paro cardiorrespiratorio. Mas los que atendemos a mujeres embarazadas con fetos anencefálicos sabemos que éstos son móviles y que al nacer no sólo respiran espontáneamente y tienen reflejos, sino que también pueden deglutir los alimentos, pudiendo vivir horas, días e incluso semanas, sin necesidad de respirador artificial. Los fetos anencefálicos no están entonces muertos. No cumplen ni el criterio clásico de muerte al poseer un corazón latiente, ni el nuevo criterio de muerte encefálica. Son entonces, por simple CONTINUA EN la página - c2
CYAN MAGENTA YELLOW BLACK